~David~
Después de explicarle a mi padre todo lo que me había pasado con mi madre, me acompañó a una habitación que tenía habilitada para visitas y que si así lo deseaba podría convertirse en mi nueva habitación. El se ocuparía de hablar con mi madre y traerme de su casa todas las cosas que necesitase, aunque también se ofreció a comprarme todo lo que quisiera si lo prefería.
Después de pasar toda la noche sin poder dormir busqué mi móvil entre las cosas que pude coger y le envié un mensaje a Nolan, en este momento deseaba verle más que nunca. Al desbloquear el móvil vi que Nolan me había mandado una gran cantidad de mensajes y tenía varias llamadas perdidas, el pobre ha tenido que estar muy preocupado.
En el momento en que iba a llamarle mi móvil se quedó sin batería, el momento perfecto. No sabía dónde estaba mi cargador así que salí en busca de un teléfono que pudiese usar para llamarle. Cogí el teléfono que se encontraba en una de las mesitas del salón y marqué su número.
La llamada no duró más de dos minutos, simplemente le dije donde estaba y como llegar, ahora lo único que me quedaba era esperar. Volví a meterme en la cama donde me esperaba Hikari y esperé.
Los minutos se me hicieron eternos hasta que por fin oí el ruido del timbre, cuando me dirigí hacia la puerta ví a mi padre que se disponía a preguntar de quien se trataba, pero se detuvo al verme.
-¿Nolan?
-Nolan.
-Vamos hijo ábrele le puerta entonces, yo dormiré un poco más así que tenéis toda la casa para vosotros, eso si no hagáis mucho ruido, no sé si me entiendes. - Ante ese comentario mi cara se tornó roja.
-¡Papá! ¿Enserio crees que es el mejor momento para esas bromas?
-Perdona hijo, pero bueno sois adolescentes, y a esa edad siempre os apetece.
-Por favor cambiemos de tema.
-De acuerdo, yo sólo quería que vieras que tienes un padre enrollado, y ahora ábrele la puerta al pobre Nolan.- Eso fue lo que hice, abrí la puerta del portal y dejé abierta la del apartamento.
-¡David!- Nolan apareció a los pocos minutos tirándose sobre mí y besándome.-¿Estas bien? ¿Te ha hecho algo? Déjame verte bien.
-Tranquilo Nolan, estoy bien. No me duele nada, simplemente me ha echado de casa. Para ella he dejado de ser su hijo.
-No entiendo como ha sido capaz de hacer algo así.
-En parte si la entiendo, lo de mi padre la dejó muy tocado, es cierto que mi padre no la amaba pero no fue la mejor forma de descubrirlo.
-Esa parte la entiendo, pero eres su hijo David, su único hijo. No entiendo como una madre es capaz de borrar a su hijo de su vida.
-No lo se Nolan y creo que nunca lo sabré, no sé que es lo que pasará, no sé si ahora viviré con mi padre para siempre o si algún día ella querrá volver a estar a mi lado.
-Por el sitio en el que vivir no te preocupes, porque de todas formas tengo la intención de que vivamos juntos cuando empecemos la universidad.
-¿Y a qué universidad pensáis ir?-Intervino apareciendo mi padre.
-Buenos días, señor Heartfield.
-Llámame John, bueno y dime ¿Universidad?
-Todavía no tengo pensado a que universidad quiero ir, pero si se que quiero vivir con su hijo y pasar el resto de mi vida con él.
-Todavía sois muy jóvenes para decir eso.
-Te recuerdome decías lo mismo cuando estábamos en el instituto.-Dijo Jack apollado en el marco de la puerta con una sonrisa.
-E..eso era distinto.-Se defendió mi padre avergonzado.
-No le veo la diferencia, y ahora vuelve a la cama y deja a los chavales en paz.
-Simplemente me estaba preocupando por ellos ya que uno de ellos es mi hijo.
-Un padre también tiene que saber cuando molesta a su hijo y su novio.
-Vale, vale. Ya me voy y os dejo solos para que podáis poneros todo lo cariñosos que queráis.
-Nolan vamos a mi habitación anda, ahí no nos molestara nadie. Bueno igual lo hace Hikari, ya sabes que te adora.
-¿Está contigo?
-Si, mi madre nos echó a los dos.
Cogí un par de bebidas y le llevé a mi nueva habitación, me sentí un poco incomodo dentro de ella pero con Nolan a mi lado estaba mucho más relajado.
-¿David cómo estas?
-Sinceramente hecho una mierda, mi madre me odia y me ha echado de casa. Mi padre intenta ayudarme para distraerme pero tanta amabilidad me resulta un tanto incomoda, la única que consigue ayudarme el Hikari.
-Vaya muchas gracias.
