Loser of the year

By MarianaDaddario

134K 7.1K 2.2K

Él tiene toda su vida planeada; continuar sus estudios en la universidad más prestigiosa de Nueva York, conse... More

Prólogo
Introducción
¿Un niñero? ¿Es enserio?
No te vayas...
Bienvenida a la ciudad que nunca duerme
Almuerzo
¿Tú otra vez?
Profesora Martin
¿Estás bien?
El niño bueno
Yo también perdí
Game Day
Lunes de Fiesta
Hora del juego
Estúpido seudo cupido
Más que una carta
Recordando el pasado
¿Día nacional sin camisa?
Unhappy Birthday
Te odio...
Mi héroe sin capa
¿Qué sucedió?
Feliz cumpleaños...atrasado
¿Apostamos?
Diferencias
La noche de las motos
¿Una qué?
Novia vs...¿qué eres tú?
¡Estás celosa/o!
Coney Island
Defensa
El niño bueno ha regresado
Uno...dos...tres, hasta el fondo
Tiempo De Aires Nuevos
¿Una noche para olvidar?
Un nuevo Matt
La cita que no imaginé
Los Daddario
Perdedor
Los Anderson
Confianza
Volviste...
Conviviendo con el enemigo
Una llovizna inusual
Sin temor al cambio
La familia es primero
Una parte de mí
Halloween especial
Cita
Un paso a la vez
Sadie Hawkins
Un fin, nuestro comienzo
Día de acción de gracias
Pesadilla
Corazones rotos
Perdiendo
La carta de Lila
El mapa que me lleva a ti
Hora de irse...
Mi otra mitad
Revelaciones y mentiras blancas
Nostálgico Amor
Todo lo que quiero de Navidad...
Loser of the year
Epílogo
Playlist
Agradecimientos
⚜️
⚠️ Tenemos que hablar ⚠️

Lovebug

1.7K 84 25
By MarianaDaddario

Matt
La noche había sido un completo martirio, no dejaba de regañarme a mí mismo por haberle hecho a Lila lo que hice, Dom prometió hablar con ella pero me dijo que se negó, no quería verlo porque decía que como hombre no me traicionaría y prefería no arrancarle la cabeza a él también.

No pude conciliar el sueño, intenté mandarle miles de mensajes pero nunca los contestó, incluso apagó su teléfono para que dejara de llamarla, Dom insistió en que esperara hasta mañana pero ya no podía más. Pasé toda la noche despierto, la culpa me mantenía sin sueño así que no dormí igual al día que llamé a Beatrice para vernos antes de volver a Nueva York, no me sorprendí cuando a la mañana siguiente después de bañarme, al mirarme al espejo unas ojeras aparecieran bajo mis ojos.

-Te ves horrible-puntualizó Dom mientras tomaba su mochila
-Me siento peor de lo que me veo-lo imité y salimos del edificio, habíamos quedado con Alberto para ir juntos a la facultad, al salir de la residencia este ya se encontraba esperándonos con su camioneta, subimos y comenzó a manejar.

-Todo bien entre Lila y tú?-preguntó Alberto
-No, todo se fue al caño-Me cubrí el rostro con las manos
-Algo así imaginé
-Por qué? Te dijo algo cuando la recogiste en el aeropuerto?
-Pues no dijo mucho pero si se puso a llorar

Escuchar eso partió completamente mi corazón.

-Lloró?
-Si, le pregunté por qué y me dijo que dos personas le hicieron daño, quise saber que le habían hecho exactamente pero sólo me contestó que una era más dolorosa que otra

No dije nada, Dom no dijo nada ni Alberto pues el decir lo sucedido en voz alta le hizo darse cuenta de que a que se refería Lila, continuamos el viaje en silencio.

La escuela ya se encontraba decorada por motivos de otoño, si no hubiera hecho lo que hice probablemente la hubiera disfrutado (más con la compañía de Lila), pero mi mente no dejaba de pensar en ella, en su voz pidiéndome que me fuera, en la frialdad de su mirada, en sus lágrimas derramadas, quise buscarla pero Dom insistió en que no sería tan conveniente pues probablemente no me dejaría conversar con ella y se armaría un escándalo.

Estaba terminando uno de mis trabajos escolares en una banca afuera de uno de los edificios de la facultad, me sobresalté por recibir una notificación en mi celular, la miré y me entristecí al ver de que se trataba, era un depósito por la cantidad de los boletos, ella había pagado los suyos diciendo de forma indirecta que se alejaba de mí.

No pude concentrarme en mis clases, nada de lo que escuchaba entraba en mi cerebro, incluso llegué a pensar qué tal vez Lila no me gustaba y solo estaba obsesionado con ella de una forma no sana, quizá, estaba tan confundido.

-Ok, tu tragedia te ha afectado tanto la cabeza-dijo Alberto dándome toques en la frente
-Pero y si es verdad? Qué tal si confundí amor con obsesión?-puse mi cabeza en mis brazos que se encontraban sobre la mesa, realmente me sentía agotado
-Solo sigues confundido por todo lo que Beatrice te dijo, pero que fue aquello que mencionó de Lila? Lo que hizo que dudaras de ella?

Iba a mencionar lo de los chicos con los que había salido pero lo pensé dos veces.

-Mencionó que tenía un problema de alcholismo severo, que se la llevaron de Boston por eso
-Eso es bastante ridículo, no puedo creer que lo hayas creído-contestó Dom
-Tenía algo de sentido si consideras el incidente del día después de su cumpleaños-bebí de mi café, no me sabía a nada
-Algo más?-Alberto mordió su manzana
-Qué se autolesionaba, eso me preocupó
-Pero...-Dom iba a comentar algo pero se lo guardó
-No te juzgaré, posiblemente no eres el primero al que le dice eso, si pudo convencerte aún cuando sabías todo lo que ella nos contó es completamente seguro que se lo ha dicho a otros
-Pero quizá fui el único perdedor que le creyó, no logro quitarme la espina de que soy un perdedor, perdí a...-lo dejé al aire, me sentía confuso con mis sentimientos
-La chica que te trae loco-Lanzó Dom
-Ya no sé, quizá yo sea tóxico para ella

Suspiré, los chicos siguieron comiendo, yo no tenía hambre por lo que prescindí de aquello, regresamos a nuestras clases, mi ánimo y desempeño no subió en lo más mínimo. Al terminar la jornada tenía que ir al auditorio para ensayar la obra, intenté cambiar mi actitud para hacer un buen trabajo en el ensayo pero Dom insistió en que fuéramos al gym para despejarme (mis padres habían conseguido que les hicieran descuento en las membresías a mis amigos), dijo que yo tenía sentimientos encontrados que se despejarían golpeando algo, no discutí nada y lo acompañé.

Llegamos, nos cambiamos, estiramos y fuimos al espacio designado para enfrentamientos cuerpo a cuerpo.

-Esto es justo lo que necesitas, lo sé-puso sus puños en alto
-Me ayuda en qué?-comenzamos a dar vueltas
-Liberarás tu frustración intentando esquivar mis golpes
-Luzco cansado pero no lo estoy tanto

Comenzamos a lanzarle golpes al otro, sinceramente sí servía para deshacerme de todo el odio a mí mismo que sentía, el enojo hacia Beatrice por mentirme y los celos (?) por el sujeto en la foto de Lila.

-Sabes, cada vez pienso más que debería alejarme de ella
-Por qué te alejarías de alguien a quien adoras?

Aquello me desconcertó tanto que no vi cuando Dom me derribó, se rió pero me ayudo a levantarme y seguimos con el combate.

-Cómo sabes eso?
-Qué es lo que cuelga de tu cuello? Luce familiar
-Son las placas del ejército que pertenecieron a Jason Anderson
-Cuándo te las dieron?
-En la final del partido de futbol-Le di un golpe en las costillas
-Quién te las dio?-soltó una patada que esquivé
-Lila...
-Por qué no se las haz regresado?-alzó sus cejas
-Porque...-No tenía nada para argumentar
-Déjame ayudarte a responder, no te las quitas porque te encanta tener algo de ella porque ella te encanta
-Calla! Eso no lo sabes!-me sonrojé aún más de lo que el ejercicio lo hacía
-Sí lo sé porque soy tu mejor amigo y he vivido contigo tu fascinación por la señorita Anderson, además no llevarías las placas de su padre si no te gustara, jamás llevaste algo de Grace ni siquiera los relojes que te daba
-Estás demente Sherwood-intenté derribarlo pero fallé
-Admite que estás enamorado de Lila!-Dom empezó a acercarse más para golpearme
-No, no lo haré!-solté un golpe que esquivó
-Te encanta! Dilo!-con sus piernas me había inmovilizado

-No!
-Dilo!-tomó mi brazo
-Ok, ok, lo admito-con una tonta sonrisa en su rostro me soltó

-Cómo se siente decirlo en voz alta?-siguió sentado en el piso, aún con una estúpida sonrisa
-Púdrete Sherwood-toqué nerviosamente mi cabello
-Lo haré pero sabes que te sientes mejor

Y así era, no había dicho que estoy enamorado de Lila por querer creerme ser lo peor para ella, en cierto modo estaba agradecido con Dom.

