Black Soul |Completa|

By badblood02

1.6M 89K 7.8K

Mi madre murió, y sin más familia, quedé a cargo de mi padre. René nunca nos tuvo en cuenta, engañaba a mi ma... More

Prólogo
Capítulo 1: Asterville
Capítulo 2: Nuevas Emociones
Capítulo 3: Primer día
Capítulo 4: ¿Black Soul?
Capítulo 5: Otro nuevo día
Capítulo 6: Nuevo Empleo
Capítulo 7: Peleas
Capítulo 8: ¿Travis?
Capítulo 9: Sensaciones
Capítulo 10: Matthew
Capítulo 11: Papá
Capítulo 12: Secretos
Capítulo 13: Entrenamiento
Capítulo 14: Deseo parte 1
Capítulo 15: Deseo. Parte 2
Capítulo 16: ¿Qué pasó ayer?
Capítulo 17: Tentaciones
Capítulo 18: Sola
Capítulo 19: Reencuentros
Capítulo 20: Volar como moscas
Capítulo 21: Problemas
Capítulo 22: La fiesta parte 1
Capítulo 23: La fiesta Parte 2
Capítulo 24: Canadá
Capítulo 25: Señor y Señora Davenport
Capítulo 26: La vuelta a casa
Capítulo 27: OMG
Capítulo 28: Scott
Capítulo 29: Son risas
Nota de la autora
Capítulo 30: Mis 3 Yo
Capítulo 31: 7 minutos
Capítulo 32: Dolor, llantos y sonrisas
Capítulo 34: ¿Sophie?
Capítulo 35: Preguntas
Capítulo 36: El vestido rojo Parte 1
Capítulo 37: El vestido rojo Parte 2
Capítulo 38: El vesitdo rojo parte 3
Capítulo 39: Un Topo
Nota de la autora❤️
Capítulo 40: Fue ella.
Capítulo 41: ¿Embarazada?
Capítulo 42: Sorpréndeme
Capítulo 43: Christine McAlister
Capítulo 44: Una Navidad Perfecta ¿verdad?
Capítulo 45: El comienzo del fin
Capítulo 46: Aprender a vivir con el dolor
Nota de la autora😋
Capítulo 47: Viejas fotografías
Capítulo 48: Muerte en vida
Capítulo 49: Perdida en la oscuridad
Capítulo 50: Antiguos vínculos
Capítulo 51: Dejémoslo pasar
Capítulo 52: Quebrarse hasta llorar
Capítulo 53: El rostro del enemigo
Capítulo 54: Un nuevo año, un nuevo comienzo
Capítulo 55: El jefe
Capítulo 56: Algunas cosas simplemente cambian
Capítulo 57: El final de Sonia
Capítulo 58: La amo, Chase
Capítulo 59: Miedo, mucho miedo.
Capítulo 61: Diecinueve Minutos
Capítulo 62: A Salvo
Capítulo 63: Todos mis defectos
Capítulo 64: Cree en mí
Capítulo 65: Aventuras
Capítulo 66: Tranquilidad
Capítulo 67: Su mirada
Capítulo 68: Cat
Capítulo 69: Déjala ir
Capítulo 70: Algo anda mal
Capítulo 71: Terminó
Capítulo 72: ¿Es el final?
Capítulo 73: Otra vez
Capítulo 74: Las horas siguientes
Capítulo 75: Colombia
Capítulo 76: Tan solo días
Capítulo 77: Arruinándolo todo
Capítulo 78: Pequeños estallidos
Capítulo 79: Regresando a casa
Capítulo 80: La fiesta de Jack. Parte 1
Capítulo 81: La fiesta de Jack. Parte 2
Capítulo 82: Nuestro hogar
Capítulo 83: Volver a encontrarnos
Capítulo 84: El plan perfecto
Capítulo 85: Príncipes y reinos
Capítulo 86: Una vez más
Capítulo 87: La muerte
Capítulo 88: ¿Es real?
Capítulo 89: La búsqueda
¡Ayuda!
Capítulo 90: Hemos llegado
Capítulo 91: Luz
Capítulo 92: La parte más difícil
Capítulo 93: Comprensión
Capítulo 94: Es hora de afrontarlo todo
Capítulo 95: Despedidas
Capítulo 96: Un destello de esperanza
Capítulo 97: El gran ataque. Parte 1
Capítulo 98: El gran ataque. Parte 2
Capítulo 99: ¡Hazlo!
Capítulo 100: Actúa como si me amaras. FINAL
~Epílogo~
¡Agradecimientos!
~Letras a Mía YA DISPONIBLE~ Reseñas~

