Capítulo VII: Instinto de Sirena

1.6K 150 23
                                    

                ― Lo siento, ¿te he hecho esperar mucho?

                Dani se volvió hacia ella con una sonrisa deslumbrante. Sus cabellos oscuros despeinados estaban ligeramente mojados por el agua que había comenzado a caer. El día se había vuelto gris, y amenazaba con caer un torrencial en cualquier momento. Tatiana había salido de casa con el cabello mojado. Había pensado en secárselo con el secador, pero visto el tiempo que hacía, prefirió ahorrarse tiempo. Se había puesto un poco de espuma en las puntas para que estas se rizaran, se vistió, se puso una chaquetita negra de media manga, unas botas de caña corta y se apresuró a llegar al Eroski.

                ― No te preocupes, acabo de llegar ―afirmó manteniendo la sonrisa.

                Tatiana lo dudaba mucho. Por el estado de sus cabellos y la humedad en los hombros de la camisa desabrochada encima de una camiseta de manga corta, estaba claro que llevaba allí un poco más de lo que pretendía que creyese. De todos modos, no tenía intención de contradecirle. Dani se acercó a ella, le dio dos besos y la guió hacia el lugar donde había aparcado su coche.

                Habían quedado en el Parc Central como un punto de referencia, pero allí no había cine. Al menos no todavía. Tatiana observó los futuros cines Yelmo que se estrenarían, seguramente, a mitades de noviembre. Llevaban años sin cines en Tarragona, así que no estaba demasiado segura de que esa noticia fuera realmente cierta. Ella lo esperaba de todo corazón, pues estaba cansada de tener que coger siempre el autobús para poder ver una película. Por suerte, Daniel, el chico con el que había quedado, tenía coche. De ese modo se ahorraba el tener que pagar el billete de bus.

                ― Espero que abran pronto estos cines. Es un palo tener que ir siempre a Las Gabarras para poder ver una película.

                ― Según he oído, lo inauguran en noviembre ―lo informó Tatiana sin apartar la mirada especulativa de los cines.

                ― Entonces tenemos que quedar para ver la primera película aquí ―apuntó apresuradamente con una radiante sonrisa. Tatiana se volvió lo justo para verla y se sintió inexplicablemente incómoda.

                Dani parecía agradable. Era guapo, simpático, atento y, por lo que había podido comprobar, un experto en lograr que las conversaciones no se apagaran. En realidad, según recordaba, todas las estudiantes de su instituto estaban como locas por él porque además de ser atractivo era bastante listo. Algo que sin duda no abundaba. Por lo general, ella no acostumbraba a salir con ese tipo de chicos. Se llevaba bien con todo el mundo, era sociable, pero con los que salía esporádicamente no eran del instituto. Llevaba muchos años allí, y a todos los veía como compañeros o amigos. Salir con un compañero de clase equivaldría a llevarse las obligaciones de fiesta. Era inevitable que, estudiando en el mismo lugar, la conversación se decantara hacia ese tipo de temas. Tatiana se negaba a hablar de estudios en una cita. Así que no terminaba de entender por qué razón había aceptado la propuesta de Daniel.

                El coche estaba aparcado a pocos metros de donde se habían encontrado. Era un Renault Megane azul eléctrico precioso y casi nuevo. El volante tenía una funda granulada de color negro y azul, a juego con el coche. Antes de entrar, Tatiana pudo fijarse que en el lateral izquierdo había un dibujo alucinante en negro de una sirena. Era solo su silueta, pero el diseño era realmente precioso.

                ― ¿Te gusta? ―preguntó Daniel con curiosidad. Tatiana entró en el coche y se acomodó en el asiento del copiloto.

                ― Es alucinante este coche―apuntó con una sonrisa.

Vínculo (Part2 Hera)Where stories live. Discover now