-Y ahora qué? Lo dije pero eso de que sirve? Ella aún me odia
-Créeme cuando te digo que estás equivocado
-Lo estoy?
-Como su mejor amigo y novio de su mejor amiga, poseo información privilegiada-se levantó y me ayudó a pararme también
-Entonces aconséjame sobre mi siguiente movimiento-me crucé de brazos
-Buscarla y ofrecerle disculpas, nada la haría más feliz, algo me dice que ya no desea tanto arrancarte la cabeza.

Lo miré un momento, suspiré, bebí agua, me encogí de hombros y me fui a cambiar.

Lila
Dolía saber que Matt no confió en mí, dolía saber que la perra de Beatrice había interferido una vez más en mi vida pero sobre lo que más me afectaba era saber que Max aún no se rendía después de tanto tiempo.

Sin mucho ánimo me metí a bañar, me preparé para ir a la escuela y salí con mis amigas, no sin antes silenciar mi teléfono, estaba cansada. Las chicas se habían quedado en la habitación para abrazarme al dormir, ayudó pero no era igual que con Matt, ellas me dieron consuelo y ánimo, sin embargo el pelinegro me hacía sentir segura. No dormí mucho en la noche, mi celular fue responsable de eso pero también mi tristeza, tenía sueño, quería dormir e intentar seguir adelante...pero hacía tiempo que no dañaban mi corazón por lo que costaría más conseguirlo.

Cada quien se fue a su facultad, entré a mis clases e hice lo posible por concentrarme, noté que no hice un buen trabajo cuando la profesora Martin dió un ligero toque en mi pupitre para llamar mi atención, me desperté y la vi parada frente a mí, con los brazos cruzados.

-Señorita Anderson, gracias por interrumpir su sueño para prestar atención a mi clase
-Yo no...-estaba sumamente apenada
-No sé preocupe, tranquilamente puede ponerse al día, claramente yendo a mi oficina terminando clases-se marchó enojada y siguió con su clase, bebí un poco de agua e intenté prestar atención escribiendo el trabajo que nos había pedido, estaba despierta pero no concentrada.

Logré terminar el trabajo, pero no evitaba que tuviera que ver a mi tutora al final del día para claramente ser amonestada, iba caminando cuando me topé con Grant, genial, algo más de que ocuparse.

-Lila! Llevo días buscándote pero no te apartas de tus amigos, cómo estás?
-Grant puedo ser sincera contigo?
-Claro, qué sucede?

Nos apartamos un poco del pasillo, no quería hacer esto dónde hubieran muchas personas.

-Te ves no muy bien? Puedo ayudarte en algo?-apartó un mechón de mi cara
-No, estoy bien pero lo que quiero decirte es que creo que en su momento llegué a tener acciones que te hicieron pensar que quería contigo algo más que una amistad cuando no es así, me caes bien, eres un chico increíble que desde que llegué se portó muy lindo conmigo, pero no creo que podamos funcionar como pareja
-Estás hablando en serio?-hubo un cambio en su mirada, no diría propiamente que ahora se veía triste o algo parecido, se le veía más obscuro
-Si, lo siento mucho, pero sigo teniendo aprecio por ti, no dejemos que esto arruine nuestra amistad
-No lo sé Lila, tengo que pensarlo-tomó mi mano
-Está bien, estaré para lo que necesites
-Sólo tengo una duda...-apretó sus labios, escogiendo sus palabras-Esto es...por Matthew?

La sorpresa de aquello hizo que le soltara su mano y retrocediera, no recordaba haberle contado sobre Matt, quizá se hubiera dado cuenta por lo mucho que salgo con él pero no lo había mencionado en su presencia.

-Por qué quieres saberlo?
-No importa, nos vemos Lila

Se alejó, me quedé reflexionando aquello un momento más, pensar en Daddario me dio un vuelco en el estómago por todos los sentimientos que sentía por él, enojo y tristeza más que otros.

