"Conexión."
Volar es una habilidad tan útil pero no le ganaría nunca a la teletransportación pero en un pequeño aspecto sí y ese es la vista desde arriba, todo se achica y se vuelve tan tranquilo.
¿Quién imaginaría que tal tranquilidad sólo es temporal hasta que llegue la guerra de razas? Tanta gente inocente podría salir dañada si no actuamos con cautela.
Pero hay un pequeño detalle que no me cabe y es el internado y por qué mi hermano estaría ahí, peleando por su vida. Soy consciente de la existencia de criaturas sobrenaturales en el lugar pero ¿qué vuelve un internado codiciado un imán de problemas sobrenaturales?
La respuesta será algo que obtenga después de averiguar si lo que vi es verdad. ¿Debería confiar en mi mente?
Bajamos en la colina, esa horrible colina, pero no hay señales de mi hermano ni de quien sea que sea su asesino. La colina está desierta, al igual que el internado.
-Sólo aluciné, perdoname Dev, te he traído hasta aquí por nada. -Pase una mano por mi cabello, ¿cuál era mi medicación? Serviría ahora para evitar estas estupideces.
-Está bien, -se queda un momento en silencio antes de poner su mano en mi hombro-pero puede que no te hallas equivocado. -Susurra.
- ¿A qué te refieres? - Niego confundida.
- ¿Fa? -Esa voz, esa tan familiar voz que ya no era tan aguda. - ¿Eres en serio tú?
- ¿JJ? -Volteo y una corriente de felicidad recorre mi cuerpo, no lo evito y salto sobre él para abrazarlo. Extrañamente, él no huele como los lobos ¿podrá ser normal? - ¿Qué haces aquí?
-Eso debería preguntártelo a ti, ¿no deberías estar huyendo de ellos? -Levanta la cabeza hacia Devon.
-Es complicado y largo. Lamento haberme ido sin despedirme. -Junte las cejas pero él soltó una risita.
-Si hubiera sido yo en tu posición hubiera hecho lo mismo. Aunque hubiera querido que te quedarás para preguntarte todo sobre mi extraña condición, gran herencia de nuestros padres. -Ríe.
- ¿Eres un lobo? Pero no tienes ni el olor y eso que apestan.
-Gracias, supongo. Deben irse, solo habrán lobos que no dudaran en despedazarlos.
-JJ, no hay nadie aquí.
-Están en el bosque, es luna llena y es mi primera transformación. Tengo un ritual que hacer para ser parte de la manada, nos veremos luego pequeña.
-Soy mayor que tú. -Lo despeino.
-Pero más pequeña. -Besa mi frente para luego adentrarse al bosque. Suspiro dando vuelta para irnos.
-Continuemos con el entrenamiento. -Me pongo en posición de volar pero un grito pronto amortiguado me hace parar, ese aroma no hace que dude en dar vuelta corriendo y en poco ver aquella escena.
Jackson contra el árbol con una daga incrustada en el pecho y otra a punto de ingresar. Agarro al agresor con rapidez y lo pongo contra un árbol frente a Jack. Al poner mi brazo contra su cuello logró descubrir ese bello rostro, aquel que tanto mintió y ame.
-Qué bueno verte viva, cariño.
-No me digas cariño. ¿Qué carajo crees que haces?
-Cumpliendo la misión.
-Asesinar a la reencarnación de Li. -Sus ojos celestes me miran confundido. -Esto será lo último que has realizado en contra mía, Reynolds.
- ¿Por qué tanto odio de pronto? ¿A caso no te gusto lo de la otra noche? Porque yo entendí que sí.
-Fa, -Mierda-no está solo. -Volteo a verlo de rodillas con una estaca en el brazo, mi hermano está en el suelo con dos dagas más.
-Dejalo, ahora.
-Es tiempo que ustedes, barbáricos, aprendan algo. -Trueno el cuello de Chris y volteo con los ojos rojos. -Yo no soy de acatar, soy de ordenar.
En un abrir y cerrar de ojos estoy detrás de uno atravesando su pecho, puedo admitir que hay una fuerza actuando sobre mí, algo que no termino de determinar u entender.
Pateo a uno en la pierna y a pesar de que me muerde en la pierna trueno su cuello, me siento tan poderosa pero ¿es acaso esto electricidad? Mi cuerpo duele y se encoge hasta caer en el piso, escucho como unas chispas, puedo ver a Devon totalmente desmayado.
