Double Life.

Rompiendo las Reglas.

Louise despertó con dificultades para respirar, otra vez había soñado con el extraño hombre que la perseguía, esa cara llena de tatuajes se le hacía cada vez más familiar como si ya la hubiese visto en la vida real.

—Louise, apresúrate, llegaremos tarde –Louise escuchó lo que le pareció la voz de Brandon del lado de afuera de su apartamento.

—Dame 5 minutos –Dijo ella y corrió a cambiarse.

Cuando ya estuvo preparada se hizo algunas tostadas, agarró su bolso y salió de su apartamento donde Brandon la esperaba sentado junto a la puerta. Ambos se miraron por unos segundos y luego comenzaron a caminar en dirección a las escaleras.

—Tendrías que empezar a usar despertadores, niña –Dijo Rafa cuando Louise y Brandon entraron dentro de Lulú.

—Bueno lo siento por no tener 100 despertadores en todo mi cuarto que me ayuden a despertarme –Dijo Louise acomodando las cosas en su bolso.

—Sólo tengo un despertador y está pegado en la pared así cuando suena tengo que sí o sí levantarme a apagarlo –Dijo Rafa mientras comenzaba a conducir.

—Mientes –dijo Louise—, conozco ese despertador, si le gritas: "¡Ya me levanté!" se apaga automáticamente.

El trayecto hasta la escuela continuó con esa "discusión" la cual concluyó en Rafa diciendo: "Sólo levántate más temprano".

Una vez en el lugar, Louise bajó de Lulú y caminó las respectivas cuadras hasta llegar hacia la escuela. Al entrar se encontró con Nicholas y Samantha en la entrada, así que saludó a ambos.

—Buenos días, señora Crawford –Dijo Louise.

—Buenos días, Alicia –Dijo Samantha fingiendo una sonrisa—. Nicholas, hijo, ¿me dejas hablar a solas con Alicia, por favor?

Nicholas la miró extrañado y luego asintió para después adentrarse en la institución.

Louise no entendía lo que sucedía, pero le invadió el pánico al recordar las cámaras ocultas en su casa.

¿Las habrá notado? –Pensó Louise —No lo creo, ¿por qué lo estaría hablando conmigo si así fuera?

—¿Qué ocurre, señora Crawford?

—Ven –Le dijo Samantha y juntas se alejaron de la entrada de la escuela y caminaron hacia la vereda de enfrente.

Rafa y Brandon observaban la pantalla sin entender lo que estaba sucediendo.

—Sé lo que has hecho en mi casa –Le dijo Samantha a Louise quien fingió hacerse la desentendida—. Lo de las cámaras, Alicia, te he visto.

Louise se había quedado en blanco, ya no sabía qué inventar. Se suponía que ella trabajaba en la CIA porque sabía camuflarse, es algo que le han enseñado la mitad de su adolescencia, ¿cómo algo así pudo haberle ocurrido?

—Dile que es cierto, que fuiste tú –Dijo Brandon hacia el micrófono para que Louise lo escuchara.

—¡¿Qué?! –Preguntó Rafa exaltado.

—¿Qué? –Susurró Louise.

—¿Con quién hablas? –Preguntó Samantha.

—No dije nada, señora Crawford –Dijo Louise con tono de preocupación—. Pero sí, es cierto, yo coloqué esas cámaras en su casa –Louise no podía creer que esas palabras estaban saliendo de su boca. No estaba rompiendo una regla de la CIA, estaba rompiendo como 20 reglas.