Mi Propiedad [IronFrost]

Decimotercero. Conmiseración.

Todo comenzó, conforme me arrastraban fuera de la celda, sentía como los desniveles que había en el suelo rasgaban la piel de mi estómago y mis pernas, a dios gracias que el metal estaba frio igual que el ambiente, si hubiera sido de otra manera más partes de mi cuerpo hubieran salido lastimadas; cuando se detuvieron tomé un poco de aire, me soltaron y no sentí ningún movimiento por unos segundos, no sabía qué debería hacer ¿Moverme? ¿Actuar como si hubiera muerto? Pensar rápido no es mi actividad favorita, así que me levanté del suelo, vi las heridas que tenía, no eran graves, nada que Loki no pudiera curar, después, con un poco de miedo levanté la vista, no sabía qué esperar, otra mala idea, en cuanto mis ojos hicieron contacto visual con los ojos de una de las criaturas, estos se movieron rápidamente y vinieron por mí, me sujetaron de pies y manos y me ataron a una especie de mesa de metal, todo fue extraño para mí, sentir lo frio tocando mi cuerpo de esa manera tan repentina fue un golpe de realité, mi cerebro se concentró en la situación en la que estaba, debía de salir de ahí de alguna manera.

Una de las criaturas se acercó con lo que parecía un bisturí en una de sus manos, poco antes de que se acercaran había logrado zafar una de mis manos del amarre que tenía; en cuanto la criatura estuvo lo suficiente cerca, tomé el bisturí y lo clavé en la misma mano en que lo traía. Con movimientos torpes pero veloces logré desamarrar todas las extremidades de mi cuerpo, ese era el momento que estaba buscando, la sangre se agolpaba en mi cabeza y hacía que todo fuera más real que como era en verdad. Comenzaron a llegar más criaturas, tomé lo que parecía una cierra, seguro ese era el artefacto que había hecho gritar a Loki cuando estuvo ahí, de alguna manera logré prenderlo y me arrojé hacía ellos, no pensé en si tenían armas o no, sólo quería salir de ahí y llevarme a Loki conmigo. Comencé a atacarlos y hacer cortes en donde quiera que pudiera, aunque su piel era gruesa el artefacto lograba atravesarla, pocos minutos después, mi cuerpo estaba lleno de sangre viscosa y azul, pero todas las criaturas habían sido mutiladas, eran tres tal vez, pero para mí se había sentido como si fuera un ejército. Estaba recordando el camino por el que me arrastraron de regreso a la celda de Loki, no podía dejarlo ahí, no podía irme sin él; cuando llegué a la entrada, Loki me miró con asombro, lo poco que sus ojos amoratados se podían abrir lo hicieron, una leve sonrisa que duró no más de dos segundos para darle lugar a un rostro de terror absoluto, después de ver su rostro asustado todo fue negro nuevamente.

Abrí mis ojos y lo primero que vi fue el rostro de Loki ensangrentado y colgando como si su cuerpo ya no quisiera ser uno con él, estaba colgado por los brazos, su cabello escurría por su frente en mechones de sudor y sangre, intenté decirle algo para cerciorarme de que estuviera vivo pero aunque mi boca se abrió no pude emitir ningún ruido, de pronto sentí mi propia presencia, estaba igual que él, colgado por mis muñecas, arrodillados frente a frente para contemplar nuestro propio sufrimiento; sentí esos pesados golpes contra el suelo, las criaturas estaban viniendo de nuevo hasta nosotros, fingir que estaba inconsciente como Loki, me pareció la mejor alternativa para la situación, los pasos se detuvieron justo detrás de mí y escuché las respiraciones que en mis oídos parecían ser toros bramando enfurecidos, después, los vi pasar por uno de mis costados y dirigirse hasta donde estaba Loki, comenzaron a soltarlo pero sin moverlo del lugar en donde estaba, solamente lo dejaron caer de rodillas, el golpe al parecer hizo que Loki despertara, lentamente abrió sus ojos y se encontró conmigo, pude ver como su rostro se transformaba aún peor de lo que ya estaba resignación estoy seguro que esa era la palabra que Loki reflejaba en sus ojos. Las criaturas comenzaron a golpearlo en el rostro para que despertara completamente, funcionó, en un par de segundos Loki estaba completamente consciente de lo que estaba pasando, después, las criaturas se dirigieron hasta donde yo estaba y me soltaron también, intenté alguna especie de arrastre hasta donde Loki estaba y lo abracé, quería que de alguna manera sintiera un poco de amor y compañía, sabía que de los dos él estaba llevando la peor parte; la sala en la que estaban ahora era diferente a la anterior, en el techo había dos agujeros que dejaban entrar luz en el centro del lugar que era donde nosotros estábamos, todo lo demás estaba obscuro, hasta que una de las criaturas que estaba ahí encendió un interruptor y la realidad fue otra completamente diferente, toda la sala estaba repleta de artefactos extraños y que no lucían nada amigables a la vista, Loki respiró resignado al ver aquella escena, volvió a tomar aire, se sentó sobre sus rodillas y comenzó a controlar su respiración, después de unos segundos miró a Tony directo a los ojos. -Lo siento, amo, esto es mi culpa. - Tony no podía negarlo, de no ser por la intervención de Loki en su vida, posiblemente ahora estaría fumando marihuana en su oficina, pero en su lugar estaba en lo que parecía una nave espacial siendo torturado por criaturas que parecían haber sido sacadas de un libro de Lovecraft. En seguida que Loki terminó la frase, las criaturas los separaron, colgaron de nuevo a Loki y ataron las manos de Tony tras su espalda, el espectáculo estaba a punto de comenzar. Lo primero que sucedió fueron las cadenas haciéndose más cortas, como estaban colgadas del techo, conforme subían hacían que el cuerpo de Loki quedara suspendido en el aire, las criaturas se acercaron y ataron dos pesas a los tobillos de Loki, una en cada pierna, cuando soltaron el peso, Loki gritó del dolor, los grilletes de sus muñecas estaban cortando su piel por todo el peso que estaban soportando; todos los músculos de su cuerpo se marcaban bajo su piel estirada por la presión, eso parecía iba a ser castigo suficiente, pero para nada era la realidad, la criatura se acercó hasta Loki con artefacto puntiagudo en su mano, era una especie de cono de metal, media por lo menos cuarenta centímetros de la punta a la base y en esta estaba sujeto al mango de una pistola, Tony imaginó lo que iba a suceder con aquel artefacto, el espectáculo de horror que las criaturas estaban dispuestas a dar era sorprendente. La criatura que llevaba el artefacto en la mano comenzó a introducirlo en el ano de Loki, conforme este se iba introduciendo iba causando más dolor en el pelinegro por su forma cónica que se expandía, en momentos parecía que Loki iba a desmayarse por el dolor intenso que estaba sintiendo, sus fuertes gritos de dolor se convirtieron en lamentos, después en quejidos, y terminaron en sollozos reprimidos y lágrimas que se escapaban de su control; de nuevo su existencia estaba siendo dolorosa, de nuevo no tenía nada más que perder, la vida era lo único que hacía su suplicio interminable.

Mientras el mortal veía con rencor, asco y remordimiento todo lo que estaba sufriendo su amigo, intentaba soltarse de su agarre, pero todo lo que se esforzara era inútil, su mente estaba bloqueada de nuevo, no tenía opciones más que esperar a que algo nuevo sucediera, imposibilitado para ayudar, sólo quedaba observar aquel grotesco espectáculo, observar hasta que él formara parte también.

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Mientras, en la ciudad de Ny. El que alguna vez fue el grupo de héroes más poderosos del planeta, estaban en una cafetería de la ciudad, Steve, Natasha, Clint, Sam, Wanda y Visión estaban pensando cuál era la mejor opción para deshacerse de Loki y liberar a Tony del supuesto control mental que el Dios estaba ejerciendo sobre él, no era normal que Tony defendiera a Loki por sobre sus amigos, amigos que lo habían traicionado y abandonado en el hielo por proteger al asesino de sus padres, pero aun así, para Steve Rogers ese no era motivo suficiente para hacer lo que había hecho, aliarse con su archienemigo era muy bajo, incluso para los estándares que el equipo tenía de Tony. Mientras lo que quedaba de vengadores discutían cómo dividir la cuenta de 20 dólares entre 6 personas para que nadie quedara sin dinero, en la Torre Stark, el dios del trueno se hacía presente, llevaba buenas nuevas para su amigo y su hermano, confiaba ciegamente en que ambos estaban bien. Al aterrizar en la terraza como ya era costumbre en el Asgardiano, un chico de no más de 18 años estaba entrando por el ascensor que estaba del lado contrario de la sala de estar de Tony, al verse de frente, Thor levantó su mano en señal de saludo, el humano no podía creer que tenía frente a él a una deidad, a un dios mítico del que había aprendido en la escuela. - ¡Buenos días, señor Dios del Trueno! - Peter desde luego estaba nervioso de tener a ese musculo de 2 metros frente a él. - ¿Sabes en dónde está mi hermano y el hombre de acero, pequeño hombrecillo? - No, señor respondió el menor, y sin esperar más respuesta, Thor comenzó a moverse por la torre para encontrarlos, mientras Peter seguía de pie en el mismo lugar donde había visto lo que para él era algo parecido a una aparición celestial. después de unos minutos en los que Peter recordaba el momento que le había sucedido hace unos segundos, el chico siguió por varios minutos a Thor a lo largo de los pasillos de la Torre. - Yo también estoy buscando al señor Stark. - Comentó Peter intentando entablar una conversación que Thor. - ¿Eres el hijo del hombre de acero? - Preguntó Thor con tanta naturalidad como si preguntara si alguien quisiera otra galleta. - Para nada. - respondió Peter -Soy su ayudante- comentó el chico - Creí que para eso estaba Loki. - respondió Thor sin voltear a ver el muchacho. - No entiendo ¿Qué tiene que ver Loki con todo esto? - Peter ya no obtuvo respuesta, Thor ya un poco desesperado se detuvo y levantó su mirada al techo, habló tan fuerte que Peter juró que las paredes habían temblado por un momento. - ¡Heimdal, tú que todo lo ves, muéstrame qué ven los ojos del mortal Tony Stark! - Los ojos de Thor se volvieron amarillos por un segundo y después volteó a mirar a Peter con su mayora cara de seriedad - ¿Tienes poderes? - Preguntó el dios sin titubear. -Sí- respondió Peter, un segundo después estaba sobre el hombro de Thor mientras este levantaba su martillo y una luz multicolor los rodeaba desde el cielo.

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Lamento la tardanza, sé que no he sido constante con las actualizaciones, creo que ya les había explicado porqué, espero me entiendan y les gusten las partes que voy actualizando, salu2. <3