-N-no m-me to-to-toquen. -Me esforcé en hablar.
-Ellos van a amar cuando te entreguemos. -Escuchamos un rugido, los ojos de aquella chica con cabello castaño denotan miedo. -Oh, no. -Lo gritos son constantes y escuchó pisadas que luego suenan como si se los hubieran devorado. - ¡NO ME LASTIMES! -Unas gotas de sangre caen en mi rostro.
La corriente eléctrica para tras unos segundos, me paro y veo a mi hermano con aquellos ojos lilas con azul pero él estaba asustado como si toda la sangre rodando por sus dientes y mandíbula fuera una sensación nueva.
-JJ, ¿estás bien? -Lo miro con preocupación, él se limita a asentir. Uno de los vampiros viene corriendo sin fuerzas, tratando de acabar con ambos. -Para. -Pronuncie y él paro frente a mí, sostuve su mandíbula y lo mire a los ojos para intimidarlo. - ¿Por qué creen por seguro que él es Li? -Se mantiene en silencio. - Responde.
-La marca en su nuca, como un círculo formado por otros. Es única, ningún otro la tiene y es imborrable. Li era el único que la tenía y ahora él. Es una amenaza como tú.
-Asumo Jassy te mando por lo que mandarás un mensaje. -Presione con fuerza su mandíbula- Dile que sus dos peores amenazas están vivas y pronto acabaran con su reinado. -Achine un poco los ojos presionando más su mandíbula, mis uñas se clavan en su piel. -Le dirás que la elegida hará que pague todo lo que ha causado. -Lo suelto y él corre.
-Tu ami-amigo está aún dor-dormido. -Estaba algo más calmado pero sus manos temblaban. Era su primera transformación y la luna ni siquiera está en lo más alto del cielo.
-Te llevaré a casa, con mamá y papá. ¿Crees poder ayudarme a arrastrarlo? -Solo asiente. -Entonces vamos.
Levanto a Devon de un hombro y Jack del otro, caminamos hasta fuera. Oh mierda, ¿es ese mi mellizo?
-Déjenme ayudarlos. -Nos arrebata a Dev y lo mete atrás, como un saco de papas.
-Agust, yo...
Me interrumpe. -No quiero oírlo, aceptaría que te hubieras ido al día siguiente pero te fuiste en la noche más importante de mi vida. -Su ceño esta fruncido y sus ojos denotan decepción.
-Y morí el día de tu boda. -Suspire. -Debemos ayudar a Jack, está asustado de su nueva condición.
- ¿Qué sucedió?
-Lo que sucede cuando un lobo ataca. -Agust si tenía ese hedor pero no puedo decirlo hasta que me perdone.
-Pero si él aún no tuvo su primera transformación ni el ritual.
-Sí, bueno sucedió hace poco. Vámonos, ya murieron muchos como para seguir aquí. -JJ se sube al auto tras hablar y lo seguimos tras dedicarnos unas miradas de preocupación.
Apoyo la cabeza de Dev en mi regazo mirando por la ventana evitando la mirada juzgadora y azul del rubio.
Esa entrada, rodeada de bellos narcisos y olor a pino. Bajamos y Agust llevo a Devon en sus hombros como si fuera ligero cual pluma.
Estas escaleras blancas son preciosas, nunca acabé de entender cómo se mantienen tan bien, sin ningún tipo de deterioro. La entrada es igual, lo único que ha cambiado es el color de los sillones de blanco al negro.
- ¡Jack!, ¿Qué te ha pasado? -Tras analizarlo suspira. -No es tuya, gracias Dios.
-Tu luna está aquí, debes limpiarte y bajar ¿entendido? -Él asiente y sube rápido, ahora sus miradas están sobre mí.
-Hola Raquel, Ronald. -Les dedique una sonrisa leve, sus miradas eran de sorpresa.
-Creí que estabas muerta, dijeron que te atraparon.
-Lo hicieron pero, -mi mirada paso por un Devon desmayado en el sillón-tengo unos amigos que salvaron mi trasero de ahí, aunque nadie puede salvarme de una hemorragia.
-Estás convertida, creí que ellos no querían eso. ¿Qué sucedió?
-Ellos no lo hicieron, fue Devon-lo señalo- lo hizo cuando estaba muriendo. Larga historia, ¿qué es una Luna?
-Cosas de lobos. -Demonios, ese tono frío y tosco me duele.
-Una luna es el amor eterno de un lobo, sólo nos enamoramos una vez y eternamente. -Ronald rodea a su mujer plantando un beso en su cien.
- ¿Quién es la de Jack? ¿Puedo conocerla? -Sonreí.
-Si él desea, pero debes esperar. -Miro a Agust. - ¿Estás listo?
- ¿Crees que sea una situación adecuada? No creo que dejen que ella esté en mi ceremonia de unificación.
-Es la elegida, querrán tenerla ahí por lo que simboliza.
- ¿Quién era Li? -Interrumpí la batalla de miradas entre un Agust preocupado y Ronald con el semblante calmado.
-El gran alfa, es una leyenda. -Sonríe antes de acercarse a mí y abrazarme. -Bienvenida en serio, Ruffy.
- ¿Sería raro que los siga llamando papá y mamá?
-Tú decides eso. -Se separó y ambos caminaron hacia la cocina. Me quedé parada por unos segundos antes de subir a la habitación de Jackson. Los cuadros familiares siguen, siempre los cinco.
-Jackson. -Mencione tras la puerta, toqué tres veces y él abrió con miedo, no hacía mí sino hacía sí mismo.
Sus cabellos rubios eran castaños ahora, asumo se metió enteramente a la ducha. Su torso tiene un suéter gris de cuello redondo ancho de mangas largas, sus piernas tienen unos jeans negros pegados junto a unas botas del mismo tono que estos.
-No lo entiendo, Fa, ¿por qué pude transformarme sin dolor? ¡No soy un híbrido! -Camina hacia la ventana y lo sigo, su ventana daba a una parte del tejado. Salimos para sentarnos en este, suspirando a la luna volvió a hablar. -Yo no soy capaz de lograr nada semejante a Li, no soy él.
- ¿Por qué crees eso? ¿Qué hizo esté Li?
-Li era un lobo rebelde que inició su propia manada pero dicen que era una vergüenza. -Ríe suave marcando ese hoyuelo tan típico de él. -Se dice que Li desató un poder que ningún alfa o lobo poseía, él dominaba el bosque y todo lo que le afecte. Este poder que lo caracterizo sucedió cuando unos vampiros habían acabado con la mayor parte de su manada y con su amada Luna, una humana que tenía el corazón más puro de toda la humanidad.
- ¿Se comió a los vampiros o hizo que el bosque se los tragara? -Pregunte con algo de burla.
-Los quemó vivos, Li controlaba todo fenómeno natural. Los elementos, los árboles, los mares, todo. Cuando perdió el control sus ojos rojos cambiaron a un color lila azulado y sus manos se rodearon de llamas que pronto acabo con un bosque entero. Li murió al sacrificarse con un vampiro tirano por los lobos. Seguimos existiendo por eso. Siguió viviendo por sus camaradas caídos y su amor, yo no puedo ni estar lejos de ella sin que la preocupación me invada.
- ¿Quién es ella? -Lo codeo y un leve sonrojo se pone en sus mejillas.
-Ven, es tiempo que la veas. -Salto del techo al suelo y lo seguí, caer de pie me hace sentir un gato. Caminamos a la entrada de la casa y luego a la cocina.
Un cabello sedoso y rubio, un aroma exquisito. Es humana, mierda.
-Amor. -Se acerca a la chica y planta un beso en su frente, ella se para y me mira. No bastan las palabras para describir lo que siento al ver esos ojos verdes grisáceos y nariz respingada.
-Evelyn. -Murmure con una sonrisa.
-Nunca llamaste. -Intento darme un abrazo pero retrocedí, su aroma es muy bueno pero debo controlarme.
-Aún no es seguro estar cerca de mí si eres humana, no quiero drenarte y enfrentarme al nuevo gran alfa.
- ¿Ahora tú también te lo crees? -Vuelca los ojos riendo.
-Esto es raro, ¿cómo te convenció de ser su novia? Antes de que me vaya lo único que pensabas de él era que era un acosador tierno, como un oso de peluche. -JJ le da una mirada de ofendido, pero ese pequeño sonrojo en sus mejillas lo delata.
-Primero fue un plan para mantener el reinado, luego fue cuando me salvó de unos tipos que querían comerme. Pronto acepte este papel de Luna pero no quita lo raro que es ya sabes todo esto.
-Nunca te acostumbras, siempre hay algo nuevo. -Ella ríe.
-Deberíamos irnos, están esperándonos en el bosque. -Agust habló, se ha cambiado a un pantalón blanco y una camisa desabrochada del mismo color.
-Fa, ¿por qué estoy amarrado? -Mire a Agust con las cejas arqueadas.
- ¿Qué? No confío en vampiros.
-Joder, si fue él quien me protegió. -Camino hacia él y lo intento desatar pero la cuerda me quema. -Eve, ¿podrías?
-Siempre. -Sonríe para comenzar a desatarlo, hecho eso ella entrelazo su mano con la de Jack y salieron por la puerta de atrás.
-Deberíamos alcanzarlos, es algo que no quiero perderme. -Caminamos fuera siguiendo a todos que van en pareja.
Hay luces a los bordes del camino, los árboles hacen una especie de arco con sus ramas hasta que llegamos al centro, varias personas, o bueno, lobos estaban sentadas sobre sus piernas, visten todos de blanco y sus sonrisas parecen genuinas pero pronto sus miradas se posan en mí, algunos no disimulan el olfatearme.
- ¿Qué hacen vampiros aquí? Saben que está prohibido, Jones. -Aquel hombre no lucía mal pero tenía unas cuantas arrugas en su frente, sus ojos eran profundos y oscuros.
Doy un paso delante de ellos, el hombre me analiza y le alargo mi mano. -Soy Rafaella y puedo apostar que usted me conoce. -Alce la cabeza un poco, el hombre seguía mirándome y analizándome.
-La elegida. -pronuncia por bajo. -Se supone que ellos te eliminaron, eso esparcieron. -Estrecho mi mano y poco a poco se arrodillo. -Es un honor tenerla en esta ceremonia de unión. Soy Kain, el alfa de esta manada.
-No es necesario que te arrodilles, párate Kain. -Él hace lo indicado. -No quiero retrasar más la ceremonia de mi hermano, ¿podemos continuar?
-Claro, siéntese al frente. -Señala hacia la izquierda, asiento y caminamos hacia allí, pero el hombre para a Devon.
- ¿Y tú? ¿Quién eres?
-Es mi pareja. -Agregue rápido. -Va donde vaya, me protege de todo. -Asiente y lo deja pasar, nos sentamos igual que todos. Si es posible sonrojarse para un vampiro seguramente lo estoy y bastante, ¿cómo se me ha ocurrido?
-Con protector bastaba. -Murmuro sin mirarme.
- ¿Estás enojado? -Susurre sin conseguir respuesta, ¿y a este que le sucede?
-Agust, -Pongo mi mirada en la pareja, Natasha no está frente a mi hermano como debería. -Preparate para recibir a tu luna, quien será tu fiel compañera, tu mano derecha, tu soporte en la guerra y en la paz. A la vez será quien te proteja cuando debilites, quien luche por ti al igual que lucharás por ella. Será a quien le darás todo tu ser.
Él cierra los ojos asintiendo, Kain hace un ademán con los dedos y entre una escolta conformada de 2 mujeres y 2 hombres trajeron a Nat con un vestido sin hombros que las mangas holgadas comienzan un poco más arriba del codo y la falda le llega a los talones mostrando sus pies descalzos. Su cabello ahora platinado con raíces oscuras, las puntas le llegan encima de los hombros.
La dejaron encima del suelo, frente a Agust y se retiraron detrás del alfa.
-Mi amor, mi mundo entero, si es que no lo deseas no te veré, estoy completamente a tu disposición. -Nat tomó la mano de Agust y la puso en su mejilla.
-Mírame, somos iguales porque somos dos partes de una misma alma. Destinados siempre a unirse. -Él abre sus ojos y sonríe. -Sólo falta un paso más para ser iguales, otorgame lo que tu llamas maldición y la cargaremos juntos.
-Si Li lo desea, así será. -Ambos miran al alfa.
- ¿Habéis decidido donde será la marca? -Ambos asienten, Nat señala un círculo en la parte descubierta debajo del hombro. -En vista que sí, ¿ambos estáis de acuerdo con la gran responsabilidad que vendrá después? Para ti Agustus, será cuidarla y enseñarle todo sobre nosotros. Para ti Natasha, será aprender y usar lo aprendido para cuidar de la manada y de tu alma gemela.