Capítulo 60: Mitocondrias

13K 650 36
By badblood02

Los días fueron pasando casi sin que nos diéramos cuenta. La casa segura se había transformado en un nuevo hogar para mí. Me sentía cómoda, acompañada, libre. Solía soñar en tener algo así algún día; un grupo de amigos increíble, un chico perfecto a mi lado, un enorme jardín trasero para distenderme y sobre todo una vida lejos de mi padre y los recuerdos atormentantes que la muerte de mi madre me traía.

Después de aquella noche todo fue casi perfecto. Matthew y yo no habíamos discutido ni una sola vez y nos encontrábamos mejor que nunca. Eso sí, no lo voy a negar; mi mente siguió dándole vueltas al asunto de Sonia durante algunas semanas. El hecho de pensar en mi muerte me aterraba, y recordar lo cerca que había estado de ella en los últimos meses hacía que todo mi cuerpo se paralizara. Tuve varios sueños en donde moría, por distintas razones, pero todas coincidían en algún punto con Matthew. Y eso no se podía borrar de mi cabeza tan fácilmente.

Maisie se fue al día siguiente. Debo admitir que su partida me dolió muchísimo más de lo que esperaba, y que el miedo porque algo malo le pasara se apoderó de mí sin tener intenciones de irse. Ella intentó calmarme, diciéndome que todo iba a estar bien y que era una verdadera genio en todos estos asuntos. Pero claramente, sus palabras de apoyo no sirvieron para tranquilizarme, y aún así esperaba un mensaje de ella todas las noches.

Los chicos continuaron planeando el gran ataque. Oí hablar de Davenport, de un barco y hasta incluso de varias armas involucradas. Matthew me comentó que Travis lo había llamado un par de veces a su móvil, solamente para provocarlo y sacarle algo de información. Pero Sam ya había cifrado todos nuestros teléfonos y Matt era lo suficientemente listo como para no caer en su trampa. A pesar de eso, decidí no involucrarme en el tema, ya que sólo provocaría que empeorasen mis sueños por la noche.

En ese momento me encontraba en la cama, estudiando para uno de los exámenes posteriores al receso de invierno. Mis ovarios dolían tanto que se me hacía muy difícil concentrarme, sumando el hecho de que Matthew se encontraba en una esquina tocando una melodía con la guitarra.

—¿Podrías tocar abajo? No logro concentrarme—le pregunté con cordialidad observándolo desde la otra punta del cuarto.

—Claro— respondió el sonriendo y dejando a la vista ese hoyuelo que me traía loca—. ¿Lograste entender lo de las mito... mitoconcrias?

—Mitocondrias— lo corregí riéndome de él.

—Como sea— dijo algo ofendido, empezando a ruborizarse, algo muy poco usual en él.

—Lo entendí. Pero es bastante complejo así que me cuesta memorizarlo.

—¿Y si hacemos una canción?— preguntó volviéndose a sentar con la guitarra entre las piernas. Tocó un acorde tres veces y comenzó cantando—. Las mitocondrias son...

Me miró esperando que continúe con su estrofa, pero estaba riéndome tanto que no podía ni siquiera hablar.

