Fiona
El resto del día lo pasamos con Liam y Charlotte. Mi móvil comenzó a sonar, lo que me extrañó, pero al ver a Zack sonreí inconscientemente.
- ¡ Princeso ! - Escuché su risa al otro lado - ¿ Que tal estás ? - Pregunté preocupada.
- Podría estar mejor - Sonreí - Tengo buenas noticias...
- ¿ Cuáles ?
- Adivina quien tiene seis entradas para ir a un concierto de música electrónica - Abrí los ojos sorprendida.
- ¿ Enserio ?
- Sí.
- ¿ Seguro ? - Volví a preguntar haciéndole reír.
- ¡ Que sí ! - Me levanté del banco llamando la atención de los presentes - ¿ Estás con los chicos ?
- Sí - Puse el manos libres para que les avisara también.
(...)
- ¿ Te puedes relajar ? Me estás poniendo nervioso - Dijo Axel aparcando su moto cerca del coche de Zack, quien salió sonriendo.
- ¿ Estás preparada para la mejor noche de tu vida ? - Me reí por lo mal que sonó eso - Que mal pensada... O no... - Me guiñó el ojo con una sonrisa de medio lado, haciendo que Axel gruñera molesto - Tranquilo que no te quito a la chica - Se rió.
- ¿ Tu quieres que termine lo que comenzó Gabriel ? - Zack borró su sonrisa y elevó las manos a modo de paz mientras retrodecedia hacía atrás lentamente.
- ¡ Chicos ! - Charlotte se me abalanzó encima abrazandome.
- ¡ Será el mejor día de la historia ! - Gritó Zack entrando al recinto donde ya había una gran multitud eufórica.
- Llegué - Dijo James hiperventilando a nuestro lado - No pensé que estuviera tan lejos esta mierda - Este miró alrededor y sonrió - Menos mal que será la hostia - Asenti de acuerdo.
El concierto empezó, haciendo que las horas pasaran rápidamente y mi euforia aumentara a cada segundo.
- ¡ Fiona ! - Me giré hacia Charlotte - Nos tenemos que ir - Dejé de saltar.
- ¿ Por qué ? - Miré la hora y eran las dos de la mañana. Esta apuntó a su hermano.
- Mi hermano y yo tenemos que madrugar para acompañar a nuestra madre al médico - Hizo una mueca disgustada.
- Yo también me tengo que ir - Dijo James terminando su bebida de un trago - Mañana tengo que hacer un favor a un amigo y tengo que tener todas mis habilidades al cien por cien - Me reí. Les di a cada uno un beso en la mejilla y se marcharon perdiéndose por la multitud de gente.
Zack y yo seguimos eufóricos según iban cambiando la canción, en cambio Axel estaba a nuestro lado bebiendo alcohol despreocupado mirando alrededor.
- ¿ Te estás aburriendo ? - Grité por encima de la música, pero aun así se tuvo que inclinar para escucharme.
- No, simplemente estoy relajado - Gritó este de nuevo. Asenti no muy segura.
Cuando Zack iba a beber de su vaso de plástico, Axel se lo quitó haciendo que este se quejara, el problema era que no se entendía que decía por la música. Axel se acercó a él.
- Estás con medicamentos, no puedes beber y lo sabes - Gritó haciendo que Zack frunciera el ceño.
- Será solo un poco, no me jodas - Gritó este de vuelta intentando quitarle el vaso, pero Axel lo tiró al suelo con una sonrisa victoriosa, haciendo que Zack le empujara enfadado.
- Calmate, lo hago por tu bien - Dijo Axel intentando controlarse.
- ¿ Y ahora que bebo ? - Se cruzó de brazos aun con el ceño fruncido.
- Voy a por un zumito para el niño - Sonrió haciendo que me riera en bajo.
- No me jodas el festival Axel - Le avisó Zack apuntándole con el dedo índice.
Este se encogió de hombros quitándole importancia a lo sucedido entre ellos y se escabulló entre la gente desapareciendo. Zack se quedó mirando algo a lo lejos serio, por lo que tiré de su camiseta llamando su atención y haciendo que sonriera.
- ¿ Sucede algo ? - Pregunté poniéndome de puntillas para intentar ver entre la gente.
- No, solo me ha parecido ver a alguien conocido, pero falsa alarma - Frunci el ceño extrañada, pero decidí ignorar su comportamiento.
- ¡ Hey ! - Axel nos ofreció dos vasos haciendo que Zack y yo lo miraramos interrogativos.
- ¿ Cómo es posible que vendan zumos en un festival ? - Pregunté haciéndole reír.
- He ido a un bar y ya - Se encogió de hombros bebiendo de su cerveza.
- Esto es increible - Dijo Zack negando con la cabeza.
- Yo sí puedo beber alcohol - Me quejé.
