Louis nunca ha tenido nada en su vida.
Él no sabe quién es, o qué le gusta, si prefiere el frío o el calor, si le gusta más el dulce o el salado, si le atraen más los hombres alfas que las chicas.
Y ahora es uno de esos momentos, porque no sabe si quiere que Harry lo bese, su omega lo empuja a sus brazos pero su razón le dice que no debe rebajarse tanto sólo por una misión.
Pero estando ahí, frente a Harry, el alfa dándole una mirada tan tierna por primera vez desde que lo conoció, no puede evitar querer besarlo.
Acerca su rostro al de Harry, concediendole ese esperado permiso, mientras cierra sus ojos. Harry toca los pómulos del omega con su pulgar, adorándolo, acerca su respiración a los labios del joven y este sin pensarlo relaja su cuerpo automáticamente, ahí es cuando Harry sabe que debe hacerlo.
Presiona sus labios contra los de Louis, robándole un gemido, el omega responde el beso, más eufórico de lo que Harry creyó, luego Harry comienza a profundizar el beso, sintiendo el sabor a miel de Louis, empalagándose a más no poder y su alfa gustoso.
Muerden labios, adentran lenguas y gimen placenteros, Louis con su barriga hormigueante y Harry con su mente en el cielo.
Harry se separa un poco a tomar aire y mira a Louis, el omega abre sus ojos, con sus pupilas ligeramente dilatadas y mejillas carmín -¿Dónde habías estado?- suspira el alfa contra la mejilla del omega depositando un beso.
Louis no siente su cuerpo, totalmente adormecido -Debo irme, es tarde- habla bajo.
Harry asiente -Vamos, te acompaño.
Louis se levanta del sofá y la mano del alfa recae en su cadera para guiarlo.
"Es tierno" piensa Louis.
Ambos llegan a la habitación, Harry cerrando la puerta a su espalda lo pone nervioso, no sabe qué es lo que Harry querrá ahora, en realidad sí lo sabe, todos quieren lo mismo. Así que para hacer las cosas más fáciles y más cortas comienza a desabotonarse la camisa, cuando Harry voltea y lo mira, baja su cabeza, para no mirarlo.
-Yo... iré a la recepción a pedir un colchón inflable para darte tiempo y espacio para que cambies, ya vuelvo- un giro rápido y el alfa se ha esfumado.
Louis no lo entiende, ¿qué acaba de pasar? ¿Por qué huyó? ¿O es que no quería acostarse con él? ¿Para qué lo sedujo toda la noche si no quería sexo de Louis? ¿Para qué ha estado insistiendo con las ganas que le tiene si ahora corre?
Louis termina de quitar su camisa, totalmente hundido en sus dudas, coloca una pijama en su cuerpo y se siente en el borde de la cama a pensar, a ver qué fue lo que pasó. Él hubiera podido creer fácilmente que la razón es que él no le gusta lo suficiente a Harry pero luego de tantas insinuaciones y lo que acaba de suceder a bajo, rechaza eso.
¿Por qué Harry no lo usó como él está acostumbrado?
La puerta se abre de nuevo y Harry junto a un botones entran, el chico a instalar el colchón y Harry a cambiarse.
-¿Listo capullo?
Louis asiente mientras con sus ojos repasa la tela de la camisa cayendo por la espalda de Harry, dejándola desnuda para luego ver como vuelve a ser tapada por una camiseta de dormir.
Guts and Boops
Esto escrito en su camiseta, el botones informa que ya está listo, da las buenas noches y se retira.
Louis escucha el cierre del pantalón de Harry abrirse, ahí se tensa de nuevo pero el alfa sólo toma un buzo de dormir y lo reemplaza, para luego sujetar su cabello en una corta coleta y girarse.
-¿Luzco atractivo?- bromea.
Louis cae en cuenta de cuánto tiempo estuvo mirándolo y se sonroja -Es raro verte con ropa tan informal.
Harry sonríe -Voy a dormir, no a un desfile, gota de miel.
Louis recobra su personaje -Luces atractivo- piropea.
Los ojos de Harry se tornan maliciosos y comienza acercarse -¿Muy?
Louis comienza a correrse hacia atrás hasta que su espalda golpea contra el respaldar de la cama -Sí- jadea temeroso.
Harry sonríe mal y luego se aleja -Buenas noches, capullo, descansa- comienza a irse.
Louis lo detiene un momento sentado en la cama -¿Harry?- el alfa voltea -Duerme tú en la cama, yo dormiré en el colchón.
Harry ríe burlón y lo mira -Escucha Louis, después de todo lo que has hecho y me diste hoy, déjame a mi darte la cama, dame ese placer, ¿si?- Louis lo mira dudoso pero él lo toma como un sí -Duerme bien- apaga la luz y se va de aquella recámara.
El botones ha instalado el colchón en la sala de estar, así que toma una sábana y una almohada y se recuesta.
¿Quién lo diría? El jefe de la mafia española más poderosa de España, a quien todo temen, alguien ta poderoso, durmiendo en el suelo por cederle su cama a un omega de bonitos ojos que lo besó esa noche. Luce como un quinceañero.
Tapa su cuerpo y por fin logra conciliar su sueño, a Louis no le sucede lo mismo, esa noche, no logra dormir y no sabe por qué.
La mañana siguiente cuando el omega despierta ya Harry se ha ido pero ha enviado a alguien con el desayuno, así que no todo es tan malo. El omega se dispone hacer aseo para entretenerse, encuentra la pasada camisa de Harry recostada en una silla, así que recuerda todo, como besaba su cuello, como luego lo besaba a él, lleva el pedazo de tela a su nariz, atrayendo aquel aroma del alfa, su omega derretido y ronroneando.
¿Por qué dicho alfa huele de tal manera?
Hace a su inocente corazón soñar, si tan sólo él no fuera un mentiroso, si tan sólo él tuviera la oportunidad de demostrar quién es quizá pudiese conseguir el corazón del alfa pero nada bueno comienza con una mentira.
Dentro del refrigerador hay una gran cantidad de verduras, Louis no sabe cocinar pero ya han pasado las horas desde su desayuno y tiene hambre, tampoco quiere pedir nada en la recepción porque simplemente no tiene la confianza, así que le tocará aprender.
Mira unas papas, una caja de leche y una pechuga de pollo, la pregunta es... ¿qué puede cocinar con eso?
El internet ha sido utilizado con tantos fines distintos, Louis nunca ha tocado un celular y menos navegado por la red pero una tablet encedida en la mesa principal es su solución. Toca dos veces el centro de la pantalla y esta se enciende, Louis mueve su dedo a través de la pantalla.
-¿Cómo se usa esto?- murmura -¿Dónde puedo buscar recetas?- dice para sí mismo pero el asistente de voz de esta se activa.
"Hola, ¿cómo puedo ayudarte?" la voz de ese sistema de ayuda asusta al omega al inicio provocando que este se aleje del aparato, una barras aparecen en la pantalla de la tablet como si buscase algún sonido o respuesta, Louis sale de su escondite detrás del sofá para acercarse.
-¿Señora?- pregunta el joven al sistema voz.
Esta se vuelve activar "¿En qué puedo ayudarte?" dice en voz alta y clara.
Louis mira la pantalla esperando si aparece algún rostro pero no, sólo es una pantalla en negro esperando respuesta.
-Necesito cocinar, señora- dice Louis apenado e inocente.
"Quince mil millones de resultado a su búsqueda <Necesito cocinar, señora>"
Louis frunce el ceño mientras se aproxima a la tablet, una larga lista de noticias, vídeos e imágenes aparecen ahora en la pantalla. El dedo de Louis trata de tocar una imagen pero esta lo lleva ahora a otro lugar, una página color rojo con letras blancas.
-YOU-TU-BE- lee Louis intrigado.
Una barra en la parte superior donde dice "buscador", Louis no es tan tonto como para no saber que significa eso, así que le da click y aparece el teclado y la búsqueda por voz.
-Es mejor decirlo que escribirlo- habla bajo.
Toca el micrófono la frase "di algo" aparece.
-Ok, eh... yo... necesito cocinar- dice nervioso y luego calla. La página lo envía a una exagerada cantidad de vídeos, él necesito una receta, no eso.
Toca el micrófono de nuevo -Yo... necesito una receta para cocinar papas, leche y pollo, por favor.
Ahora sí, la página lo envía a recetas de cocina, el chico lee los títulos y escoge uno que dice "Patatas con bechamel ¡Triunfar es fácil!" El video comienza y Louis sigue los pasos tal como en el video, a veces quemando sus dedos, otras veces haciendo estropicios o quedando muy salado para que al final el resultado no sea tan malo.
Al llegar la tarde, casi noche, Harry vuelve, Louis está recostado en el sofá mirando un programa de cocina cuando el aroma del alfa lo abraza su piel hormiguea.
Harry deja las llaves en la mesa y se gira a mirar al omega -No creí que estuvieras aquí, capullo- desabrocha el botón de la manga de su camisa.
Louis frunce el ceño -¿Por qué?
Harry recoge su cabello y toma asiento junto al omega -¿Has estado aquí todo el día? ¿No has salido?
Louis niega dudoso. El alfa exhala -Lou, sabes que puedes a ver el hotel, ¿verdad? No tienes que permanecer aquí encerrado todo el día cuando yo no esté, alguien mis hombres de seguridad afuera de la puerta te acompañarán.
Louis mira a Harry durante un tiempo sin entender bien lo que el alfa dice y luego asiente -Lo sé, es sólo que no quería salir, me gusta estar seguro.
-¿Te sientes seguro?- cuestiona el mayor.
Louis asiente -Cuando estas aquí.
El alfa de Harry se pone alerta, lo malo es que no sabe que quien habla no es Louis verdaderamente.
Harry mira al joven directo a sus ojos -Eres muy hermoso, ¿lo sabías?
Louis comienza a sentir su cuerpo lleno de adrenalina -Tú me lo has dicho muchas veces- traga, intentando no dejarse caer.
Harry lo mira y corre un mechón de se cabello hacia atrás -No entiendo como es que no tienes alfa.
Está devuelta.
Louis brazos de Louis comienzan a dejarse caer sobre los hombros del alfa, atrayendolo a sí, Harry se deja llevar -Tal vez estuve esperando a alguien sin saber...
Los labios temblorosos del omega pero decisivos comienzan a bailar sobre la barbilla del alfa, robándole a Harry tantos jadeos -Lo-u-is- entrecorta.
Un beso pasional recibe Harry en su boca, suaves labios cálidos empapándolo.
El alfa que está ahí, siguiendole el beso a ese omega no es el mismo con el hace unas semanas estuvo en el despacho, con el que casi se acuesta o el que lo recibió el primer día, es otro, ha cambiado, más dulce, más frágil, más temeroso, más humano, es una pena que Louis no lo note, por su ambición a cumplir la misión, por su sueño de ser libre, por su sueño de huir, no pueda ver que tal vez, el mejor alfa, su alfa, puede estarlo besando en ese mismo momento.
Sólo la espera de que cuando Louis lo descubra no sea demasiado tarde.
Louis comienza a sumergir su lengua en la boca del alfa probándolo y gustando el sabor que descubre, es un alfa exquisito, no se puede negar.
Louis nunca en su vida ha probando un alfa tan placentero para su omega. El pobre cachorro dentro suyo se ilusiona, con tal vez una oportunidad de que tal alfa algún día sea llamado suyo, temblado cada vez que este lo mira y lloriqueando cuando se alejan, porque el sincero Louis no es quien está besando a Harry, ni tampoco seduciéndolo, es su personaje, el alfa se siente atraído de alguien que no existe y Louis no se puede sentir más desdichado.
Los ojos de Louis se abren con él aún siguiendo el beso y teniendo al alfa en sus brazos, un pedazo de papel del bolsillo del pantalón de este se ha salido, el chico cuidadosamente lo toma para leer su contenido mientras juguetea con su lengua dentro de Harry para distraerlo.
Louis abre sus ojos extremadamente grandes, lo ha conseguido, con esto logrará acceder a cualquier dato de la mafia, memoriza la clave y deja el papel en su lugar de nuevo, necesita apuntarla en algún lugar antes de que la olvide, separa su beso.
-Ha-rry- jadea -Necesito ir al baño, ya vuelvo- aleja al alfa de su cuerpo dejándolo extrañado y aturdido.
Corre al baño y en un pliegue de papel sanitario apunta la clave para luego guardarla dentro de un par de medias suyas limpio, toma un poco de agua para calmarse, se mira al espejo y respira.
¿Y ahora qué?
No tiene ni idea pero esa clave debe llegar a Liam lo antes posible, aún no comprende como es que Harry siendo un alfa con la cantidad de poder que tiene, tenga algo tan importante apuntado en algo tan inseguro como un trozo de papel pero bueno, eso le da una ventaja al omega.
Louis vuelve con Harry y el resto de la noche de ambos se resume en una fluida serie de besos húmedos entre ellos, que Louis a pesar de todo, no desaprovecha para nada.
Y Harry, él cada vez cae más.