-La acepto, porque no hay persona que me haya entendido igual que tú, que me haya entendido desde el primer momento. No hay persona más profunda, amable, inteligente y prudente que tú. Desde el día uno mi corazón ha sido tuyo, y te juro que seguirá siendo tuyo hasta que el mío deje de latir. Me complementas tanto que sin ti siento que estoy perdido. Te amo, y prometo cuidar de ti, de tus anhelos, de tus metas y de lo que a ti te importe porque sé que así estoy protegiendo esa bella alma que tienes mi amada.
-Yo también la acepto, haz hecho de mi mundo rutinario algo increíble. Me has hecho lo más feliz posible incluso días grises, tú corazón es puro y hermoso, está lleno de todo tipo de virtudes que estoy tan agradecida de poder haberlas conocido a todas. Agradezco la paciencia, el amor y los recuerdos que me has dado. El día que nos conocimos, mi corazón lo sabía, saltaba de un lado al otro y no podía ocultar mi sonrisa y desde aquel día no he soñado con nada más que con el día de unirnos eternamente. Te amo por todo lo que eres, por tus virtudes y tus errores, tus buenos y tus malos días, por tu pureza y tu sencillez. Soy tuya desde el día uno, y lo seré siendo hasta que mi corazón se detenga.
-Podéis continuar con la parte final, Agustus. -Él asintió y se acercó a ella para primero besar sus labios y luego continuar con una línea de besos cortos y delicados hasta la parte señalada, paro ahí y abrió la boca causando que sus caninos tanto inferiores como superiores se engrosaran y alargaran para luego ingresarse en la piel de Natasha quien suelta un gemido cuando entra, una lágrima sale de sus ojos mientras que el rubio sujeta el cuerpo de ella con fuerza.
Sus ojos intentan permanecer abiertos, la sangre chorrea de su brazo y no hago más que apretar mis puños calmándome, no puedo arruinar su momento pero parece que la está asesinando. Hago un ademán de pararme pero Devon me sujeta y niega.
-Esto es parte del ritual, no interfieras. -Suspire y mire hasta que Natasha se desmayó y Agust se separó de ella con sangre cayendo por los bordes de sus labios. Él se levanta y coge a Natasha en brazos para retirarse hacia la casa dejando un rastro de sangre mientras todos observan cómo se van.
-Debemos aguantar que la Luna despierte y comenzará ahí el festín, podemos caminar hacia su dirección para aguardar.
Todos se paran y caminan por ahí.
-Ahora entiendo porque Li mantuvo a su amada como humana. -Murmure hacia Dev pero fui ignorada por completo, suspiro pero siento pronto su mano entrelazarse con la mía. Genial, va a ignorarme verbalmente pero no corporal. ¿¡A caso no entiende que soy un loro que necesita del habla!? Además del hecho que su voz me encanta.
Me siento extraña, soy un punto negro en medio de todo el blanco. A pesar de los pantalones negros de Devon encaja más que yo gracias a su camiseta blanca. Mi blusa de cuello de tortuga entallada negra no ayuda para mezclarme, ni siquiera la falda verde con negro a cuadros ayuda.
-Ahora eres fácil de encontrar. -Ríe detrás de mí, su sonrisa blanca me recuerda a buenos tiempos.
-Tú siempre podrás encontrarme.
-Voy a robártela chico de ojos oscuros y te dejaré con el hermanito rubio. -Sonrío para jalar a Jackson y ponerlo frente a frente con Devon y arrastrarme hasta los columpios. -Ya que cierta señorita me dejo abandonada, debes ponerme al tanto. ¿Cómo paso todo esto?
-Es largo, pero comenzó con otro vampiro, uno de ojos celestes, sonrisa soñadora y una personalidad carismática que no puedes odiar. -Sonreí mirando el pasto. -Él gano mi corazón, pero creo que fui su entrada hacia mi familia. Ahora sé que debe asesinar al siguiente Li y ese es mi pequeño hermano Jackson.
-Demonios, tú ex quiere asesinar a mi novio. -Ríe y me mira algo indignada.
-Fui atacada por una vampira cuando era humana, dos chicas que quise mucho me salvaron. Una sigue conmigo pero la otra ha cambiado todo sobre ella. Quiero llevarla a su verdadero ser de nuevo, sacarla de esa oscuridad.
- ¿No has pensado que tal vez esa oscuridad sea realmente ella?
-No, sé que no lo es, espero que no. -La miro con las cejas juntas y ella suspira. -Continuando, debo decir que no fui reina de ningún baile. Ahí no había eso, ¿lo crees?
- ¡Oh dios, no! -Reímos. - ¿Cómo te sientes con este nuevo cambio?
