* Imagen de Lucy Lewis *
Fiona
Me desperté perezosamente, abrí los ojos encontrando la hora del despertador justo en frente... Las once de la mañana. Me incorporé estirandome y me quedé un segundo mirando mi habitación. ¿ Mi habitación ? No recuerdo a ver venido, solo que estaba en el sofá esperando a Axel. Tal vez Scott me trajera al quedarme dormida. Me desice de las mantas, cogí ropa de mi armario y me fui a duchar.
Aun con el pelo mojado salí ya vestida con una camiseta de manga corta y unos pantalones cortos. Fui a la cocina viendo a mis padres, mi madre cocinando y mi padre viendo el periódico tranquilamente, haciendo que me recordaran a cuando era pequeña. No ha cambiado nada.
- Hola - Sonreí sentandome junto al patriarca.
- Buenos días - Dijeron los dos al unísono. Mi madre me colocó un plato de tostadas y un café con leche.
- Gracias - Justo entró mi hermano por la puerta vestido con unos vaqueros y una camiseta blanca.
- Hola - Bostezo sentándose a mi lado bastante cansado, claro que seguramente se quedaría despierto hasta que llegara Axel a casa.
Hablando del rey de Roma...
Este aparece con una camiseta de manga corta negra y unos pantalones vaqueros del mismo color. Su pelo esta despeinado, pero le sienta bien, incluso me gusta más así. No parece cansado, incluso diría que a madrugado. Sus ojos conectaron con los mios haciendo que un escalofrío recorriera mi cuerpo, aparté la vista normalmente y cogí mi tostada para llevarmela a la boca.
- Café solo ¿ verdad ? - Preguntó mi madre haciendo que Axel asintiera sentándose junto a mi hermano - Aquí tienes - Este asintió a modo de agradecimiento - ¿ Y bien ? - Dijo mi madre sentándose junto a mi padre mirándome sonriente - ¿ Que tal todo por chicago ? - Me preguntó curiosa.
- Muy bien, nada del otro mundo - Me encogí de hombros.
- ¿ Tienes amigos allí ? - Preguntó mi padre bajando el periódico, sus ojos verdes se interesaron por mi.
- Sí, al llegar allí choqué con un chico llamado Cameron y su hermano Jeff - Les expliqué - Cam se ha vuelto mi mejor amigo y unos días después conocí a Axel y sus amigos - Mi madre me miró duditativa.
- ¿ Ya os conocíais entonces ? - Asentí.
- Vamos a la misma universidad y él... fue quien me salvó de Matt - Bajé la cabeza avergonzada.
- Me alegra escuchar eso - Dijo mi padre doblando el periódico y dejandolo sobre la mesa a mi lado. En la portada salía un nuevo asesinato por parte del "Ángel de la muerte"
- ¿ Quieres ir luego a dar una vuelta ? - Preguntó Scott bebiendo de su taza. Asentí sonriente - Pues comeremos fuera, ¿ Te apuntas ? - Axel se encogió de hombros mirando su móvil concentrado.
- Tengo que ver a alguien de todas formas así que... - Guardó su móvil y nos miró.
- Pues vamonos ya - Dijo mi hermano dejando su taza y plato en el lavavajillas. Imité sus gestos al igual que Axel.
- ¿ Y donde... ?
- Al centro comercial - Sentenció Axel antes de que terminara la pregunta.
Este se fue directo a su coche sin escuchar nuestra opinión, por lo que Scott y yo fuimos a nuestro coche y lo seguimos por detrás. Me fijé en el cielo encapotado con ganas de llover, pero no tenía intención de hacerlo. Unos minutos después aparcamos en el parking del enorme centro comercial, al salir nos juntamos los tres y nos encaminamos hasta la puerta, aunque antes me llamó la atención una furgoneta negra sin matrícula a unos metros de esta.
- Date prisa o te quedaras atrás - Dijo Scott llamando mi atención, aceleré el paso aun mirando de reojo la furgoneta - ¿ Que comeremos ? - Entramos viendo a bastante gente por la zona paseando.
- ¡ Pizza ! - Propuse. Los dos asintieron caminando hasta la pizzería de allí.
