Enamorada de mi mejor amigo [Terminada]

Capítulo quince: Él nuevo vecino

Narra: Lina.

---Mamá. Ya llegue---pronuncio al entrar a mi casa---¿Mamá?.

---¡Aquí en la cocina cariño!---escucho en la cocina. Yo entro a la cocina y me acerco a mi madre que por cierto, esta preparando un muy rico pastel de chocolate---pense que vendrías más tarde---yo le doy un beso en la mejilla.

---¿Por qué lo dices?--- le pregunto un tanto confundida.

---Prácticamente siempre al salir del instituto sales con Connor.

---Si---yo toma una manzana de la alacena, y le pego un mordisco---el tuvo que entrenar con los chicos. En pocos días es el juego---le informó.

----¿Sabes cariño?. Quizás deberías hacer nuevos amigos---yo la miro con confusión---no es que no me agrade Connor. Por que sabes que lo adoro, es sólo que cuando el tiene algo que hacer. Tu estas sola por que no tienes más amigos con quien divertirte.

---Ya sabes que soy muy mala asiendo nuevos amigos---le recuerdo.

---Pero por lo menos podrías intentarlo---yo no le respondo nada. Mi madre se acerca a mi y me pone una de sus caras de mamá brava---Lina Catherin Zambrano Valero. Prometeme que intentará hacer nuevos amigos---yo sigo sin responderle nada---Lina.

---Okay okay. Intentaré hacer nuevos amigos. ¿Feliz?--- ella me mira aún no muy convencida.

---Prometemelo---yo ruedo los ojos con un poco de fastidio en realidad.

----Te lo prometo---yo me doy la vuelta y cuando estaba apunto de marcharme de la cocina para subir a mi habitación, la voz de mi madre me detiene.

---Lina---yo me doy la vuelta---¿Adonde vas?.

---A mi habitación---le digo obvia.

--- No no no, ven. Me acompañaras a llevarle a los vecinos nuevos este pastel que hice---mi madre me toma del brazo. Yo me quito mi bolso y lo dejo en el sofá.

Mamá y yo salimos de la casa y tocamos la casa de nuestro nuevos vecinos. Al tocar una guapa señora de preciosos ojos verdes nos abre.

---Mucho gusto---mi madre le da una sonrisa---mi nombre es Bárbara de Zambrano, ella es mi hija Lina. Le hemos traído algo.

---Muchas gracias. Pasen.

Mi mamá y yo entramos a la enorme casa.

---Ven.

--- Yo me quedo aquí---mi mamá me da una mala cara. Pero sin mas se marcha con la señora a la cocina.

--- Hola---escucho una voz masculina mis espaldas.

Expulsl un gran suspiro y sin mas me doy la vuelta, encontrandome con un muy a puesto chico de ojos verdosos, cabello castaño oscuro. Tez algo morena, pero no tan alto.

--- Hola---pronuncio con nerviosismo---yo soy Lina. Tu vecina---le explico.

El chico solo asiento sonriente.

---Mucho gusto---el se acerca demasiado a mi---Noah Martínez---pronuncia este dejandome ver una sonrisa completamente preciosa.

---Fue un gusto. Hablamos después.

--- Eso me encantaría. Cariño, ya nos vamos---me indica mi madre.

---Emmm.... debo irme---pronuncio nerviosa.

---Fue un placer conocerte nueva vecina---pronuncia este sonriente.

---Prácticamente yo llevo más tiempo viviendo en esta vecindario que tu. En ese caso, eres tu el nuevo---el chico me mira con una cara difícil de descifrar.

Es como si tratará de comprenderme. Quizás solo se confundió con mi muy tonta explicación.

---Lina---mi madre me llama con firmeza.

---Así. Adios---yo me hacer a mi madre.

---Adiós vecina vieja---mi suelta una risita, mientras que yo solo subo mis pulgares. Y sin mas salimos de la casa de los nuevos vecinos.

--- Es cosa mis. ¿O ese chico es lindo?---miro a mi madre confusa.

---Pues si. Es lindo---pronuncio con una sonrisa.

--- No se compara con Connor---yo detengo mi paso y miro con palidez a mi mamá---pero se ve que es un muy buen chico. No digo que Connor no lo sé. Es sólo que Connor es Connor, y jamás dejará de serlo---sabia perfectamente a lo que se refería mi madre.

Pero lo cierto aquí es que no deseaba hablar sobre eso. Hay algo que núnca jamas alguien va a poder comprender, los ojos de Noah o de cualquier otro chico. Jamas se compararan con los de Connor. Y eso era un hecho, o por lo menos eso era lo que yo sentía.

---¿Sabes mamá?---comienzo a caminar nuevamente---no comprendo nada de lo que dices---quizas este mal. Es un hecho que me estoy engañando, pero me duele. Y por esa razón lo mejor sera hacerme la loca.

Por lo menos por ahora.