6.

1.7K 216 21
                                    


Esas grandes manos se deslizaban por sus piernas, ascendiendo en un toque cariñoso y apretándolas con deseo.

Pero tenía que reírse.

No pudo evitarlo.

—¿Qué sucede?

—Russie —Canadá soltó una risita—, no puedo hacerlo.

—¿Por qué?

—Traes un pijama de ositos —sonrió enternecido—. Es muy adorable.

—Me lo quitaré y ya.

—Pero seguiré pensando en los ositos —suspiró—. Por hoy no lo hagamos... Solo quiero un beso... Y tal vez unas mordidas.

Rusia sólo negó. No importaba. El sexo era secundario si podía dormir acurrucado junto a Canadá.

Indispensable [Canadá x Rusia]Where stories live. Discover now