Capitulo 32: Reaparición

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~David~

Después de explicarle a mi padre todo lo que me había pasado con mi madre, me acompañó a una habitación que tenía habilitada para visitas y que si así lo deseaba podría convertirse en mi nueva habitación. El se ocuparía de hablar con mi madre y traerme de su casa todas las cosas que necesitase, aunque también se ofreció a comprarme todo lo que quisiera si lo prefería.

Después de pasar toda la noche sin poder dormir busqué mi móvil entre las cosas que pude coger y le envié un mensaje a Nolan, en este momento deseaba verle más que nunca.  Al desbloquear el móvil vi que Nolan me había mandado una gran cantidad de mensajes y tenía varias llamadas perdidas, el pobre ha tenido que estar muy preocupado.

En el momento en que iba a llamarle mi móvil se quedó sin batería, el momento perfecto. No sabía dónde estaba mi cargador así que salí en busca de un teléfono que pudiese usar para llamarle. Cogí el teléfono que se encontraba en una de las mesitas del salón y marqué su número.

La llamada no duró más de dos minutos, simplemente le dije donde estaba y como llegar, ahora lo único que me quedaba era esperar. Volví a meterme en la cama donde me esperaba Hikari y esperé.

Los minutos se me hicieron eternos hasta que por fin oí el ruido del timbre, cuando me dirigí hacia la puerta ví a mi padre que se disponía a preguntar de quien se trataba, pero se detuvo al verme.

-¿Nolan?

-Nolan.

-Vamos hijo ábrele le puerta entonces, yo dormiré un poco más así que tenéis toda la casa para vosotros, eso si no hagáis mucho ruido, no sé si me entiendes. - Ante ese comentario mi cara se tornó roja.

-¡Papá! ¿Enserio crees que es el mejor momento para esas bromas?

-Perdona hijo, pero bueno sois adolescentes, y a esa edad siempre os apetece.

-Por favor cambiemos de tema.

-De acuerdo, yo sólo quería que vieras que tienes un padre enrollado, y ahora ábrele la puerta al pobre Nolan.- Eso fue lo que hice, abrí la puerta del portal y dejé abierta la del apartamento.

-¡David!- Nolan apareció a los pocos minutos tirándose sobre mí y besándome.-¿Estas bien? ¿Te ha hecho algo? Déjame verte bien.

-Tranquilo Nolan, estoy bien. No me duele nada, simplemente me ha echado de casa. Para ella he dejado de ser su hijo.

-No entiendo como ha sido capaz de hacer algo así.

-En parte si la entiendo, lo de mi padre la dejó muy tocado, es cierto que mi padre no la amaba pero no fue la mejor forma de descubrirlo.

-Esa parte la entiendo, pero eres su hijo David, su único hijo. No entiendo como una madre es capaz de borrar a su hijo de su vida.

-No lo se Nolan y creo que nunca lo sabré, no sé que es lo que pasará, no sé si ahora viviré con mi padre para siempre o si algún día ella querrá volver a estar a mi lado.

-Por el sitio en el que vivir no te preocupes, porque de todas formas tengo la intención de que vivamos juntos cuando empecemos la universidad.

-¿Y a qué universidad pensáis ir?-Intervino apareciendo mi padre.

-Buenos días, señor Heartfield.

-Llámame John, bueno y dime ¿Universidad?

-Todavía no tengo pensado a que universidad quiero ir, pero si se que quiero vivir con su hijo y pasar el resto de mi vida con él.

-Todavía sois muy jóvenes para decir eso.

-Te recuerdome decías lo mismo cuando estábamos en el instituto.-Dijo Jack apollado en el marco de la puerta con una sonrisa.

Amar a tu enemigo Where stories live. Discover now