-Nolan, sabes que tu me ayudas mucho, no se que haría sin ti ahora mismo. ¿Quiéres quedarte conmigo esta noche?
-Es una proposición un tanto indecente, pero me gusta.-Comenzó a reírse.
-Sabes que no me refería a nada de eso, estas demasiado salido.
-No estaría tan salido si no me tuvieras a palo seco, tanta castidad no puede ser buena.
-Sabes que necesito mi tiempo.
-David no seas tonto, lo decía en broma. Puedo esperar por ti años si es necesario ¿Has dormido algo?
-No he dormido nada la verdad.
-Pues vamos a dormir un poco, yo tampoco he dormido mucho.-Se desnudó y se metió dentro de la cama.-¿A qué esperas?
-¿Lo dices enserio? No voy a poder dormir nada igualmente.
-Déjame ser tu osito de peluche y vemos que pasa, igual consigo que te duermas.
Le hice caso y al igual que el me quede en bóxer y me metí en la cama, el simplemente me dio un tierno beso y me abrazó. A los pocos minutos caí en los brazos de Morfeo.
~John~
-Jack no se que hacer.
-¿A que te refieres?
-Como puedo hablar con Alicia, ella es así por mi culpa.
-Por nuestra culpa, John ahora lo principal es el bienestar de David. Esta claro que Alicia no nos va a perdonar a ninguno de los dos por aquello, al fin y al cabo pillar a otro hombre chupandosela a tu marido no es algo que puedas olvidar.
-No lo digas así.
-Pero fue lo que paso, también fue porque nosotros nos confiamos demasiado, pensaba que volverían más tarde a casa.
-Tampoco creo que David me haya perdonado.
-Sinceramente yo tampoco lo creo, pero se que con un poco de tiempo conseguirá perdonarte, al fin y al cabo su dulce novio está de tu parte.
-Se que Nolan me entiende pero tampoco comparte la forma en la que lo hicimos.
-Estábamos desesperados por volver a estar juntos, eso es algo que también entenderán, sobretodo Nolan, al fin y al cabo lleva años desesperado por estar con tu hijo.
-Espero que tengas razón. De todas formas hoy iré a la casa de Alicia e intentare que recapacite y hable con David, es mejor que lo arreglen ahora, con el tiempo las cosas se harán mas complicadas.
-Sinceramente no creo que entre en razón, ahora mismo no quiere ver a ninguna de las personas que estamos en esta casa, ni siquiera a su propio hijo. Estoy seguro que te echara la culpa a ti de que se haya vuelto así ¿Quieres que te acompañe?
-Es mejor que te quedes aquí. Puede que los chicos te necesiten y verte solo hará que Alicia se enfade más.
-Tienes razón y ahora vuelve a la cama, tengo frío si no estas en ella.
-En eso sigues siendo igual que un niño.-Comencé a reírme.
-No cojo el sueño si no tengo a mi osito de peluche ¿Algún problema?
-¿Me estas llamando peludo?
-Tranquilo que no me refiero a eso, y ahora entra de una vez.
Cuando me desperté me lente con cuidado de no despertar a Jack y comencé a preparar la comida.
-¿Ya estás despierto?
-¿A caso no te dije que no podía dormir sin mi osito?
-No tienes remedio. Prepara la mesa mientras yo hago la comida y ve a llamar a los chicos.
Tras colocar todos los cubiertos en su sitio, Jack se dirigió a la que a partir de ahora seria la habitación de David y al poco volvió solo.
-Los pobres están durmiendo abrazados, me da pena despertarlos. Además cuando me he acercado Hikari me a mirado con cara de "no los toques".
-Pobres, no han debido de dormir nada, esperaré a terminar la comida y los iré a despertar yo.-Tras unos casi cuarenta minutos la lasaña ya estaba casi terminada y fui a despertarlos.-Chicos siento despertarlos, pero la comida ya esta casi lista.-Al acercarme un poco mas vi que su ropa estaba en el suelo, lo que me hizo suponer que estaban desnudos, juventud divino tesoro.
-¿Papá?
-David la comida ya estaba así que cuando estéis listos venir.-Se arremolinó un poco en la cama y se dispuso a salir.
-Hijo espera, me voy ahora.
-¿A qué te refieres?-Dijo destapándose y mostrándome sus bóxer.
-Perdón pensé que estabais desnudos, por eso me iba a ir.
-¡Papá! ¿Cuántas veces tendré que decir que Nolan y yo no hemos hecho nada todavía?
-Vale, perdona hijo.
-¿Qué pasa?
-Nolan la comida ya esta lista.
-Menos mal me muero de hambre.-Respondió saliendo de la cama este también.
-Hijo veo que tienes buen gusto en los hombres.-Dije fijándome en el cuerpo de Nolan.
-¡Papa! Sal ya de aquí.
