Mi Propiedad [IronFrost]

Cuarto. Soliloquio.

Loki había recibido su castigo por no tener la cena lista, Tony había abusado de él, su cuerpo sucio y lleno de vomito hacían que el acto fuera más desagradable para Loki, Tony en ese momento era todo lo que Loki nunca imaginó que el mortal era; cuando Thor le preguntó a dónde era mejor llevarlo y el respondió que a la Torre Stark, Loki recordaba a un Tony vestido en traje o en su armadura, oliendo siempre a una fragancia con aroma a roble, tenía una casa bonita así que Loki supuso que Tony iba a ser igual, pero ahora que lo tenía de cerca, que estaban en la intimidad de la cama, podía verlo tal cual era, o por lo menos como era en ese momento. Tony no era menos desagradable que muchos otros que abusaron de él, tal vez ahora no estaba en su mejor forma y eso ayudaba bastante a que su imagen fuera tan poco agradable a la vista, lleno de sudor, vomito y otros fluidos de los cuales Loki no tenía idea de su procedencia.

Tony no fue nada compasivo o amable con Loki, lo usó para lo que sabía que era su función, Loki no puso ninguna resistencia, sería estúpido y doloroso intentarlo, sabía que estaba ahí para servirle a su amo, después de todo Tony no estaba siendo tan agresivo ni tan "malo" como se podía ser, el dolor y la repulsión que Loki estaba sintiendo no era nada comparada con el dolor que el anillo le podía causar si se resistía a obedecer. Tony parecía no iba a durar mucho, Loki quiso atribuir todos esos rasgos negativos y desagradables al alcohol, se negaba a pensar que esa era la naturalidad de Tony. Después de algunos minutos el mortal se quedó dormido dentro de Loki, el dios sentía ese dolor punzante en su trasero, Tony no había dicho nada sobre si se podía retirar de ahí o no, así que simplemente se quedó, por lo menos iba a poder "dormir" sobre una cama por primera vez en mucho tiempo.

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Las madrugadas de invierno eran duras, y más en una torre tan grande como lo era la de Stark, todo ese espacio vacío, sin nadie quién estuviera ahí, la enorme habitación lucía desoladora, muebles blancos y espacios enormes hacían que el lugar luciera como una cárcel para enfermos mentales, el Dios estaba a punto de ser uno si seguía con esa vida. Loki despertó porque Tony salió de él entre sueños, sintió como un golpe en su espalda lo empujaba fuera de la cama y su cabeza golpeaba el frio mármol de la habitación, después, todo comenzó a obscurecerse.

Cuando Loki recobró el conocimiento, estaba en un lugar diferente, todo en tonalidades blancas y ese frio que calaba en sus huesos, su cuerpo había pasado a ser el claro ejemplo de la desnutrición. Estaba sobre una cama y con una sabana cubriendo su cuerpo, se estremeció al darse cuenta de lo que estaba pasando, estaba usando un mueble, específicamente una cama, iba en contra de las normas que Tony le había dado desde un principio, el anillo comenzó a arder de nuevo en su dedo e inmediatamente se lanzó al piso, tenía una bata de hospital ¿En qué momento había pasado todo esto? De nuevo ese frio piso bajo su cuerpo. Su pasado no era el que alguien podría desear, siempre abusado por otros, comenzando por su padre, y ahora por un mortal, cada vez que Loki creía que no podía estar más en el fondo de la miseria, encontraba una nueva forma de ser humillado, perdiendo todo lo que había construido hasta ese momento, dejando que alguien más de nuevo pisoteara sobre él y dejara que sus esperanzas cayeran en un agujero sin fondo; después de todo eso, cuando no le quedaba nada más que su consciencia, después que su cuerpo ya no le perteneciera y sólo tuviera sus pensamientos, hacía lo único que podía hacer, dejar todo atrás y volver a comenzar.

- Vaya vista. - La voz de Tony entró por los oídos de Loki e hizo que vinieran a su mente flashbacks de todo lo que había pasado anoche, la manera en que Tony lo había tratado, el hecho de que ahora pudiera verle el trasero bajo la bata era lo menos importante. Loki se levantó rápidamente e inclinó la cabeza frente a Tony. -Buenos días, señor. - Loki no sabía qué esperar, no tenía contexto alguno sobre como había llegado hasta ahí y porqué su ropa no estaba en su cuerpo, sólo recordaba haber agradecido que Tony no le hiciera el daño que pudo haberle hecho, después de eso, durmió un poco más tranquilo por estar sobre una cama.