"Te quiero."
Al otro lado de la línea no se escuchó nadamas que silencio. Tragué saliva deshaciendo el nudo de la garganta y noté como un peso se había levantado de mis hombros dejándome mas tranquila.
"Vale... um, tienes que estar bromeando, ¿Verdad?" Dijo sin poder creer lo que escuchaba a través de la línea de la llamada. Créeme, si yo fuera él, tampoco me lo creería.
"No, estoy hablando en serio Scooter." Dije con tono serio, haciendo que se lo creyera esta vez.
"¿Que?!" Soltó en voz alta. Estaba incrédulo. "Pero... ¿porque?"
Suspiré cogiendo aire y expulsándolo. "Porque tengo que hacerlo." Tragué saliva de nuevo con nerviosismo.
"No tienes que hacerlo y tu lo sabes, no ha pasado nada como para que tomes una decisión tan precipitada... ¿no?" Suspiré y pasé mi mano libre por mi rostro con frustración. "¿______?" No contesté. "Oh joder, ¿Que demonios ha pasado?" Mier*da. Estaba perdida y no le podía contar la verdad.
¿Que se supone que le iba a decir? Oh, Scooter. Tranquilo, es solo que me he estado tirando a Justin durante unas semanas y estoy jodidamente enamorada de él. Un psicópata me esta haciendo la vida impossible y amenaza con hacer daño a Justin, pero tranquilo, lo tengo todo bajo control.
Quizás... podía funcionar.
"Oh podía mandarte derecha a un psiquiátrico." La voz trasera de mi cabeza habló esta vez por mi.
Sacudí mi cabeza. "Yo..." Suspiré. "Necesito alejarme de todo un tiempo, y creo que necesito hacerlo ya." Tragué saliva y luego lamí mis labios.
"¿Justin tiene algo que ver con esto?" Dijo con determinación en sus palabras.
Sentí un escalofrío recorrer mi cuerpo al escuchar su nombre en la boca de Scooter.
Guardé silencio. "Mier*da, el tiene que ver con esto, ¿Verdad?"
"Mira, si tiene que ver con él no es problema, solo te llamé para decirte mi decisión." Mordí mi labio esperando con impaciencia su respuesta.
"______, no puedes hacer esto."
"Si lo puedo hacer."
"No lo hagas." Intentó convencerme.
"Mi decisión esta tomada y no hay vuelta atrás." Mi voz era algo débil.
Se escuchó un suspiro de frustración desde la otra parte del teléfono. "¿Jason sabe algo?"
Negué con mi cabeza. "No, y no quiero que le digas nada, ¿de acuerdo?"
"El tiene que saberlo, _____."
"No, no tiene que saberlo, y no lo sabrá. Al menos, no hasta que yo lo diga." Me largué de la ventana mientras caminaba por la habitación para dirigirme a la cama y sentarme.
"Dios, _____." Suspiró. Sabía que en ese momento estaba todavía en shock y pasándose por su pelo sus manos con frustración.
"Necesito que me prometas que no le vas a decir a nadie esto, y menos a Jason." Esperé con impaciencia.
"Esta bien, no le diré a nadie." Asentí con mi cabeza con alivio.
Se produjo un silencio incómodo.
"¿Cuando te vas?" Tragué el nudo que tenía en mi garganta.
"Mañana será mi último concierto."
"Y... ¿Como les vas a decir a todos?" Lo había pensado pero no estaba segura.
"Antes del concierto, supongo." Pasé mi dedo por una onda que caía en mi hombro.
"Vale."
"Tengo que... ir al estudio." Lamí mis labios con nerviosismo.
"Esta bien..." Justo antes de despedirnos el me interrumpió. "______."
"Si." Contuve mi respiración por lo que iba a decir.
"¿Estas bien?"
Asentí con mi cabeza como si el me pudiera ver. "Si." Esbocé una pequeña sonrisa intentando convencerme a mi misma y a él.
"Sabes que puedes confiar en mi, ¿Verdad?" Hizo una pausa. "No le diré a nadie nada."
Me sorprendía su confianza. Scooter era una de esas personas que se comportaba como parte de tu familia o como un amigo verdadero, cuando la ocasión lo requería.
¿Como le podría decir lo que había pasado con Justin si él era su representante?
De ninguna manera.
"Esta bien Scooter. No pasa nada."
El suspiró. "Esta bien. Buenas noches _____." Antes de colgar le interrumpí.
"Scooter!"
"¿Si?"
"Gracias... por todo." Tragué saliva.
"De nada." Dijo con un tono comprensivo y la llamada se cortó.
Scooter's Point of View:
¿Que demonios ha hecho este chico?!
Pasé mis manos por mi cabeza mientras ponía mi gorra en su sitio. Mier*da, mier*da y mier*da.
Estaba seguro de que había sido algo entre ellos. Se veían muy juntos últimamente y sabía perfectamente, que había algo.
Busqué entre mis contactos el teléfono de Justin. El me iba a aclarar todo de una vez. No quería presionar a Smith, porque sabía que esa chica estaba mal, pero Justin me lo iba a tener que decir.
El teléfono dio unos cuantos tonos cuando escuché la voz de Justin. "Hey, ¿Que pasa man?" Contestó con un tono algo alegre. Se escucharon voces de chicos, seguramente estaba con sus amigos.
"Justin, ¿que demonios hiciste?" Le exigí con mi voz. No estaba para nada contento.
"¿Que? ¿D-de que estas hablando?" Parecía estar extrañado.
"Smith, de eso estoy hablando." Seguí esperando a que él contestara.
"¿Que?"
"No te hagas el tonto y ve al grano, y no me digas que nada porque se que hay o había algo que pasaba entre vosotros." A ese punto echaba humo.
No me puedes culpar, el tour se acababa de quedar sin una telonera y algo estaba mal con Smith y Justin. Por no hablar del hecho que le tenía que ocultar a mi amigo que su artista abandonaba el tour precipitadamente.
"¿Quieres saber lo que pasa? Entonces, pregúntale a esa perra." Dijo con furia. Parecía dolido por algo.
"Justin." Le reprendí por su palabra desafortunada.
"¿Que?" Se dijo el sorprendido. "Es la verdad."
"Mejor cuéntamelo tu." Lamí mis labios esperando impacientemente. Desafié con sarcasmo en mi voz.
Suspiró con ira. "Ella... ugh, ella me mintió. Y me hizo creer cosas que no eran, cuando en realidad todo era mentira."
Fruncí mi ceño. "¿Que?"
"Lo que escuchas Scooter."
"Pero... no, Smith no es así. Yo la conozco, no haría nunca algo así."
"Pues al parecer las apariencias engañan."
"Seguro que hay una explicación detrás de todo esto." Razoné. Es decir, me negaba a que eso fuera verdad. Simplemente no podía serlo.
"Si, que es una jodida mentirosa." Habló con voz dura. Se notaba dolido y decepcionado.
Suspiré. Simplemente no podía creerlo. "No se que ha pasado exactamente, pero sea lo que sea no hagas que afecte a tu trabajo."
"Vale." Mordí la cara interna de mi mejilla, enganchándola con los dientes con frustración.
"Buenas noches." Terminé la llamada antes de que Justin tuviera la oportunidad de decir algo.
Había prometido que no iba a decir nada, y lo iba a cumplir. Al menos hasta que ella lo dijera primero.
_____'s Point of View:
Terminé de vestirme y puse una chaqueta por encima de mi camiseta de manga corta. Me iba a ir al estudio a esas horas y Bruce me estaba esperando para marcharme. Tan solo cogí mi iPhone y algo de dinero y me largué de allí.
Nos dirigimos al estudio. No tenía planeado ir esa noche, pero simplemente lo necesitaba. Necesitaba hablar a través de la música, escribir, desahogarme, poner cada sentimiento que sentía en un papel.
A veces, los psicólogos te mandan escribir como te sientes en un papel, o diario, porque es una forma de terapia y de expresarte, sin tener la necesidad de ponerte delante de una persona determinada y abrir la boca. Porque las cosas dichas por ti misma, suenan mas dolorosas, que escritas en un papel.
De esa forma, te desahogas de la forma menos dolorosa posible.
Eso es lo que hice. Escribí. Una hora. Otra. Otra más. Llegó la madrugada. Concretamente la una y media de la madrugada. Y entonces fue cuando se me vino todo encima. La noche te hacía sentir mas vacía y sola de lo que realmente estabas.
"¿Estas bien _____?" El productor me preguntó con preocupación.
Asentí esbozando una pequeña sonrisa. "Si."
Iba a amanecer y todavía estaba allí, sentada en una silla, delante de la mesa de mezclas con el productor. Mandé a Bruce al hotel de vuelta para que se fuera a descansar, y yo me quedé allí.
Aprovechaba el tiempo, porque sabía perfectamente que no iba a ser capaz de dormir ni un segundo. Los recuerdos y las palabras de Justin pasaban cada segundo por mi cabeza, atormentándome.
Leí la letra de la canción que había compuesto hacía unas horas en el estudio. Se llamaba Scars. Recordaba como las lágrimas caían por mis mejillas con cada letra que incrustaba sobre el papel. Acababa de recoger mis cosas y me había montado en el bus bajo la atenta mirada de todos. Simplemente me senté en uno de los asientos y me apoyé en la mesa dirigiendo mi mirada al exterior.
Sola, sin nadie a mi lado. No quería hablar. Mi iPhone estaba sobre la mesa y lo miraba con mirada perdida. Sentía voces a mi alrededor y alguna mirada que otra, pero las ignoraba. Noté como Alfredo se sentaba, a los pocos minutos de emprender nuestra marcha hacia Washington, en frente de mi.
Levanté mi mirada para coincidir con sus ojos oscuros y el me miró esbozando una leve sonrisa. "Te traje un café, como te gustan." Me puso en frente el café grande de Starbucks y yo lo cogí.
"Gracias." Dije con voz débil mientras le agradecía con mi mirada y mis palabras, amablemente.
"No importa." Se encogió de hombros. "¿Porque no vienes con nosotros?" Preguntó con curiosidad.
Tragué saliva con dificultad y sentí algo dentro de mi estremecerse. Negué con mi cabeza. "Estoy bien aquí, gracias." Sonreí levemente.
"¿Estas bien _____?" Di un sorbo de mi café saboreando el aroma en mi boca y luego tragué para mirarle a sus ojos de nuevo.
"Si, solo algo cansada, pero estaré bien." Sonreí intentando tranquilizarle.
"Esta bien." Se levantó y se detuvo justo a mi lado al pasar por el pasillo. "Si necesitas algo estaré allí, con los chicos." Dijo dando un apretón a mi hombro con su mano. Asentí mirándole hacia arriba.
"Gracias." Lamí mis labios poco después mientras el se marchaba.
Tan solo habían pasado unos minutos de viaje y me había dado cuenta de que era lo más incómodo del mundo. Estaba cansada. No sabía que hacer. No podía ir con los chicos--normalmente el viaje con Justin o con sus amigos sería mas llevadero-- y realmente estaba agotada por no dormir en toda la noche.
Me apoyé con mi codo en la mesa y puse mi cabeza en mi mano mientras miraba al café a la vez que tocaba el bote con mis dedos.
4 horas de maldito viaje.
Volteé mi cabeza y miré a la parte trasera del bus. Justin estaba concentrado hablando con Ryan, el asentía con su cabeza, y justo cuando sintió mi mirada me miró a los ojos, aunque rápidamente me esquivó.
Me removí en mi asiento con incomodidad. Algo en mi pecho me hacía sentir mal. Era como si tuviera presión. Me llevé mi mano y contuve mi respiración, tranquilizándome. Era extraño.
3 horas de viaje después, me senté sobre mi asiento en el sofá mientras me acomodaba. Había estado durmiendo la mayoría del tiempo, aunque dos horas no era descansar mucho, por lo menos me sentía algo despejada. Me encontré con la mirada de Allison. "Vaya, ¿has descansado?" Dijo su voz mientras me estregaba mis ojos.
Me encogí de hombros. "Algo." Suspiré incorporándome a la vez que me sentaba. "¿Que hago aquí?" Dije algo extrañada y confundida.
"Jason te trajo cuando te dormiste, es muy incómodo dormir ahí." Asentí seria mientras suspiraba y miraba al frente. "Has estado toda la noche en vela, ¿verdad?
"Si." Le miré con sinceridad en mis ojos.
"Jason ha estado mirando las canciones que has compuesto... ha dicho que eran muy buenas." Fruncí mi ceño confundida.
"¿Por que?"
"Las ha encontrado en la mesa después de traerte aquí." Hice una mueca sorprendida.
"Oh." Dan me miró con curiosidad en frente de mi.
"Tienes muchas ojeras." Comentó mirándome.
"Vaya, gracias." Dije con sarcasmo y ellos rieron por mi comentario.
"¿Todo bien?" Allison me miró.
Asentí con mi cabeza.
"Dime la verdad." Exigió en voz baja.
"Allison--" Ella me interrumpió.
"¿Justin otra vez?"
Tragué saliva y asentí.
"¿Que hizo esta vez ese chico? Realmente no se va a dar cuenta de--" La interrumpí esta vez yo.
"No es su culpa Allison."
Me miró sorprendida. "Entonces..."
Negué con mi cabeza. "Es... todo. Se ha acabado, Allison." Le miré a sus ojos y ella se quedó todavía más sorprendida que antes.
"No." Negó con su cabeza sin poder creerlo. "Pero... ¿Porque?" Frunció su ceño. "Es decir, estabais bien. Os vi ayer y..."
"Pero ahora no. Todo ha acabado y eso es todo." Mordí mi labio.
Justo después de bajar del bus, nos dirigimos a comer a un lugar cercano. Me fui con todos los demás, porque en realidad, no tenía otra opción. La comida fue tensa. Ni siquiera abría la boca ni una sola vez. Justin estaba un poco mas a la derecha y por lo menos no coincidía con sus ojos cada vez que levantaba mi mirada.
Cada vez que chocábamos nuestros ojos... la decepción, el enfado y la tristeza se cruzaban. Simplemente no podía seguir con eso ni un solo momento más. Necesitaba irme de ese tour. No podía soportarlo. Me mataba mirarle a los ojos y ver esa mirada de decepción que me dirigía, después de todo lo que había pasado.
Era superior a mi.
Caminé por el pasillo de los backstage, quedaba bastante rato, así que tenía tiempo para descansar. Me senté en el sofá, sola. No sabía ni como iba a hacer esto, pero lo tenía que hacer. Tenía que hablar con alguien, y ese alguien era Miley.
Ella era mi mejor amiga, y sabía que no me iba a fallar e iba a respetar mi decisión. Si llamaba a Lily y se enteraba de lo que estaba a punto de hacer, estaba segura de que sería capaz de remover cielo y tierra para venir hasta donde estaba yo y encadenarme al bus para que no me fuera.
Y no bromeo.
Cogí mi iPhone sobre mis manos antes de dar un sorbo a mi refresco que estaba apoyado sobre la mesa. Marqué su número y puse mi teléfono en mi oído, esperando.
"______! ¿Como te va?" Dijo con alegría.
Suspiré. "Me va..." Mi voz era apagada aunque intentaba sonar bien.
"¿Que esta mal?"
"Todo, Miley. Mejor dicho... ¿que esta bien? Acabaríamos antes." Mordí mi labio.
"¿Que ha hecho Justin esta vez?" Tragué saliva y lamí mis labios.
"El no ha hecho nada..."
"Entonces, ¿Que has hecho tú?" Fruncí mi ceño mirando a mi alrededor pensando.
Suspiré de nuevo al coger aire. "Se ha acabado todo Miley." Mi voz ahora era devastada.
"¿Que?" Dijo con incredulidad. "Pero... ¿Porque?"
"Él..." Tragué saliva haciendo una pausa. "Él ha recibido unas fotos nuestras, le han dicho que las iban a publicar y que yo había mandado hacerlas... ha creído antes a quien se lo ha dicho que a mi." Lamí mis labios. No sabía como iba a hacer esto.
"Pero... es un gilipo*llas si hace eso. ¿Le dijiste algo?"
"No." Negué con mi cabeza.
"Pero... ¿porque? Es decir, eso es mentira." Noté un nudo formándose en mi garganta.
"Lo se, pero... ugh." Me quejé con mi voz. "Es más difícil de lo que tu piensas Miley." Suspiré.
"No, tu lo haces difícil. Estoy segura de que te pidió explicaciones, ¿me equivoco?"
"Si, me las pidió, pero... ni siquiera pude explicarme, guardé silencio y él dio todo por decidido." Pasé mis manos por mi pelo.
"Tienes que hablar con él."
"No." Me adelanté con voz dura. "No me quiere ver... ni hablar. Cuando se fue me dejó claro completamente lo que quería."
"¿El que quería?"
"No tener nada que ver conmigo más." Tragué saliva intentando que el nudo en mi garganta se deshiciera. Pero no funcionó. "Dijo que se había acabado." Mis ojos ardían por contener las lágrimas.
"Pero..."
"Si hubieras visto su mirada... como me miraba. Se sentía decepcionado, me odia Miley."
"Oh mier*da." Murmuró. "Lo siento." Suspiró al otro lado de la línea. "Pero sigo pensando en que tienes que hablar con él."
"No puedo ni siquiera mirar a los ojos de sus amigos, Miley. ¿Como se supone que voy a mirar a los suyos?" Miré a la nada jugando con mi pajita del refresco en la mesa.
Suspiró con resignación. "Tienes que hacer algo, si no, va a ser muy incómodo compartir tour con él."
"Eso no importa." Tragué saliva preparándome para lo que venía.
"¿Porque?"
"Me voy de Believe Tour."
"¿Que?!" Noté su shock mientras gritaba. "Pero... no. ¿Como demonios vas a hacer eso? ¿Estas loca?" Lamí mis labios.
"No, es lo mejor para todos, Miley." Pasé mi mano por mi nuca frotándola con frustración.
"No lo es, y tu lo sabes."
"Lo es, y lo voy a hacer." Seguí en mis trece. Si algo era, era cabezota.
"No lo hagas, _____."
"Esta decidido y no hay vuelta atrás Miley." Ella suspiró, sabiendo perfectamente que no me iba a convencer.
"¿Lo saben ya todos?" Negué con mi cabeza como si ella me pudiese ver.
"No. Los voy a reunir en un rato para decirles la noticia." Suspiré intentando tranquilizarme. Me hacía falta. Era un lío.
"¿Ni siquiera lo sabe Jason?"
Negué con mi cabeza.
"Solo Scooter, y tú."
"¿Sabes que Jason te va a pedir explicaciones de todo verdad?"
Asentí, sabiendo que lo haría.
"Entonces, se las tendré que dar." Me encogí de hombros.
"Suerte con eso." Miley suspiró al otro lado de la línea.
"La voy a necesitar." Esbocé una pequeña sonrisa.
"Tranquila, todo saldrá bien." Me estremecí al notar que ella decía las mismas palabras que Justin me decía.
"Eso espero."
"Nos vemos pronto, supongo."
Asentí. "Si. Seguramente regresaré a Los Ángeles mañana o esta noche."
"Suerte."
"Gracias Miley." Me despedí de ella y colgué la llamada, dejando el teléfono sobre la mesa delante de mi y me recosté en el sofá hacia atrás.
Di un suspiro de alivio, un peso menos que tenía presionándome sobre los hombros.
Miré a un punto fijo de la vacía habitación mientras sentía las voces del pasillo hacer eco. Una de ellas era de Alfredo, estaba llamando a uno de los bailarines, escuché que era Nick. Tragué saliva y suspiré de nuevo mientras sentía como los recuerdos venían a mi mente...
Justin y yo siempre nos habíamos tenido en los momentos malos. Apoyándonos el uno al otro, como cualquier amigo hace con una amiga... Aunque no sabía que 'cualquier amigo' llegaría a significar tanto para mi.
Caminaba por el bus del tour mientras miraba a las caras de los chicos que estaban sentados en los sofás que rodeaban el pasillo. Fruncí mi ceño al ver el rostro serio de Jason. Me senté a su lado. "¿Que pasa?"
El me miró y luego miró a los demás. Allison asintió con su cabeza. "Te tengo que decir algo, _____." Tragué saliva.
"¿Que esta mal?" Pregunté alarmada mientras algo dentro de mi se estremecía. Sabía que algo no iba bien, lo podía sentir en mi cuerpo y en mi pecho.
El suspiró y tragó saliva con dificultad haciéndome ver que mis sospechas eran ciertas. "Jason, habla."
Levanté mi mirada y vi caminar a Justin saliendo de la sala que estaba en la parte trasera del bus. Scooter iba detrás de él. Sus ojos eran llorosos y el rostro de Scooter mostraba preocupación. Los dos me miraron.
Algo dentro de mi pecho se encogió al ver la mirada triste y rota de Justin. Lamió sus labios y me miró de nuevo a los ojos. Noté un escalofrío recorrer mis adentros.
"¿Que ha pasado?" Miré a todos alarmada. Ellos simplemente mantenían la calma y el silencio. "Allison." La miré, sabía que ella no me podía mentir.
Abrió su boca, pero ni siquiera le dio tiempo a decir nada. Simplemente Jason se le adelantó mientras Justin se sentaba a mi otro lado y Scooter al lado de Jason.
"Verás... acaban de llamar los padres de Avalanna." Mi expresión cambió inmediatamente. Temí lo peor. Sabía que había pasado, pero ni siquiera me atrevía a pensar o a decirlo en voz alta. "Ella..." Le interrumpí negando con mi cabeza.
"No." Negué repetidas veces mi cabeza de un lado a otro. "No, no, no." Dije de nuevo mientras mi mano se iba instintivamente a mi boca conteniendo los sollozos que amenazaban con salir. Mi garganta se secó, mis ojos ni siquiera parpadeaban, pero sacaban lágrimas haciendo que cayeran directamente en mi regazo. Todas las miradas, o la mayoría, estaban sobre mi.
Justin estaba a mi lado con sus brazos sobre sus rodillas mientras miraba al suelo sin ni una sola expresión en su rostro, sorbió su nariz y apretó su mandíbula con fuerza.
"______." Jason se acercó a mi, mientras envolvía sus brazos a mi alrededor intentando tranquilizarme. "Lo siento." Susurró mientras pasaba sus manos por mi pelo y mi espalda, moviéndolas de una manera tranquilizadora y confortante.
"No puede ser Jason." Sollocé en su hombro. "No." Me negaba a aceptarlo.
"Se que es duro, pero sabíamos lo que iba a pasar ______." Tragué saliva con dificultad intentando deshacer mi nudo en mi garganta.
La había visto escasas veces, casi las mismas que Justin y Alfredo, pero esa chica era impresionante. Con tan solo una mirada o sonrisa que le dirigieras, se sentía feliz.
Me aparté poco después mientras me sentaba mejor en el sofá y sentí como alguien se movía a mi lado mientras yo secaba mis lágrimas de mis mejillas. Allison se levantó para ir a coger agua a la nevera. Alfredo estaba con su mirada perdida en frente de nosotros.
Lamí mis labios y de nuevo sollocé, recordando los ojos de aquella impresionante chica.
Puse mis codos sobre mis rodillas y enterré mi cabeza en mis manos mientras mi cabello hacía de cortina, escondiéndome de todos los demás. Nunca había llorado en público, pero esta era la excepción.
Sabía perfectamente que todo el mundo estaba tocado por la noticia.
Sentí una mano pasarse por mi espalda y ni siquiera hizo falta voltearme para saber de quien era. Justin. Sollocé todavía mas fuerte y mordí mi labio para contenerme.
"Hay que ser fuertes chicos." Scooter comentó dirigiéndose hacia nosotros y hacia todos los demás. Tragué saliva y me volteé hacia el lado de Justin mientras envolvía sus manos alrededor de mi y yo hacía lo mismo con su cuerpo. Era tan delgado, pero a la vez estaba empezando a ponerse fuerte.
Me aferré a él, como si la vida me fuera en ello y aspiré su aroma, encontrando algo de paz a su lado. Sus brazos estaban envueltos alrededor de mi cuerpo. "¿Por que siempre la gente buena tiene que acabar así?" Balbuceé en su hombro sin apenas fuerzas.
"Lo se." Contestó con su voz rota poniendo su rostro en mi hombro apretándome con fuerza. De una forma u otra, los dos sentíamos casi lo mismo. Para él significaba mucho esa chica.
La gente dice que las relaciones se hacen mas fuertes en los duros momentos, y aunque no suelo creer en lo que dice la gente... muchas veces tienen razón.
Los momentos mas duros, son los que más acercan a dos personas.
Caminé sobre el pasillo del autobús para sentarme en el asiento del sofá. Miré a Allison con curiosidad y le sonreí. "¿No tienes hambre?" Me preguntó.
"Acabo de ir a Starbucks con Alfredo, ¿Por que?" Le miré algo curiosa.
Se encogió de hombros. "Llevas muchas horas sin comer. Solo decía." Levantó sus manos en señal de rendición.
"¿No esta Selena?" Le pregunté con curiosidad.
Ella negó con su cabeza.
Fruncí mi ceño extrañada. "¿Donde ha ido? El otro día estaba aquí, pensé que hoy vendría." Tragué saliva, mirándole con curiosidad.
Ella suspiró profundamente y negó con su cabeza mirándome a los ojos. "Ella... no va a venir por aquí más."
Arqueé mi ceja. "¿Por que?" Es decir, no es que fuera mi mejor amiga o algo de eso... es más, no me gustaba mucho. No me preguntes por que, pero había algo en ella que no me acababa de gustar, no me inspiraba confianza.
Tragó saliva. "Justin y ella ya no están juntos." Lamió sus labios pillándome completamente por sorpresa.
"¿Que?" Pregunté con incredulidad.
"Lo que oyes." Encogiéndose de hombros.
"No--no lo sabía." Le miré de nuevo a sus ojos. "¿Que ha pasado?"
Ella se encogió de hombros. "No he querido preguntarle nada a Justin. Cuando pasa algo así, es mejor no remover las razones. Te deja peor darte cuenta de todo." Asentí con compresión.
"Entiendo."
"Justin esta mal." Dijo mientras miraba al suelo con su mirada perdida.
"¿Donde esta?" Sentí ganas de verle y de darle un abrazo o decirle que todo iba a estar bien.
Señaló con su cabeza hacia el interior del bus. "En su habitación."
Yo asentí con mi cabeza. Me levanté.
"¿Vas a ir?"
Asentí. "Es lo menos que puedo hacer. Para eso están los amigos, ¿no?"
Ella esbozó una pequeña sonrisa. "Entonces, ve."
"Nos vemos." Dije mientras me despedía y me largaba de allí, entrando a la sala, donde estaban los demás, viendo la televisión y hablando. "Umm..." Dije con timidez. "¿Esta Justin ahí?" Señalé con mi cabeza hacia su habitación.
Scooter asintió con su cabeza. "Si, ha entrado hace un rato."
Asentí. "Um, vale. Tengo que hablar con él y--" Pasé mi mano por mi pelo con nerviosismo. Scooter sonrió divertido ante mi tímida reacción.
"Esta bien, no te voy a decir nada." Levantó sus manos haciendo un tono gracioso con su voz.
Reí levemente. "Vale." Me dirigí hacia la puerta y llamé con mi mano. Pero nadie contestó. Llamé otra vez y una suave voz algo ronca contestó un simple 'adelante'.
Suspiré y agarré el mango de la puerta para abrirla despacio. "Umm... ¿Puedo entrar?" Dije con timidez al sentir sus ojos sobre mi rostro. El asintió algo aturdido y sorprendido al verme en su cuarto.
Tragué saliva y terminé de entrar en su cuarto cerrando la puerta detrás de mi. Me planté delante de su cama. El se incorporó sentándose en ella. Había estado acostado. "¿Pasa algo?" Preguntó algo curioso.
Negué con mi cabeza. "No." Esbocé una pequeña y tímida sonrisa. "Verás... yo." Pasé mi mano por mi cabello de nuevo con nerviosismo. Miré al suelo esquivando sus ojos mieles.
Mentiría si dijera que no me intimidaba su mirada. Y más su cuerpo sin camiseta.
"Si." Animó a que continuara.
"Quería saber si estabas bien." Decidí dejar a un lado mis nervios y mi timidez y me lancé. Él me miró a los ojos mientras ponía sus codos sobre sus rodillas observándome atentamente. Lamió sus labios mostrándome su lengua al hacerlo y tragué saliva.
Él asintió. "Um, si, estoy bien." Esbozó una falsa sonrisa.
Asentí con mi cabeza. Claramente no quería hablar de eso ahora.
Mier*da. Me di una bofetada interiormente por ser tan estú*pida como para entrar en su habitación, por probablemente interrumpirle mientras dormía y descansaba, y recordarle su ruptura con su ex-novia.
Genial Smith. Te vas superando. Sigue así campeona.
"Oh, me alegro." Lamí mis labios. "Venía porque me acabo de enterar de ... um... tu... bueno." El frunció su ceño ante mis palabras y luego alivió su expresión comprendiendo a lo que me refería.
"Oh, no importa." Alivió con una mueca intentando sonreír. Pero no le salió.
Caminé hasta plantarme mas cerca de él. Tragué saliva. "¿Pu-puedo sentarme?" Pregunté con miedo a que se sintiera incómodo y pensara algo como 'que demonios haces, vete de aquí agobiante.'
El asintió. "Oh, claro." Se apartó un poco para dejarme sitio en su cama y me senté con cuidado. Miré su rostro poco después.
"Se que esto no es fácil para ti. Entiendo por lo que estas pasando ahora mismo, y por eso... um, te quería decir que estoy aquí si necesitas algo." Esbocé una pequeña y tímida sonrisa mientras el me miraba.
Asintió con su cabeza. "Gracias." Sonrió. "Realmente lo agradezco." Lamió sus labios.
"Puedes confiar en mi, si necesitas a alguien. Yo estaré aquí para ti." Sonreí y luego lamí mis labios de nuevo.
El asintió mirándome a los ojos sonriendo poco a poco. "Gracias." Dijo de nuevo tragando saliva y quedándose un rato mirándome a mis ojos chocolate.
Me perdí en sus ojos mieles y suspiré, estaba sorprendida por su proximidad.
"No tienes nada que agradecer." Alivié la tensión del cuarto. "Esta bien, Justin." Pasé mi mano por su espalda.
MIer*da. Se me había olvidado que no había ropa justo ahí. Pero la seguí acariciando.
El me miró y tragó saliva mientras lamía sus labios poco después. Se notaba triste por su expresión y su mirada. Sus ojos estaban brillantes.
"Oh, ven aquí." Le dije una vez que me di cuenta del dolor detrás de sus pupilas.
El ni siquiera puso oposición. Se dejó llevar y deslizó sus brazos alrededor de mi cintura mientras me abrazaba con fuerza. Pasé mis manos por su nuca y su cuello, bajando por su espalda, frotándola suavemente para reconfortarle.
"Se como te sientes Justin, pero esto se va a pasar." Susurré intentando tranquilizarle en su oído.
El ni siquiera respondió, siguió abrazándome como si necesitara desahogarse.
Me estremecí con solo sentir su tacto en mi espalda.
No sabía que me pasaba.
Y ahí fue cuando empecé a sentir algo por él... algo que no era solo una simple amistad. Era algo... más, y poco a poco con el tiempo se hizo mas fuerte ese sentimiento, dejándome hipnotizada completamente, por él.
No me había dado ni siquiera cuenta pero las lágrimas habían empezado a fluir por mis mejillas, sin parar. Mis mejillas parecían cascadas. Tragué saliva mientras las dejaba bajar por mi piel.
Siempre intentas contenerte, intentas que el dolor no vaya mas allá... pero te olvidas de que a veces, ese dolor no lo puedes controlar. Y es entonces cuando todo te supera y te das cuenta de lo mal que puedes llegar a estar.
Te das cuenta de que has llegado al límite. No encuentras nada positivo a tu alrededor. Pero es que en realidad, en ese momento, nada es positivo para ti, porque estas destrozada por dentro y te sientes atrapada en un pozo, del que sabes que no vas a salir en mucho tiempo si no reaccionas y haces algo para cambiar el final que tendrás si sigues así.
Sabes que tienes que hacer algo, cambiar, irte, marcharte, alejarte de todo. Y eso es lo que tenía que hacer ahora. Alejarme, de todo y de todos.
La mayoría de la gente dice que estarás feliz al lado de la persona a la que amas, simplemente el hecho de estar a su alrededor, te hace sonreir y te hace sentir protegida. Pero era irónico como todo había cambiado para mi. Ahora huía de la persona que mas amaba.
Miré mis manos y tragué saliva al notar que mis ojos iban directamente a mis muñecas, concretamente a la muñeca que todavía conservaba dos marcas, una mas profunda y mas visible que la otra.
Cerré mis ojos apretando mis labios mientras un dedo se pasaba por aquella cicatriz.
Puede sonar masoquista por recordar el dolor, pero me acababa de venir a la cabeza la primera vez que Justin se enteró de lo que había ocurrido...
"¿Que te ha pasado?" Sus ojos estaban completamente abiertos y su ceño se frunció al ver mi expresión de nerviosismo mezclada con sorpresa. Abrí mi boca buscando aire. Mier*da. Lo había descubierto.
"N-nada." Mi voz me traicionaba.
"______..." Susurró intentando acercarse a mi, pero yo me quedé totalmente quieta sin saber que hacer. Tragué saliva. Mi garganta estaba seca. "Dame tu muñeca."
Negué con mi cabeza. "No." Solté en un susurro.
"Dios, ¿Que has hecho ______?" Podía ver su preocupación a través de sus hermosos ojos color miel claros. Eso me destrozaba por completo. Se acercó de nuevo, intentando coger mi muñeca pero se la aparte de su camino.
"No por favor. Aléjate de mi." Negué con mi cabeza, soltando un sollozo. Dando un paso atrás, me volteé corriendo hacia mi habitación antes de que el pudiera alcanzarme.
Me encerré. Di un portazo que resonó en todos los rincones de aquel pasillo. Tragué saliva con mi respiración agitada y lancé el bolso en la cama, poniendo mi espalda contra la puerta. Rápidamente, sentí golpes en mi puerta que me hicieron estremecer. Cerré mis ojos con fuerza.
"______." Dio dos golpes mas en la puerta. "______, abre por favor." Golpeó de nuevo. Su voz era seria ahora.
Me llevé mi mano a mi boca, conteniendo mis sollozos. Tragué saliva y me mordí mi labio intentando no hacerle saber que estaba llorando. Las lágrimas cayeron por mis mejillas pero rápidamente las limpié con el dorso de mi otra mano.
"______. Por favor. Quiero hablar contigo." Sentía su respiración detrás de la puerta.
"No. Por favor Justin, vete." Se podía notar por el tono de mi voz, algunos sollozos que se escapaban con las palabras que decía.
"No me iré hasta que me abras."
"¿Porque lo hiciste ______?" Notaba el dolor en sus palabras. Le había decepcionado.
"Justin, déjame." Susurré, pero estaba segura de que el era perfectamente capaz de escucharme. "Por favor." Sollocé en voz baja mientras me iba de la puerta hacia mi cama. Noté algunos golpes mas, pero al cabo de unos minutos se pararon. Ya no estaba allí.
Y justo, como la besaba cuando me hizo el amor por primera vez en Miami...
Pasé mis manos por su piel y poco a poco sentí como sus manos cogían las mías, concretamente una de las manos.
No sabía que hacía, pero sentí como acariciaba mi muñeca, un escalofrío recorrió mi cuerpo estremeciéndome por completo al sentir la sensibilidad en mis cortes. Me congelé totalmente. Tragué saliva. "Shh, tranquila." Me intentó calmar con su suave voz y lo consiguió.
Me di la vuelta hacia él, mirándole a los ojos y posé mi cabeza sobre su pecho desnudo, sintiendo el latido de su corazón en mi oído, su pecho estaba tan caliente. Lamí mis labios y pasé la mano que tenía entre sus manos a través de su torso. El cogió mi muñeca con marcas y la llevó a sus labios plantando besos en cada corte. "Por favor, no lo vuelvas a hacer."
En sus palabras se podía notar la tristeza, la culpabilidad y la preocupación. Eso me rompió por dentro. Me hizo sentir mas culpable de lo que ya me sentía.
Aguanté las lágrimas que amenazaban con salir de mis ojos y mordí mi labio intentando contenerme para no sollozar. Su otra mano hacía círculos con su dedo pulgar en mi espalda. La otra posó mi muñeca sobre su pecho y pasaba suavemente las yemas de sus dedos por los míos.
Era increíble, como algo que nunca pensé que pasaría, había pasado... pero la felicidad no había durado mucho. Todo se había ido.
Era... impossible.
Tragué el nudo que llevaba en mi garganta y suspiré profundamente estremeciéndome poco después cuando se abrió la puerta. "_____." La voz de Fredo hizo que me quitara rápidamente las lágrimas de mis mejillas.
"Hey." Escondí mi rostro un poco entre mi cabello que hacía una cortina a mi alrededor. Limpiaba mis ojos con cuidado para que no se fuera mi maquillaje.
"¿Es-estas llorando?" Dijo sorprendido mientras cerraba la puerta detrás de él y se dirigía al sofá para sentarse a mi lado.
Negué con mi cabeza. "No, no es nada." Sonreí intentando reprimir mis lágrimas. "Me entró algo en el ojo." Tragué saliva y lamí mis labios con nerviosismo.
Frunció su ceño. "¿Se supone que me lo tengo que creer?" Arqueó su ceja.
Me encogí de hombros. "Esa es tu decisión."
El esbozó una pequeña sonrisa. "No te hagas la dura Smith." Pasó su brazo alrededor de mis hombros mientras me acercaba a su cuerpo. Yo sonreí un poco intentando borrar mi expresión de llorar. Frotó su mano en mi hombro. "¿Por que no has estado casi con nosotros? Se te echa de menos."
Mordí mi labio inferior. Él no sabía nada.
Me encogí de hombros. "Quería... reflexionar." Hice una mueca con mi rostro.
Ahora o nunca Smith. Coge fuerzas y adelante. Tu puedes.
A veces tenía mas miedo al enfrentarme a una persona, que a miles de ellas delante de un concierto.
Nadie me iba a animar, así que me quedaba animarme a mí misma.
"¿Sobre que?" Dijo curioso apartándose un poco de mi.
Suspiré. "Umm... verás. Yo, te tengo que decir algo." Tragué saliva con dificultad.
No llores. Joder.
Me miró algo sorprendido. "¿Debo de preocuparme?" Estaba confundido.
"No lo se." Sonreí intentando quitar tensión.
"_____." Me animó. "Habla. Me estas preocupando." Esta vez su rostro era serio.
"Verás... ayer, ayer paso algo y ...no esta siendo fácil para mi y... creo que he llegado al límite." Hice una pausa para mirarle a sus ojos marrones. El frunció su ceño y alivió su expresión.
"¿Algo? ¿El que?" Tragó saliva.
Suspiré. "Justin y--" Me interrumpió.
"No hace falta que me lo digas, Smith. Sabía perfectamente que había algo entre vosotros dos." Sonrió con complicidad, me sorprendí por su confesión. "Se notaba por la forma en la que os mirabais." Se encogió de hombros. "¿Que puedo decir? Soy listo." Reí por su tono de voz en señal de broma.
"Entonces..."
"Lo sabía, pero no se nada sobre lo que ha pasado." Frunció su ceño. "No he hablado con Justin desde ayer después del concierto."
"Yo... él y yo hemos discutido y, es algo grave. No me lo va a perdonar nunca Fredo."
Suspiró. "¿Por que? No creo que sea tan grave."
Negué con mi cabeza. "No, Alfredo. Él... no lo va a hacer. No me va a perdonar."
Me miró directamente a los ojos. "Si quieres, puedo hablar con él." Negué rápidamente con mi cabeza.
"No, no por favor. No lo hagas." Supliqué con mi voz.
"Pero... ¿Por que? Estoy seguro de que fue un malentendido."
Negué con mi cabeza. "Simplemente, deja las cosas como están. Será mas fácil para todos."
"No lo será, y mucho menos para ti. Mírate." Me señalo. "Te sientes mal y no lo puedes negar."
Suspiré y pasé mis manos por mi cabello.
"Va a ser incómodo para los dos, estar mal mientras estáis en el tour juntos. Sería mejor arregl--" Le interrumpí.
"Eso no pasará."
"¿Por que?" Frunció su ceño sin entender.
"Porque me voy de Believe tour." Lamí mis labios.
"¿Que?!" Gritó sin poder creerlo.
Vaya, otra persona que reaccionaba de la misma manera.
"Pero... ¿Que demonios haces _____? Cuando se entere Jason te va a matar."
"Genial, por lo menos no tendría que lidiar con las miradas que me lanza Justin... te digo que sería menos doloroso si me matara." Tragué saliva.
"No digas eso _____." Su mirada era triste, al igual que la mía.
"Es la verdad Alfredo." Lamí mis labios.
"Voy a --" Se intentó levantar, pero yo le detuve agarrándole de la muñeca.
"No. Nada que hagas o digas me va a hacer cambiar de opinión. Ya hablé con Scooter y Miley, y ni siquiera ellos lo consiguieron."
Suspiró con resignación sentándose de nuevo en el sofá. "Joder, ______." Negó con su cabeza pasando sus manos por su rostro con frustración. "¿Y que vas a hacer?"
"Necesito tu ayuda." Tragué saliva mientras le miraba directamente a los ojos. El me miró atentamente. "Necesito que les digas a todos que se reúnan en un rato en el escenario. Allí les comunicaré todo."
Suspiró mientras me miraba. "_____." Negó con su cabeza. "No puedes estar haciendo esto." Se negaba a aceptar lo que le estaba diciendo.
"Es lo mejor Fredo." Lamí mis labios. "Por favor, ayúdame con esto. Es... lo único que te pido." Le miré con sinceridad a sus pupilas.
Suspiró. "Esta bien. Te ayudaré."
Esbocé una pequeña sonrisa, llena de dolor y de tristeza. Me abracé a él sin dejarle ir. Le apreté fuertemente y el hizo lo mismo aferrándose a mi cuerpo. "Gracias." Susurré en su oído.
"¿A quien le voy a hacer Fried oreos ahora?" Dijo intentando aliviar el ambiente. Sonreí sin poder evitarlo.
"Scooter come mucho." Comenté bromeando y el sonrió en mi espalda. Notaba su pecho retumbar haciendo un sonido ronco en mis oídos.
Se apartó poco después y me miró a los ojos. "Te voy a echar mucho de menos Anastasia." Bromeó y le pegué en su hombro con suavidad.
"Y yo a ti Christian." Lamí mis labios sonriente. Era una sonrisa con tristeza, agridulce.
Se levantó y se dirigió fuera de la habitación mientras me daba un último abrazo. "Nos vemos luego." Asentí con mi cabeza y la puerta se cerró mientras yo me quedaba allí, en silencio, de nuevo sola con mis demonios y mis pensamientos.
Justin's Point of View:
Miraba con mi mirada perdida al suelo del backstage, todavía sin poder creer lo que acababa de pasar el día anterior después del concierto. ¿Como podía haber estado tan ciego como para haberme creído todo?
La verdad es que Smith nunca me había parecido ese tipo de persona que va por ahí acercándose a la gente con el fin de obtener lo que quiere--fama.
Siempre me había parecido una chica sencilla, simple, una chica normal y corriente como las demás. Alegre, divertida y muy simpática. No hacía falta mencionar que era hermosa y atractiva, tan solo hacía falta verla bailar para deducirlo.
Pero... supongo que la gente te sorprende.
"Chicos." Alfredo entró en la sala mientras todas las miradas recaían sobre él. Fruncimos nuestro ceño.
"¿Que pasa?" Allison comentó con curiosidad.
"Oh nada." Negó con su cabeza, pude ver la tristeza en sus ojos. Parecía como si algo fuera mal y el lo quisiera ocultar.
Tragué saliva y lamí mis labios con dificultad, fijando toda mi atención sobre él. "¿Que pasa man?" Le pregunté mientras el agitaba su mano quitándole importancia al asunto.
"En media hora mas o menos tenemos que estar todos en el escenario chicos." Lamió sus labios. Todos se miraron confundidos.
"¿Porque?" Dan replicó.
"Smith lo ha dicho." Se encogió de hombros haciéndose el loco, pero en el fondo yo sabía que el sabía algo que nosotros no sabíamos.
Al escuchar ese nombre... ni siquiera soy capaz de decir lo que sentí.
Decepción, tal ver esa sería la palabra correcta.
Solo pensar en los momentos que había pasado con ella, me dolía saber que todo eso era probablemente falso y que ella ni siquiera se había sentido como mi amiga.
Era duro darte cuenta de eso.
Todos asentimos y se sentó al lado de Allison mientras hablaban algo preocupados. Yo simplemente esquivé sus miradas y miré a los chicos, que actualmente estaban a mi lado mientras hablaban sobre algo.
"¿Estas bien man?" Ryan preguntó. Yo asentí con mi cabeza.
"Si." Contesté simplemente.
"¿Por que crees que nos ha reunido a todos allí fuera dentro de media hora?" Preguntó con curiosidad.
Me encogí de hombros. "No lo se, ni me importa."
"En realidad, si te importa Justin." La voz trasera de mi cabeza replicó.
Es normal, es decir, tengo curiosidad como todos.
"Te importa."
Jodida voz.
Me pasé el resto del rato hablando con Ryan y los chicos de cosas sin sentido. Me olvidé de todo y justo antes de que empezáramos a hablar de lo que íbamos a hacer en unos días--planeábamos irnos a algún lugar.-- todos se empezaron a levantar.
Salimos de la puerta del backstage. Yo fui de los últimos y justo al volverme me choqué con alguien. Un hombre al que nunca había visto. Era de mas o menos mi estatura, ojos claros, una gorra de los New York yankees y ropa negra. Parecía un trabajador del estadio. "Lo siento." Dijo antes de mirarme a los ojos fijamente.
Me dio un escalofrío con solo verlo y ni siquiera sabía la razón. Lamí mis labios y negué con mi cabeza quitándole importancia. "No pasa nada."
"Vamos Justin." La voz de Ryan me sacó de mis pensamientos y yo asentí apartando mi mirada de los ojos de aquel... chico de unos veinte cinco años o un poco más, y me iba con él poniéndome a su altura. "¿Quien era?" Preguntó curioso.
Me encogí de hombros. "No lo se, pero era extraño." Fruncí mi ceño mientras hacía una mueca con mi cara.
"Vamos." Dijo Ryan riendo por mi mueca. Asentí con mi cabeza y nos dirigimos por ese pasillo al escenario. Miré una última vez atrás y me di cuenta de que aquel tipo ya no estaba allí. Sacudí mi cabeza y seguí mi camino.
Era extraño.
______'s Point of View:
Estaba calentando la voz en mi backstage. Dan había pasado por la habitación al escucharme calentarla. Se había sentado conmigo en el sofá y simplemente empezamos a hablar de música, como a veces hacíamos en los viajes largos de bus hacia alguna ciudad. "¿Has probado a cantar esa canción en acústico? Sonaría muy bien con tu voz." Sonrió mirándome a los ojos.
Me encogí de hombros. "No lo creo." Sonreí levemente.
"Crees muy poco."
"Suele pasar cuando se trata de mi." Los dos reímos por mi mueca.
"¿Porque no lo intentas?" Me preguntó. Pensaba que lo decía en broma.
"¿En serio?" El asintió.
"Claro." Sonrió.
Lamí mis labios con nerviosismo sin saber que decir. Dan buscó con sus ojos algo en la habitación. "Tengo una mejor idea." Me levanté sonriente mientras el me miraba con curiosidad ante lo que estaba haciendo.
"¿A donde vas?"
"Al escenario." Me encogí de hombros, haciendo una mueca.
"Oh, así que la vas a cantar." Arqueó su ceja con diversión. Yo asentí con mi cabeza.
"Por supuesto, tu siempre tienes razón." Sonreí. Lamí mis labios y nos encaminamos hacia el escenario. Casi no había nadie. Solo algunos montadores.
"¿Puedes poner la música?" Le pregunté a él mientras James aparecía detrás de nosotros.
"¿A donde vais?" Preguntó curioso.
"Ya lo verás." Dije mientras me dirigía hacia el medio del escenario y cogía un micrófono. Lo probé y cuando me aseguré de que iba, asentí con mi cabeza hacia James. El pulsó una tecla en su macbook y la base de la canción del cover de James Arthur, Impossible, comenzó a sonar en mis oídos y en todo el escenario, llenando el vacío que había en mi interior.
Cuando escuché esa mañana esa canción, me hizo sentir en el séptimo cielo. Narraba a la perfección todo lo que sentía.
"Ooh hmmm." Murmuré en el micrófono mientras las primeras notas de la canción empezaban. "I remember years ago someone told me I should take caution when It comes to love... I did." Lamí mis labios cerrando mis ojos y apretando mi micrófono mientras lo apoyaba sobre el soporte.
Seguí cantando la canción mientras me dejaba llevar por la música y sentía cada letra salir de mi interior.
"And now when all is done, there is nothing to say, you have gone and so effortlessly you have won, you can go ahead. Tell them all I know now, shout it from the roof tops, write it on the sky line, all we had is gone now." Sentí un nudo en mi garganta cuando recordé los ojos mieles de Justin.
"Tell them I was happy." Lo fui a su lado. "And my heart is broken." Estaba mas que roto. "All my scars are open." Mi interior estaba destrozado y mis cicatrices eran señales del dolor que me había causado todo. Un momento vino a mi memoria.
"No quiero que me hagas daño, y por eso mismo no deberías de haber hecho lo que hiciste..."
"Tell them what I hope would be Impossible, impossible, impossible, impossible." Los recuerdos de aquella noche se repetían en mi mente mientras mi voz salía un poco ronca.
"¿Sabes lo que quiero?" Le miré. "Quiero tus brazos cuando me siento mal, para que me abracen. Quiero tus ojos, para que cuando los mire, sepa que todo estará bien." Tragué saliva. "Quiero tu voz para que me diga que nada malo va a pasar. Simplemente, te necesito a ti."
"Broken trust and broken hearts." Mi corazón estaba roto, dolorido. "I know I know... And now when all is gone, there is nothing to say." Tragué mi saliva, teniendo que parar un poco para no derrumbarme.
Sentía miradas detrás de mi. Los ojos quemaban en mi espalda, pero simplemente no dije nada. Seguí cantando, y desahogándome. "Tell them them what I hope would be impossible impossible impossible impossible."
Impossible. Eso me rompía el corazón en pedazos. Odiaba esa maldita palabra.
Venía la última parte. No podía más. Tenía ganas de gritar. En realidad no creía que fuera capaz de estar mas rota de lo que ya estaba.
A la mier*da todo.
Apreté mi mandíbula cerrando mi pu*ño alrededor del micrófono con fuerza y rabia. Si alguien me mirara en esos momentos a los ojos, pensaría que esa canción la habían hecho para mi... la sentía.
Describía mi vida... porque todo lo que quería, parecía impossible. Inalcanzable.
"I remember years ago, someone told me I should take caution when It comes to love, I did..." Mi voz se desvaneció en un susurro y sabía que ahí venía el golpe de voz. La parte mas alta de la canción.
"Tell them all I know now." Pasé mi mano por mi cabello echándolo hacia atrás mientras mi mano caía hacia delante con fuerza. "Shout it from the roof tops, write it on the sky line." Hice una pausa haciendo que mi voz se rompiera. "All we had is gone now." Cogí aire conteniendo un sollozo.
Todo se había acabado.
"Tell them I was happy. And my heart is broken, aaall aaaaall I hope would be impossible impossible," Dejé de sujetar el micrófono con mis manos y abrí mis brazos sintiendo el ritmo de la música, mis ojos seguían cerrados. "Impossible, impossible." Mi pecho iba a estallar por la fuerza con la que cantaba. "Impossible, impossible." Canté por encima de la música. "Impossible..." Bajé mi voz hasta un que no fue escuchada. La música terminó y sentí como algo me golpeaba con fuerza.
Estaba sorprendida de que no estuviera llorando.
Impossible. Eso era. Lo nuestro era impossible. Y dolía pensarlo, pero dolía más decirlo en voz alta.
Me volví hacia atrás, mirando a los chicos. Pero no solo Dan y James. Justin, Alfredo, Allison y Ryan. Me miraron con sorpresa. Y Jason pestañeó. "Wow." Dijo por fin.
"Definitivamente va con tu voz." Dan asintió con su cabeza sonriente. Yo hice una mueca.
Justin me miró con un rostro sin expresiones, en blanco. Suspiré y lamí mis labios esquivando su mirada. Ni siquiera dije nada. Justin se dirigió a donde estaba James y comenzó a hablar con él diciéndole algo sobre la música y yo me dirigí con todos a mi backstage.
Poco después, alguien interrumpió y llamó a la puerta. "Chicos, ya es la hora." Alfredo se acercó a nosotros.
"Oh, esta bien. Nos vemos allí fuera." Dan se levantó rápidamente. "Y piensa en lo que te dije." Dijo antes de marcharse.
Yo sonreí.
"¿El que te dijo?" Preguntó con curiosidad.
"Cantar una canción, según él le va bien a mi tono de voz."
Negó con su cabeza. "Dan y la música." Los dos reímos. "¿Estas lista?" Preguntó mientras yo suspiraba y asentía.
"Creo." Hice una mueca, sintiendo los nervios fluir en mi interior.
"Vamos." Señaló con su cabeza hacia la puerta y yo asentí mientras salíamos del backstage. No había nadie en el pasillo. Quedaban una hora mas o menos, para que abrieran las puertas del estadio. Yo ya estaba preparada.
Me había cambiado de ropa. Llevaba unos jeans negros ajustados, y una blusa en color claro de tirantes. Mis tacones eran altos como siempre. Mi pelo tenía volumen con ondas y caía por mi espalda. Había puesto eyeliner y máscara en mis ojos con sombra para darle profundidad a mi mirada.
Aunque era consciente de que ni sombras, ni máscaras iban a resistir a mis lágrimas.
Notaba como la luz salía del escenario mientras caminábamos. Alfredo se dirigió hacia la parte de abajo y yo me quedé allí, entrando al escenario. Miré al suelo intentando esquivar las miradas que sentía sobre mi. Mier*da. Odiaba ser el centro de atención de todo el mundo.
Suspiré sabiendo que esto era todo. Allí estaba. Iba a acabar con todo de una vez por todas. Sabía que Jason me iba a matar al bajar del escenario, a Justin seguramente le aliviaría que me fuera de allí después de todo lo que había pasado... y los demás se quedarían en shock.
Luché contra las ganas de vomitar que sentía justo en ese momento y me terminé de acercar al escenario. Le mostré una sonrisa a Alfredo desde mi sitio en el escenario y el me sonrió intentando tranquilizarme. Estaba justo al lado de los chicos. Ryan, Chaz, Za y Justin a su lado, me miraban con curiosidad y seriedad a la vez.
Miré a Justin y sentí como mi mundo se venía abajo.
Me moría de ganas por decirle "Te quiero", quería decirle la verdad, pero no podía.
Sentía impotencia en mi interior, al saber todo lo que estaba pasando y no poder contarle a él toda la verdad de una jodida vez. Pero estaba en juego mucho si lo hacía, y prefería perderle y saber que estaba bien, a perderle del todo y por mi culpa.
Nunca me lo perdonaría.
Tragué saliva y miré a todos. Me iban a escuchar perfectamente, así que no necesitaba nada, solo mi voz--que sabía que se iba a venir abajo al final--
Cuando llegas a un lugar, cuando empiezas un libro, cuando encuentras a una persona que se convierte en tu amiga, cuando empiezas una etapa de tu vida... nunca sabes cuando va a llegar el final de todo eso.
Pero siempre tenemos que tener en cuenta de que todo no dura toda la vida, aunque queramos, no podemos evitar el hecho de que todo tiene su final.
Todo que empieza acaba. Todo que acaba tiene un lugar en tu corazón, en tu cabeza... quieras o no. Ya sea importante, o sea algo malo que no quieras recordar. Pero todo perdura en tu interior.
El verano, una relación, tu película favorita, el libro que has empezado a leer y no quieres seguir leyendo por miedo a que acabe... todo en esta vida tiene un final.
Hoy, era el día, en el que decía adiós a una etapa de mi vida. La mejor etapa. Believe Tour. Un recorrido en el que había encontrado a personas maravillosas, geniales e impresionantes que me habían hecho la vida mas fácil con sus sonrisas y locuras.
Todos esos rostros, nombres, recuerdos... tendrían lugar en el hueco mas grande de mi corazón. Y yo esperaba ocupar un lugar grande en el de ellos.
Todo lo vivido... permanecerá y esa persona a la que amas, estará en tu corazón para siempre.
Aunque lo que hubiera entre ellos, fuera impossible.
Suspiré mientras pensaba todo eso mirándoles a los ojos a todos. Era duro. No pensaba que lo sería tanto.
Alfredo me dio una señal con sus pulgares hacia arriba y me sonrió tranquilizándome de nuevo. Yo asentí con mi cabeza y por fin mi boca se abrió para decir algo. Jason me miró con el ceño fruncido.
No One's Point of View:
"Umm... gracias por venir aquí." Dijo suspirando poco después. "Os he reunido porque quería que supierais algo." Smith tragó saliva mientras sentía las miradas de todos sobre ella. Estaban desde bailarines, pasando por amigos de Justin, miembros del equipo, representantes... todos los que formaban parte de Believe Tour.
No sabía muy bien como empezar a decir nada de eso. "No se muy bien como decir esto... en realidad no se me dan bien los discursos, y siempre que tenía que hacerlos, huía para no afrontarlos o me inventaba excusas." Los bailarines rieron con humor ante las frases de Smith.
Lamió sus labios y miró a sus manos mientras su dedos jugaban con nerviosismo. Sabía que no iba a ser fácil, pero nunca imaginó que fuera tan difícil.
"Hay veces que... cuando haces algo, nunca sabes cuanto tiempo vas a estar haciéndolo. Simplemente lo haces porque quieres, sientes que amas lo que haces, y sigues adelante a pesar de todos los obstáculos. Como yo hice." Suspiró.
"Yo solo... solo quiero daos las gracias por siempre estar ahí para mi y apoyarme, sacarme sonrisas, hacer bromas... hablar conmigo. O simplemente, el simple hecho de sonreírme cuando estaba mal, me hizo feliz. Gracias por eso." Jason a este punto ya no sabía que demonios estaba haciendo, le miró a los ojos frunciendo su ceño.
Justin parecía estar atento a sus palabras.
"Sois geniales chicos... nunca pensé que conocería a tantas personas impresionantes e increíbles como vosotros." Miró a los bailarines. Nick le hizo un gesto con su mano y ella sonrió alegremente. Las chicas le sonrieron alentándole para que siguiera. "Realmente, cuando vine aquí, no conocía a nadie, y pensaba que no os iba a gustar o algo así."
"Oh vamos, Smith, eso es impossible! ¿A quien no le gustas?" Kenny gritó haciendo que se llevara todas las risas y las miradas hacia él.
Sonreí tristemente, mordiendo su labio para contener las lágrimas que amenazaban a salir de sus ojos penetrantes. Su labio iba a comenzar a temblar de un momento a otro.
"Oh, vaya. Gracias Kenny." Smith sonrió ladeando su cabeza hacia un lado. Murmuró un "te quiero" con su boca y Kenny le sonrió mostrando su perfecta dentadura.
Miró a un lado para que la sonrisa de Alfredo le ayudara a continuar, pero no lo vio por ninguna parte. Frunció su ceño mirando a todos los lados. "Continua." Jason le animó.
Mordió su labio. "Siento si alguna vez os he defraudado..." Miró a Justin sintiendo como su corazón se encogía al ver a esos ojos mieles que una vez le hacían sentir mejor, y ahora le odiaban. "Si os he hecho daño." Siguió mirándole y luego esquivó su mirada. "Realmente si alguna vez os he hecho sentir mal, lo siento. Todos tenemos días malos y no era mi intención." Suspiró cogiendo aire.
Justin no quitaba su mirada de encima de aquella chica que le había conseguido hacer reír en los momentos duros, pero que le había defraudado completamente horas antes. Tragó saliva con dificultad al mirar a sus ojos chocolate y sintió la tristeza en sus irises marrones. Se había sorprendido de que ella hubiera dicho algo así mirándole a los ojos.
Mientras tanto Alfredo estaba en el backstage buscando su teléfono. Scooter había acordado que le llamaría, y había pensado que le daría tiempo antes de que Smith dijera lo que finalmente iba a decir delante de todos. Se había ido corriendo para volver lo antes posible. No pensaba que le llevaría mucho tiempo, por eso lo había hecho.
Beep.
Un sonido en el backstage de Smith hizo que su cabeza se quedara mirando a la puerta del cuarto de par en par. Sentía la voz de Smith al final del pasillo y se tenía que dar prisa.
Maldijo y entró rápidamente. Quizás era su móvil. Ya que no lo encontraba.
No. No era el suyo. Era el de Smith.
Comprobó si era importante, para dárselo justo después. Quizás era Scooter para algo del tour, papeles tal vez... ya se sabía que habría que firmar cosas. Lo iba a dejar cuando algo llamó su atención.
De: Desconocido
Buena chica Smith.
Me alegro que me hicieras caso.
Sigue así y tu Bieber estará a salvo ;)
Su ceño se frunció sin entender a que venía ese mensaje. Pero pronto, algo hizo click en su mente. Mier*da. Había algo en todo esto que no cuadraba.
Tragó saliva y lamió sus labios mientras empezaba a observar los otros mensajes que había recibido de aquel número desconocido.
De: Desconocido
Lee con atención y escúchame bien perra.
Esa foto, estará circulando por internet en cuestión de tiempo. Si me delatas ante alguien, o sobre todo, ante Justin, haré que tu vida sea un infierno yendo a por lo que mas quieres.
Sígueme la corriente y no le pasará nada malo, ni a Justin, ni a la gente que quieres.
Y mucho menos a ti, preciosa.
Ten cuidado con lo que dices.
Sintió algo en su pecho detenerse. Tragó saliva con dificultad y siguió leyendo cada palabra atentamente.
"Sígueme la corriente y no le pasará nada malo, ni a Justin, ni a la gente que quieres." Alfredo murmuró en voz baja para si mismo.
Oh joder. Algo muy malo había detrás de todo eso y lo acababa de descubrir. "Joder Smith. ¿Por que no dijiste nada?" Dijo con incredulidad, sintiendo la necesidad de ir a ese escenario a dejar todo claro y a hablar con Justin antes de que Smith diera un paso que terminara con todo.
Tragó saliva y se olvidó su teléfono justo en la mesa, ni siquiera eso le importaba ahora mismo. Caminó con paso apresurado por el pasillo. Maldijo, el pasillo no parecía tan largo cuando había venido.
Fue viendo el resto de mensajes, comprendiendo que todo había sido planeado por un tipo al que ni siquiera conocía. Le habían tendido una trampa a Smith y le estaban haciendo daño.
Fue entonces cuando Alfredo se dio realmente cuenta de los verdaderos sentimientos de su amiga. Ella realmente quería tanto a Justin, como para sufrir en silencio con el fin de que nada malo le pasase a él.
Por su parte. Smith estaba todavía en el escenario, todos sonreían, hasta que llego el momento de la verdad. "Ayer por la noche, decidí algo... por esa razón os he reunido aquí." Odiaba las despedidas. Mordió su labio temblando. Iba a ser fuerte.
Jason maldijo. "Oh no, ______."
Smith negó con su cabeza, diciéndole con su mirada que se callara.
"Lo siento Jason, tengo que hacerlo." Le miró con tristeza y dolor en sus ojos.
"Joder Smith." Maldijo en voz baja. En ese momento nadie sabía las palabras que iban a salir de la boca de la cantante.
Justin alivió su expresión mirando atentamente a la chica delante de él. "Me voy de Believe Tour." Suspiró diciéndolo.
Los rostros de todos y cada uno de los presentes se quedaron en shock. Todo el mundo se quedó boquiabierto sin saber que hacer, o decir. Kenny tragó saliva mirando a la chica delante de sus ojos. Y negó con su cabeza llevándose su mano a su rostro. La quería mucho.
Dan estaba sin poder reaccionar y Allison negó con su cabeza llevando su mano a su boca. "Smith, no hagas esto." Negó con su cabeza. La joven miró a los ojos tristes de Allison, su confidente y su principal apoyo en el tour en los momentos malos. Se disculpó con su mirada.
"Lo siento." Dijo en voz baja, pero lo suficientemente alto como para que ella y los demás lo escucharan.
Justin, miraba perdido al escenario, en shock. No podía creer eso. Sintió algo dentro de él estremecerse al escuchar las palabras salir de la boca de Smith. Ni siquiera sabía como reaccionar. Su expresión ya no era de odio.
Querría decir que le daba igual, pero sabía que no le daba, le importaba. Nunca pensó que llegaría a tomar esa decisión tan brusca y repentina.
Y todo eso, sabía perfectamente que era por lo que había pasado.
Justin lamió sus labios y levantó un poco su mirada para coincidir con los ojos de Smith. Tragó saliva y su expresión se suavizó. Ni siquiera dijo nada. No sabía que decir.
"Muchas gracias por todo, chicos. Realmente, han sido los mejores meses de mi vida y me alegro de que los haya podido compartir con personas tan impresionantes como vosotros." Contuvo un sollozo con su mano en su boca y esquivó la mirada de Justin.
Eso a ella le hacía daño. Mucho daño.
Alfredo corrió por el pasillo rápidamente y bajó a la parte baja del escenario, llegando al lado de Justin y de los demás. Le miraron sorprendidos. "______!" Gritó llamando la atención de la chica. Ella se sorprendió al verle y su expresión se cambió a una de confusión. "No hagas esto." Negó con su cabeza.
"Lo siento Alfredo, ya te dije que no iba a cambiar de opinión." Dijo decidida, aunque dolía.
Justin miró a Alfredo con curiosidad. Su amigo no paraba de respirar jadeante. Era como si hubiera corrido una maratón o algo por el estilo.
"______." Él insistió. Le llamó una vez más, bajo la atención de todos. Jason sabía que algo no iba bien por la expresión de Alfredo. Justin le miraba con algo de confusión porque el no solía estar así de serio.
"Fredo." Le dijo para que dejara de insistir, pero lo que Smith no sabía era que no iba a insistir, iba a decirle la razón por la que ella hacía todo esto.
"______, lo se todo." Alfredo le miró con sinceridad. Smith se congeló delante de todos. Su respiración estaba enganchada en su garganta sin saber que decir. No podía creerlo.
Justin y Jason le miraron con incredulidad, sin saber que pasaba. Ni siquiera dijeron nada, simplemente se dedicaron a ver a Smith para comprobar lo que decía.
Los ojos de la chica se abrieron completamente. "¿Q-que?" Jadeó en busca de aire, sintiendo algo dentro de ella estremecerse. Era una sensación escalofriante. Algo iba mal.
Los demás, simplemente se quedaron expectantes y confundidos, dirigiendo sus miradas atentamente a Alfredo y a Smith, para averiguar lo que pasaba.
"No tienes por que hacer esto _____." Alfredo negó con su cabeza. "Se todo lo que pasó y porque hiciste esto."
Alfredo, en realidad sabía lo que había pasado con Justin, se lo había contado minutos Ryan después de salir del backstage de Smith. Quería aclarar todo entre ellos, pero Justin simplemente se había negado. Estaba muy dolido.
"Por favor, Fredo, no lo hagas." Negó con su cabeza suplicándole con su voz.
La mirada de su amigo se dirigió a los ojos claros de Justin y le miró fijamente con sinceridad. "Justin. Todo era mentira." A este punto Justin ya no sabía que hacer o a quien escuchar. Todo era tan confuso, tanto como para él, como para Jason.
"¿El que?" El chico le miró con confusión.
"Smith hizo todo esto para protegerte. Le dijeron que si no te mentía, irían a por ti." Por fin la verdad estaba saliendo a la luz. Smith les miró con mirada algo confundida a los dos. Pasó su mano por su cabello apartándolo un poco de su rostro, miraba a Justin y a Alfredo. Jason se quedó completamente en shock. Ni siquiera entendía que demonios estaba pasando.
Justin miró rápidamente a Smith a los ojos.
"Lo siento." La chica susurró mientras sentía como se derrumbaba por dentro. Estaba rota.
¿Y ahora que? Pensaba.
Justo en un punto del estadio con total visibilidad del escenario, había una persona, un hombre... conocido por Justin--ya que se había topado con él. Llevaba preparando esto desde el día anterior y había decidido actuar esta noche, pero los acontecimientos se había adelantado.
Nunca pensó que Smith fuera a abandonar el tour, por tanto, tenía que actuar rápidamente.
"Si no eres mía, no serás de nadie." Susurró aquella persona. Y antes de que todos tuvieran tiempo a reaccionar, un sonido ronco retumbó en todo el estadio. Todos se agacharon asustados. Menos una persona.
Smith.
Se quedó congelada, en el escenario. Delante de todos, mientras miraban a su alrededor comprobando que había pasado. Smith sintió un pinchazo en su estómago, como cuando no comía demasiado y su madre le tenía que amenazar diciéndole que si no comía, le quitaría el libro de canciones en el que componía.
Su boca estaba abierta, no dijo nada. Simplemente sintió como un fuerte dolor en su interior le hacía quedarse sin aliento. Tragó saliva con dificultad y dirigió su mirada a su vientre--mejor dicho, a su pecho. Una sustancia viscosa de color rojo estaba empezando a teñir su blusa clara.
Su mano se fue directamente hacia ese punto que quemaba en su cuerpo, presionó con su palma su pecho intentando que el dolor profundo se fuera de su cuerpo. Pero seguía ahí.
"¿Que ha pasado?" Jason miró a su alrededor. Todos se levantaron por fin y miraron al escenario. La mirada de Justin se abrió completamente en shock y temor, al divisar una mancha roja en el pecho de _____. Ella le miró jadeando con mirada perdida.
"______." Susurró Justin, sintiendo como algo dentro de el se estremecía y su pecho dolía. "______!" Gritó con todas sus fuerzas mientras se intentaba aproximar al escenario, pero era demasiado alto como para poder saltarlo.
Jason, horrorizado y asustado, hizo lo mismo que Justin. Los demás se llevaron sus manos, tanto a su cabeza como a su boca intentando contener el shock. Allison sintió un escalofrío estremecer su cuerpo. Kenny se aproximo a Justin.
"No, no, no." Bruce negó con su cabeza mientras maldecía. Se aproximó a Jason mientras le ayudaba a subir por la parte delantera del escenario. Kenny hizo lo mismo con Justin.
Las piernas de Smith flaquearon, cayendo de rodillas delante de todos, en el escenario. Intentando contener su respiración, pero sentía como poco a poco el aire abandonaba sus pulmones y se ahogaba. No podía respirar. Las miradas de todos estaban sobre ella.
Tragó saliva de nuevo lanzando un gemido de dolor. Dolía demasiado. Justin se incorporó después de subir al escenario y corrió hacia la silueta de Smith. Jason le siguió detrás, como si le fuera la vida en ello. Casi tropieza, pero no le importaba en ese momento nada. Solo quería llegar hacia ella, al igual que Justin.
Bruce sin embargo, empezó a gritar para pedir refuerzos, rápidamente los miembros de seguridad aparecieron alrededor del estadio. No era seguro estar allí en ese momento. "Justin no puede estar ahí, podrían dispararle." Uno de los guardaespaldas gritó.
Justin ni siquiera le escuchó, se arrodilló al lado de Smith. Mirándole a los ojos y luego dirigiendo sus ojos mieles a su herida en su pecho. _____ tragó saliva con dificultad y tosió poco después, sintiendo como desgarraban su interior.
"______." Justin suspiró mirándole a los ojos con dolor y miedo. Sentía angustia por no poder hacer nada. "_____, mírame." Ella hizo lo que le pidió.
Su mirada estaba perdida. Jason estaba observando a Smith de pie, sin saber que hacer, estaba en shock. Rápidamente se volteó gritando. "Que alguien llame a una ambulancia!" Gritó mientras Alfredo asentía con su cabeza, mirando desde lejos las piernas cruzadas de Smith tendidas en el suelo.
"Justin." Ella jadeó, contuvo un sollozo mientras soltaba una mueca apretando sus ojos con dolor. "Lo siento." Negó con su cabeza mirándole a los ojos. Las lágrimas abrumaban en sus párpados. Su mano viajó con torpeza hacia su mejilla, mientras acariciaba con delicadeza la suave piel de Justin.
"Esta bien, no pasa nada." Miró a los ojos de la chica intentando tranquilizarle con su suave voz. Su mano retiró un mechón de cabello que caía en un lado de su rostro.
Smith tragó saliva con dificultad mientras sentía como su vista se empezaba a ir, veía cada vez con mas problemas. Las fuerzas abandonaban su cuerpo poco a poco, su vida se estaba desvaneciendo. Tosió mientras intentaba respirar.
"Tranquila." Justin sintió como algo dentro de él dolía. Era como si sintiera su dolor. Las fuerzas se iban de su cuerpo también, pero de otra forma. El no tenía una bala cruzada en su pecho. "Respira." Lamió sus labios con nerviosismo.
Ni siquiera sabía que hacer o decir. Abrió su boca para jadear y justo en ese instante sintió como su cuerpo se estremecía y las fuerzas se iban completamente de ella. Tragó saliva por última vez. "No, _____. Por favor no me dejes." Sintió la voz de Justin en un susurró mientras su vista se desvanecía, sus ojos se cerraron y luego se volvieron a abrir con dificultad mirándole por última vez. "______."
Una lágrima cayó por la mejilla de Smith mientras miraba por última vez a esos ojos mieles que le hipnotizaron desde el primer día que los vio. "Te quiero." La voz de Justin penetró en sus oídos, mientras el chico dejaba salir las palabras que sentía en ese momento.
Había hecho falta que Smith estuviera al borde de la muerte, para que el se diera cuenta de lo que realmente sentía por ella. En los momentos mas difíciles, como estos, son en los que la gente realmente se da cuenta de lo que significa una persona para ellos... se dan cuenta de sus verdaderos sentimientos.
En ese momento, Smith sintió su vista desvanecerse por última vez mientras sus ojos se cerraban y su cuerpo se quedaba sobre el escenario, ante la atenta mirada de horror y dolor de Justin.
Lo había protegido... había dado su felicidad a su lado, a cambio de que él estuviera a salvo. Pero realmente, se había olvidado de que ella podría correr el mismo peligro que él.
El chico al que había amado con toda su alma.
Y el chico que ahora sabía que la quería.
Las circunstancias, el destino... parecía que no los querían juntos. El hecho de estar juntos, parecíaImpossible.