Tenía un par de horas libres por lo que me moví a la facultad de Kath para ayudarla a decorar unas calabazas que serían colocadas en las facultades de humanidades por motivos de otoño y Halloween, sería bueno para relajarme cortar algo que no fuera la cabeza del idiota más grande que conozco. Mi mejor amiga ya se encontraba en las mesas designadas para la decoración de las calabazas, me senté junto a ella, me dieron un cuchillo, una víctima y comencé a tallar.

-Te encuentras mejor?-volteó a verme, se veía angustiada
-Si, por qué?-seguí concentrada en mi escultura
-Porque tu pobre calabaza no dice lo mismo-La señaló con el cuchillo, accidentalmente a propósito deformé a la pobre verdura, se veía realmente mal
-Oigan, sabíamos que las decoraríamos con tema de Halloween pero no tan explícito-comentó Em llegando con otra calabaza para mí y para ella, dejó sus cosas bajo la mesa para sentarse frente a nosotras, puso manos a la obra.
-Queda con la época-intenté defender a mi pobre víctima
-Qué bueno que no estás en mi clase de actuación porque el profesor Rossi te hubiera reprobado, eres muy mala mintiendo-dijo Em
-Dinos que te tiene tan inquieta? Fue lo sucedido con Matt?-preguntó Kath
-No sólo fue eso, hay...algo que sólo uno de ustedes sabe
-Qué ocurre?-Em bajó su cuchillo y se centró completamente en mí
-Les he contado sobre mi ex novio Max, no?
-El chico que te complicó tanto la existencia? Es lo único que hemos oído de él, no es tu tema favorito-Kath también detuvo su trabajo
-Pues...lo es, pero también tuve hermosos momentos a su lado. Ok, les diré; cuando estudiaba en Boston yo solía salir con muchos muchachos ya fuera porque eran lindos o porque podía sacar algo de ellos, lo sé, la Lila antes de Nueva York no es una de la que me sienta completamente orgullosa, no había tenido un novio serio hasta que Max Irons apareció en mi vida.

»Llegó desde Inglaterra a mi escuela, yo siempre era quien escogía a los chicos pero él se fijó en mí antes, comenzó a cotejarme dándome lindos y caros regalos además de llevarme a lugares muy bonitos, me sentí realmente halagada y especial cuando lo hacía así que poco a poco fue despertando en mí un interés por él pero su actitud fue lo que me enganchó. Es guapo así que fue fácil caer en sus redes, dejé que lo que en su momento conocí como amor me cegara, pero aún así viví grandes momentos a su lado, tuve varias citas hermosas con él, por ejemplo la fiesta donde me presentó como su novia y nos besamos por primera vez es algo que odio recordar con cariño, la disfruté tanto que aún conservo la foto que nos tomaron ese día.

-Podemos verla? Deseo tanto ver al famosísimo idiota que te marcó tanto-dijo Em

Con un suspiro tomé mi celular, busqué la foto y se las mostré, un nudo en mi garganta se formó al ver lo feliz que lucía en ese instante al lado de alguien que me hizo bastante daño.

-Si es guapo, en eso no te equivocas-comentó Kath regresándome el teléfono
-No todos los monstruos son horribles, hay unos muy hermosos
-Pero qué hizo su noviazgo algo que tanto odias? Siempre que hablas de tu ex novio te pones tensa
-Pues al principio de nuestro noviazgo todo fue miel sobre hojuelas, él me quería muchísimo y yo a él...pero con el tiempo nos fuimos conociendo más y la situación ya no fue tan hermosa. Él siempre intentó caerle bien a mi familia pero son duros de ganarse.
-Dom me contó que amaron a Matt-comentó Kath
-Lo hicieron, incluso mis primos lo aprobaron pero a Max no, nunca les cayó bien, por mucho que les diera cosas o que yo me viera feliz no funcionaba.

»Me amó como nadie jamás lo había hecho, me hizo sentirme especial por sus tratos pero entonces nos fuimos conociendo más, se dio cuenta de lo apegada que soy a mi familia y pareció no gustarle que prefiriera estar con ellos que con él, todo comenzó a irse a la mierda en ese momento pues para hacerme cambiar de opinión metió ideas en mi cabeza de que él era más importante, me manipuló a su antojo sin que yo me diera cuenta, no niego que yo también le hice daño encelándolo una vez a propósito o que no hacía nada cuando me compraba cosas caras así que con el paso del tiempo discutíamos más de lo que nos tomábamos de las manos.
Su manipulación fue tan buena que me hizo creer que mi papá no me quería ver feliz con él, papá siempre lo desaprobó lo que causó constantes e intensas peleas entre nosotros hasta que un día me marché de mi casa.

