Capítulo 5: Inesperado

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—No se preocupe señor Kim, me presento soy la trabajadora social Jung Whee-in venimos por la información que ha sido recibida el pasado sábado trece de febrero, se trataba de la devolución de uno de nuestros niños y que por razones que desconozco termino en sus manos.

¿Devolución? ¿Qué acaso estás mujeres no tenían sangre en la cara? Estaban hablando de un niño inocente con el derecho de ser amado y protegido por una familia que lo ame y lo valore, no un simple objeto sin valor. 

Aun así queriendo decirle muchas cosas a ambas mujeres que estaban bien cómodas en su sillón y le hablo al pequeño con tono dulce:

—Yoongi mi amor, porque no vas con Namie y le ayudas ¿Sí? –asintiendo salió en busca del señor moreno sin antes decir:

—Los señores Kim son real mente buenos Wheenie. -hizo una pequeña reverencia y salió disparado para buscar al moreno.

—Sabemos el proceso y lo que se realizara, yo... -Quiso hablar Moon.

—Yo... iré por sus cosas. -Intervino Seokjin sin querer seguir con la conversación, sabia lo que le iban a decir, ya lo había vivido varias veces y la cantidad de rechazos que tenía de los orfanatos ya no lo iba a soportar más, su corazón se estrujaba y sus pensamientos solo se llenaban del pequeño de test clara y de mejillas rechonchas que llego raramente a su casa lleno de tierra y con una espina que el mismo curo.

Las dos señoritas veían con gran animo el lugar que los rodeaba, era grande, enorme, a decir verdad, había un vidrio opaco que separaba la sala principal de lo que ellos dedujeron que era una estancia de trabajo y detrás de ellas una escalera larga por donde había desaparecido Jin, la decoración tenía un toque de revista de esas casas de en sueño donde cualquier poderoso empresario terco y arrogante vivía; pero esto... era totalmente lo contrario, el lugar donde estaban tenia color, el sofá beige tenia cojines en rosado, rojo y naranjas.

Era bastante acogedor a su al frente tenía una pintura donde se encontraban dos hombres, los dos usando trajes tradicionales de boda, mirándose con miles de destellos en sus ojos, como si con solo una mirada cada uno entendiera lo que dice el otro. 

—Disculpen la demora, tuvimos unos contratiempos en la cocina –Ingreso Namjoon cargando al pequeño en un brazo y con el otro ofreciendo el vaso de agua, sonriendo cómplices sin saber que pasara cuando Jin se entere de lo que le paso a su adorado ¿Sarten?

—Yoongi cariño ven por favor, tenemos que hablar - Dijo Moon mirando a Namjoon que sigue parado viéndolas fijamente tratándole de decirle con la mirada que los deje un momento.

Mientras Nam en el fondo lo único que quiere hacer es abrasarlo y gruñirle a cualquiera que se atreva a quitarle su pedazo de azúcar.

—Señor Namjoon ¿Dónde está su esposo? — y con eso salió en busca de esté, retrocediendo lentamente sin dejar de verlas, pero sabía que tenía que dejarlos un rato solos.

Unos pequeños sollozos se escuchaba en una de las habitaciones vacías, encontrando así a su esposo en canclillas sollozando en uno de los rincones, camina a paso lento sintiendo la pesadez del ambiente inundando su pecho.

—Nammie no quiero que nos lo nieguen, no de nuevo. -hablo Seokjin con la voz entrecortada.

Ellos sabían que no podían mantener a Yoongi por mucho tiempo con ellos sin dar aviso, pues tarde o temprano lo buscarían, pero lo odiaba, detestaba no poder tenerlo, la sociedad no lo quería así y las personas harían lo que fuera para que le arrebaten un ser de luz.

Namjoon no dudó en cubrir su cintura y apegarlo a su pecho, sabe lo que siente lo más probable es que así sea, que les nieguen la custodia o peor aún que le den la oportunidad y en mediados de tiempo se lo arrebaten sin una razón buena o al menos tratable.

—Esta vez será diferente, lo presiento Jinnie- beso su mejilla con calma- vamos a hacer lo necesario y trataremos con todo amor, ya no llores precioso, te ves feo

Una risa acompasada sonó y volteando entrelazo sus manos alrededor del cuello de su esposo empinándose para así darle un beso suave demostrando que quería intentarlo de nuevo, los dos bajaron tomados de la mano viendo a un Yoongi dormido en los brazos de la trabajadora social.

—Bueno creo que este es un adiós –hablo la directora, con una sonrisa socarrona en sus labios.

—No estaría muy seguro de ello, pero por el momento si lo es – hablo Seokjin apretando entre sus manos el pequeño peluche del que Yoon se había aferrado descubriendo que era su caricatura favorita y con manos temblorosas se lo entrego a la que traía a Yoon durmiendo en su pecho.

Caminaron hacia la puerta de su casa y despidieron a Yoon con un beso cada uno en su frente.

Subieron a su respectivo auto y poco a poco se fueron desvaneciendo hasta no poderlos ver.









✅ Editado

26022021


♡ Inefable ♡ NamJinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora