Narra Brad:
Llegué a casa pensativo. Esta noche tenia...¿Una cita? Con Andy. Ya podría haberme declarado antes. Aunque no había sido nada decente. Pero ahora compraría rosas y me pondría mi mejor camisa para ella. Si definitivamente si. Y colonia. Miré a Vibs ella también parecía estar contenta. Me miró.
-Hoy hay pizza - dijo sonriendo. Claro, ahora todo cuadraba. Mi madre salio de la cocina con la comida y decidimos comer en el sillón otra vez. Era cómodo. Dejamos las mochilas en las habitaciones. Cuando vi mi cama recordé el beso con Andy. Quien me iba a decir a mi que hoy tendría una cita con ella. Y no para jugar a la Play ni para enseñarle a hacer skate, ni siquiera para ir a un McDonalds. Baje las escaleras. Vi como mi madre y Violet hablaban mientras comían.
-Jo gracias por esperar.
-Es que tenia hambre no podía esperar.- dijo Violet. Mi madre reía. Me gustaba verlas así. Sonreí.
-¿Y esa sonrisa tan grande?-dijo Violet con cara de pervertida.
-Bueno ya que insistes os lo explicaré. Esta noche...tengo una cita con Andy. Ah por cierto mamá, me ha dicho que me quede a dormir. ¿Puedo?
-Claro cielo ni que fuera la primera vez.
-Será la primera que tengan sexo - dijo mi hermana mirando a mamá seriamente. Mi madre se quedo algo estática.
-No vamos a tener sexo es solo una cita para hablar - dije tirandole una servilleta envuelta a mi hermana.
-Bueno Violet eso no es cosa ni tuya ni mía si no de tu hermano y Andrea.-dijo mi madre riendo. Pues no se lo tomaba tan mal. Acabe de comer y decidi dormir un rato para tener energía por la noche.
Me desperté, el despertador no había sonado, pero solo eran...¿LAS OCHO DE LA TARDE?
-Violet - dije gritando. Llegó a mi cuarto con un ramo de flores.
-Si lo se, te has dormido, pero para eso estoy yo. Llévale estas rosas.
-Pero...son azules.
-Lo se, le encantaran. Te he dejado la ropa en el baño y la colonia también. Cuando acabes avisame y te arreglaré el pelo.
-He quedado a las 9 en su casa.
-Pues venga no hay tiempo que perder.-besé a mi hermana en la frente. Si no fuera por ella estaría perdido. Me duché rápidamente, lavé mi pelo y salí. Anda, mi camisa favorita es la que había escogido mi hermana. Era azul con estampados en verde. También había escogido unos jeans largos tejanos, no quedaba mal, tampoco sería una cena muy formal pero quería ir bien. Me vestí y finalmente me puse mis zapatos. Mi hermana llego con el secador.
-Oh mira que mono, le va a encantar - dijo sonriendo.
-¿Tu crees?
-Claro que si. Ella también lleva años pillada por ti Braddy. No seas inseguro. -sonreí. Que raro...nunca me había decidido por miedo y ahora que lo había hecho todo era genial.
Mi hermana me puso el pelo hacia atrás como si llevase un tupé. Claro que yo lo tenía demasiado largo para eso. Me puse el collar de siempre y mis anillos. Baje las escaleras y cogi las flores. Abrí la puerta.
-Eh eh eh, te olvidas esto.- mi hermana llego con un frasquito de colonia y me la echo. Ahora olía a hombre. Mi madre se levantó.
-Mucha suerte hijo - me beso la frente y mi hermana la imitó. -Te queremos - dijeron al unísono. Y me encaminé hacía su casa. No estaba muy lejos. ¿Como se vestiría ella? Ella no se arreglaba demasiado pero no le hacía falta, siempre estaba muy guapa. Aunque cuando se arreglaba más de lo normal casi era un pecado mirarla. Era como una princesa pero, no muy sofisticada, era como una dama de la realeza.
Llegué a su casa y toque el timbre. Ella me abrió. Vaya. Me miró con los ojos abiertos y yo a ella. Llevaba una camiseta negra y una falda ancha a conjunto. No estaba muy maquillada, pero algo. Su pelo estaba liso como siempre, y olía genial.
-Jo, estas guapo -dijo sonriendo.
-Te diría lo mismo pero tu estas más que eso.-dije algo sonrojado. "Ella también lleva años pillada por ti Braddy. No seas inseguro."
Entramos dentro y le di las flores.
-Ayyyy que bonitas. Muchas gracias Brad.-me abrazo por el cuello y yo por la cintura. Nos separamos y nos fuimos a sentar.
-He hecho pasta se que te gusta.
-Si mucho.
-Empezamos a cenar y hablamos de todo. Salio el tema de Tris y Mary. ¿Como habría acabado la conversación? Ya le preguntaría a Tris.
-¿Como esta tu madre?-me dijo.
-Mejor, después de una sesión suele estar agotada pero esta semana lo está llevando bastante bien.
-Me alegro.-dijo sincera.
-Además mi hermana esta bastante contenta no se por que pero espero que siga así.