- Sí, pero yo no quiero que lo bebas - Frunci el ceño.
- ¿ Y quien te crees que eres para poder decidir por mi ?
- Axel Lewis - Dijo con superioridad - Solo haz caso y ya - Miré a Zack quien nos mira atento.
- No te aguanto - Susurré poniendo los ojos en blanco.
- Tengo que ir al baño - Dijo Zack llamando nuestra atención.
- Vale - Este se marchó dejándonos a Axel y a mí solos.
De repente se empezaron a escuchar botellas rotas y gritos. Como no, una pelea, no podía faltar. La gente empezó a unirse poco a poco, Axel me cogió de la mano y tiró de mí en sentido contrario para salir de allí, pero la gente nos lo ponía difícil.
- ¡ Axel, más lento ! - Grité, pero no me escuchó, haciendo que tuviera que saltar a personas para no tropezarme.
Noté como alguien agarraba mi otro brazo con fuerza, haciendo que frenara en seco y Axel me soltara perdiéndolo de vista. Me giré para ver al sujeto que me agarraba sin ninguna dulzura, pero al verle se me heló la sangre y mis piernas empezaron a flaquear ante el miedo que sentía.
- M-Matt... - Tartamudee al ver su sonrisa. Este se inclinó hacia mí mientras me empujaba entre la gente.
- Como no me hagas caso tu novio y tu amigo morirán - Susurró provocandome un escalofrío - Tengo a cuatro personas apuntándoles a la cabeza ahora mismo y como hagas algo que no debes... - Se separó con una sonrisa cínica.
Empezó a andar entre la gente perdiéndonos más y arrastrándome con él, a cada paso que daba tiraba de mí marcando sus dedos en mi muñeca. Quería gritar con todas mis fuerzas y que Axel o Zack me ayudarán, pero sería inútil con la música. Llegamos a los primeros puestos, Matt sacó un fajo de billetes y se lo entregó a uno de los hombres para que nos dejara pasar por la parte de atrás del escenario sin que nadie nos viera. La música iba quedando atrás según caminabamos por el pasillo, el cual parecía que me llevaba a una muerte segura.
- ¿ Donde me llevas ? - Me atreví a preguntar según nos acercábamos a la puerta.
- Lo primero - Me pegó un tortazo haciendo que me marease y me agarró de cuello estrellandome contra la pared - Lo segundo; No hables si yo no te he dado permiso o preguntado algo ¿ entendido ? - Su rostro estaba a milímetros de la mía. Mis lágrimas resbalaron por mis mejillas según asentía - Buena chica - Me soltó haciendo que rápidamente me agarrara a la pared para no caerme. Me volvió a coger, pero esta vez del antebrazo y tiró de mí fuera del recinto.
- Bonito coche - Sonrió Axel con los brazos cruzados y apoyado en un mercedes negro - Es una pena que no puedas ir en él - Mostró una navaja negra, la cual guardó en el bolsillo de su pantalón. Había pinchado las ruedas del coche.
- Largate o la mataré - Matt sacó un arma de la espalda y me apuntó a la cabeza haciéndome cerrar los ojos.
- No lo harás - Dijo Axel incorporándose del coche y sacando su arma - La quieres, ¿ no es así ? - Sonrió de medio lado mientras jugaba con el arma.
- ¿ De verdad piensas que no lo haré ? - Lo retó cargando el arma haciendo que mi corazón se detuviera y cerrara los ojos fuertemente. Sé que lo hará. Es Matt. Solo le importa él mismo.
- Creo que no tendrías tiempo de apretar el gatillo... - Matt estalló en risas.
- Creo que has hablado antes de tiempo - Sonrió con superioridad, haciendo que Axel lo puntara con intención de disparar, pero estaba yo en medio de los dos.
Dos furgonetas negras derraparon a nuestro lado, bajaron ocho personas con armas y todas apuntando a Axel, el cuál momentos después caía al suelo por el disparo de Matt.
- ¡ Axel ! - Intenté llegar a él, pero un hombre me cogió y me llevó hasta una de las furgonetas - ¡ Dejarme ! - Intenté patearle, pero era inútil. Las lágrimas caían al suelo y mi mirada se iba volviendo borrosa por las lágrimas - ¡ Axel ! - Matt se acercó a mí y me dio con el mango del arma.
Noté como un hilo de sangre resbalaba por mi perfil, pero mis ojos seguían clavados en Axel, el cual sangraba del pecho e iba dejando un charco de sangre debajo de él. Mi mirada se volvió borrosa, no quería perder la consciencia, pero cuando me tumbaron en la parte trasera de la furgoneta y cerraron la puerta mis ojos se cerraron, notando como me ataban las manos y los pies; y con un último pensamiento antes de caer en la oscuridad...
Axel...