Las lágrimas de tristeza y coraje resbalaban por mis mejillas, las limpié con el dorso de mi mano, Kath puso una de sus manos en mi hombro y Em sujetó la otra para animarme a continuar, haberle dicho a Dom esto me había aligerado la carga pero entre a más gente se lo contaba menos era el dolor.

-Te fuiste lejos?-Em no soltó mi mano
-No mucho, quise quedarme con Max pero algo en mí me decía que no lo hiciera por lo que opté acudir a la casa de una de mis "amigas", estuve sólo dos días porque no aguanté estar lejos de la persona que más amaba en el mundo así que al tercer día lo busqué, nos reconciliamos y me dio el valor de enfrentarme a Max para terminar con él
-Y qué pasó? Por qué tiene él la culpa de tu extraño comportamiento?-preguntó Kath
-Max jamás aceptó nuestra ruptura, se aferró a la idea de que sólo pasábamos por un mal momento, así que cuando me fui a Miami parece que Beatrice y él se aliaron para seguir buscándome para tener aún contacto conmigo, esa perra lo manipuló para que con su rechazo al fin de nuestro noviazgo además del apoyo de sus enormes recursos consiguieran la dirección de mi escuela y mi celular, es por eso que destruí el anterior, no quería que me contactaran, sin embargo Max lo volvió a hacer, pero en un momento de debilidad yo...contesté uno de los mensajes de Max, ahí empezó la enorme bola de nieve que me está atormentando, no deja de mandarme mensajes-hundí mi cara en mis manos
-Por qué no le dejaste de contestar?-Kath levantó mi rostro mientras me dedicaba una linda sonrisa
-Porque ese idiota no se rinde fácil, era contestarle de vez en cuando y cortantemente o aguantar que me llamara en cualquier momento de forma insistente, pude haber estado con Matt cuando eso pudo haber pasado, incluso es capaz de venir hasta Nueva York desde Alabama, eso hubiera sido lo peor que podría haber pasado. Pero ahora no puedo cerrar la puerta que yo misma le abrí, y no, no puedo bloquear su número porque son números privados desde donde me contacta así que estoy perdida-enterré mi cuchillo en la segunda calabaza, la supervisora de la actividad nos regañó y tuvimos que empezar de nuevo a esculpir
-No estás perdida, nos tienes a todos nosotros, también a Harry aunque esté en Ottawa...sin olvidar a Matt, sobre todo él-Em sonrió y Kath la imitó
-Estoy consciente de eso, es por eso que desearía poder hablar con él
-Y por qué no lo haces?-preguntó Kath
-Porque ayer le pedí que se alejara de mí, mis impulsos otra vez lo alejaron
-Saldremos de esto, ok? Lila, muchas gracias por la confianza-dijo la pelirroja
-Tengo una idea, danos tu celular-los ojos de la morena se agrandaron
-Por qué?
-Lo guardaremos para ti, así no le contestas a Max y puedes tomarte un respiro, te lo daremos mañana así que puedes decirle que estuviste ocupada o algo, sólo quiere que le contestes, no?
-Son las mejores amigas que podría tener en la vida-Entregué mi teléfono

Les sonreí a ambas, realmente había servido de mucho contárselos. Terminamos de tallar unas cuantas calabazas más así que cuando terminé volví a mi facultad, aún tenía unas pocas clases pero sobretodo debía ver a la profesora Martin y ofrecerle una disculpa por haberme dormido en su clase.

La encontré en su oficina, me pidió que me sentara en la silla frente a su escritorio, obedecí y puso una taza de té de menta en mis manos.

-Profesora Martin, quiero ofrecerle una disculpa enorme, usted sabe del aprecio que le tengo por lo que faltarle el respeto a su clase y a usted durmiéndome no fue mi intención-tomé un sorbo de té
-Tranquila Lila, ok?-me sonrió, por qué?!
-No está molesta?
-Lo estaba he de admitirlo pero después de que me entregaras tu trabajo al final de mi clase entendí que simplemente estabas desgastada y quizá triste
-Mi trabajo le dijo eso? Si no mal recuerdo hice un relato sobre...
-Bueno, no fue exactamente tu trabajo, más bien fue la hoja que, sospecho, me entregaste anexa a éste por accidente-tomó mi trabajo de la pila de hojas que estaban en su escritorio
-De qué habla?-la pluma con la que había estado jugando resbaló de mis manos por la sorpresa

Por favor, que no sea lo que creo que es.

