~Nolan~
Nunca pensé que Allen me diría algo como eso, pero al fin y al cabo era algo que me merecía. Yo dejé que David le hiciera cosas peores.
-¿Hikari? ¿Qué haces aquí? David debe de estar como loco buscándote por toda la ciudad, supongo que tendré que llevarte a tu casa aunque no quiera ir.
-Miauu.-Fue lo único que obtuve como respuesta y la cogí en brazos.
-Deja de lamerme la cara me haces cosquillas.
-Nolan...
-¿David?
Dios este día no podía ser peor.
-Supongo que estabas buscando a esta pequeña. Toma, yo me tengo que ir.
-Nolan espera...por favor.
-¿Qué quieres? ¿Insultarme más?
-¿Podemos olvidar sobre lo que pasó la última vez y volver a ser amigos?
-¿Recuerdas el día que encontramos a Hikari?
-Claro que sí.
-A la pobre la habían abandonado en la calle y yo quise llevármela a casa, pero mis padres no me dejaron tenerla y tú me dijiste que la cuidarías y que decidiese cual sería su nombre ¿Sabes por qué la llame Hikari?
-No.
-Porque Hikari significa luz y eso era lo que tú fuiste para mí. Una luz que siempre me ayudaba, pero parece que me queme cuando intente tocar esa luz.
-Nolan...
-Yo ya estaba enamorado de ti por aquel entonces ¿Enserio crees que puedo olvidarme de todo? ¿De todo lo que siento por ti?
-Nolan hay una razón para que sea como soy. Ven a mi casa y hablemos.
-De acuerdo.
***
-Nolan, bienvenido ¿Has sido tú quien encontró a Hikari?
-Buenas tardes señora Morrison. Si fui yo el que la encontró.
-No me extraña nada ya que al fin y al cabo siempre fuiste al que más quiso.
-Mama vamos a subir a mi cuarto.
-De acuerdo ¿Queréis que os lleve algo para comer?
-No gracias, no tenemos hambre.
-Vale. Si necesitáis algo estaré en la cocina.
Tras esto su madre se fue a la cocina y David y yo subimos a su habitación.
-Tengo que contarte la razón por la que me volví homófobo.
-Fue por tu padre ¿Verdad?
-¿Cómo lo sabes?
-Hable con él un día que fue al instituto.
-¿Por qué no me lo contaste?
-Porque en cuanto le viste saliste corriendo y quise esperar a que tú decidieses hablarme de él.
-Entonces la explicación será muy sencilla, el engañó a mi madre y le encontramos con otro hombre. Por eso se divorciaron y odio a los gays.
-David creo que deberías hablar con tu padre para conocer toda la historia.
-No quiero volver a verle.
-Hasta que no lo hagas no entenderás porque hizo lo que hizo y seguirás odiándolo injustamente.
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Amar a tu enemigo
RomanceAllen Levellier, un joven chico de 17 años, gay autoproclamado, alto, con el pelo blanco y ojos de un profundo gris, y Lavi Cyril, misma edad, homófobo a ultranza, alto, pelirrojo y ojos color verde intenso, dedica su vida exclusivamente a hacer imp...