-Vale.-Supongo que esto es lo que se conoce como humillar a tu hijo delante de su novio.
-¿Que has hecho ya?-Me pregunto Jack.
-No he hecho nada, simplemente le dije que tenia buen gusto porque Nolan tiene buen cuerpo.
-¿En serio? ¿A caso ahora te gustan jovencitos?
-No seas tonto, solo me has gustado tu y siempre lo harás.
-Lo se, pero nunca esta de mas oírlo de vez en cuando.
-Dios, no se que voy a hacer con vosotros dos en casa ahora.
La comida transcurrió mejor de lo que pensaba, parecía que Jack se estaba ganando poco a poco a David hablando sobre fútbol y demás. Todas esas cosas que a mi no me interesaban, pero disfrutaba viéndolos hablar, supongo que Nolan le pasaba lo mismo, porque estuvo mas tiempo mirando a David que hablando.
Había llegado la hora de ir a hablar con Alicia y no podía estar mas nervioso, la última vez que la vi fue durante nuestro divorcio y siempre que me miraba parecía que me quería matar. Ella se había quedado con nuestra antigua casa así que no tenia problema para encontrarla, el viaje en coche fue bastante mas corto de lo que me esperaba, no me había dado tiempo de prepararme mentalmente. Había llegado la hora de actuar como un padre y eso sería lo que haría. Me acerque a la puerta y toque el timbre.
-¿Qué haces tú aquí?
-David está conmigo ¿Podemos hablar?
-No tengo nada que hablar contigo, eres el hombre que arruinó mi vida y convirtió a mi hijo en esa aberración.
-Alicia por favor, déjame pasar y hablemos.
-De acuerdo, pero no esperes gran cosa. Prepararé algo de cafe, aunque solo sea por la educación que me dieron mis padres.
La casa seguía exactamente igual que el día que me fui, quitando algunos muebles nuevos y que el salón ahora es de otro color.
-Si estas buscando el sofá donde te revolcaste con ese hombre lo quemé.
-Alicia dejemos de lado nuestros problemas, se que nunca me perdonarás y tampoco lo espero, pero entiendo que con nuestro divorcio te dí la oportunidad de encontrar a un hombre que realmente te amase por como eres.
-Por favor deja de decir tonterías, si quieres que vuelva a acoger a David y olvide todo lo que ha pasado solo tengo una condición y es que se olvide de esa tontería de ser maricón.
-Ser gay no es algo que se elija Alicia, es algo que simplemente pasa, al igual que a ti te gustan los hombres a él también. No tiene nada de mala y no por eso deberías dejar de quererlo.
-No me malinterpretes, nunca dejare de querer a David, pero que me haga esto es algo que no puedo perdonar ¿Sabes como se reían de mi cuando se supo lo tuyo? No permitiré que se rían de mi por tener un hijo maricón.
-Por favor deja de usar esa palabra para dirigirte a nuestro hijo.
-Es lo que sois así que no veo problema en que use esta palabra.
-¿A caso no vas a recapacitar sobre lo ocurrido?
-Ya lo he hecho y desde mi punto de vista no tengo la culpa de nada de esto, simplemente parece que queréis volver a hacerme daño.
-Ninguno de nosotros quería hacértelo Alicia, si así es como lo ves te pido perdón. Sinceramente espero que encuentres a alguien que te quiera y te entiendas. Si quieres apartar a David de tu vida es tu elección. Ahora si me lo permites me gustaría cargar en el coche las cosas de David e irme.
-Adelante, me ahorras tener que tirarlas.
Me dirigí al coche para coger las cajas que había preparado y subí hasta la habitación, esta era la sala que más había cambia, cosa normal ya que David ya no era ningún niño y sus gustos habían cambia. Todavía recuerdo cuando tenias póster y figuras de Pokemon por toda la habitación. Después de dar unos cuantos viajes ya solo me quedaba una caja y podría irme, se trataban de juguetes y demás cosas que David había guardado desde pequeño, incluyendo uno de sus peluches favoritos, un pequeño cordero blanco.
-¡Espera un momento! ¿Puedo quedarme con eso?
-¿Con el corderito?
-Si, era lo único que hacia que David se durmiese cuando era pequeño.
-Eso y que le cantaras.
-¿Te acuerdas de eso?
-Claro que me acuerdo, aunque no lo creas te quise, no de la forma que tu querías pero te quise.
-Supongo que me alegra un poco, pensé que David y tu seríais mi vida.
-Yo no era el hombre adecuado para ti, por eso no pude evitar abandonarte para estar con la persona que siempre he amado, pero David si que estará contigo para siempre, pero para ello tienes que cambiar tu forma de ver las cosas. Quedar con este y después de que reflexiones de verdad arregla todo esto.
-...
-Bueno yo me voy ya, me ha encantado verte otra vez. Sigues tan guapa como siempre.
Me subí en el coche y me dirigí hacia el apartamento, me sentía triste por todo lo que le estaba pasando a mi hijo, pero en parte también me hace feliz tenerle en mi casa junto a Jack. Esta era una nueva oportunidad que me daba la vida para ser el padre que David necesita que sea.
~Bran~
Nunca en mi vida pensé que volvería a encontrarme con Neal. Después de como termino todo entre nosotros y que el se fuera de la ciudad pensé que o todo volvería a la normalidad, que me volvería a enamorar y me olvidaría de él.
Pero ahora esta otra vez aquí, no se porque motivo esta en el hospital pero que el esté aquí significa que tengo que hablar con Lenalee, tengo que contarle mi historia con él, mi primer amor.
Tengo que llamarla y contárselo, cuanto antes mejor. El timbre de la casa sonó y ya que me encontraba solo en casa tendría que ir a ver quien era.
-¿Neal?
-Hola Bran ¿Qué tal todo?
-¿Enserio? ¿Eso es lo primero que me dices después de todo este tiempo? Vete de aquí .
-Vamos Bran no te pongas así ¿Me invitas a pasar?
-No eres bienvenido ¿Para qué has venido?
-Bran quiero que volvamos a estar como antes, te necesito.
-No me hagas reír Neal, eso es imposible. Ahora estoy enamorado de otra persona.
-¿Una mujer?
-Si es una mujer y se que ella me querrá mucho mas de lo que tu alguna vez hiciste.
-Me alegro de que sea así, pero más tengo mis palabras. Bran volvamos a ser amigos, recuerda todas las cosas que hemos pasado juntos.
-Recuerdo todo, desde los cuatro años y ¿Sabes cual es el ultimo recuerdo que tengo de ti? Tu abandonándome sin ningún motivo y yéndote de la ciudad.
-Bran aunque no lo creas tuve mis motivos para hacerlo y te prometo que dentro de poco lo entenderás todo.
-Ya no necesito entender nada. Lo único que necesito saber es lo que se, ahora tu eres parte de mi pasado y nada más.
-Bran, por favor.
-¡Vete!
-De acuerdo, me voy. Ya nos veremos.
Tras eso se dio la vuelta y se fue. De verdad se pensaba que le perdonaría sin más, si es así es más tonto de lo que pensaba. El daño que me hizo nunca se borrará. Cogí mi teléfono y me dispuse a llamar a Lenalee.
-Lenalee ¿Podrías venir a mi casa?
-Claro ¿Ha pasado algo?
-Simplemente hay algo que debo contarte nada más.
Ahora solo quedaba esperar a que llegase y prepararme mentalmente para que posiblemente me dejase por mi pasado. Se que no muchas mujeres serían capaces de aceptarlo y por eso no la juzgaré si es lo que decide hacer.
Tras media hora el timbre volvió a sonar, esta vez esperaba encontrarme con Lenalee, si Neal ha decidido volver, esta vez no me contendré.
-Hola Bran.-Dijo Lenalee acercándose y dándome un tierno beso en los labios.
-Hola Lenalee.-Dije tras corresponder el beso. -Tengo algo que contarte, no tenia pensado hacerlo tan pronto ya que es algo que deseo olvidar de mi pasado, pero mi pasado a vuelto a mi.
-Bran me estas asustando un poco ¿Qué ha pasado?
-Antes de estar contigo estuve con otra persona.
-¿Y qué tiene eso de malo? No pasa nada porque estuviese con alguien antes si ahora a la persona que quieres soy yo.
-El problema es que esa persona es un hombre.
-¿Qué? ¿Eres gay?
-Lenalee no soy gay, mejor diría que soy bisexual o no mejor dicho no se muy bien que soy. No es que me gusten los chicos y las chicas, solo me han gustado dos personas en este vida, una de ellas fue Neal y la otra eres tu, pero no me enamoré de vosotros por vuestro género, sino porque al estar con vosotros me siento realmente completo y feliz.
-¿Ese era el problema?
-El problema es que Neal ha vuelto.
-¿Y qué me quieres decir con eso? ¿ Qué vas a volver con él? ¿En serio? ¿Te parece gracioso ya que estaba enamorada de Allen?
-Lenalee relájate, no quiero hacer eso.
-Me voy.
-¿Qué?
-¡Qué me voy de aquí! Es mejor que cortemos.
-Lenalee, espera...
No espero a que acabase la frase, simplemente agarró la puerta y se fue sin decir nada más. Acababa de pasar lo que más me temía, ahora me encontraba solo otra vez y Lenalee me odiaba.
Fin del capítulo treinta y dos de "Amar a tu enemigo" espero que os haya gustado.