-Pues es una lista que se titula "Razones para no soportar a M.D."-estiró la hoja para leer el encabezado

Sip, es exactamente lo que creo que es.

Comencé a hundirme poco a poco en la silla, sentí el calor subir por todo mi rostro, cubrí mi cara con mis manos.

-Creí que quizá era un trabajo extra para compensar tu falta de atención pero entonces comencé a leerlo, te importa si lo hago en voz alta?

Negué con la cabeza, sabía que por la pena apenas y podría hablar.

-"Razones para no soportar a M.D.", 1.-Por no escucharme primero, 2.-Por ingenuo, 3.-Por ser bipolar con su barba, 4.-Por apoyar sólo a equipos deportivos malos, 5.-Por hacer que su sonrisa brille tanto, 6.-Por ser un caballero conmigo, 7.-Por tener un cuerpo que embone tan bien con el mío cuando nos abrazamos, 8.-Por su aroma tan exquisito e inconfundible, 9.-Por tener los ojos más hermosos que he visto, 10.-Por haber despertado algo que creí muerto

Estaba más roja de lo que un ser humano puede estarlo, me sentía apenada por haber escrito eso, estaba tan distraída e inspirada escribiendo mi lista que jamás noté cuando la hoja se juntó con mi trabajo de clase, la parte buena es que mi tutora y yo tenemos una buena relación de confianza, sabe un poco sobre mi vida amorosa pero no descartaba lo incómodo del momento.

-Sabes, esto es claramente un efecto de "lovebug"-dobló la hoja y me la entregó
-Love qué?
-Como escritores usualmente tendemos a ser más...filosóficos que los demás, hay un "síntoma" que le pasa a los seres humanos, es bastante interesante, como sabes "lovebug" significa "insecto del amor", puedes darte una idea general pero para que te des una idea es pensar únicamente en una persona especial, dejar de ver sus defectos porque sus virtudes te importan más, sospecho, mi estimada Lila, que eres víctima de eso
-Yo...
-Acaso es el joven Daddario el causante?

Casi tiro la taza por la sorpresa.

-Qué Matt qué?
-He notado que a partir de ciertos meses tus trabajos hablan de amor, casi siempre con un personaje masculino alto y de cabello negro, además siempre pasas tiempo con él
-Pero es diferente que escriba eso a qué sea recíproco
-Yo no lo dudaría-Una sonrisa de lado apareció en su cara
-Puede ser más específica
-Soy escritora del guión de la obra que protagonizará, ocasionalmente visito el teatro para dar asesorías sobre los personajes, el joven Daddario y tu amigo rubio suelen tenerte como tema de conversación, sus ojos se iluminan como los tuyos cuando hablan del otro
-De verdad?-Una chispa de algo se prendió dentro de mí, mi tutora asintió-Pero aún así alejé a Matt, detesto tenerlo lejos, quiero estar con él
-Imagino que por tu escrito y la frustración que tienes en estos momentos piensas que esto terminará porque él no te ha buscado, por qué no tomas tú la iniciativa? Búscalo, dile cómo te sientes, no debes alejarlo, no si realmente te importa como dices

Lo medité, no por mucho tiempo, ella tenía razón, sería madura por unos instantes y buscaría a mi chico.

-Lo haré profesora Martin, muchas gracias-me levanté del escritorio
-Por nada Lila-con un gesto de despedida salí de su oficina.

Comencé a dirigirme hacia mi residencia, mandaría un mensaje a Dom desde mi computadora para buscar a Matt, quería arreglar lo sucedido tan pronto como fuera posible, sospechaba que ambos la pasábamos igual de mal lejos del otro.

El pelinegro era de aquellas personas que son bastante atractivas al verlas, recuerdo que cuando lo conocí lo consideré sumamente guapo, pero con el paso del tiempo y a medida que lo fui conociendo su belleza se transformó en lindura, comenzó a llamar mi atención ya no de forma física, sino más allá, me sentía tranquila a su lado, sabiendo que fácilmente ambos podíamos desaparecer el mundo alrededor con la compañía del otro. Por eso mismo fue tan dura su desconfianza, sin embargo yo también tenía gran parte de la culpa, seguiría el consejo de la profesora Martin y lo buscaría, pero mi plan se vio afectado una vez en mi cuarto a nada de mandar el mensaje sonó el teléfono de la habitación (Tenemos teléfono fijo en el cuarto?!!), dicho descubrimiento me asustó pero me sobresalté aún más al oír su voz.