- ¡ Axel ! - De repente una chica saltó sobre este bastante emocionada. Mi hermano y yo nos miramos sin entender - Mucho tiempo sin verte - Lo besó repetidas veces la mejilla dejándole la marca del pintalabios rojo en ella.
Era bastante guapa, pelo negro, ojos azul celeste... lo que me recordaba a una chica de hace años, pero no estaba segura de ello. Axel se la intentó quitar de encima pero no tuvo suerte, lo que me hizo reír un poco llamando la atención de la chica. Esta me sonrió emocionada y me abrazó asustandome.
- Que chica más guapa - Me alagó - Soy Lucy Lewis - Se presentó. ¿ Lewis ? - Soy la hermana mayor de Axel - Abrí los ojos sorprendida.
- Encantada, soy Fiona Bullock - Sonreí amablemente.
- Yo soy Scott, su hermano - Se presentó mi hermano.
- ¿ Es tu novia ? - Preguntó Lucy a su hermano apuntándome. Este puso los ojos en blanco y negó con la cabeza - Algún día tienes que sentar la cabeza - Le pinchó la mejilla con sus uñas perfectas pintadas de rosa.
- ¡ Hey ! - Un hombre bastante guapo se nos acercó con una niña de unos 5 años en brazos. Eran demasiados guapos los tres.
- Princesa - Dijo Lucy cogiendo a la niña - Mira es el tío Axel - ¿¡ Tío !? Me aguante las ganas de reír al ver que la cogía en brazos. No conocía esa parte tierna de él, no le pega para nada.
- ¿ Que tal el colegio ? - La preguntó sonriendo, lo que me sorprendió. Dios esa sonrisa.
- Bien, he hecho muchos amigos nuevos - Dijo la niña sonriente abrazandolo - y me he apuntado a danza - Este levantó una ceja haciendome gracia - ¿ Me irás a ver ?
- Se intentará - La bajó con suavidad y esta fue con su padre, quien la cogió de la mano.
- Me alegra ver que estás bien - Dijo Lucy apoyando su mano en el hombro de este - Nos tenemos que ir ya, pero quedaremos la próxima vez para ir donde papá y mamá - Este asintió serio - Me alegro a veros conocido - Se giró hacia nosotros dos con una sonrisa.
- Nosotros también a vosotros - Me puse de cuclillas - Adiós...
- Zoe... - Se presentó avergonzada.
- Hermoso nombre - Sonreí haciendo que ella hiciera lo mismo. Me incorporé y estos se marcharon - Me muero de hambre - Me quejé entrando al local con bastante gente, pero había mesas todavía, por lo que elegimos una y decidimos cual pedirnos.
- Hola, ¿ habéis elegido ya ? - Preguntó una chica quedándose embobada con mi hermano y Axel. Cogió las comandas y se marchó sonriente.
Mi móvil comenzó a vibrar repetidas veces, miré quien me estaba enviando tanto mensaje y sonreí inconscientemente. Cam quería saber si estaba bien o si tenia algún problema. Le aseguré que estaba muy bien y que estaba con Axel también, este se sorprendió, le expliqué que era amigo de mi hermano y se quedaba con nosotros en mi casa. Estuve un rato hablando con él y riendome por sus tonterías fuera de lugar.
- Aquí tenéis - Dijo la chica poniendo enfrente de nosotros tres pizzas.
- Gracias - Me acerqué la mía, cogí una porción y me fijé que la chica seguía ahí.
- Si quieres decir algo, dilo de una vez - Dijo Axel molesto mirando su móvil concentrado.
- E-Esto... me preguntaba si...
- No estoy interesado ni en ti, ni en las que se esconden detrás de la barra - Miré hacia allí y era cierto, allí se encontraban tres chicas más mirando hacia nuestra mesa - Largo - Esta agachó la cabeza y se fue con las demás avergonzada.
- Eso ha sido muy desagradable para ella - Frunci el ceño - Podrías tener mas tacto - Este me miró serio.
- Yo simplemente les he dicho lo que hay - Se encogió de hombros.
