Quincuagésimo. Panacea.

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Espero no me odien, yo los quiero bastante. 

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Todo el ajetreo de la devolución de Tony y Loki a la torre ya había pasado, Thor y Peter estaban en la cocina, un simple sándwich no iba a ser suficiente para el apetito del dios, Peter se ofreció a cocinar algo para ambos; para el muchacho la torre era como su segundo hogar, podía pasearse por ahí y quedarse cuando quisiera, desde que se había encontrado con Tony, el millonario había intentado algún tipo de adopción para él, procuraba todo lo que podía atender de él, económicamente lo apoyaba bastante, y tenían la confianza de dejarlo pasear por toda la torre como si fuera su verdadero hijo. Los últimos 3 meses Peter había estado de intercambio en Londres, aparte de ser un chico bastante apuesto, era un genio en potencia, estaba pronto a ser un digno sucesor de la tecnología Stark.

Mientras Thor y Peter compartían sus alimentos, Tony estaba tomando una ducha, sentía que habían pasado años desde que había sentido agua cálida golpeando su cuerpo suavemente, dejaba que el agua limpiara sus impurezas exteriores y aclarara sus pensamientos, su cuerpo seguía lastimado, Loki sólo había curado su propio cuerpo y después se había ido a cumplir las ordenes que Tony le había dado. Cuando el hombre salió de la ducha encontró un bulto en su cama, supo de inmediato de qué se trataba.

- Sé que no estas dormido Loki, en este tiempo he logrado comprender un poco de tu retorcida y lastimada mente, pero, puedes estar tranquilo, no porque te haya llamado a dormir a mi cama significa que voy a hacerte algo malo, sé que lo hice la primera noche que pasaste aquí, pero no fue en la cama eso sí lo puedo decir. –

Un silencio incómodo se hizo después de la poco atinada broma que Tony había dicho.

- Bueno, en cualquiera de los casos ¿serías tan amable de usar tu magia para curar un poco mis heridas? – Loki se levantó de la cama y se acercó hasta Tony, el hombre estaba parado frente al espejo con una toalla atada a su cintura mientas con otra secaba su cabello.

- Claro, amo. – Loki se paró tras él, ambos podían verse en el espejo, era tan grande que se podían ver de pies a cabeza; Loki levantó sus manos y la bruma verde comenzó a aparecer para curar todas las heridas que Tony tenía en su cuerpo, la sensación era extrañamente reconfortante todo dejaba de doler y por unos segundos dejaba de sentirse también. Ninguno notó en que momento la toalla que Tony tenía atada se había deslizado dejando ver todo su cuerpo desnudo frente al espejo, a la vista de ambos hombres.

- Listo, amo. –

Loki notó en un segundo lo que estaba pasando, y enseguida dirigió su mirada hacia la entrepierna de Tony, ahora era diferente, todas las veces en que había podido observar a Tony desnudo fue en situaciones terribles para cualquiera de los dos, pero ahora la situación era calmada, ambos dirigieran su mirada a la entrepierna de Tony, no parecía que al mortal le causara molestia que Loki lo estuviera mirando, no parecía que ninguno de los dos le molestara.

- ¿Dormimos un rato, Loki? Te pedí que vinieras a mi cama porque es más cómoda que ninguna, además quiero que estemos juntos por si algo como lo de hace un rato pasa de nuevo, esta vez no van a tomarnos por sorpresa, supongo que todos merecen una noche de sueño tranquilo. –

Loki miró a Tony un poco inseguro y confundido, la última vez que había tenido que dormir en la habitación de Tony las cosas no habían salido tan bien para él, pero ahora las circunstancias eran diferentes, su amo estaba sobrio y con una completa convicción de cuidarlo. Suspiró cerró sus ojos y caminó hasta adentrarse en las suaves sabanas de la cama.

-Tranquilo, te dije que estoy arrepentido de lo que sucedió aquella vez, no sé de qué manera hacer que me perdones por aquello. –

- No hay nada que perdonar, amo. Yo estaba a su servicio al igual que ahora y usted puede hacer lo que quiera conmigo. –

- En ese caso... - El silencio después de esas palabras hicieron que Loki sintiera la sangre de su cuerpo ir hasta sus pies, después, sentir el brazo de Tony rodeando su cintura erizó todos los vellos de su cuerpo. – Vamos a dormir, necesitamos recuperar energía. –

Loki dejó escapar aire que no sabía que estaba reteniendo, cerró sus ojos y con más calma en su cuerpo intentó caer en el dulce placer del sueño, pero un último comentario de Tony lo hizo sonreír levemente. – Estuve a punto de decirte que se agradecía el calor de estar con otra persona, pero eres realmente frío, serías perfecto para el verano. –

Después de que ambos rieran un poco, lentamente se quedaron dormidos, juntos para protegerse mutuamente, para sentir la seguridad que poco a poco uno había comenzado a significar para el otro.

[...]

Otro día comenzaba, Loki como de costumbre se había levantado a las 5:00 am. Sabía sus responsabilidades y no iba a dejarlas por una noche de calor y comprensión por parte de Tony. se dirigió a su habitación, directamente al baño, lavó su cara cona agua helada para terminar de despertar, se miró en el espejo y por un segundo no se reconoció, de nuevo tenía color en su piel, de nuevo tenía grasa en esos pómulos antes cadavéricos, su pelo despeinado, ¡Su pelo despeinado! Tenía su pelo sano de nuevo, no tenía lugares calvos ni puntas disparejas, las bolsas bajo sus ojos ya no eran tan obscuras cono lo eran antes, todo parecía ir mejor ahora.

Una hora después de despertar, Loki ya había puesto la ropa en el cuarto de lavar, limpiado el piso de toda la sala de la terraza y también limpiado toda la cocina para que cuando su amo despertara a tomar una tasa de café todo luciera impecable; incluso esas tareas que consideró detestables ahora significaban rutina, y la rutina era seguridad en una mente como la de Loki, el cansancio de servir a otros ahora era parte de su cuerpo también.

Terminó de limpiar y comenzó a hacer el desayunó el pelo atado por precaución y un mandil atado a su cintura; con la ayuda de JARVIS Loki se había convertido en un gran cocinero, esperando así algún tipo de reconocimiento por parte de su amo, un simple "estuvo rica la comida" hubiera sido suficiente, pero siempre que trataba de hacer algo bien, de mejorar para agradarle a Tony, parecía que este le odiaba más, o por lo menos eso parecía hasta las ultimas 72 horas, parecía haber cambiado mucho en la relación que ambos tenían ahora.

El día que para Loki parecía iba a ser uno un poco mejor que los anteriores estaba a punto de convertirse en uno un poco peor que todos los demás, parecía que la vida de Loki iba a seguir llena de desgracias. Se escuchó la puerta de la terraza y después unos pasos secos caminar por el recién pulido mármol, Loki aún tenía las manos un poco lastimadas por los líquidos que uso. Los pasos no tenían prisa por caminar más rápido, se tomaron su tiempo para hacer que el eco sonara por todo el lugar; Loki, al escuchar ese sonido, tensó su cuerpo, pensó en esconderse, pero sería mejor ser el primer frente ante cualquier amenaza, así su amo tendría tiempo de reaccionar o huir.

- Buenos días, Loki. – La voz era profunda y sombría, pero Loki pudo identificarla de inmediato, sabía que un problema se avecinaba nuevamente.

- Buenos días, director fury. –

- No te molestes en mostrarte altivo como en tu ultima visita a la Tierra, sé de tu condición actual ¿Loki cocinando en la torre Stark? No podrías estar haciéndolo de manera voluntaria. –

- Jarvis, por favor despierta a... a... al amo Tony e infórmale de su invitado ¿Gusta una tasa de café, director? – Loki estaba quemándose por dentro, después, y por encima de todo él era un príncipe y no tenía que rebajarse a servirle a un mortal. El anillo comenzó a arder en su dedo y recordó su verdadera situación en ese momento.

- No podría tomar nada que viniera de tus manos, Loki, pero hablemos al respecto. –

[...]

Mientras en la Torre Stark estaba la inesperada visita de Fury, en otro lado de la ciudad un súper soldado antes considerado por todos, un héroe, se embriagaba en un bar de los bajos mundos, Steve sabía de esos lugares, muchas veces fue con Natasha en busca de mercancía que el gobierno y Shield se negaban a darles, o a desmantelar pequeñas bandas de narcotráfico, pero ahora, ahora él estaba consumiendo las sustancias que alguna vez prometió destruir, fraguando un plan para vengarse del hombre que lo estaba haciendo sentir así, todo mientras las incesantes cámaras de los celulares de su alrededor le tomaban fotos consumiendo drogas y las posteaban con el hashtag #CaptainAmericaIsOverParty .

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Déjenme leer sus expectativas y qué les gustaría ver en está historia. los TQM. 

Mi Propiedad [IronFrost]Where stories live. Discover now