Hitoshi tenía razón.
Shouto no podía respirar. El pelimorado iba en la moto unos metros más adelante que ellos en el auto, y Katsuki estaba haciendo su mejor esfuerzo para evitarse un choque.
Incluso si a él no le gustaba admitirlo, Shouto tenía todos los síntomas de una maldita reacción alérgica, como Hitoshi había sugerido. Cuando llegaron al hospital le hicieron vomitar información, que el pelimorado complementaba cuando él se quedaba en silencio.
Shinso había firmado los papeles del retiro de anticonceptivo, y ahora lo estaba mirando con cierta expresión que a Katsuki no le gusta.
—Nunca quise que Shoto se pusiera esa mierda, mucho menos que terminase intoxicado.
—La única forma que Shouto hiciera una tontería sin leer cinco veces las instrucciones es si Touya está de por medio.
—¿Cómo supiste que no era...?.—Consulta el ojirrojo. Lucía igual que cuando caía en celo, el olor pegajoso, los ojos caídos, el agotamiento, la piel hirviendo...
Shinso mira el techo del hospital pensando. No puede decirle nada de eso, así que lo mejor que puede hacer es actuar como un sabiondo.
—Solo sé.—Dice, mirando a otro lado.—Lo conozco de niños, creo que puedo sentir su estado de ánimo a una cuadra de distancia.
Dice mientras se estira, evitando mirarle a la cara. Aun así, él es novio de Shoto.
Sin marca, así que para la ley su relación era inexistente. Katsuki suspira pesado. Incluso si Sero fuera su alfa de clan, él tampoco podría entrar a menos que algún familiar lo metiera.
—Has estado enamorado de él desde niños, querrás decir. ¿Por qué lo dejaste?.
Shinso lo mira estático, como si lo hubiera tomado de sorpresa, pero se recompone rápidamente.
—No te incumbe.
—¿No? Has estado metiendo la nariz en mi relación desde que empezó. —Dice el cenizo.
Hitoshi lo mira inexpresivo otra vez, alzando una ceja, evidentemente sin ganas de contarle nada.
—¿La falsa o la real? Debo darte eso, al menos, fuiste más valiente que el imbécil de Izuku para contarle la verdad.—Ahora es el turno de Katsuki de verse totalmente sorprendido, porque esto quería decir que Shinso sabía del trato. —¿Vas a negármelo? No eres el único con amigos que manejan las cámaras de seguridad.
Katsuki no quería quedarse callado, pero no era mentira.
—¿En serio crees que tienes derecho a decidir por Shouto?
—No puedo, por eso sigues aquí.—Confiesa el pelimorado, girando un poco el rostro como hace Shoto cuando va a hacer una amenaza. No es novedad que Hitoshi copie manerismos del omega, era un beta antes; los betas lo hacen a diario... pero...—Vas a cometer un mínimo error y voy a asegurarme de eliminarte del camino.
Katsuki suelta una risa nasal. Esta era la cara de Shinso que él quería ver. Porque en el fondo, aunque tenga todos los manerismos de Beta, al final del día sus instintos son igual de bajos que el de un alfa. Lo que quiere decir que claramente Shinso puede competir, pero hay algo deteniéndolo de hacerlo.
—Estás tan seguro de ti mismo.—Dice Katsuki divertido. Divertido porque Hitoshi Shinso tiene un punto flojo y él acaba de encontrarlo.—Pero ni siquiera has sido capaz de confesarle que te gusta. Estoy casi seguro que eres un cobarde.
—Round one, fight.—La voz de Touya resuena a sus espaldas e Hitoshi suelta una risa forzada y tensa; casi estomacal. Seguro el pelimorado estaba pensando en golpearlo, pero tiene que mantener la estampa de niñito controlado frente a los hermanos de Shoto.
—Im not even trying to.
—Más te vale, un Hospital no es lugar para pelear.—Regaña Natsuo agarrándolo de los hombros con cariño, para sacudirlo. Entonces no fue por eso que se detuvo.—Casi recordé que tu apellido no es un adorno, lucías igualito al niñito mimado que salió de la casa de su papá para vivir en un árbol a los 12.
—Duro como un mes en ese árbol.— Dice Touya agarrando a Katsuki del hombro, seguro con intenciones de hacerlos cercanos.—Comiendo solo paltas hasta que su papi le compro la consola que quería.
Shinso rueda los ojos, y cambia de tema. —¿Cómo sigue?
—Estable, le pusieron oxígeno, pero recuperará la conciencia y verán si hay que trasladarlo, así que quédate unas horas más.—Dice Natsuo.
Unas seis horas después, la enfermera estaba bombardeando a Hitoshi con papeles por las intervenciones realizadas a Shouto. También firmó el traslado al área de tratamiento intensivo. Shouto casi se había ido en drop, por eso lo cambiarían a un área de monitoreo por al menos la noche.
Él podría entrar, porque Touya hizo a Hitoshi dejar a constancia de que Katsuki era pareja de Shoto, eso quedaría ahí hasta que el omega salga de la clínica, por otro lado, Shinso había agarrado el casco y se había largado. Touya se estaría quedando en un motel al frente para esperar.
Él puede dormir en la sala donde está Shoto, gracias al papel que firmo Shinso. Las paredes son blancas impolutas, cada camilla/nido separada por una cúpula de cristal grueso conectada a un inhibidor. Y él suspira relajado cuando ve a su omega y no tiene más esa sensación de que se va a morir si no lo marca.
Shouto abre los ojos perezosamente cuando siente el aroma de Katsuki cerca. Aún estaba cubierto hasta la cabeza, le dolía el brazo porque habían retirado el implante anticonceptivo. Sinceramente, esperaba algo así, aunque en los primeros días no sintió absolutamente nada, por eso, dejo pasar todas esas sensaciones raras desde el inicio, pero no sospecho jamás que sería eso lo que le diera esa sensación de que iba a morirse.
No fue como lo que pasaba con los supresores, no era un maldito calor adelantado; él casi tiene un Drop. Por eso lo tenían en las camillas nido, cubierto de mantas; Le trae un déjà vu estar aquí.
Se sentía realmente cansado, pero no podía dormirse, quería ver a Katsuki y su omega chillaba por el consuelo del aroma de su alfa; sobre todo porque se sentía como un mal omega por no poder satisfacer los deseos de su alfa, por no poder mantener el anticonceptivo y tener que hacer al alfa esperar más.
—Amor.—Katsuki pasa la mano por encima de su cuerpo cubierto. Su voz suave. Si Shoto pudiera moverse bien, estaría colgando en sus brazos. En lugar de eso se gira adolorido.—Está bien, no te muevas.
Shouto suelta un suspiro cuando Katsuki se mete con él a la camilla para impregnarlo. Sus manos apaciguando la tensión muscular y, volteándolo para poder abrazarlo.
El bicolor frunce el ceño cuando lo tiene de frente.
—¿Qué?— Dice el cenizo, besando su frente y su nariz y su boca después.
—¿Touya se te subió encima o como por qué hueles tanto a él?—Dice con diversión oculta el omega.—Hueles a Mango, me recuerda que estoy aquí por su culpa.
—Se me cargo en la espalda, quiere que me lleve bien con Shinso, ¿Puedes creerlo?—Dice haciendo una mueca de ofensa, que muta cuando Shoto sonríe.—¿Cómo es posible que te veas tan guapo después de casi caer en drop? El resto de omegas deben estar celosos. Mi papá va a estar celoso si le cuento.
Dice el cenizo, mirando las cortinas ser cerradas por uno de los doctores. Shouto restriega su cara en su pecho, y Katsuki se quita el aparato, el olor es clínico, pero entre las mantas puede sentir el olor desvanecido del omega.
—Me diste un gran susto.—Comenta el cenizo, con esa voz aliviada. Shoto lo mira con sus ojitos brillantes.—Dijeron que descansaras un poco y después podríamos llevarte a casa, tus hermanos se están quedando enfrente.
—Lo... siento.—Dice el omega frunciendo las cejas amenazando con llorar otra vez. Los parámetros alterándose ruidosamente a su espalda, y Katsuki lo besa de sorpresa, una, y otra y otra vez, hasta que Shoto no tiene los ojos llorosos, besos cortitos, pero que no le permitan al omega reaccionar antes de recibir otro, hasta que solo pueda pensar en cuando va a recibir otro beso. Luego los parámetros vuelven a la normalidad.
Una de las manos del omega alcanza su boca soltando una risita cuando el doctor los observa del otro lado del cristal. Seguro revisando los parámetros de Shoto que se habían medio alterado hace unos segundos, para irse y cerrar la cortina.
—Mi omega es tan bueno, mmh.—Dice en su oreja, besando delicadamente su nuca y Shouto suspira, seguro más sensible por el estrés previo.—Tan lindo, Tan mío.
Shouto suelta un gemido cuando el lamé una línea desde su clavícula a su oreja.
—Las cosas que te haría si tu hermano no estuviera afuera, Shoto...—Confiesa el cenizo y omega suelta una risita vergonzosa. No pueden entrar, él sabe bien que podría... darle un poco de confort. Pero sabe que si hace el intento su omega puede sentirse mal por no poder mantener el anticonceptivo. —Estoy seguro de que mi bebé debe estar hambriento.
Bromea, tocando el tatuaje en el abdomen del omega que lo mira con ojos pesados. El olor a berries intensificarse a un nivel más normal.—Katsuki, que no estoy embarazado.
Reclama golpeándole el pecho bastante fuerte. Bastante para alguien que seguro está medicado. —Deberías, debería tenerte embarazado solo para mí.
—No seas tonto, apenas soportas a Akihiro.—Menciona el omega. —No quiero bebes.
—Yo tampoco.—Responde el alfa. —Pero me gusta la idea de que seas solo mío.
Shouto se ríe bajito.—Soy tuyo mientras te portes bien.
—Soy el mejor en todo lo que hago.—Dice el cenizo, besando sus labios, viendo al omega sonrojarse un poco.
—Kat...