*Llamada*
-Cómo está la escritora más bonita del mundo?
-No tienes imaginación para decir otra cosa?
-Nop, tú eras la parte imaginativa y yo la realista, me extrañaste?
-No mucho, de hecho nada
-Oww, sabes pensé que tu celular estaba descargado y por eso no contestabas ni mis mensajes o llamadas, qué bueno que tienes teléfono en el cuarto
-Cómo conseguiste el número de mi habitación? Estoy segura que por normas de privacidad no está en la guía telefónica
-Digamos que me lo dió un pajarito, todo a su tiempo, princesa
-Pero aún así puedo colgarte y ganas no me faltan de hacerlo
-Sólo quiero hablar contigo, escuchar la hermosa voz con la que solías leerme bajo la casita del árbol de tu hogar, recuerdas eso? Cuando almorzábamos con pescado y papas en ese lugar, lo bien que se acomodaba mi cabeza a tus piernas para que pudieras acariciar mi cabello mientras leías tus bellas creaciones

Un enorme dolor en el pecho me golpeó secamente, tenía que ser más fuerte.

-Lo recuerdo aunque es opacado por una de las muchas y grandes discusiones que tuvimos en tu biblioteca, cuando ambos nos gritamos tanto hasta acabarnos la voz, recuerdo bien como casi arrojo un jarrón a tu cabeza
-Auch! Buen movimiento pero aún así quiero escucharte, que hablemos de algo, mejor dicho
-De qué?
-Pues me enteré que tu niñito actor lo arruinó todo contigo, eso es cierto?
-A ti por qué te importa?
-Para saber si cuando te vea tendré que abrazarte para consolarte hasta que duermas en mis brazos como solías hacerlo cuando estabas triste
-Sólo fue una vez, en un paseo escolar donde por cierto tú fuiste la causa por la que lloré como lo hice
-Yo te dije que pelearas así con tu papá?
-No, pero nuestro noviazgo fue la razón por la que peleamos
-Él no quería tu felicidad
-Claro que la quería, era mi papá! Nadie me conocía como él, lo nuestro fue un error
-Quizá tengas algo de razón pero no niegues que en su momento la pasamos sumamente bien, sobre todo en la fase de "luna de miel", la sonrisa que sólo yo podía provocarte es de mis mejores recuerdos de ti, lástima que te fuiste a Miami a estudiar literatura
-Miami fue bueno para mí, sane todas mis heridas
-Literalmente, no?
-Qué quieres? Ya oí lo que querías decir, te colgaré ahora
-Sólo quiero decirte algo más
-Qué sea rápido
-Recuerdas que hace tiempo te hice una promesa?
-Qué?
-Yo jamás rompí una promesa contigo, la cumpliré antes de lo que imaginas
-Espera, yo...
-No hace falta que digas algo, probablemente no la recuerdes pero la cumpliré porque te quiero y no empezaré a quedar mal contigo
-Pero no quiero que lo hagas, no quiero saber más de ti, creí que lo habías entendido
-Podrás ser lo distante que quieras pero eso no cambia mi amor por ti, haz memoria y quizá recuerdes la promesa que te hice, nos vemos Lila, jamás olvides lo que siento por ti.
*Fin de la llamada*

Sin que yo pudiera decir algo colgó.

Me molesté muchísimo conmigo misma por no haber sido un poco más fuerte, me había vuelto a desequilibrar, me senté en mi cama, molesta por todo lo que había pasado, escuché que alguien llamó a la puerta, sin mucho ánimo y sin levantarme, pedí a la persona que tocaba que entrara.

Y eso hizo, la puerta se abrió para dejar entrar a Matt, cerró la puerta cuando entró, se acercó a mi cama y se quedó parado frente a mí, respetando mi espacio, jamás lo había traspasado sin mi consentimiento y esta no fue la excepción. Alcé la vista hacía él, se veía incluso más cansado que yo.

