Emily Brown creía que tenía todo bajo control en su vida, hasta que llegó el momento de irse a la universidad.
Era una buena estudiante, buena hija, buena hermana y buena amiga, cumplía cada meta que se proponía y era feliz con su novio Nathan, inc...
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Noah.
Escuché el sonido de la puerta sonando sin cesar y solté un bufido, tirando el cojín que se encontraba sobre mis piernas a un lado y comenzando a caminar a paso lento hasta la puerta.
¡Noah, abre la maldita puerta! –Gritó una voz, la cual reconocí como Jacob y abrí la puerta, obteniendo un buen vistazo del hermano de la que ahora, al parecer, era mi ex novia. - ¿qué sucede contigo, hombre? –Preguntó, haciéndome a un lado para ingresar a mi apartamento. -
¿Qué haces aquí? –Pregunté confundido, intentando acomodar el buzo deportivo que estaba utilizando para no parecer tan derrotado. - ¿cuándo has llegado?
Con mi hermana. –Respondió mi mejor amigo, sentándose en el enorme sofá de mi sala y volteando su rostro en mi dirección. - y tienes mucho que contarme sobre eso.
¿Lo sabes todo? –Murmuré, buscando una copa de vino en la cocina para ir hacia donde se encontraba Jacob, en una mano con dos copas y en la otra la botella de vino, dispuesto a tener esta conversación. - ¿la has visto? –Pregunté, sentándome a su lado. -
Sí. –Afirmó mi mejor amigo, destapando la botella. - y puedo asegurarte que jamás he visto a mi hermanita más destruida. –Bufó él, observando fijamente mis ojos. - ¿qué pasó por tu cabeza al hacerle eso?
No le hice nada, joder. –Bufé, tirando mechones de mi cabello y sintiendo como perdía la paciencia rápidamente. - Emily es la jodida chica más preciosa que he conocido en mi vida, la más atenta, inteligente y quien me hace sonreír en todo momento. –Expliqué, lamiendo mi labio inferior. - ¿realmente crees que le haría algo como eso?
Te conozco, amigo. –Dijo él, bufando y reclinando su espalda hacia atrás, adoptando una posición más cómoda. - pero también creía que jamás tendrías algo con mi hermanita.
Amigo, ambos sabíamos que esto sucedería el día en que comenzáramos a pasar más tiempo juntos. –Dije, recostando mi espalda contra el respaldo del sofá y bebiendo un sorbo de vino. - recuerdo las múltiples conversaciones sobre esto y no puedo creer que todo terminó así. –Murmuré, percibiendo como Jacob asentía a mi lado. -
FLASHBACK.
Comí un poco de la pizza que estaba en el centro de la mesa y observé a mis amigos, todos sentados en un círculo mientras teníamos un montón de libros en nuestras piernas, pues estábamos estudiando para los exámenes que comenzaban en dos días.
No puedo creerlo. –Bufó Jacob, tirando un mechón de su cabello y mirando con odio su móvil, lo que nos alteró a todos. -
¿Qué sucede? –Preguntó Alan, dejando a un lado unos apuntes que tenía en su mano para tomar un trozo de pizza y comer de ella. - ¿ha sucedido algo con Kate? –Murmuró, recordando a la reciente conquista de nuestro amigo. -