- Si, pero hay mejores formas de decirle a alguien que no quieres nada con ella - Este puso los ojos en blanco.
- No es asunto tuyo - Cuando fui a contestarle intervino mi hermano.
- Basta ya los dos, comamos tranquilamente - Asentí mirando por la ventana.
- Oye... - Los dos me miraron, Axel con cansancio y mi hermano con el ceño fruncido pensando que iba a seguir con la discusión - Creo que algo anda mal - Me levante del asiento y miré alrededor al no ver a nadie.
Muchos hombres vestidos de negro aparecieron, separándose en distintas direcciones. Dos de ellos entraron a la pizzería con un saco negro, sacó cada uno un arma y nos apuntó a todos intentando que entráramos en pánico.
- Tú, mete todo el dinero aquí - Le dijo a la camarera entregándole el saco.
Me senté en mi sitio mirando a los dos sujetos con pasamontañas ocultando su cara excepto sus ojos, que llevaban unas gafas de sol. Mi mirada viajó a mis acompañantes; Axel estaba comiendo como si no pasara nada y mi hermano miraba por la ventana atento a lo que pasaba en el exterior.
- Ten - Dijo la chica pasándole el saco con las manos temblorosas.
- Bien... Ahora los demás, sacar el dinero o las joyas de valor - Gritó. Mierda, mierda, mierda.
Antes de que llegaran a nosotros metí mi móvil y una pulsera que me regalaron mis padres en el hueco entre el sofá y la pared. Mi hermano se dio cuenta, sus ojos me miraron con preocupación por si me pillaban. Uno de los hombres se acercó, pero ninguno habíamos sacado nada para darle.
- ¿¡ A que estáis esperando !? - Dijo enfadado. Saqué el dinero que tenía, al igual que Scott y se lo dimos - ¡ Tú ! - Apuntó a Axel que seguía comiendo como si nada. Sacó un fajo de billetes y se lo extendió en la mesa despreocupado.
¿ Cuanto dinero llevaba encima ? El hombre se rió al ver el dinero y lo metió junto el resto de las cosas que había robado. Un hombre entró corriendo también con un pasamontañas, pero sin gafas ocultando sus ojos negros.
- ¡ La policía esta fuera ! - Les avisó haciendo que me relajara en el asiento.
- Que cada uno coja una persona - Este me cogió del brazo atrayendome a él. Scott se levantó impidiéndoselo - No me vengas con mierdas niñato - Le apuntó con intención de disparar.
- ¡ Iré contigo, pero no le dispares ! - Me levanté atrayendo la mirada de sorpresa de ambos.
- Buena chica - Este me puso uno de sus brazos en mi cuello y me colocó el arma en la sien. Los otros dos compañeros cogieron a otras dos personas de la misma forma y salimos de ahí - Con estas personas valen, no cojais a nadie más - Miré alrededor y conté a doce sujetos, seis de ellos con escudos humanos.
- Si quiere yo me encargo de ella mientras - Dijo un chico acercandose a nosotros. El hombre asintió, me empujó contra el sujeto y este volvió a apuntarme a la sien - ¿ En que cojones pensabas ? - Esa voz... Giré la cabeza un poco y vi sus ojos azul grisáceos, haciendo que mi cuerpo se relajara.
- Solo pensaba en salvar a mi hermano de una muerte segura - Susurré al igual que él.
- Pues la próxima vez no vayas tan lejos ¿ escuchaste ? - Este miró alrededor durante unos segundos.
- ¿ Como has sido capaz de integrarte ? - Pregunté curiosa.
- ¿ Te crees que es momento para preguntas ahora ? - Decidí no volver hablar - Solo te lo voy a decir una vez así que escucha - Asentí mirando a los demás hablando de como salir y hacer en cada posible suceso - Solo no hagas nada, sigueme el juego y como se te ocurra hacer algo fuera de lo común te pego un puto tiro en la cabeza ¿ entendido ? - Dijo serio. Asentí rápidamente al verle tan convencido de lo que me había dicho - Pues solo dejate llevar de aquí al final...
Esto no pintaba bien... pero nada bien...
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Byeee 😘😘 *