-¿Si verdad? Es como que ya no está de tan mal humor.-dijo riendo.- Aunque creo que es por James - dijo poniendo cara traviesa.
-¿James? ¿McVey?
-Si bueno ella no me ha dicho nada pero no se. A ver si me cuenta...
-Y me cuentas a mi que yo tengo que supervisar - dije serio.
-No seas cascarrabias, tu estas aquí conmigo...
-Cierto. Bueno ignoremos este tema.
-seguimos hablando y sonó mi móvil. Miré WhatsApp, era mi hermana
Vibs:
Te he puesto un preservativo en el bolsillo derecho del pantalón. De nada. Xx
Yo:
Dudo que lo utilice pero...gracias.
-¿Quien es?
-Mi hermana...es tonta.
-Pobre en realidad la quiero pero...si un poco tonta si que es - reímos.
La ayude a recoger los platos y se sentó en la encimera. Yo me puse en frente de ella y la besé.
-¿A donde llegará todo esto Brad?
-No lo se. No me importa. No tenemos por que tener una etiqueta.
-¿No quieres una relación?
-Quiero probar y ver como vamos.
-Ya yo igual, no me gusta ir rápido. -ahora me besaba ella. Mucho. Me mordió el labio y los besos se hicieron más profundos. La cogi de la cintura mientras la besaba.-nos separamos por falta de aire. Estaba roja al igual que yo. Nos miramos.
La besé otra vez. Capture su labio inferior y lo mordí, y lo chupe, y lo volví a morder. Era tan adictivo.
La cogi en brazos, enrollo sus piernas en mi cintura y comenzamos a andar pero sin dejar de besarnos. Ella me tocaba el pelo, y yo le acariciaba la espalda. Esto era el paraíso.
Llegamos a su habitacion y la estire en la cama. Pensé en lo pervertido que era esto.
-Tranquila no vamos a hacer nada.-me miró.
-¿Tu...no quieres?-me miró triste y supe que haría cualquier cosa por verla feliz. Ella fue la primera en enamorarme. ¿Por que no la primera en probarme?
-Si quiero, pero solo si tu me das permiso. -estaba encima suyo. Esto era tan íntimo. La verdad es que estaba bastante excitado pero no quería que lo notara.
-No quiero que otro sea el primero.-me dijo seria. Sin duda la besé de nuevo. Y me separé. Comencé a besarle la mandíbula y después el cuello, así llegue a su oreja.
-Te quiero - dije sincero. Cogi su camisa por abajo y metí mis manos en su abdomen. La volví a besar mientras acariciaba este. Roce mi nariz con la suya.
-¿Puedo?-pregunté cogiendo su camisa. Asintió y en un rápido movimiento me deshice de ella tirandole a algún rincón de la habitación. Besé su cuello de nuevo y fui bajando hasta donde tenía mis manos puestas en su abdomen. Entonces ella se incorporó y me cogio por el cuello. Me beso muy profundamente y deslizó sus manos por mi camisa. Desabrochandola. Le temblaban las manos.
-Tranquila, no tenemos prisa, te juro que te voy a cuidar.-le susurré mirándola a los ojos.
-Gracias.-me dijo sincera. Y entonces me beso el pecho. Fue rozando mi torso con sus uñas, yo acabe de quitarme la camisa. Ella llego al botón de mi pantalón.
-¿Puedo?-ahora ella pedía permiso. Yo asentí. Estaba muy caliente. Era algo vulgar decirlo así pero esta chica me ponía a 100.
Me desabrocho el pantalón con cuidado y yo los tire a otro rincón de la habitación. Ahora ambos estábamos de rodillas en la cama. La cogi de las mejillas y la besé profundamente. Ella me acariciaba el pelo con sus uñas. Introduje mi lengua aun más y ella soltó un gemido.
Baje mis manos por su espalda hasta la goma de la falda.
-Puedes quitármela.-No dude y le baje la falda. Ella se la acabo de quitar y la tiro lejos. Me cogio del cuello y nos hizo caer en la cama. Me coloqué entre sus piernas y la besé desenfrenadamente. Ella gemía y decidí besar su cuello de nuevo. Después de unos cuantos besos lo mordí y hice un camino de chupetes hasta llegar a sus pechos. Nos incorporamos de nuevo. Ella no paraba de gemir y eso me encantaba, me volvía loco. Toqué su pecho derecho por encima y baje el tirante del sujetador. Besé su hombro bajando el tirante cada vez más. Ella misma echo las manos hacia atrás y se desabrocho el sujetador. Cogi ambos tirantes mientras seguía besando su hombro derecho y cuando se lo quite de encima cogi sus pechos. Sin más rodeos besé su pecho derecho y mordí su pezon. Note como mi miembro empezaba a chocarse contra los calzoncillos. Me dirigí a su pecho izquierdo y lo besé. La miré mientras lo hacía y ella se mordía el labio inferior. Sus ojos estaban llenos de deseo. Deje su pecho para besarla de nuevo, y entonces ella puso sus manos en mi abdomen. Su mano derecha fue bajando, y bajando hasta tocar mi miembro. Lo masajeaba suavemente
-Dios Andy.-dije con la voz entrecortada intentando calmar mi respiración.
-Lo siento - me miró muy sonrojada, parecía tan inocente. Sonreí.
-No lo sientas, sigue.- Y cogio la goma de mis calzoncillos. Los bajó y yo acabé deshaciendome de ellos. Ella me miró a los ojos. Sabía que no quería ser descarada. La besé otra vez mientras bajaba mis manos hacia su trasero. Me sentia algo pervertido, pero quería disfrutar de esto. Cogi la goma de la última prenda que ella llevaba encima.
-Puedes. -me dijo alentandome a quitársela. Las bajé y ella las tiro a otro rincón de la habitación. La miré a los ojos. Estábamos sudando, pero esto no acababa aquí.
La besé tiernamente y cuando nos separamos decidí mirarla de arriba arriba a abajo. Sonreí. Ella me miró algo sonrojada y cerró sus ojos algo triste.
-Eres preciosa. Incluso más de lo que haya podido imaginar.-mordió su labio y abrió los ojos de nuevo.
-Tu eres...bastante grande...y- la cogi de las mejillas y puse mi pulgar sobre sus labios.
-No tengas miedo por favor iré despacio. Pero si tu no puedes frenare...¿Vale?-asintió con la cabeza. Recordé que el preservativo estaba en mis pantalones y me levante rápidamente a cogerlo. Lo abrí y me lo puse despacio. Llegué a la cama de nuevo y nos estiramos. Me puse sobre ella. Comencé a besar sus pechos de nuevo. La verdad es que tenia unos pechos grandes. Baje mi mano hasta llegar a su feminidad. La acaricie un poco. Yo no tenía mucha experiencia en esto lo único que había visto eran videos porno por Internet. Pero claro esto era serio. Olvide ese pensamiento estúpido. Fui despacio, y bajé mi mano. La acaricie cada vez más fuerte. La miré. Ella me miraba también. Ambos ardíamos. Seguí masajeando y ella gimió. Puse mi mano más abajo y seguí masajeando, ella gimió fuerte. Besé su feminidad y después su abdomen. Subí hasta su pecho y besé sus labios. Me puse entre sus piernas y roce un poco mi miembro con su feminidad. Ambos gemimos. Fui despacio y la besé de nuevo. Cogi sus manos y las entrelacé con las mías.
-Te quiero Andy - dije en un susurro.
-Yo también te quiero Brad.-respondió.
Me introduje en ella poco a poco. Ella apretó mis manos muy fuertemente y paré.
-¿Estás bien cielo?
-Si si, sigue.
-Introduje un poco más y ella gritó. Pare de nuevo.
-No te quiero hacer daño.-la miré.
-Tu besame.
-La besé y introduje todo mi miembro. Ella gritó y vi como una lágrima caía por su mejilla. La cogi de las mejillas.
-¿Quieres que pare? -cuando me di cuenta yo también tenía lágrimas en los ojos. Le estaba haciendo daño.
-Que no cielo sigue, puedo aguantar.- la acabe de embestir y saqué mi miembro. Otra lágrima cayó por su mejilla. La besé y introduje lentamente mi miembro otra vez. Ella ahogo un grito. Otra lágrima cayó.
-No puedo verte así - le susurré.
-Cada vez duele menos. Sigue Brad.-dijo cogiendome de las manos otra vez.
La volví a embestir otra vez, y otra. Ella se calmo y limpie sus lágrimas. La volví a besar y la embestí de nuevo. Yo ardía de placer. Ella parecía estar cada vez más cómoda. La embestí una vez. Y otra. Y otra más. Lentamente. Solté un gemido. Esto era el paraíso. La mire y se mordía el labio.
Pare un momento.
-Brad sigue.
-Pero...
-Que sigas.- la embestí de nuevo y empecé a hacerlo fuerte. Ella se contrajo. Y gimió fuerte. Y yo gemi fuerte. Sentí como llegaba. La besé y la seguí embistiendo fuerte. Una embestida. Y otra y otra más. Sentí como llegaba al paraíso. Me contraje y sentí como un líquido salia de mi. Genial muy fuerte. Ella me beso. Sabía que no había llegado y empecé al moverme de nuevo. Una embestida más. Y otra más fuerte. Ella gimió muy fuerte. Me cogio de las manos. La embestí por última vez y sentí como su líquido salia. Ambos estábamos extasiados. Sudando. Viviendo un momento único. Me tumbe encima suyo y la besé. Saque mi preservativo. Le hice un nudo y lo tire en la basura de su habitación. Volví a estirarme encima suyo.
-Me alegro tanto de que hayas sido el primero - sonrió.
-Y yo me alegro de haberlo sido.-Espero ser el último también.
-Te quiero Brad.
-Yo más Andy.-besé su frente y se acoplo en mi pecho. Sentí como poco a poco se quedaba dormida. Y yo junto a ella. Sentí que no había nada que no pudiéramos hacer.