-Es extraño, estoy mejorada pero no me siento en control. Siento que hay un botón para que explote pero no lo tengo yo. -Me encojo de hombros. - Supongo, estoy algo asustada de lo que puedo hacer.
-Yo no. -La miro y está con una sonrisa sincera. -Puede que tu carácter haya cambiado, tu mentalidad pero tu corazón, tu alma, eso no ha cambiado ni un poco. Ser distinto no te hace malo.
- ¿Y cómo crees que te sentirás cuando seas tú en el lugar de Natasha? -Ella dirigió su mirada al suelo.
-No quiero cambiar, me gusta ser humana. Es simple, me gusta así. Hemos hablado esto con Jack y él solo me repite que si no lo deseo no me convertirá, que lo único que le importa es que sea feliz a su lado. Quiere que viva, y yo no lo sé, quiero darle todo pero tengo miedo. En serio lo amo, y sé que es apresurado pero en dos años tendremos ambos la mayoría y sé que ahí tendrá que asumir su puesto como Alfa.
-Pero no es hijo de Kain, ¿por qué dices que será alfa?
-Hoy se supone que es su primera transformación pero no lo es, la primera fue cuando me salvó. Ahí vi sus ojos, son tan distintos a cualquiera de acá. He escuchado la leyenda y puedo asegurar que se trata de él. Cuando se transformó por primera vez huyó, irónicamente lo encontré sentado en mi entrada con mirada preocupada y le prometí que cuidaría de su secreto. Limpié sus lágrimas y fue un momento dónde lo único que quería hacer era quedarme ahí, sientiendo su calor y mirar a sus ojos celestes hasta que muera. Puedo asegurarte que ese día fue cuando me enamoré completamente de él. -Cubre su rostro riendo, sus mejillas son rosadas ahora. -Acabo de admitirte que amo a tu hermano menor, joder, creí que eso era algo que nunca haría.
-Imagina que yo nunca creí que llegarías a si quiera dirigirle la palabra. -Reímos observando hacia los chicos. -Él nunca saca su mirada de ti.
-Esa chico tampoco de ti.
-Es distinto, está controlándome.
-Aja, sí. ¿Quién es?
-Devon Shane, un chico complicado, silencioso y calmado.
-Tú opuesto. ¿Qué son? Porque escuche que lo presentaste como tu pareja. -Me codea.
-No lo sé, ha cuidado de mí desde el manicomio pero borro mi memoria. Cuando lo conocí me causo intriga, quería saber todo sobre su mundo con obvios motivos egoístas pero una parte de mí amaba el modo en el que hablaba, sonreía o simplemente como su presencia calmaba mis nervios. -Pose mi mirada en él. -Cuando lo volví a encontrar con la memoria borrada, mi mirada no podía irse de la suya. Fue extraño y no entendía porque estar cerca de él me hacía sentir segura, lo entendí cuando me convertí. Mis sentimientos son extraños, hay una parte que quiere a Devon y otra que quiere volver a esos tiempos del internado con el chico que va tras a cabeza de mi hermano. No sé qué hacer, me acosté con el primero y ahora Devon lo sabe, creo que se ha molestado pero yo soy libre.
-Suena como celos. Imagino que quería ser el primero en tenerte y la persona de quien te ha puesto en tanto enrollo le ha ganado. ¡Hasta yo estaría frustrada! -Golpeo mi hombro. - Deberías hablarlo con él, porque dicen que si te enamoras de dos personas debes quedarte con la segunda, de otro modo ¿Por qué te hubieras enamorado de la segunda si realmente amabas a la primera?
-Puede que tengas razón, pero no cambia la situación. -Sonreí de lado.
- ¡La luna ha despertado! ¡Venid todos a verla y celebrarla! -Nos paramos y caminamos hacia la puerta donde Natasha sale con una marca de una luna menguante encerrada en un triángulo, ese tatuaje está donde debería estar la mordida. Debo aclarar que la marca es negra y parece como si le hubieran hecho con algo ardiendo.
Todos aúllan y aplauden mientras ambos bajan, cabe aclarar que Nat ya no está manchada de sangre, usa un enterizo con pantalón entallado sobre los tobillos y sin ningún tipo de manga blanco, ahora tiene unas zapatillas blancas. Agust se cambió a un suéter blanco con jean blanco y unos zapatos del mismo color. ¿Os he mencionado cuando extraña me siento con estar de negro en medio de toda una fiesta de blanco?