Capítulo 34

8.3K 643 95
                                    

*Narra _____*

Bajé a por la bandeja de Jeff y luego volví a su habitación. Le dí de cenar y posteriormente bajé la bandeja y me senté ha comer sola, ya que todos habían terminado de cenar. Cuando terminé mi cena subí nuevamente con Jeff.

—Ya es hora de que te duermas. —Le dije después de cerrar la puerta detrás de mi.

—Está bien. —Suspiró con cansancio, se acomodó mejor, se arropó y se puso su antifaz de dormir.

—Que descanses. —Susurré.

—Tu igual. —Dijo en el mismo tono que yo.

Me senté en una silla que había en frente de la cama, y esperé a que el se durmiera. Temía de que por un dolor se despertarse o algo. Una vez dormido salí de su habitación y me fuí a la mía, me puse mi pijama, me acosté y no tardé en dormirme. Estaba exhausta.

*Narra Liu*

Sonó el timbre, me aseé y dejé pasar a Eyeless, volvió a sonar el timbre y bajamos al comedor. Yo me senté solo ya que _____ se tenía que quedar cuidando a Jeff.

Verla a partir de ahora se me hará muy difícil, Jeff le absorberá todo el tiempo. Por que el es así. Absorbente, cuando quiere a una persona la quiere únicamente para el, sin compartirla, las 24 horas todos los días.

Suspire con derrota, y me concentré en tomarme mi desayudo con cierto aburrimiento y tristeza. Después de haberme terminado el desayuno entré a clase y Slenderman empezó ha explicar.

(...)

Sonó el timbre y me fui al recreo, me senté donde me solía sentar con _____. No dejo de pensar en ella, se acerca el fin de semana y ella estará a solas con Jeff. Lo peor es que sé que Jeff no dejará pasar esta oportunidad y pasarán varios días juntos, quizás una o dos semanas.

Y lo peor de todo, es que yo no puedo hacer nada. No puedo reclamarle que pase más tiempo conmigo, y no con el, ni que me preste algo más de atención por que me sienta solo y vacío. Suena demasiado egoísta, lo sé, pero me gustaría que sin siquiera decírselo ella lo hiciera. El poco tiempo que llevamos estando juntos como amigos, ha conseguido llenarme, y le cogí el cariño con mucha rapidez, tanta que le sorprendió a mi mismo y me negué ha aceptar mis sentimientos.

Abandoné todos los pensamientos cuando se vieron interrumpidos por el timbre que anunciaba la vuelta a la clase. Entré y me senté de nuevo en mi sitio con algo de pereza.

*Narra _____*

Ya era casi la hora de almorzar, pero como Jeff debía descansar pensé que sería buena idea dejarle dormir hasta que se despertara... Mala idea, iba ha sonar el timbre para almorzar y el seguía dormido.

—Vamos Jeff, despierta, ya es la hora de almorzar. —Dije con voz suave.

—Un ratito más... —Dijo con un tono de voz adormilado.

—Levantate... —Le ordené otra vez con suavidad.

—Un poquito más... —Se acurrucó en las sábanas.

—¡Que te levantes! —Subí mi tono de voz dejando todo rastro de suavidad en el de lado y golpeándolo con una almuada.

—Voy, voy. —Dijo incorporándose y quitándose el antifaz.

No pude aguantar soltar una carcajada al verlo recién levantado mientras se quitaba el antifaz.

—¿Qué es tán gracioso? —Preguntó sin entender el motivo de mi risa.

—Verte con antifaz para dormir y unos pelos alborotados.

—No es gracioso, me fastidia mucho no tener parpados. Y mi pelo está sensualmente alborotado. —Me fulminó con la mirada.

—Pobresito. —Hice un puchero. — Y... ¿Estás mejor? —Pregunté observando su torso.

—Sí, por lo menos mejor que ayer —Suspiró. —¿Y tu? —Preguntó mirando mi estómago.

—Sí, estoy mejor.

—¿Tienes moretones? —Preguntó mientras me subía un poco la sudadera.

—Sí. —Respondí mientras golpeaba su mano para que no subiera más la sudadera.

—¡Auch! —Se quejó. —¿Por qué has hecho eso?

—Por que me estabas subiendo la sudadera, y la única que se la puede subir soy yo. —Dije obvia.

—Vale, vale. —Levantó las manos en señal de rendición. —Que gruñona estás por la mañana.

—¿Por la mañana? —Elevé una ceja. —Si ya es casi la hora del almuerzo.

—¿Enserio? —Se sorprendió un poco.

—Sí, te lo dije antes, pero tu solo decías: "un poquito más..." —Traté de emitar su voz adormilada.

—Más que parecer una voz adormilada pareciera que estás drogada. —Se burló de mi mientras con su mano tiraba de mi mejilla.

Después de bromear un poco más con Jeff bajé a por el almuerzo de el y subí a su habitación.

—¿Crees que ya puedes comer solo? —Le pregunté poniendo la bandeja sobre sus piernas.

—No, dame de comer. —Dijo como un niño pequeño.

—Infantil...

—Gruñona...

—Calla y come. —Dije metiéndole una cuchara con comida en la boca.

Terminé de darle de comer a Jeff, y bajé al comedor, dejé la bandeja su bandeja y me cogí una. Me senté y empecé a comerme el almuerzo.

Me terminé el almuerzo y me dirigí otra vez a la habitación del azabache. Me senté en su cama, al lado de el.

—Jeff, ¿Te ocurre algo? —Pregunté notando que estaba pensativo.

—Eh... No, nada. —Respondió saliendo de su trance.

*Narra Jeff*

_____ interrumpió mis pensamientos, pero me volví a quedar pensando sin poder evitarlo.

Creo que no estoy aprovechando al máximo mi oportunidad, Liu tiene más ventaja que yo, por que el ha pasado más tiempo con ella, es su mejor amigo y le tiene más confianza. Debo actuar más rápido... ¿Pero cómo?

—¿Jeff? —Ella intentó volver ha sacarme de mis pensamientos, preocupada.

—No es nada. —Le sonreí tiernamente mientras le acariciaba la mejilla. Vi un leve sonrojo en ella.

Sí, justo así es lo que debo hacer.

Amor de la infancia (Jeff, Liu y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora