Masaru después de saber el paradero de su bebe, descansa mas tranquilo.
Aki se queda con su hermano, y durante el día siguiente se había sentado a un lado del escritorio de Aizawa dibujando sobre unas hojas, mientras el profesor pasaba las materias correspondientes.
Al terminar, Akihiro se levanto entre sonrojado y nervioso para dejarle un dibujo al bicolor. Quiere dejar en claro que ha movido el lugar que le pertenecía a Bakugo como héroe número uno de su corazón, y se lo ha dejado a Shoto, al final, Bakugo siempre será su hermano número uno.
Y si, Shoto se saltó la mirada inquisitiva de Bakugo, dándole una mirada de desprecio y autosuficiencia que le causo un tic al cenizo; es decir, Shoto podía haberlo insultado directamente, pero no lo hizo, aunque podía, y hubiera sido mucho mas Gratificante poder responderle.
Kirishima se rio fuerte una vez fue consiente de la situación. Bakugo estaba siendo rechazado de todas las maneras posibles, habidas y por haber, sin ningún tipo de consideración de por medio.
Claro, para el Cenizo esto tenía que ser un martirio. Estaba acostumbrado a jugar con omegas de manera esporádica, no era extraño que se hubiese acostumbrado a la docilidad con la que algunos omegas lo trataban.
Kirishima había comprado un helado para Akihiro en la gasolinera.
Se supone que Bakugo iría a dejarlo a casa solo, pero Masaru invito a todo su grupo de amigos, Incluidos Denki, Mina y Sero, a comer para pasar el mal rato, y claro, estos se habían acomodado en la parte de atrás sin siquiera permitirle , Denki con el niño en las piernas, que venia relajado con las feromonas omega del rubio.
Sin embargo, el menor venia observándolo con demasiada atención. Esa atención que solo ocurre cuando un niño va a preguntar algo incomodo y tu tendrás que hacerlo pasar desapercibido.
—Denki, ¿Tu nunca te enojas?.
El omega parpadeo un segundo, no esperándose la pregunta, entrecerrando los ojos de manera sospechosa..
—No, No tiene esa capacidad.—Respondió Mina por el. El niño analizo su helado como si estuviera buscando el sentido de la vida.
—¿Estas Enlazado con Sero?— Denki pestañea y responde un suave 'Si'. —¿Que es un Nudo?.
Sero escupe su Pulmón y Katsuki se giro de golpe tras escuchar eso.
—¿Quien?— Akihiro parece entender a lo que se refiere su hermano, y responde un básico..."Mitsuki"— Te lo dije, te lo dije muchas veces.
—Lo sé.—Pucherea. Katsuki aprieta la mandíbula de rabia.
—Llegamos.— Katsuki se baja encontrándose a su madre omega que rápidamente coge al niño en sus brazos y lo llena de besos. Al mismo tiempo, el hombre deja un beso en la frente de su hijo mayor. —¿La Bruja?
—En la comisaria.
—Es su culpa.
—Lo sé.— Murmura, mirando su hijo frustrado.—¿Qué planeas que haga?
El tono amargo de su madre lo reduce. Katsuki suspira complicado.
Abandonar a la alfa no estaba en el libreto. Masaru no podía abandonar a Mitsuki, menos ahora con Akihiro siendo un cachorrito problemático y alfa. Katsuki había pasado por esa edad y recuerda haber reaccionado mas duro que Aki, el había golpeado al profesor, por la misma broma del nudo, y ciertamente Akihiro era mas dulce que el, probablemente no aguantaría la separación, y por muy desagradable que fuese Mitsuki, Masaru la amaba, por sobre todas las cosas.
—Huele a Berries.— Remarca el hombre, cuando Akihiro se acomoda en su espacio.
—¡Shoto me ayudo a encontrar a Tou-chan!— Dice sonriente.— Es mi Ángel guardián.
—Shoto.— Masaru observa a su mayor. —¿El omega del que hablabas la otra vez?
La mirada del resto de sus compañeros de salón rebota en el.
—Ya te dije que le compraras supresores.— Repite Katsuki con mofa, algo nervioso.—A Akihiro le gusta ese omega.
Masaru mira a su hijo un segundo.
—Mitsuki dejo algo para ti en la mesa, no se que era, pero lo dejo ahí. — Comenta restándole importancia. —Iré a dormir a tu hermano. Hay comida en el horno, esta tibia Y por favor, No
Grites.
Katsuki deja un beso en la frente de Akihiro y Masaru camina con el niño que se despide con la manito de los demás, ya medio dormido.
El alfa decide que lo que sea que su padre le dejase, importaba menos que alimentar a la manada de intrusos presentes en su hogar, así que sirve los platos con total tranquilidad.
La mañana siguiente Katsuki se anuncia con un torbellino de pestilencia mientras Kirishima dejaba sus ropas sobre la cama para reordenarlas dentro del bolso, cuando sintió el huracán que era Bakugo Katsuki entrando a su habitación de las residencias dejando un papel sobre la cama, para luego sentarse en la pera y agarro la bola anti estrés, lanzándola con frustración hacia la pared, y sin hacerlo esperar, Kirishima tomó el grueso papel entre sus dedos para leerlo.
"...Queridos amigos y familiares..." Kirishima no quiso leer más por que había que ser tonto para no darse cuenta que era una invitación de matrimonio.
Específicamente para la Boda de Kodai Y Katsuki.
—Por la cara que traes, Shoto te volvió a decir que no.—
—Me dijo Metete tu trato por él Culo —Gestualizo. — Y después que Me deseaba un matrimonio feliz.
Él alfa se derritió sobre la pera para mirarle como cachorro regañado.
—No es tan difícil si no le gritas.— Dijo, consciente de la reacción en cadena que venía.
—¿Dices que es mi culpa?.
—Debe compararte con Kaibara de lo intenso que estás siendo. — Comenta, tras haberse topado con Tetsu en la mañana y escuchar al de pelo café hablar pura payasada del omega.
—¿De que lado estas? —Se quejo él alfa ofendido por la comparación.
—¿Existe un lado?— Consultó.— Pero si lo piensas, ambos se beneficiarían.
—Mi mamá Hizo una lista de cosas que me gustan en los omegas y Todoroki no cumple con nada, Hasta Denki cumple mejor que él IcyHot.
Kirishima se río burlesco.
—¿Qué?.
—Te gustan mentirosas, y con aires de mojigatas.— El nombre Reiko quedo impreso en su frente y el alfa de Katsuki le gruño. Kirishima le golpeo con el mismo papel para hacer a su amigo volver. —Como sea, Shoto no es lo que quieres, pero si lo que necesitas.
—Como va a ser ese pedazo de mutante desobediente una...
—Shoto no te ha dicho que si. —Indica.— Shoto no hace cosas que no quiere y contradice tu personalidad desagradable sin siquiera sudar. ¿Qué crees que hará con Mitsuki? Tu mama ni siquiera lo va a hacer arrugarse, probablemente hasta la insulte de buenas primeras.
—Yo no... Pensé en eso— Dijo suavemente. —Tienes razón.
—Voy a darte una mano...—Suspiro rendido.—Pero trata de dejar de ser un imbécil.