—¡Vamos!— me animó y comenzó otra vez—. Las mitocondrias son tan geniales y un tanto desiguales— me hizo señas para que continuase.

—Están formadas por dos bicapas de fos— hice una pausa—. Fo. Lí. Pi. Dos— alargué la o.

—¿De qué se encargan, Mía?— preguntó imitando una voz grave.

—¡De la respiración celular!

—¿Y están presentes en todas las células?

—¡No! ¡No! ¡No! Tan sólo en las eucariontes.

—¡Las mitocondrias son tan geniales! Y sin ellas nos moriríamos.

Ambos estallamos en carcajadas. Eso fue desastroso.

—Deberíamos salir en Spotify, ¿no crees?— preguntó él.

—Definitivamente no. Haríamos que la empresa se funda— reí otra vez al recordar su intento de agravar su voz.

—Bueno. Te dejo seguir estudiando tus partes raras de las células— tomó la guitarra y se levantó del suelo.

—Está bien— le dije. Me dio un beso en la frente y se retiró de la habitación.

*

Un par de horas más tarde seguía en el mismo lugar, recostada en la cama rodeada de libros, hojas y de mi computadora. Pero esta vez no estaba estudiando.

—¿Te sientes mejor?— preguntó trayéndome una taza humeante y una almohadilla caliente.

—Definitivamente no. Esa pastilla no me hizo ningún efecto— respondí y levanté mi suéter para que él coloqué la bolsa de agua tibia.

—Esperemos que esto funcione. He leído en internet que un baño caliente y un té tal vez ayuden—carreaspeó—. Y muchas otras decían que un orgasmo también funcionaría.

Rodeé los ojos ante su comentario y le revoleé una almohada que tenía cerca mío. Él levantó sus manos en señal de rendición.

—Puede que acepte el té— me entregó la taza y ambos nos quedamos en silencio durante un rato.

—¿Estás segura que no quieres que me quede?

—¡Sí! Vé y diviértete con tus amigos. No creo que un simple dolor de ovarios pueda conmigo.

Bruce estaba por cumplir años al día siguiente y para reanimarlo, Matthew, Chase y Sam habían organizado una pequeña reunión en un bar no tan lejos de allí. Según lo que Matt me había comentado sólo serían ellos cuatro y nadie más. No podían arriesgarse a que su paradero sea descubierto, ni siquiera por otros integrantes de la banda. Se encargarían de volver temprano y no dejar que Sam conduzca ebrio.

—Llegaré temprano. Ten el móvil cerca por cualquier cosa. Y por si luego te agarra hambre, hay sopa en la heladera.

—Gracias— le agradecí con un corto beso en los labios y acaricié su mejilla.

—¡Nos iremos sin ti, hermano!— gritó Sam desde la planta baja.

—Vete antes de que vengan a buscarte— él me sonrió y abandonó el cuarto no sin antes darme un beso de despedida.

Escuché la puerta de entrada cerrarse y suspiré. Me esperaba una larga noche en soledad, rodeada de textos, videos explicativos y, tal vez, un poco de música.

El sonido de mi móvil me interrumpió en la cuarta oración del párrafo. Cat me envió una foto de la invitación oficial que Jack había dado para su fiesta de primavera.

"¡Increíble! Aún faltan algunos meses Cat, pero estoy completamente entusiasmada. ¡Debo buscar otro vestido! El rojo se arruinó💔. ¿Tú que dices, tienda online o visita al centro comercial? "

Envíe el mensaje y bostecé. Al sostener el celular entre mis manos, no pude evitar caer en los vicios de las redes sociales. Que si mi escuela estaba cerrada debido a la nieve, que las historias de Cat preguntando en una encuesta qué zapatos comprarse, que Jack festejó la victoria en su partido de tenis.

Me sentí un poco nostálgica en ese momento. Había aspectos de mi vida anterior que extrañaba con una fuerza increíble. Las charlas camino a casa con mis amigas, los debates interminables en la organización del periódico escolar, las fiestas de fin de curso en dónde todos éramos amigos de todos. Y sobre todo a mi mamá, pero sabía que por más de que la extrañara con toda la fuerza posible, nunca podría volver a tenerla.

Dejé el móvil a un lado y tomé la computadora. En el buscador, escribí el nombre del video explicativo que me faltaba ver. Mis ojos se abrieron como platos al percatarme de su duración. Justo antes de darle play, mi teléfono volvió a sonar, pero esta vez tenía una llamada entrante de Matthew.

—Mía— saludó él. Del otro lado podía escuchar voces y mucha música.

—Hey— respondí a su saludo. Fruncí el ceño—. ¿Todo anda bien?— escuché como la música se iba alejando, permitiendo que escuchara con más claridad.

—Sí. Llamaba para avisarte que estamos camino a la casa. Llegaremos alrededor de una hora.

—Está bien— bostecé. Del otro lado, oí puertas del coche cerrarse y la voz de Sam riendo.

—¿Qué haces aún despierta?

—Estoy comenzando a ver un video sobre la respiración celular— dije fingiendo un tono entusiasmado, que él al notarlo, soltó una carcajada—. ¿Quieres saber cuánto dura?

—¿Cuánto?

—¡Una hora! ¡Una maldita hora, Matt!

Black Soul rió con fuerza desde el otro lado de la línea. Solté un bufido, enojada.

—No creo aguantar mucho. ¡Envíame las fuerzas para poder hacerlo!

—Tú puedes, nena.

Minutos después de cortar con Matt, me dispuse a ver el video, intentando que mis ojos no se cerrasen con cada palabra sobre las mitocondrias.

Tiempo después miré el reloj y me sorprendí al ver la hora que era; la una menos cuarto. Dejé los libros y la computadora a un lado y me quité la almohadilla de agua caliente que, para ese momento, se encontraba helada.

Me coloqué las sandalias y me abrigué un poco más. Afuera estaba nevando y la calefacción no era lo suficientemente potente para una mansión tan grande.

Atravesé el pasillo tarareando la canción que habíamos inventado por la mañana con Matthew. Tal vez era desastrosa, pero sin dudas era muy pegadiza.

Llegué a la cocina y rebusqué en la nevera el recipiente con la sopa.

¡Bingo!

Cuando me di la vuelta para dirigirme hacia el microondas, un dolor punzante se presentó en la parte inferior de mi cabeza. Luego, algo cayó al suelo partiéndose en mil pedazos. Llevé mi mano hacia mi nuca, al mismo tiempo que me volteaba para ver que había ocurrido.

Todo pasó muy rápido.

Mis ojos se movían con rapidez de un lado al otro mirando todo a mi alrededor; mi mano cubierta de sangre, la sopa hecha añicos y los ojos de Travis mirándome con un rencor que jamás había visto.

Antes de que pudiera incluso reaccionar, mis ojos comenzaron a cerrarse, mi cuerpo se volvió más pesado y caí sobre el piso quedando inconsciente.

Continue Reading

You'll Also Like

143K 9.3K 30
⚠️ CONTENIDO ADULTO. ¿Cliché? Definitivamente, sí ¿A quién no le gustan los clichés? Todos decimos siempre "ya estoy cansado de eso", "es lo mismo s...
10.9K 447 18
Naruto es traicionado por sus amigos después de la invasión durante los exámenes chunin descubre que su padres están vivos
1M 86.3K 41
¿Y si por accidente te ganas el odio del cantante más famoso del país? *♫* Kale es el cantante juvenil más amado de la década, pero está cansado de s...
43.2K 5.7K 34
Todo se resumía en un huracán, donde ella en medio del caos y él la ayudaba a calmar la tormenta. Évannie Dubois es una chica que toda su vida ha s...