69.

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—Russie, lamento llamar de la nada.

—Can —sonrío emocionado—. ¿Cómo es...?

—Necesito tu ayuda... —sonó alterada—. ¿Podrías venir por mí, por favor?

—Claro... Dónde...

—Estoy detenida —Canadá soltó una risita nerviosa—. No le digas a Ame, por favor.

Rusia se quedó en silencio un momento antes de decir.

—¿Y qué hiciste?

—Bueno... Intentaron asaltarme y...

—¡¿Estás bien?!

—Sí. Solo me asusté y reaccioné... y le rompí la nariz al ladrón... ¡Estaba asustada! —se excusó—. Y ahora creen que yo fui la agresora... Russie, por favor, ayúdame.

—Voy para allá.

Y cuando tomó los datos y colgó, no pudo evitar soltar una carcajada.

Pobre infeliz que intentó delinquir a Canadá.

Porque era una bella señorita, de sonrisa alegre y mirada risueña..., pero tenía una fuerza brutal y certera.

—Me gusta —susurró antes de ir en auxilio de su amada.

Indispensable [Canadá x Rusia]Waar verhalen tot leven komen. Ontdek het nu