MARIA CELESTE Y LOS ALEKSEEV. ( Serie Poliamorosa )

Capitulo 5. Celeste.

Celeste

Ya llevamos tres meses de clases, y estaba a no dar, tenía tiempo sin salir, de fiesta aunque mis nuevos amigos y compañeros me habían invitado a mas de una, prácticamente aquí en Barcelona los estudiantes organizan fiestas cada fin, es cuestión de ir con tus amigos y divertirse, ya había ido  una que otra fiesta, pero me disgusta que las chicas encontraban conquista o algún amiguito por ahí y se iban con ellos dejándome votada prácticamente.

Sus fiestas siempre terminaban en folladas, e incluso Lina, me había comentado que había participado en una orgía o algo así, pues un grupo de chicos las invitaron a ella y otras amigas a casa y terminaron follando todos con todos.

La verdad sentí asco, pues primeramente no me gustan las mujeres o bueno eso creo, aunque mi vida sexual se resume a nada, nunca he tenido novio, pues siempre me enfoque en ser la mejor, quiero ser profesional y tener un futuro prometedor.

Hoy acepte pues siento que lo nesecito, estoy pegada como un koala de Helena, aunque ya estoy preocupándome, pues la veo muy risueña con el tipo que acaba de conocer.

Bebo mi vaso está un poco fuerte ya he bebido varíos vasos pero no están tan fuertes como para emborracharme, salgo de la cocina y voy a buscar a Helena, no quiero quedarme sola, camino segura y prácticamente al ritmo de la música, está muy buena; había traído un vestido pegado de arriba y escotado a tras, con la falda ancha, me queda espectacular color palo rosa, se que soy hermosa y llamo la atención de los tipos, lo digo por qué cuando paso hay un chico o algo mayor me ve de reojo, es guapo rubio con algunos tatuajes, ojos azules muy, muy guapo.

El me ve directo a mis ojos y yo hago lo mismo, le sostengo la mirada, veo como se le dibuja una sonrisa en su rostro ladida, y yo también lo hago, no se por que lo hice, mi sonrisa fue coqueta, lo veo y luego vevo de mi vaso y sonrió, creo que ya el alcohol me está afectando.

El chico sale de mi campo de vision y voy al baño, pero cuando voy saliendo me encuentro a Franco, mi compañero de clase.

— Hola Celeste, como la pasas.— me dice Franco algo alegre está bebiendo.

Veo a todos lados buscando a Angel y a Paolo pues este trío sin inseparables.

— No los busques ya se fueron, consiguieron chica.— me dice.

Veo que está con otros amigos, estos le golpean y el entiende y me los presenta.

— Ohh , si mira Celeste mi amigo Leandro.— Este me ve y va por mis mejillas y me besa muy pasionalmente, Leandro tiene un aire fuerte, huele a hierva y me toca de más.

También me presenta a Carl y a Tomás, la verdad no me caen tan buen como Franco y Angel, tiene una mirada perdida y están algo alocados.

Cuando voy al baño y vuelvo Helena ya se ha perdido, empiezo a buscarla, pero nada, veo que Leandro está detrás de mi como pegante.

— Oye Celeste, vamos a bailar.— me dice.

(Niego.)— Lo siento mi amiga se me perdió. — le digo, este sonríe y me dice.

— Tranquila disfruta la fiesta, yo te llevo a tu casa. — bueno en realidad me relajo, eso era mi preocupación y asiento.

Sale música latina, Salsa y pues no soy específicamente del pasifico pero si aprenti a bailar muy bien  y lo hago.

Mi parejo como era de esperarse le quedó grande mi paso, pero de la nada me salió un parejo creo que paisano también y nos dimos la rumbeada, nos hacen círculo, y cuando doy una vuelta pues esta hace parte de un paso del baile, un chico rubio muy guapo, con chaqueta de cuero, me ve y coquetea conmigo.

También le sonrió, creo que mi exceso de sinpacicidad se debe al exceso de licor en mi sistema.

De la nada aparece Leandro con un vaso de trago, el cóctel que bebia antes, lo tomo todo pues mi boca está receta y sedienta; pero cuando terminó me siento mareada, un poco, pido pera ir al baño, pero Leandro no me lo permite y me dice que arriba hay otro baño; me río y asiento, estoy subiendo las escaleras con ellos, detrás de nosotros van otros chicos creo amigos suyos, la verdad mi estado de alicoramiento no me permite percibir muy bien que dicen, solo bromean.

Cuando ya estoy arriba y Leandro me lleva de su mano,veo al tipo sexi, de hace rato y talvez por mi, estado de ebriedad me suelto rápidamente de Leandro y bajo las escaleras, llegó al tipo, pues mi celebro se le ocurrió la grandísima idea de coquetearle, pues en realidad me gustó mucho, al igual que el primer tipo, el de los tatuajes.

Llegó rápido a este, aunque Leandro no hace sino llamarme y me persigue.

— Hola guapo.— lo veo y sonrio, algo tonta.

— Hola belleza, estas hermosa.— me dice el chico. O bueno no tan chico pues es algo mayor.

— Te Vi y dije, iré a decirle, que estás muy papasito, muy rico. Pareces un biscocho.— me río y el lo hace.

Se que es solo por lo tomada que hago esto jamás lo haría así decirle a un tipo lo bueno que puede estar.

—¿Biscocho?— me pregunta.

— Si, ( jajaja) para comerte.

El me ve y me toma de mi mano.

— Ben conmigo, hagamos una fiesta.— me dice.

Y me lleva afuera, veo que hay otro hombre, tambien muy guapo, sus ojos azules, y está el otro tipo, el que ví primero en la fiesta.

Sonrió, voy le tocó el pecho al que ví primero, también tiene sus ojos azules, tatuajes y un toque maloso.

No mido mis actos le tocó su pecho y busco su cara, termino besándolo, pero me solprendo cuando esté me corresponde y me besa aun más fuerte.

Volteo y ahí está mi chico el que me trajo tiene una sonrisa, enorme busca mis labios y yo le correspondo.

Me dan otro trago y siento como soy llobeda por ellos.

—Ben vamos hagamos nuestra fiesta, b
Privada.— me dice el chico de la chaqueta de cuero.

Escucho como ellos hablan, pero es otro idioma, creo es ruso, pero por mi estado no logro entender nada.

Ellos me llevan al auto, dónde el hombre de tatuajes, me alza en sus piernas y me besa, toca mis piernas, es deciliosa y caliente su tacto.

No estoy pensando, racionalmente, pues los besos de este par de hombres rubios y de ojos azules, me están enloquecuendo.

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“Que aventura te espera Celestica.”

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