Super Craig x Wonder Tweek

Ternura y deseo

Firkle no podía decir que aquello era una cita, al menos él no tenía intención alguna de que lo fuera, probablemente, y trataba de convencerse, de que estaba ahí con esa chica por el mero interés de conocer otras ideas, siendo como era, difícilmente perdía su tiempo hablando con palurdos conformistas, y a veces solo escuchar las cosas extrañas que decía Ike, solían volverse monótonas y predecibles.

Por otro lado, Karen estaba algo inquieta, más no nerviosa, ver al chico en su monocromático atuendo con ese aire de misterio y seriedad, sus ojos  enegrecidos por el color hollín del delineado le daban cierta intensidad a la mirada, estaba delante de una persona imposible de pasar desapercibida que causaba cierta pesadez.

En el silencio mutuo, él bebía el café como si disfrutara la experiencia del acto tan mortal, ella apretaba el asa con una mano y la otra meneaba un círculo infinito dentro del líquido caliente (probablemente ya estaba medio tibio luego de tanto agitar).

-Estas incómoda-

-Eh?! No no no, para nada-

-No lo preguntaba... Si no querías venir no tenías porque hacerlo, no voy a sentirme mal o algo por el estilo, no soy del tipo que lloriquea.

-No dije que fuera eso! Es... Es solo que estoy algo preocupada por otra cosa-

-Quieres hablar de eso?-

-Mmh.... Es mi hermano, se supone que estoy aquí para pasar tiempo con él, sin embargo está demasiado ausente, sé que trabaja y a veces solo quiere dormir, pero es distinto... Su ausencia parece más cómo, cómo si no fuera él, se comporta totalmente ajeno a mí...-

-Usa drogas u otra cosa?-

-Que? No, para nada, suele beber o fumar pero no con hábito-

-Algún trastorno mental, lesión en la cabeza o pérdida de consciencia reciente?-

- No, nada de eso, de un día a otro se volvió así-

-Considerarías que le han lavado el cerebro?-

-Si vas a burlarte de esto no me parece gracioso-

-Hablo muy en serio, hay muchas formas de lavarle el cerebro a alguien, desde hipnosis, drogas, videos o audios subliminales, adoctrinamiento o hasta brujería-

-Pero quién podría hacerle eso a Kenny? No es la persona más amable o simpática pero tampoco alguien tendría motivos para eso-

-Puede que no sepas todo sobre él, solo mira el ejemplo de tu amiga pelirroja y su hermano, ella no tenía idea hasta ese día-

Reflexionando ante eso, Karen sintió miedo y angustia, no entendía que podría haber hecho cambiar a su hermano de esa forma, si alguien estaba tratando de herirlo, en que estaba metido Kenny? Podría acabar igual que su hermano mayor hace tanto tiempo? Estaba completamente sola y apenas lo notaba, la sensación fue demasiado abrumadora causando  su llanto. Firkle fue sorprendido ante eso, había considerado las posibilidades de que el tema fuera sensible pero no de esa forma, estaba reacio al contacto físico así que apegado a su carácter circunspecto, se acercó solo un poco, ofreció un pañuelo desechable y permaneció en total silencio hasta que todo su desborde acabara.

Sintiéndose serena y desahogada, terminó de limpiar los restos de lágrimas de su rostro, se disculpo por causar tanto alboroto y sintió el bochorno irremediable cuando acertó las miradas de los demás comensales sobre ellos. Miradas curiosas y otras acusadoras, que más podrían pensar al ver a una niña llorar en compañía de un varón? Hundió su cuerpecillo deslizándose por el vinil del asiento, accidentalmente con eso su rodilla chocó contra la de Firkle, de inmediato recobró una postura recta, casi militar. Pero el joven continuaba taciturno ante cualquiera de sus arrebatos, Karen no tenía la seguridad si era su personalidad o mera indiferencia.