N/A: HOLAS!!! Oh, dioses! Mañana es noche buena!!! Yupi!!! Lamento, en serio lamento no haber seguido con el maratón, pero es que no he encontrado tiempo para hacerlo. Sinceramente, pensé que como entré de vacaciones, estaría baboseando todo el día, pero realmente no he tenido tiempo. Cambiando de tema: Gracias!!! No me puedo creer que hallamos llegado a las 17 000 leídas, la verdad. Esto es alucinante. :D No podría estar mas feliz. Muchisimas gracias por las 17 000 y los 800 votos. Les debo una ;) Feliz Navidad!!! Y... subiré un cap antes de año nuevo, asi que aun no les deseo un feliz año nuevo. Feliz Navidad!!! (aunque eso ya lo dije... ) Y pásenla bonito, semidioses. Voten y comenten... eh... nada más. ;) Feliz... - no voy a volver a decir navidad... - miércoles!!!. Disfruten, semidioses.
PD: Esto de las preguntas me esta gustando, eh... ¿Cuál es su personaje favorito de entre las dos sagas? El mío... Percy. Aunque también amo a Annabeth, a Frank y a Leo. :) Respondan en los comentarios :)
PD 2: Voy a volver a dedicar los caps a la primera persona que comente, por eso el cap va dedicado a @JuanitaOsorioRamirez. :*
Mariana *_*
*_* *_* *_*
P.O.V Percy.
- ¡SÉ QUE TIENEN A MI NOVIA, IDIOTAS! - rugió alguien - ¡ABRAN [@ItsMeruuBiitch, ya lo corregí ;) :3] AHORA MISMO!
Todos en la habitación intercambiamos una mirada de preocupación.
- Espera, espera - dijo Leo, mirando a Elizabeth - ¿Tienes novio?
- Así es - confirmó ella - Es Octavian, a veces suele ser... un poco celoso...
- ¿Tenías novio? - dijo Jason, enojado - viniste a coquetear con nosotros, me besaste, y ¿Tenias novio?
- Pero el no estaba aquí, ¿o si? - respondió mientras se encogía de hombros - No sé como se enteró.
Mientras tanto, los tipos que estaban en la puerta, seguían aporreandola. Pobre puerta...
- ¡QUE ABRAN! - volvieron a gritar.
- ¿Y ahora que hacemos? - preguntó Nico.
- Pues... - dijo Frank - yo soy su primo, así que a mi no me pueden hacer nada...
- Gracias por el apoyo, Zhang - le dije - ¿Ideas?
- ¿Mudarnos a China? - sugirió Leo.
- Lo apoyo - dijo Jason.
- ¡No se van a mudar a China! - protestó Nico - ¡Japón es mucho mejor en esta época del año!
Fulminé con la mirada a todos. Entonces, alguien volvió a golpear la puerta, pero no era la voz de Octavian. Era lo voz de... Luke. Oh, Dios. Esto es malo.
- ¡ABRAN AHORA MISMO! - volvió a chillar Luke. Malo. Muy malo.
- ¡No hay nadie! - gritó Leo. Le di un golpe en la cabeza.
- ¡Cállate! - lo reprendí.
Justo en ese momento, la puerta se vino abajo. A la habitación, entraron - y creo que enojados - Octavian, Luke, y otros cuatro tipos con pinta de matones. Todos sus amigos.
En realidad, Octavian no daba miedo, tenía el cabello rubio como la paja, y ojos fríos y gélidos. Era bastante alto, y delgado, así que no representaba una amenaza. Los otros cinco sí. Yo ya me había peleado con Luke, y... no es muy lindo que digamos. Los otro cuatro tipos no los conocía, pero sabía que pertenecían al séquito de Octavian. Él se cree mucho porque viene de una familia rica yr tal... y, digamos que sus amigos no son tan delgaduchos como él.
- ¡OCTAVIAN! - gritó Elizabeth, al momento en que saltaba a sus brazos y le daba un beso. - Gracias al cielo que llegaste, ellos - dijo señalándonos - me trajeron aquí y no me quieren dejar ir. El de ahí - apuntó señalando a Jason - incluso me besó.
- ¡Eso no es verdad! - exploté - ella vino aquí y... - pero antes de que pudiera continuar, Luke me pegó un puñetazo en plena cara. Me dolia todo el rostro.
- ¡Qué te sucede! - exclamó Jason, y se acercó a mi - ¿Estás bien? - asentí. Entonces, uno de los amiguitos de Octavian se acercó a él muy rápido, y antes de que incluso me diera cuenta, le había metido un gran golpe a Jason. Su nariz sangraba.
- ¡No lo hiciste! - dijo Leo, pero antes de que pudiera hacer algo, otro de los amigos de Octavian (Dios santo, parecian monos) tomó a Leo, y comenzaron a darse golpes. Cada uno se acercó a uno de nosotros, Octavian, se fue con Frank - parece que de todos modos si le iban a hacer algo - , Y cada uno de los tipos a Nico, Leo, Grover y Jason. Luke se acercó a mí.
Luke arremetió primero. No me gustan las peleas, ni nada por el estilo, pero si el comienza... no puedo hacer más. Antes de que reaccionara, me metió otro golpe, justo en el estómgo. Mi vista nadó, y los ojos se me nublaron. Wow, ese chico golpeaba fuerte. Casi naturalmente, y como un reflejo, le metí otro golpe.
- Te arrepentirás toda tu vida de esto, Jackson.
Y entonces comenzó realmente. Todos nos pusimos a pelear como si fueramos cavernicolas. Quería ver como le iba a los demás, pero no podía. Mantenía la vista fija en Luke, tratando de que no me golpee. No estoy diciendo que funcionara demasiando bien. Pero, es que parecía que el tipo tuviera experiencia en golpear a la gente. Gracias a todos los dioses, el día de ayer por la tarde, me habían quitado el yeso, porque si no, no hubiera tenido ni una sola oportunidad contra Luke.
En cierto momento, me pareció escuchar un pequeño grito ahogado, y también me pareció vislumbrar un atisbo [Wow, cuantas palabras raras :3] de cabellos rubios, y podría haber jurado que era Annabeth. Me detuve una fracción de segundo a tratar de ver si en realidad era ella, pero no pude, ya que Luke me encestó un golpe en el ojo. Seguimos peleando arto rato, hasta que en algún momento, sonó un gran ruido, y era que Frank y Octavian (bueno, principalmente Frank) habían hecho caer el televisor. Creo que fue entonces cuando nos dimos cuenta que habíamos ido demasiado lejos. Todos paramos.
Yo me sentía bastante cansado, magullado y dolorido como para decir algo. Luke si que sabía dar unos cuantos golpes muy fuertes. Entonces alguien vino corriendo y me abrazó.
P.O.V Annabeth.
Cuando entre a la habitación, me había encontrado con varios tipos peleandose. Trate de detenerlos gritando, pero gracias al bullicio, nadie me escuchaba. Hubo un breve momento en el que Percy pareció notar mi presencia, pero antes de que pudiera asegurarse si enrealidad era yo, Luke le metió un fuerte golpe en un ojo. Hasta a mi me dolió.
La pelea prosiguió por varios minutos, y yo gritaba en vano. Entonces, Frank dejó caer la tele. Todos pararon. Estaban jadeando, y tenían feos golpes. Percy se sentó, cansado, y yo no me pude resistir y lo abrazé.
- ¡Percy! - le dije - ¡¿Estás bien?!
- Annabeth - me dijo. Su nariz estaba sangrando, y me pareció que también tenía un poco de sangre por el labio inferior. - Estoy bien, en serio... - jadeó mientras yo veía los golpes.
Entonces, una voz desde la puerta nos sobresaltó a todos.
- ¡Estudiantes! - era la voz del director - Ustedes estan en graves problemas, jovencitos. Los quiero en mi oficina en este preciso instante.