Capítulo 26: Por ti.

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Hola¡¡¡¡¡¡¡¡¡

Como casi todos los días, os dejo aquí otro capítulo de mi historia, Jamás pensé en ti: Mentira.

Debo agradecer a las personas que se han molestado a leerla, y por el apoyo que algunos me brindaís. 

Prometo intentar escribir lo mejor posible y que os guste tanto como para convenceros a seguir leyendo¡¡

Este capítulo, el capítulo ya número 26 se titula Por ti.

En esta parte, la historia de Dave y Melodie comienza a tomar forma. 

¿Qué ocurrió entre ellos que nadie lo sabe?

¿Qué siente cada uno cuándo se miran?

Aquí se comenzaran a desvelar los secretos de uno de los amigos de Ryan, Dave, del que de momento no sabemos demasiado. 

En este capítulo 26, descubriremos como era Dave antes de que conociera a los chicos y formara el grupo hace dos años. 

Preparaos, porque en este capítulo, el misterio de las reacciones de Dave y Melodie se irán desvelando¡¡¡¡¡¡¡¡¡

Espero que os guste¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ Divertíos¡¡¡¡¡¡¡¡

Y a leer¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ =^.^=

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Dave.

Me tumbé en la cama, mirando al techo. 

Cerré mis ojos, y suspiré.

¿Desde cuándo ser adolescente era tan difícil?

¿No era este mi tiempo de hacer irresponsibilidades sin preocupaciones?

Abrí los ojos de nuevo, con la imperiosa necesidad de encontrar mi guitarra. 

Allí estaba, en uno de los rincones de mi cuarto, marrón oscura desprendiendo elegancia, con las cuerdas brillando como casi siempre hacían, como si me estuvieran llamando a gritos.

Sabía lo que debía hacer en ese momento. 

Me levanté impulsado del colchón y la alcancé con una mano. 

La apoyé en mis piernas, sintiéndo su roce en ellas, la acaricié. 

Mis dedos rozando la suave madera, las tensas cuerdas... No había otra objeto que quisiera más que a aquella gitarra, la adoraba. 

Comencé a tocar la primera canción que se me vino en mente, y como no, fue la suya. 

Su melodía. 

Cerré los ojos mientras mis dedos se movían solos, sintiendo esa pasión por la música que me llenaba. Mi vida. 

Traté con sumo cuidado aquellas cuerdas como si fueran una parte propia de mi cuerpo, mientras dejaba que mis oídos se endulzaran por aquellos acordes que estaba tocando. 

Tan bonita aquella melodía, y solo para ella. 

Recordé el momento en que la conocí, me pareció tan maravillosa...

"-George, quédate aquí. Me apetece darme un baño- le ordené a mi chófer quién comenzaba a parar en   frente de aquella masa azul, el mar. 

Jamás pensé en ti: Mentira. EN PAUSA.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora