Impossible ღ [נusтιи вιeвeя&т...

By ItsGoBieber

1M 25.4K 2.8K

More

Impossible ღ [נusтιи вιeвeя&тu]
Capitulo 1
Capitulo 2
Capitulo 3
Capitulo 4
Capitulo 5
Capitulo 6
Capitulo 7
Capitulo 8
Capitulo 9
Capitulo 10
Capitulo 12
Capitulo 13
Capitulo 14
Capitulo 15
Capitulo 16
Capitulo 17
Capitulo 18
Capitulo 19
Capitulo 20
Capitulo 21
Capitulo 22
Capitulo 23
Capitulo 24
Capitulo 25
Capitulo 26
Capitulo 27
Capitulo 28
Capitulo 29
Capitulo 30
Capitulo 31
Capitulo 32
Capitulo 33
Capitulo 34
Capitulo 35
Capitulo 36
Capitulo 37
Capitulo 38
Capitulo 39
Capitulo 40
Capitulo 41
Capitulo 42
Capitulo 43
Capitulo 44
Capitulo 45
Capitulo 46
Capitulo 47
Capitulo 48
Capitulo 49
Capitulo 50
Capitulo 51
Capitulo 52
Capitulo 53

Capitulo 11

19.2K 475 31
By ItsGoBieber

“Estaría perdida sin él.”

______’s Point of View:

Desperté. Abrí mis ojos mirando al techo intentando aclarar todos mis pensamientos de una buena vez, aunque no sería una tarea fácil y era consciente de ello. Suspiré profundamente mientras lamía mis labios algo secos y me daba la vuelta hacia un lado de la cama. No había nadie en la habitación. Rápidamente me senté en la cama de golpe observando que no estaba en mi habitación.

Llevé mi mano a mi cabeza, recordando todo lo que había pasado la noche anterior. “Mier*da.” Suspiré, intentando contener mi agitada respiración. Miré en frente y justo me encontré con una imagen que no me esperaba ver.

¿Justin en un sillón durmiendo delante de la cama? ¿Que demonios hacía Justin así? Me levanté con cuidado, intentando andar por la habitación los pocos pasos hacia él. Mi cabeza estaba todavía algo mareada y lo notaba. Pero me dio igual.

“¿Justin?” Me acerqué a él sacudiéndole levemente en el brazo. El simplemente suspiró profundamente mientras movía un poco su cabeza apoyada hacia un lado en el sofá. Estaba sentado y esparcido en él. “Justin.” Susurré acercándome a él más, mientras ponía mi rostro mas cerca del suyo.

“Hmm.” Murmuró mientras sacudía su cabeza, suspirando de nuevo moviéndose mas que antes. Abrió los ojos poco a poco y me miró algo confundido de cerca. Yo me sobresalté algo. Tragué saliva mirando sus ojos mieles.

“¿Dormiste toda la noche aquí?” Le miré sorprendida.

El asintió con su cabeza. “Si, creo que si.” Miró a su lado incorporándose mientras hacía muecas con su cara. Le miré extrañada. “Ouch.” Se quejó mientras tocaba su cuello.

“¿Estas bien?” Le pregunté alarmada mirándole atentamente.

Asintió. “Si, estoy bien.” Hizo otra mueca mas con sus labios pasándose su mano por su cuello mientras lo frotaba levemente.

“Justin, no mientas.” Me miró a los ojos. Me sentía mal por que él estuviera así, de una forma u otra era mi culpa completamente. “Dios, lo siento.” Dije apenada, mientras intentaba disculparme. El me miraba atento.

“¿Porque?” Le miré sorprendida, el parecía confundido y era como si no supiera a que me refería.

“¿Porque? Justin, dormiste en ese sillón por mi culpa.” Le miré atentamente a sus ojos mieles, me sentía mal. Algo dentro de mi se revolvió. ¿Que demonios me estaba pasando? “No debí de quedarme aquí.” Agaché mi mirada, pasando mis manos por mi cabello echándolo hacia atrás levemente. Luego caía en cascada por mis hombros.

“Hey hey hey. No fue por tu culpa. Simplemente me dormí sin querer.” Se encogió de hombros com si fuera la cosa mas normal del mundo. Me seguía sintiendo mal.

Le miré sin saber que responder a eso. Tragué saliva lamiendo poco después mis labios. Negué con mi cabeza y suspiré antes de marcharme de nuevo hacia la cama.

Caminé hacia ella, mientras sentía como mis piernas me fallaban y casi caía en el suelo, si no llega a ser por sujetarme a la cama hubiera quedado desplomaba en el suelo. Solté un quejido. Mi cabeza daba vueltas, cerré mis ojos mientras sentía pasos correr hacia mi.

Unos brazos pasaron por mi cintura, impulsándome hacia arriba y poniéndome sobre la cama cómoda de la gran suite. Suspiré intentando abrir mis ojos, cuando el mareo se estaba yendo. Tragué saliva y coincidí con sus ojos. “¿Estas bien?” Su voz era agitada y su rostro de preocupación.

Asentí. “Si, estoy bien.” Mis ojos se cerraban de cansancio. Estaba agotada. Suspiré y poco después lamí mis labios todavía mirándole a sus mieles ojos. La cama se volcó hacia un lado mientras el se sentaba a mi lado, observándome con atención.

“No mientas. ¿Porque eres tan cabezota?” Su expresión era algo desconcertada. Cuando no respondí, el siguió hablando. “¿Te sientes mal?”

Suspiré, asintiendo con mi cabeza finalmente. Era la primera vez que reconocía esto ante alguien, y era ante él. Contuve mis lágrimas mordiendo mi labio.

“Entonces, ¿porque no lo dijiste anoche? Hubiera llamado a Jason o a un médico para que te revisara. Estoy seguro de que lo necesitas.”

Negué con mi cabeza, su tono era algo duro, era como si me estuviera reprendiendo por no hacerle caso anoche. Y era la verdad, odiaba los hospitales y a los médicos sobre todo. Tenía miedo. “Siempre me pasa cuando tengo una bajada de azúcar, es normal... se pasará.”

Suspiró pasándose su mano por su pelo. “Será mejor que llame a Jason, tiene que saber que no estas en condiciones para actuar.”

“No!” Grité, deteniéndole en seco, apoyando mi mano en su brazo para que no se fuera de la cama. “No lo hagas. Estaré bien para el concierto. Simplemente necesito comer algo y te aseguro que estaré bien.”

Sonreí. El no parecía convencido.

Mi cabeza iba a explotar. “Tienes que descansar, quédate todo el día en la cama. Avisaré al servicio de habitaciones para que te traiga algo de comer, es temprano.” Me miró a los ojos y yo asentí con mi cabeza levemente. Su mirada hacía estragos en mi corazón.

Sentí mi estómago revolverse con algo que era raro... una sensación rara. Como cuando te asomas a las ventanas desde una altura muy elevada y ves abajo a las personas tan pequeñas y te da un vuelco el estómago. Era así la sensación.

“¿Porque haces esto?” Le miré algo desconcertada. Es decir, tengo muchos amigos, de ellos chicos, pero ellos no eran tan atentos como él. Siempre se preocupaban por mi, pero no de esa forma. Él era mas... atento y se preocupaba más.

“¿El que?” Me miró confundido.

“Esto... preocuparte tanto por mi.” Dije en voz baja, con algo de timidez.

“Porque me importas.” Me miró a los ojos, algo dentro de mi se encogió y sentí en mi pecho una sensación extraña. Mi estómago era como si me hubiera asomado de nuevo a una ventana del piso 100 de un rascacielos de New York. Tragué saliva.

“Gracias.” Tragué mis lágrimas. Siempre que me encontraba mal y débil me daban ganas de llorar y no parar nunca.

Y lo peor era cuando necesitabas llorar, desahogarte, pero no tenían a alguien que te consolara o te dijera que todo iba a estar bien. Porque estabas completamente sola en la habitación de un hotel de una ciudad en el mundo. Sola.

“Hey.” Susurró pasando su mano por mi brazo de arriba abajo, reconfortándome. “No te preocupes, estarás bien en unas horas.” Intentó sonreírme para tranquilizarme.

Suspiré. Agradeciendo su forma de aliviarme y reconfortarme. “Gracias por todo.” Sollocé.  Sus ojos se clavaron en los míos, mirando lo débil que estaba en esos momentos.

“Shh. Descansa.” Dijo en un susurro y yo simplemente asentí con mi cabeza, cerrando mis ojos poco a poco. La última imagen que vi antes de dormir fue su rostro, su sonrisa marcada perfectamente sobre sus labios intentando tranquilizarme, y sus ojos mieles, mirándome sin perder detalle.

Lo quería...

Jueves 7 de Marzo.

Un día que sería difícil de olvidar... para mi desgracia.

“_____, ¿estas lista?” Escuché la voz de Jason detrás de mi. Me di la vuelta para mirarle de frente a los ojos.

Asentí con mi cabeza. Estaba cansada, había sido un día duro. 

Estaba tan nerviosa, que si hubiera podido me hubiera comido mis uñas.

“Entonces, adelante.” Sonrió mirándome a los ojos. “Sal ahí y demuéstrales lo que sabes hacer.” Asentí con mi cabeza, acercándome a él para darle un abrazo y poco después salir del backstage.

Me sorprendí. Demasiado. El pasillo estaba lleno de gente. Entre ellos, Jaden Smith, Chaz y Justin.

Esta era mi primera noche después de casi una semana fuera, estudiando para hacer todos los exámenes que tenía que hacer, ya que estaba estudiando el último año para graduarme y dejar el instituto. Quería hacerlo de una buena vez, aunque quedaban un par de meses y sería libre.

Suspiré, mientras todos me miraban al salir al pasillo.

Me miraron de arriba abajo. Hacía mucho que no les veía, concretamente como 5 días o algo parecido.

Sonreí para acercarme a abrazar a Scooter, haciendo que casi me dejara sin respiración por el abrazo y la fuerza que puso. Whoa. Cualquiera que le hubiera visto pensaría que no me había visto en años.

“Se te extrañó.”

“Vaya, ya veo. Parece que me fui 2 años.” Bromeé para que rieran los demás.

Noté mas miradas encima de mi. Tay, el DJ se escuchaba desde afuera, poner música para dar en pocos segundos comienzo al concierto que abriría yo como telonera.

Suspiré una vez, otra, otra mas... hasta que sentí una voz desde atrás.

“Suerte _____.” Volteé mi cabeza para mirar a sus ojos mieles.

“Gracias Justin. Me alegro de verte de nuevo.” Sonreí, para acercarme a él y abrazarle fuertemente, como si no lo fuera a dejar ir, como si fuera la última vez que le fuera a ver. 

Sentí una extraña sensación recorrer por mi cuerpo, haciendo que varios escalofríos estremecieran mi cuerpo. Tragué saliva.

“¿Estas bien?” Escuché su voz suave.

“Um, si, si. Estoy bien.” Esbocé una sonrisa fingida.

No, no estaba bien. Había algo mal, que no sabía que era, pero era una extraña sensación en mi interior de que las cosas no estaban yendo bien o no iban a ir como se esperaba. Era extraño.

“Vamos ______” Asentí con mi cabeza, saludando a los demás con la mano, apenas tenia tiempo de saludar a todos, mi actuación empezaba ya.

Noté mas miradas sobre mi, haciendo que mis nervios aumentaran.

Suspiré mientras empezaba a caminar. Miré a mis tacones, resonaban contra el suelo del estadio en el que iba a actuar. Londres. Me encantaba. Era... diferente, y siempre había querido venir aquí.

Llevaba unos shorts negros, elásticos que brillaban. Una camiseta algo corta, también negra con letras en blanco que decían palabras de arriba abajo. Agarré mi micrófono con mi mano derecha y lo apreté con fuerzas con mis dedos. Miré atrás mientras me paraba delante de la entrada al escenario. Venían todos los demás. La mayoría.

“¿Lista?”

“Lista.” Solté un profundo suspiro por mi boca, intentando sacar todos los nervios.

Me dio un último abrazo y me volví para mirar a todos los demás, parados en frente y otros a lo lejos mientras se acercaban por el pasillo. Sonreí. Coincidí con la mirada de Alfredo. Me hizo una mueca que me hizo reír.

Me volteé y empecé a caminar hacia la plataforma que me lanzaría hacia el escenario.

Las luces se apagaron. Miré al suelo de la plataforma. Los gritos aumentaron poco después de que el DJ anunciara la entrada de un artista. Esa era yo.

Esbocé una sonrisa, mordí mi labio y empecé a caminar dándome la vuelta para aterrizar sobre el escenario. Viendo las miles y miles de luces.

Escuchaba los latidos de mi corazón. Mi pecho latía demasiado deprisa. La adrenalina corría por mis venas, mientras daba cada uno de los pasos de baile a la vez que intentaba contener mi respiración para cantar. A veces era algo difícil, pero me encantaba.

“Lo hiciste genial!” Abracé a Jason mientras el me daba vueltas encima de él sobre el suelo. Haciéndome sonreir sin parar.

“Fue genial. Whoa! Nunca había actuado en Londres.” Sonreí.

“Ya no lo puedes decir.” Alfredo sonrió, dándome un abrazo.

“Necesitaba esto para despejarme, por fin que acabé los exámenes ... ya estoy mejor.” Me encogí de hombros.

“Te ves cansada. Deberías de dormir mas.”

“Es normal. Apenas dormí, tenía que estudiar.” Me encogí de nuevo de hombros mientras la voz de Justin inundaba mis oídos desde el escenario.

“¿Ya salió Justin?” Me di la vuelta para encontrarme con una de sus actuaciones.

“Si, hace unos minutos.” Sonrió Scooter.

“Creo que iré a por una chaqueta, hace frío.”

“Saliste demasiado destapada, ______.” Alfredo bromeó haciendo reír a los chicos. Arqueé una ceja mientras ladeaba mi cabeza hacia un lado para mirarle con sarcasmo.

“No es gracioso.” Le miré seria.

“Solo bromeaba.” Se encogió de hombros, todos me miraron esta vez a mi.

“Si, ya veo.” Negué con mi cabeza mientras me daba la vuelta y empezaba a caminar por el pasillo para ir a mi backstage a coger mi chaqueta. Tenía algo de frío.

Mis piernas estaban demasiado cansadas, flaqueaban. Alfredo tenía razón, debería de descansar. Esa noche, probablemente me quedaría en el hotel durmiendo hasta mañana.

Entré al backstage para revisar mi iPhone y entré en twitter, mientras me sentaba en el gran sofá de la sala y cogía mi chaqueta para ponérmela. Un escalofrío recorrió mi cuerpo al sentir la fría piel de la chaqueta cubrir la mía.

Suspiré y empecé a escribir un tweet “Noche impresionante. Me alegro de estar de vuelta. Necesitaba esto. Gracias por todo. London rocks! loveu. #Dream #Believe”

Lo cogí en mi mano y me levanté del sofá para ir hacia la puerta y cerrarla poco después a mis espaldas. Caminé por el pasillo hacia detrás del escenario para estar con los chicos justo donde estaban ellos para ver el concierto mejor. Solo los gritos de las fans en el concierto, la voz de Justin cantando y el sonido de mis tacones al choca contra el suelo, se escuchaba. Sonaba bien. Me reí al pensar una cosa tan tonta.

La falta de sueño me hacia mal.

Demasiado mal, pero a la cabeza.

Suspiré al ver a Jason volverse.

“Ya volviste. Pensaba que te habías perdido. Tardaste mucho.”

“Estaba entretenida con esto.” Alcé mi mano para enseñar mi iPhone.

Alfredo rió y nos volteamos para mirar el concierto.

Todo iba bien... transcurría al a perfección. La voz de Justin, sus movimientos, los bailarines, la reacción de las fans, todo era genial e iba bien. Hasta que llego Beauty and a Beat.

Empezó bien. A cantar. A bailar. Caminó por la pasarela con los bailarines. Noté en ese preciso instante como la respiración de Justin se agitaba notablemente. Dejó de cantar. Empezó a tambalearse. Mi corazón se sobrecogió, haciendo que mi respiración se detuviera y mi corazón también.

Tragué saliva asustada. Miré a mis dos costados. Scooter estaba frunciendo su ceño, al igual que Alfredo y Jason estaba sorprendido. Sus caras eran de confusión.

Caminó hasta llegar al escenario con los bailarines, ni siquiera se dio la vuelta para mirar atrás, simplemente pronunció unas palabras que hicieron que el aire se fuera de mi organismo. “No puedo respirar.

El tiempo era como si se hubiera parado. Tenía su mano sobre su pecho. Scooter miró a Alfredo y luego me miró a mi. Mis ojos estaban completamente abiertos, el miedo se podía ver perfectamente a través de ellos. Esto no podía estar pasando, no, por favor.

Intentaba convencerme a mí misma. Pero por mucho que lo hiciera, solo me estaba engañando incluso mas a mí misma.

Se agachó. Uno de los bailarines se dio cuenta de lo que estaba pasando y le intentó ayudar pero rápidamente salieron del escenario. Mi corazón empezó a latir con rapidez cuando lo observé caminar por delante a unos metros de distancia con algo de prisa hacia el backstage. Miré a Scooter, quien miró a Justin y corrió para alcanzarle. Su mirada era de preocupación y eso me rompió por completo.

Mi corazón cada vez iba mas rápido, tanto que parecía que se iba a salir de mi pecho en breves momentos. Todos estaban tan sorprendidos como yo y Scooter al ver a Justin de esa forma. Tambaleándose, diciendo que no podía respirar, sin cantar y sin apenas moverse. Tocando la escaleras agachándose para intentar no caerse y asegurarse de que lo hacía de manera segura sin tropezar con ella.

Tragué saliva. Miré a Alfredo, su rostro también reflejaba preocupación.

“¿Que esta pasando?” Fueron mis palabras, algo entrecortadas por mi respiración.

Se encogió de hombros y sin decir apenas nada, empecé a correr por el pasillo en dirección al backstage para saberlo por mí misma. La puerta estaba algo entrecerrada, pero todavía quedaba una ranura lo suficientemente grande como para enterarme de todo y ver lo que pasaba. Me asomé, abriendo la puerta. Mirando alrededor para ver a Justin, Scooter y a dos médicos atenderle. Y sin nada mas que una mirada para ver quien era. Su cuerpo se desplomó, cayendo en el sofá.

Si antes estaba rota, ahora estaba destrozada, y hundida por la imagen que tenía delante de mi. Negué con mi cabeza, sintiendo las lágrimas pinchar en mis ojos. En cuestión de dos segundos las lágrimas inundaban mis ojos, haciendo que con solo parpadear una vez para asegurarme de que todo esto era verdad, y no se trataba de ninguna pesadilla, cayeran por mis mejillas, inundándolas.

Justin.” Susurré esas palabras, pero lo suficientemente alto como para que se escuchara mi voz. Me llevé la mano a mi boca, sollocé mientras Scooter me miraba asustando sin apenas decir nada. Yo observaba la figura de Justin desmayado en el sofá, su rostro estaba muerto de expresiones, en blanco, pálido, con sudor corriendo por su frente. Su pelo estaba revuelto y algo mojado.

“_____, sal de aquí.” La voz severa de Scooter me sobresaltó.

Seguía negando con mi cabeza, sin creer lo que estaban viendo mis ojos. Él, estaba allí, sin apenas moverse, o respirar. Tumbado en un sofá, con su rostro pálido. Sin apenas moverse. Sin decir nada ... como si estuviera...

“_____. Por favor sal de aquí.” La voz de Scooter, esta vez mas fuerte y grave que antes, ordenándome que saliera, sonó fuertemente en el backstage.

Retrocedí saliendo de la habitación, caminando hacia el frente, para aterrizar contra la pared del pasillo, mi mano estaba sosteniéndome en la pared, mis piernas flaquearon. Las lágrimas empezaron a salir con mas fuerza que antes. Estaba perdida.

Si algo le pasaba ... no sabía si podría seguir. No me había dado cuenta hasta de ahora, pero había caído por el mas de lo que nunca imagine caer por nadie. Le quería, tanto que dolía.

Estaría perdida sin él.

Estaba apoyada contra la pared, intentando sostenerme. Rápidamente sentí unos brazos detrás de mi sujetarme para que no cayera al suelo. Era Alfredo y a mi otro lado estaba Jason. Estaba tan asustada. Las lágrimas no cesaban de caer por mis mejillas. Fue demasiado impactante.

“______.” Su voz era asustada. Era Alfredo.

“Oh dios ______.” Jason me sostuvo por mi brazo, intentando que volviera mi cara para mirarle a los ojos, cosa que hizo sin dudarlo. Me apoyaron contra la pared, ayudándome a sostenerme. Me costaba respirar. Me sostuvo mi cabeza con mis manos, mirando hacia abajo. Todo era confuso y me daba vueltas. “¿Que ha pasado?”

Levanté mi cabeza, para mirarle. Intentaba decir las cosas, pero nada salía de mi boca. Era como si no supiera nada y apenas pudiera sostenerme en pie. Si en ese momento me preguntan por mi nombre no lo hubiera sabido porque estaba en total shock.

“E-el.” Tartamudeó.

Alfredo me miraba alarmado y Jason también, estaba nerviosos y se les notaba en sus rostros. Mas gente empezó a venir por el pasillo y al verme de esa forma y en ese estado se sorprendieron tanto que sus caras eran poemas. “______, por favor, respira.” Intentaba tranquilizarme Jason.

“Tranquilízate ______.” Alfredo intentaba calmarme.

Suspiré profundamente un par de veces, pero la imagen que acababa de presenciar no se iba de mi cabeza ni un solo instante. Todavía veía cuando cerraba los ojos a Justin desmayado en aquel sofá mientras Scooter alarmado y asustado me decía que saliera de allí.

“Él... se desmayó delante de mi. Scooter estaba tan asustado.” Conseguí decir después de unos segundos intentando tranquilizarme y suspirando. De nuevo rompí a llorar, y esta vez Jason me abrazó atrayéndome a sus brazos mientras Alfredo a su lado me decía mirándome desconcertado y triste. “Cálmate, todo estará bien.”

Necesitaba que esas palabras me las dijera solo una persona en este mundo... Justin. A veces pensaba que él era el único con el poder de hacerme tranquilizarme.

Sollocé en su hombro, Chaz corrió hacia nosotros por el pasillo, estaba con más gente, con Allison, y Scrappy...

“Shhh, tranquila.” Jason me susurró en mi oído. Negué con mi cabeza. No, no podía tranquilizarme.

Me aparté de él. “¿Como quieres que me tranquilice?” Le grité. Era como si estuviera totalmente descontrolada y no podía evitarlo. “Justin esta dentro de esa habitación, esta mal, se acaba de desmayar!” Mordí mi labio poco después. Estaba perdiendo la cabeza. Sentí una punzada en mi pecho rápidamente.

“______.” Susurró, yo negué con la cabeza. “No le va a pasar lo mismo.”

Yo negué de nuevo con mi cabeza, apretando mis dientes. Me sentía impotente de no estar dentro de esa habitación ahora mismo intentando hacer algo por él. Necesitaba estar en ese momento allí con él, pero lo peor era que no podía hacer absolutamente nada. “No puedo dejar que a otra persona le pase lo mismo, Jason.” Sollocé de nuevo, mirándole a los ojos sin saber que más decir o hacer.

“______, no digas eso.” Jason me contestó. Alfredo nos miraba a los dos sin saber que decir, ya que no sabía de que demonios estábamos hablando y los demás me miraban en el pasillo con caras descompuestas. Nunca nadie me había visto así.

Mi pecho subía y bajaba, como antes. Ya no estaba tranquila como hacía unos segundos atrás. No podía respirar mas deprisa. Tenía algo dentro de mi que no podía salir. Necesitaba gritar. Tenía la ansiedad de correr y no poder. No podía hacer nada. No podía hacer nada. Nada.

Mis mejillas parecían cascadas ahora mismo. Mi aire salía de mi boca tan rápido que no me daba ni siquiera tiempo a sacarlo tan deprisa. Todo se desvanecía a mi alrededor, mi cabeza daba vueltas, puse mi mano en mi pecho.

“______, por favor. Mírame.” Ni siquiera podía levantar mi cabeza. Necesitaba aire. Lo necesitaba ahora si no me iba a quedar allí.

“No, no, no. No.” Negaba con mi cabeza.

“Mier*da, le esta dando un ataque de ansiedad.” Escuché la voz de Jason hacia Alfredo y mas gente detrás de él en el pasillo, que estaba algo alejados. “Joder, _____, respira, por favor. Respira.” Me miraba a los ojos agachándose a mi altura para mirarme mientras me hablaba. 

Mi mirada estaba perdida.

“Sácala afuera.” Allison vino a nosotros.

Levanté rápidamente mi cabeza mirándole. Negué. “No!” Dije asustada. “No puedo irme.”

Miró a Jason. “Ya.” Sin ni siquiera a que me diera tiempo a negarme, los brazos fuertes de Jason me agarraron por mis brazos arrastrándome a una salida de emergencia para salir al aire fresco de la noche.

“No, por favor, déjame ir allí.”

“______.” Me agarró entre sus manos mi rostro. “No hagas esto. No te hagas esto a ti misma.” Sus ojos marrones, obligándome a mi a que le mirara, mientras mi respiración salía en el frío aire de Londres, todavía demasiado agitada.

Las lágrimas todavía caían por mis mejillas. “No quiero que le pase lo mismo.”

“No le va a pasar lo mismo.” Susurró, mirándome fijamente.

“Tu no sabes eso.”

“Ni tu tampoco.”

“Pero...”

“No. No ______.”

Sollocé. “No quiero .... perderle.” Mis palabras salían ahogadas. Algo dentro de mi se había liberado mientras las palabras eran dichas. Tragué saliva. El nudo en mi garganta todavía estaba presente.

“Y no le vas a perder. Va a estar bien.” No dije nada, simplemente guardé silencio. “Lo que le pasó a él, no tiene nada que ver con lo que le pasó a Justin.”

Aquella historia vino a mi mente, partiéndome por dentro mas de lo que me había partido ya. Intenté deshacer el nudo que estaba en mi garganta. Suspiré. “Tengo miedo.” Susurré, me atrajo de nuevo a sus brazos envolviéndome para tranquilizarme. Me abracé a él fuertemente, intentando buscar un apoyo en ese momento.

“Cuando entremos ahí dentro, el va a estar bien. Todo el mundo nos desmayamos, el también es humano a parte de ser Justin Bieber.” Mordí mi labio.

No se cuanto tiempo pasó desde que estuvimos allí, pero cuando nos fuimos de allí, todos seguían todavía en el pasillo, Jason me agarró de un lado de mi cintura mientras caminábamos hacia todos los demás, ellos se dieron la vuelta y nos miramos fijamente.

“¿Esta bien?” Alfredo y Allison dijeron al unísono a Jason. El simplemente asintió con su cabeza.

“Será mejor que descanses y bebas algo de agua.” Asentí con mi cabeza, mirando a Fredo. Le dirigí una pequeña sonrisa intentando tranquilizarle y asegurarle de que estaba bien. Aunque realmente, en mi interior no lo estaba.

La puerta del backstage se abrió rápidamente para que saliera Scooter detrás y la dejara entreabierta, ni siquiera pude mirar a través de la reja que había en la puerta. Mi respiración se cortó.

“¿Justin esta bien?” Le pregunté rápidamente sin apenas darle tiempo a respirar. Me miró a los ojos confundido por mi estado. Debía de estar horrorosa en ese preciso instante. Tragué saliva.

El asintió con su cabeza. “Esta mejor. Le están revisando.” Algo dentro de mi se relajó notablemente. Suspiré calmadamente y de nuevo sentí las lágrimas amenazar con salir, pero no las iba a dejar salir, aunque era una forma de desahogarme, no lo haría de nuevo.

“Oh dios mío.” Allison se llevó la mano a su boca. “Me asusté demasiado.”

“Le han puesto oxígeno y ha despertado hace unos minutos. Se esta recuperando pero es demasiado cabezota, debería de ir a un hospital para que le revisen con atención pero quiere acabar el concierto.” Sonreí levemente. Ese era Justin. Siempre le estaban criticando, diciendo mier*das de él, levantando rumores... pero nadie se daba cuenta de lo profesional que era y de la verdadera persona que había dentro de esa apariencia de chico ‘guay’ que todos creían que era.

Alfredo me dio una botella de agua y escuché a Scooter seguir hablando. Le sonreí a Alfredo y le di las gracias mientras la desenroscaba y bebía poco a poco.

El frío líquido bajó por mi garganta, aliviándome considerablemente.

“Iré afuera para avisar a todos en el concierto de lo que pasa.” Todos asintieron. Hasta algunos bailarines habían salido del escenario para comprobar que había pasado y preocuparse por Justin.

“¿Mejor?” Noté la voz de Allison a mi lado, me sacó de mis pensamientos. La miré algo confusa todavía.

Asentí. “Si, gracias.” Sonreí levemente.

“Quizás deberías de entrar adentro, te quedarás mas tranquila y así revisa un médico tu estado. Te notas cansada.” Suspiré, mi corazón se aceleró. Alfredo se asomó por la puerta diciendo algo, parecía hablar con Justin o con alguien más.

Dudé un momento. Solo quería verle. Verle y comprobar con mis propios ojos que estaba bien. Asentí con mi cabeza. “Vale.”

Noté su mano en mi espalda, acompañándome hasta la puerta, en la que estaba Alfredo hablando desde allí con alguien, escuché rápidamente la voz de Justin mientras me acercaba, era algo débil y ronca. Me dio un vuelco el corazón.

“_______ sufrió un ataque de ansiedad.” Noté la voz de Alfredo desde la puerta, él no sabía que estaba detrás de él.

“¿Que? ¿Porque? ¿Esta bien?” Noté la voz de Justin alarmada desde el otro lado de la habitación. Alfredo se sobresaltó cuando nos miró a mi y a Allison en la puerta, para entrar allí.

“Oh, no sabía que estabas aquí.” Alfredo se dio la vuelta mirándome algo curioso con una sonrisa. Me encogí de hombros. Allison había pasado antes que yo y la notaba hablar con él.

Poco después pasé yo después de hablar con Alfredo. No sabía porque demonios pero estaba nerviosa. La respiración era algo agitada, pero no tanto como antes. Entré adentro mientras Allison me sonreía. Sentía en ese momento miradas sobre mi. Hasta que vi a Justin delante de mi, sentado sobre el sofá recostado. Su cara era de cansancio.

Le miré atentamente sin saber como reaccionar. Tragué saliva. El se me adelanto. “¿Estas bien? ¿Porque te paso eso?” Me miró algo preocupado y confuso a la vez.

“Me asuste. Eso es todo.” Mi mirada era seria, mas de lo que pretendía. Lamí mis labios, y jugué con los dedos de mis manos, eso era lo que siempre hacía cuando me ponía nerviosa.

“¿Estas bien?”

Asentí con mi cabeza, mirando el suelo. “Si, estoy bien.” Hice una mueca con mis labios. “¿Tu, estas bien?” Me miró atentamente a los ojos.

“Mejor.” Suspiró pasándose sus manos por su pelo revolviéndolo aún mas. Estaba sudando todavía y su frente brillaba por las gotas de sudor que caían de su pelo.

“Te notas cansado Justin, deberías de descansar.” Le miré acercándome a él cada vez más. Parar mirarle de cerca. Negó con su cabeza, suspirando profundamente de nuevo.

“No, tengo que acabar ese concierto _____. Tengo que hacerlo y lo voy a hacer.”

“Tu también eres un cabezota.” Sonreí levemente, recordando su comentario hacía unos días. Se encogió de hombros.

“Simplemente lo haré.” Mordí mi labio mirándole. “¿Has estado llorando?” Me miró atentamente a los ojos al cabo de los segundos, algo preocupado. Agaché mi mirada.

Suspiré, mordiendo mi labio fuertemente, tanto que pensaba que en segundos acabaría saliendo sangre de mi piel. Contuve un sollozo. “Tenía miedo. Pensaba que...”

Me interrumpió. “Hey, _____, no llores por dios. Estoy bien.” Me quedé allí, de pie, plantada en el suelo, sin decir nada, mirando al suelo porque no quería coincidir con sus ojos. “Ven aquí.” Lanzó un brazo en mi dirección para que me acercara a él y eso hice.

Me acerqué a él, mientras envolvía con sus brazos mi cuerpo y me sentaba a su lado, acercándome a él para que nuestros cuerpos chocaran. Pasé mis brazos por su cuerpo apretándome mas contra él. Era como si la más mínima distancia hiciera que el se marchara y no volviera nunca más y solo ese pensamiento me destrozaba por dentro.

Lo necesitaba.

Demasiado.

Mas de lo que nunca pensé.

“Estoy bien ______.” Susurró en mi oído. Sollocé de nuevo.

“Pensé que te había pasado algo malo cuando te vi desmayarte.” Una lágrimas cayó por mi mejilla. Sollocé de nuevo.

“No pasó nada malo ______, estoy bien ahora.” Me sentí bien en ese momento entre sus brazos, necesitaba ese abrazo, sentirle cerca, sentir que él estaba allí para mi y para calmarme con sus palabras de aliento.

Mordí mi labio al apartarme. Su aroma era bueno incluso sudado. Todo en él era bueno.

Tragué saliva, mirándole a los ojos tímidamente.

“No me va a pasar nada.” Sonrió tranquilizadoramente. “¿Vale?”

Asentí, aliviada al escuchar esas palabras salir de sus labios mojados y rojos.

“______, deberías dejar que te revisen.” Jason entró en el backstage, y le miramos. “Justin, ¿Estas mejor?”

“Si, estoy bien.” Justin sonrió tranquilizadoramente.

“No, Jason. Estoy mejor, no me paso nada.” Contesté.

“______.” Me dijo con severidad en su voz, mirándome con resignación.

Justin me miró. “No.” Dije con decisión.

Suspiró resignado y se largó de la habitación.

“Deberías hacerle caso, será lo mejor. Te ves cansada.”

“Luego. Ahora tu eres el que necesita toda la atención.” Me levanté para marcharme de la habitación. “Espero que estés mejor y suerte cuando salgas ahí fuera.” Sonreí sin apenas ganas. 

“Gracias. Nos vemos luego.” Sonrió y desaparecí de la habitación.

No entendía porque me pasaban esos pensamientos por la cabeza. Lo quería. Quería haberle besado antes de irme, necesitaba a alguien a mi lado como él. 

Sentí rápidamente un estremecimiento en mi cuerpo.

Cuando quieres a una persona, aunque no te des cuenta, lo sientes... puedes sentirlo por la forma en la que le abrazas, te preocupas por esa persona. Quieres pasar todo el tiempo del día con él, reír con él, hacer bromas, divertirte, sonreir, abrazarte... en los momentos mas duros, cuando crees que esa persona no volverá, es cuando ese sentimiento se intensifica en tu pecho y hace que apenas puedas respirar. Necesitas saber que esta bien, necesitas abrazarle, estar con él, que te diga que todo va a estar bien. Le necesitas a él.

No sabes porque, cuando ni como te ha pasado. Como puedes querer de esa forma a una persona. Pero sabes que necesitas que este a tu lado para que todo vaya bien, porque no soportarías perderle.

Y ahí fue cuando me di cuenta de mis sentimientos... Le quería como algo mas que un amigo.

Continue Reading