-Matthew...
-Hola
-Estaba por irte a buscar-Traté de bloquear lo sucedido en el teléfono
-Tenemos que hablar-comenzó a jugar ansiosamente con sus dedos
-Ok, hablemos-con la cabeza señalé la cama, él se sentó
-Quiero disculparme...por no preguntarte antes lo que Beatrice me dijo, fui impulsivo al citar una reunión con ella sin tu conocimiento o consentimiento, yo...lo siento mucho-Terminó de hablar y sus hombros se relajaron
-Yo tuve parte de la culpa, no te conté mucho de lo que ella dijo, no fue justo, tú siempre me contaste todo
-Pero yo debí preguntarte!
-Y yo debí contarte!
-Jamás fue mi intención hacerte daño o llorar
-Imagino que no, te perdono, perdedor, pero jamás te conté todo lo de mi vida pasada
-Eso quiere decir, que si ambos somos culpables...
-Ninguno aleja al otro?-tomé su mano, tibia igual que siempre
-Creo que sí-miró nuestras manos y besó la mía, el color me subía por todas las mejillas, sonrió al verme colorada

-Había olvidado lo linda que te veías roja
-Y yo tu sonrisa, por mucho que esas ojeras intenten opacarla-Le acomodé su ya acomodado cabello
-No había dormido bien, creo que se nota-rascó su nuca
-No te preocupes, te ves lindo

Se sonrojó.

-Qué fue todo lo que ella te dijo? Quiero que me lo digas para contestarte si es verdadero o falso-Seguía sin soltar sus manos
-Ya no importa, de verdad-Intentó depositar un beso la comisura de mis labios, me aparté por los pensamientos que no logro sacar de mi cabeza

-Claro que importa! Ya no quiero ocultarte nada...por favor, dime qué te dijo
-Bueno, evidentemente lo del alcoholismo es mentira, pero lo de las auto lesiones?

Agaché mi cabeza, no estaba orgullosa de aquello.

-Eso si es verdad, lo llegué a hacer en contadas ocasiones, fue en momentos en los que me sentía mal conmigo misma por haberle hecho daño a otros que me importaban, no me enorgullece

Sus ojos se abrieron como platos, no sabría si era de sorpresa o decepción.

-Lo importante es que ya no lo haces, ok?

A lo lejos pude oír las voces de mis amigas, hoy también tendríamos "noche de chicas".

-Las chicas vienen-solté nuestras manos
-Eso me temo-se levantó de la cama, quedando frente a mí
-Aún hay algo que aún debo contarte-Ya era hora de hablarle sobre Max
-Lo haremos mañana, te invito el almuerzo y ahí hablamos, conforme y de acuerdo?
-Conforme y de acuerdo
-Hasta mañana-Depositó un beso en mi frente
-Hasta mañana, te extrañé-lo abracé, mi cabeza quedó hundida en su pecho, él colocó sus manos en mi espalda dando leves caricias, por qué me estoy portando así con él?!!

El abrazo se terminó, salió de mi habitación y las chicas entraron.

-Parece que ya se reconciliaron, no?-comentó Em dejando dos botellas de soda en el suelo donde teníamos mantas y almohadas
-Creo que si, comenzamos a aclarar las cosas poco a poco-me levanté de la cama para dirigirme a la ventana, pude ver la silueta de Matt emprender camino a su residencia
-No lucía muy bien, esas ojeras y cara de cansado no le van-dijo Kath colocándose a mi lado
-Creo que se ve lindo incluso así-me aparté de la ventana cuando Matt desapareció de mi vista

-Espera, acaso Matt te...?-Kath también se había apartado de la ventana para sentarse en el piso conmigo y Em
-Qué?
-Te gusta!-gritó Em
-No, claro que no...quiero decir...es lindo, atento conmigo, inteligente, es atlético, amable, una gran compañía, mi familia lo ama, adoro estar con él aunque no sabe de equipos deportivos pero tiene los ojos más lindos que haya visto y...

Por qué estaba diciendo eso en voz alta?!! Momento de abortar la misión! Aborta la misión! Aborta la misión, Lila!! 

-Te gusta?-preguntó Em, ambas parecían demasiado atentas a mi respuesta

No lo hagas! No te atrevas a decirlo! Lila, no lo hagas! Retírate! Sal de ahí, a-ho-ra!

-Si...-suspiré

Y me gusta demasiado

Continue Reading

You'll Also Like

22K 621 199
Segunda temporada de esta rara historia en imagenes de amor, amistad, hermandad y mucho mas. NO AL PLAGIO! Disfrutenla, besotes enorme!
9.6K 539 16
Nina es una chica la cual recibe mucho Bullyn en la escuela al igual en el Roller todo esto la llevará a la muerte... Ella a suicidarse la cual graba...
399 161 18
Ella siempre vivió sin reglas... Él estaba atrapado en una burbuja... Recuerdos de tiempos lejanos cambiarán el presente y una vez más se volverán a...
4K 339 38
La vida y la muerte siempre están entrelazadas. En un minuto muere una persona y, al mismo tiempo, otra está llegando a este mundo. Algo tan sencill...