El Padre.

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— ¡¿Qué es lo que quieres?! ¡Deja de perseguirme! –Gritaba Louise mientras corría por unas calles oscuras y solitarias. El viento frío le pegaba fuerte en el rostro, sus ojos estaban llorosos y, por alguna razón, le sangraba la nariz.

— ¡Hasta que te canses, dulzura! –Gritaba ese hombre detrás de Louise, el mismo hombre con el que ella venía soñando por meses y meses. Calvo y con tatuajes, pálido y de ojos celestes.

— ¡Déjame ya! –Gritó Louise y se dio un golpe. Al abrir los ojos notó que se había caído de su cama y se levantó rápidamente — ¿Brandon? –Preguntó en voz alta y caminó hacia la puerta de su habitación. Se dio la vuelta y notó que en la mesa de luz había una nota.

"Tuve que levantarme temprano para ayudar a Rafa y Jonathan.

Hoy George pondrá en marcha su plan, Rafa dijo que te pongas

tus gafas cuando te pasemos a buscar para ir a la Casa Blanca,

nos servirán para incriminar a George.

Por cierto: Buenos días, preciosa. Te amo.

Brandon x."

Louise sonrió y entró a su baño para higienizarse, luego se vistió y se puso las gafas. Pensó que se veía ridícula, pero el trabajo es trabajo.

Se dirigió a su sala de estar y se sobresaltó al ver a Willa, Kleimann y otro hombre, sentados en su sofá.

—Buenos días, ¿cómo amaneciste hoy, "Alicia"? –Dijo Willa y los tres comenzaron a acercarse a Louise.

— ¡Apártense! –Dijo Louise intentando darle un golpe a Kleimann, pero este la esquivó.

—No nos compliques las cosas, ¿sí? –Le dijo Willa y el hombre (el cual Louise no sabía su nombre) que la acompañaba agarró a Louise mientras Willa le pegaba una cinta en la boca.

(...)

Jonathan, Rafa, Brandon y Nicholas se encontraban en la camioneta mirando las cámaras de Rafa para saber qué estaban por hacer George y sus ayudantes.

—Ayer creí escuchar que hablaban, pero me parece que estaban en otra zona o en la parte trasera del lugar porque ninguna cámara captó nada –Dijo Rafa.

Los cuatro observaban las pantallas y en un momento todos los mafiosos aparecieron en lo que sería la "sala" de la guarida.

— ¿Por qué están vestidos de chefs? –Preguntó Brandon — ¿No era que iban camuflados y con arneses?

En las pantallas se los veía a todos con elementos de cocina dirigiéndose hacia sus autos.

— ¿Habrán cambiado todo su plan? –Preguntó Rafa.

—No lo sé, pero tenemos que ir inmediatamente a la Casa Blanca –dijo Jonathan preocupado.

—Hay que decirle a Louise que venga –dijo Rafa.

—No hay tiempo –dijo Jonathan.

—Yo iré a buscarla, ustedes vayan, rápido –Dijo Brandon y apenas bajó de la camioneta Rafa la puso en marcha y comenzó a dirigirse a su destino.

Brandon corrió a pedir un taxi y se dirigió para el hotel. En el camino, intentó contactar a Louise en su celular pero ella no contestaba.

—Vamos, vamos –decía Brandon mientras volvía a llamarla.

Una vez en el hotel, le arrojó su dinero al taxista diciéndole que se quede con el cambio y corrió dentro del lugar. Tomó el elevador y, al bajar de él, corrió hacia el apartamento de Louise, pero su sorpresa fue grande al ver la puerta abierta y varias cosas tiras.

Double Life.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora