Narra Amy:
Iba caminando con mis brazos entrelazados con los de Harry, ya todos saben que somos pareja, sincera mente me di cuenta que la hermana de Ron, no se lo tomo muy bien, pero no me importa, estoy con Harry y me siento bien, aunque... ¿Qué diría mi padre? No lo se, pero esperó que no le moleste.
-Gracias por meterte en tus asuntos- me susurró Zahia, yo reí divertida.
-Nunca dije que yo me metería en mis asuntos, se lo dije a los demás pero yo no- ambas reímos y Zahia rodó los ojos.
-La idea era que tu también te metieras en tus asuntos- ahora yo rodé los ojos.
-Querida se que es tu primer día pero es para que sepas, que yo Nunca me metere sólo en mis asuntos- Zahia suspiró dramáticamente y yo solté una carcajada.
-¿En que me metí?-
-En una gran locura- dijimos Connor y yo al mismo tiempo, mire a Connor.
-¿Y tu cuando llegaste?- le pregunte a Connor.
-Siempre estoy cariño- me guiño y yo puse mi índice en su frente y se la aventé haciendo reír a Zahia.
-Cuidado con mi novia Wells- dijo de forma amenazadora Harry, haciendonos reír a Zahia y a mi, Connor levantó sus manos en son de paz.
-Tranquilo Harry, tendrá una cita con Zahia, ¿No?- pregunte divertida.
-¡No es una cita!- exclamaron Zahia y Connor al mismo tiempo, con Harry reímos divertidos.
-Sea lo que sea, deberás darle una explicación a tu padre- le guiñe divertida y Zahia resoplo.
Entramos a la sala de profesores, era larga y con paneles de madera en las paredes, también estaba llena de sillas viejas y dispares. Se encontraba el profesor Snape sentado en un sillón bajo y observó la clase, sus ojos le brillaban y tenía una sonrisa desagradable en su rostro. El profesor Lupin entró y cerro la puerta a tiempo que Snape habló.
-Déjala abierta, Lupin. Prefiero no ser testigo de esto. - se puso de pié y pasó entre nosotros, me dirigió una mirada cuando paso por mi lado, llegó a la puerta y giró sobre sus talones. -Posiblemente no le haya avisado nadie. Lupin, pero Neville Longbottom está aquí. Yo le aconsejaría no confiarle nada difícil. A menos que la señorita Granger le esté susurrando las instrucciones al oído.
Con Harry miramos fulminantes a Snape, después busque con mi mirada a Hermione, no estaba.
Sin embargo el profesor Lupin alzó las cejas.
-Tenía la intención de que Neville me ayudara en la primera fase de la operación, y estoy seguro de que lo hará muy bien. -mire a Neville quien estaba colorado como el cabello de Fred y George.
Snape hizo un gesto torcido y salió de la sala dando un portazo.
-Ahora- continuó el profesor Lupin llamando la atención de todos al fondo de la clase donde no había nada, sólo un viejo armario para los profesores, donde creó, deben guardar las togas. El profesor se acercó al armario y tembló de repente golpeando la pared. Por acto involuntario tome la mano de Harry, lo mire de reojo y el me sonrió, le devolví el gesto y seguí mirando el frente.
>>No hay por qué preocuparse -dijo el profesor con tranquilidad, cuando casi todos nos hicimos para atrás. -Hay un boggart ahí dentro. -ya se lo que es un boggart, mi tío Regulus me enseñó lo que eran y como atacarlos, sonreí con gesto de superioridad, que no paso desapercibido por Harry y me miro divertido.
-A los boggart les gustan los lugares oscuros y cerrados -prosiguió el profesor, todos miraban atento su clase, menos los Slytherin para variar. -Los roperos, los huecos debajo de las camas, el armario de debajo del fregadero... En una ocasión vi a uno que se había metido en un reloj de pared. Se vino aquí por la tarde, y le pregunte al director si se lo podía dejar donde estaba, para utilizarlo hoy en una clase de prácticas. La primera pregunta que debemos contestar es: ¿Qué es un boggart?
Hermione levantó la mano, yo la mire sorprendida, ¿Cuando llegó? Como si Ron me leyera la mente, le pregunto a Harry quien sólo se encogió de hombros.
-Es un ser que cambia de forma -dijo bastante memorizado para mi gusto- Puede tomar la forma de aquello que más miedo nos da. - hay una sola cosa a la que yo le temo, aunque no quiero pensar en ello ahora.
-Yo no lo podría haber explicado mejor -admitió el profesor sonriendole a Hermione, quien se puso radiante de alegría- El boggart que está ahí dentro, sumido en la oscuridad, aún no ha adoptado un forma, porque... -miró a Zahia quien respondió de inmediato.
-Porque todavía no sabe qué es lo que más miedo le da a la persona del otro lado-
-Exacto -dijo orgulloso el profesor y Zahia le sonrió. -Nadie sabe que forma tiene el boggart cuando está solo, pero cuando lo dejamos salir; se convertiría de inmediato en lo que más temamos. Esto significa -me señaló a mi y le respondí de lo que me acordaba.
-Qué tenemos una ventaja antes de empezar-
-Brillante Amy, ¿Sabes por que, Harry?- Harry algo desconcertado y confundido respondió.
-¿Porque somos muchos y no sabe por qué forma decidirse?
-Exacto Harry. - Harry suspiro aliviado y Hermione bajo la mano con una pequeña decepción. -Siempre es mejor estar acompañado cuando uno se enfrenta a un boggart, porque se despista. ¿En que se debería convertir; en un cadáver decapitado o en una babosa carnívora? En cierta ocasión vi que un boggart cometía el error de querer asustar a dos personas a la vez y el muy imbécil se convirtió en media babosa. No daba ni una gota de miedo. El hechizo para vencer a un boggart es la risa...
-Ósea su nemesis es la risa- comente por error acordandome de una película Muggle, todos los sangre pura, incluyendo a los Slytherin me miraron raro. -Cosas Muggles, ignorantes. -bufé haciendo reir a Harry, Zahia, Hermione y Connor. Emily y Ron se miraron entre ellos y luego nos miraron con gesto de no entender nada. El profesor siguió hablando.
-Concordando con lo que dijo Amy. Lo que tienen que hacer es obligarle a que adopte una forma que ustedes encontréis cómica. Practicaremos el hechizo primero sin la varita. Repitan conmigo: ¡Riddikulo!
-¡Riddikulo!- dijimos todos a la vez.
-Bien- dijo el profesor Lupin. -Muy bien. Pero me temo que esto es lo más fácil. Como ven, la palabra sola no basta. Y aquí es donde entras tú, Neville.
El armario volvió a temblar, aunque Neville temblaba más con cada paso que daba.
-Bien, Neville -prosiguió el profesor Lupin. -Empecemos por el principió: ¿Qué es lo que más te asusta en el mundo? -Neville movió sus labios, pero no dijo nada. -Perdona, Neville, pero no he entendido lo que has dicho. -dijo el profesor Lupin, sin enfadarse.
-El profesor Snape- dijo y casi todos rieron, incluyéndome. El profesor Lupin parecía pensativo.
-El profesor Snape... Mm... Neville, creó que vives con tu abuela, ¿Es verdad?
-Si -respondió nervioso. -Pero no quisiera tampoco que el boggart se convirtiera en ella.
-No, no. No me has comprendido -dijo el profesor Lupin, sonriendo- Lo que quiero saber es si podrías explicarnos cómo va vestida tu abuela normalmente.
-Bueno, lleva siempre el mismo sombrero: alto, con un buitre disecado encima; y un vestido largo... Normalmente verde; y a veces, una bufanda de piel de zorro
-¿Y bolso?-lo ayudó el profesor Lupin.
-Si, un bolso grande y rojo- confirmó Neville.
-Bueno, entonces -continuó el profesor Lupin. - ¿Puedes recordar claramente ese atuendo, Neville? ¿Eres capaz de verlo mentalmente?
-Sí. -dijo Neville con inseguridad.
-Cuando el boggart salga de repente de este armario y te vea, Neville, adoptará la forma del profesor Snape -dijo Lupin- Entonces alzarás la varita, así, y dirás en voz alta: ¡Riddikulo!, concentrándote en el atuendo de tu abuela. Si todo va bien, el boggart-profesor Snape tendrá que ponerse el sombrero, el vestido verde y el bolso grande y rojo.
Todos soltamos una carcajada, de sólo imaginarlo me mata de la risa. El armario tembló de forma violenta y volví a tomar la mano de Harry.
-Si a Neville le sale bien -añadió el profesor Lupin. -Es probable que el boggart vuelva su atención hacia cada uno de nosotros, por turno. Quiero que ahora todos dediquéis un momento a pensar en lo que más temen y en cómo podrán convertirlo en algo cómico...
Rápidamente todos formamos filas, mientras yo meditaba como podía convertir mi miedo en algo cómico.
Mire a Harry quien se estremeció un poco, tome su mano, Harry me miro, nos sonreímos y entrelazamos nuestros dedos.
-¿Todos preparados?- preguntó el profesor Lupin, Harry se veía nervioso que apretó más mi mano, al ver sus nervios me gane delante de el en la fila, Harry me acaricio la mano en gesto de agradecimiento y le sonreí.
-Nos vamos a echar todos atrás, Neville -dijo el profesor Lupin -Para dejarte el campo despejado. ¿De acuerdo? Después de ti llamaré al siguiente, para que pase hacia delante... Ahora todos hacia atrás, así Neville podrá tener sitio para enfrentarse a él.
Todos le hicimos caso al profesor y dejamos espacio para Neville, frente el armario, se veía pálido.
-A la de tres Neville -dijo el profesor Lupin, que apuntaba con la varita al porno del armario. -A la una... A las dos... A las tres... ¡Ya!
Salieron chispas de la varita del profesor Lupin y dio en el porno de la puerta. El armario se abrió de golpe y el profesor Snape salió de él, con su nariz ganchuda y gesto amenazador. Fulminó a Neville con la mirada.
Neville se hecho para atrás, con la varita en alto, moviendo su varita, pero ninguna palabra salía de su boca.
-¡Ri... Riddikulo!- dijo Neville.
Se oyó un chasquido como un látigo, Snape tropezó: llevaba un vestido largo rideteado de encaje y un sombrero alto rematado por un buitre apolillado. De su mano pendía un enorme bolso rojo.
Todos soltamos carcajadas. El boggart se detuvo, confuso, y el profesor Lupin felicitó a Neville y grito:
-¡Parvati! ¡Adelante!
Narra autora:
Parvati avanzó, con el rostro tenso. Snape se volvió hacia ella. Se otro otro chasquido y en el lugar en que había estado Snape apareció una momia cubierta de vendas y con manchas de sangre; había vuelto hacia Parvati su rostro sin ojos, y comenzó a caminar hacia ella, muy despacio, arrastrando los pies y alzando sus brazos rígidos...
-¡Riddikulo!- grito Parvati.
Se soltó una de las vendas y la momia se enredó en ella, cayó de bruces y la cabeza salió rodando.
-¡Seamus!- grito el profesor Lupin.
Seamus paso rápidamente junto a Parvati.
¡Crac! Donde había estado la momia se encontraba ahora una mujer de pelo negro tan largo que le llegaba al suelo, su rostro huesudo de color verde: una banshee. Abrió la boca completamente y un sonido sobrenatural llenó la sala: un prolongado aullido que me puso los pelos de puntos.
-¡Riddikulo!- grito Seamus
La banshee emitió un sonido ronco y se llevó la mano al cuello. Se había quedado afónica.
¡Crac! La banshee se convirtió en una rata que intentaba morderse la cola, dando vueltas en círculo; a continuación... ¡Crac! Se convirtió en una serpiente de cascabel que se deslizaba retorciéndose, y luego... ¡Crac! En un ojo inyectado en sangre.
-¡Esta despistado!- grito Lupin -¡Lo estamos logrando! ¡Zahia!
Zahia avanzó temblorosa, Amy miraba atentamente a su amiga, sabiendo que ella lo conseguiría.
¡Crac! Se convirtió en un Lethifold, su aspecto se asemeja al de un manto negro, se deslizaba por el suelo en busca de su presa...
-¡Riddikulo!- grito Zahia, la criatura ahora era una masa de muchos colores y en forma de un delfín, claro, el animal favorito de Zahia y su patronus, aunque ella aún no lo sabe.
-¡Brillante Zahia!- grito el profesor. -¡Ron, te toca!
Ron avanzó hacia adelanté.
¡Crac! Algunos gritaron, entre ellos Emily y Amy. Una araña gigante, de dos metros de altura y cubierta de pelo, se dirigía hacia Ron chascando las pinsas, al principio Ron estaba petrificado, pero luego miro de reojo a cierta persona y luego a la araña, pero entonces...
-¡Riddikulo!- grito Ron
Las patas de la araña desaparecieron y el cuerpo empezó a rodar. Lavender Brow dio un grito y se apartó del camino a toda prisa. El cuerpo de la araña fue a detenerse a los pies de Amy, quien estaba paralizada. Amy alzó la varita dispuesta a ver el mayor de sus miedos. La araña sin patas miro a Amy y se transformó y Amy lo vio... Su padre tendido en el piso y un dementor apuntó de darle el beso. Amy estaba petrificada viendo la escena, se veía tan real, realmente pensaba que el boggart era su costado Sirius se veía débil, ni siquiera se podía mover, Amy sentía un dolor punzante en su corazón, pensaba que estaba perdiendo a su padre, que ya perdió a su madre y ahora su padre, por un lado quería correr a los brazos de su padre, pero su parte cuerda, le repetía que el no era Sirius, que Sirius estaba bien, aunque a estas alturas no escuchaba a su parte cuerda.
Amy estaba paralizada viendo la imagen, sabía el hechizo que debía decir, sabía lo que debía decir, el dementor estaba apuntó de darle el beso a su padre, Harry supo que Amy no iba a reaccionar por lo que se colocó adelante de Amy, el dementor y Sirius miraron a Harry y ¡Crac! cambiaron la forma a sólo un dementor.
-¡Aquí!- grito el profesor Lupin de pronto, avanzó rápido hacia el dementor colocándose delante de Harry.
¡Crac! El dementor desapareció. Durante un segundo todos miraron a su alrededor con los ojos bien abiertos, menos Amy que miraba la nada, neutra, Harry la abrazó del costado recién ahí volvió a la realidad. Entonces vieron una esfera de un blanco plateado que flotaba en el aire, delante de Lupin, que dijo ¡Riddikulo! Casi con desgana.
¡Crac!
-¡Adelante, Neville y termina con él!- dijo Lupin cuando el boggart cayó al suelo en forma de cucaracha. ¡Crac! Allí estaba de nuevo Snape. Esta vez, Neville avanzó con decisión.
-¡Riddikulo!- grito y durante una fracción de segundo vislumbraron a Snape vestido de abuela, antes de que Neville emitiera una sonora carcajada y el boggart estallara en mil volutas de humo y desapareciera.
-¡Muy bien!- grito el profesor Lupin mientras la clase porrumpía en aplausos- Muy bien, Neville. Todos lo hicieron muy bien. Veamos... Cinco puntos para Gryffindor por cada uno de los que se han enfrentado al boggart... Diez por Neville, porque lo hizo dos veces. Y cinco por Hermione, Zahia, Amy y otros cinco por Harry.
-Pero yo no he intervenido- dijo Harry
-Yo tampoco- dijo Amy.
-Tu, Zahia, Amy y Hermione respondieron correctamente a mis preguntas al comienzo de la clase -dijo Lupin sin darle importancia. -Muy bien todo el mundo. Ha sido una clase estupenda. Como deberes, van a tener que leer la lección sobre los boggart y hacerme un resumen. Me lo deben entregar el lunes. Eso es todo.
Los alumnos abandonaron entusiasmados la sala de profesores. Harry, abrazaba a Amy de costado y ella iba mirando la nada apretándose más al brazo de Harry queriendo sentirse más segura, pero aún sentía esa opresión en el pecho, tenía un presentimiento y no uno bueno, uno que presentía, era el peor de todos. Mientras a Harry le preocupaban dos cosas, una de ellas es como la imagen que vio, le afectó mucho a Amy, la miraba todo el rato con gesto de preocupación, igual que Hermione, Zahia y Emily, por otro lado Ron y Connor aún no se dan cuenta de como esta Amy y Harry. Lo segundo que le preocupaba, era que el profesor había impedido que se enfrentará al boggart ¿Pensara que se desmayaría otra vez? Aunque ahora su prioridad, era su novia, le preocupaba, igual que a sus amigos.
-Ha sido la mejor clase de Defensa Contra las Artes Oscuras que hemos tenido. ¿No es verdad?- dijo Ron, emocionado, Hermione, Zahia y Emily lo miraron mal por no ver como estaba Amy, aunque el pareció no darse cuenta, regresaron al aula por las mochilas y Amy se coloco la suya sin decir nada.
-Parece un profesor muy bueno- dijo Connor con una sonrisa, las chicas se dieron cuenta que eran caso perdido y se unieron a la conversación, menos Zahia, que aún estaba preocupada por Amy, igual que Harry.
-Aunque me habría gustado enfrentarme al boggart yo también. -dijo Hermione-
-¿En qué se habría convertido el boggart?- le pregunto Ron burlándose- ¿En un trabajo de clase en el que sólo te pusieran un nueve?-
Hermione miro fulminante a Ron y Emily la defendió.
-Al menos ella tendría un nueve, tu con suerte tienes un siete- Hermione solto una carcajada y le sonrió a Emily. Hermione, Connor, Ron y Emily se adelantaron mientras que Zahia y Harry se quedaron atrás preocupados por Amy.
-¿Estara bien, Harry?- le pregunto Zahia a Harry por Amy.
-Eso esperó- dijo Harry mirando a Amy, quien miraba la nada y sólo caminaba y parpadeaba, Amy escuchaba a sus amigos aunque no entendía lo que decían por el simple hecho que ella no estaba en ese momento en tierra, si no en una nube de pensamientos.
-Hablare con ella o lo intentare, tu adelanté Harry- le dijo Zahia.
-Es mi novia también quiero apoyarla-
-Harry, son lindas tus intenciones pero no te ofendas, estas son cosas de mujeres, en cambio ustedes no entenderían lo que sentimos, yo si la entiendo, sabría lo que se siente ver a un padre en esa situación-
-¿Lo dices porque mis padres ya están muertos?- dijo Harry dolido.
-No, lo digo porque ustedes tienen tanta sensibilidad como una roca, deja que yo hable con ella- dijo Zahia apenada y de forma de disculpa, Harry suspiro y beso la mejilla de Amy.
-Confiare en que la animes Zahia, gracias- Harry le sonrió agradecido y fue a paso lento por los chicos mientras Zahia pensaba en alguna forma de animar a Amy, pero una amiga, siempre sabe como animar a otra.