Acuerdo.

4.3K 576 376
                                    

Tras ver tan extraña e incómoda situación, los hermanos Mccormick pararon en un café cercano para consentir a la menor con algún postre y hablar un rato de tantas cosas. El sitio era bastante normal, pero la mayoría de clientes eran chicas, cosa que fascino a Kenny aunque algunas ni lo habían notado. Acaso existe lugar donde Kenneth Mccormick pase desapercibido? Pues tal vez las miradas las robaba el mesero que iba de un lado a otro, no estaba del todo mal sin embargo en cuanto varones, no era mucho su tipo; preferente que fuesen mas delgados y bajos.

-No es el chico que nos encontramos hace rato?- señaló Karen.

-Uh... Sí, es Tweek...- Entrecerro los ojos para verle mejor.

Tweek había regresado con su mejor cara intentando ocultar que hervía en coraje, continuaba con sus labores meditando en la mente para no tirar las mesas a la menor provocación. Pero que suerte sería la suya notar que los clientes de recién, eran precisamente los mismos que contemplaron ese penoso momento.

...Por qué a mí?, Ahora pensaran que soy un loco, NNGH! Es demasiada presión!!!....

Ahogando sus gritos internos y con la mueca forzada en neutralidad, se acercó a la pequeña mesa de aquellos dos aunque antes de pronunciar palabra alguna, el chico saludo como si fuese un conocido.

-Tweek, vaya no sabía que trabajabas aquí-. Sonrió al confundido mesero que le miraba extrañado.

-Eh .. disculpe, nos conocemos?- Miró de un lado a otro en busca de algún rostro conocido que no cuadraba en sus recuerdos.

-Ah ejem...- Aclaró la garganta. -Tal vez así me recuerdes- Utilizó el tono grave y áspero de Mysterion.

Tweek se sorprendió un poco al reconocer la inconfundible voz del encapuchado, nunca se imaginó como sería el rostro de aquel tipo bajo la máscara, se limitó a expresar un corto vocablo de entendimiento al sonar del chasquido de sus dedos.

-Entonces, ustedes tres se conocen?- Preguntó Karen a ambos al parecerle curioso que se tomarán con varios conocidos en poco tiempo.

-Amm... Algo así, digamos que el hermano de Tricia y yo tenemos el mismo trabajo y Tweek... Ah pues él...- No supo contestar al no poder mencionar a los Coon y amigos.

-Ah... La escuela, no?- Se adelantó el mesero diciendo su primer idea.

La mentira parecía algo evidente ya que Kenny era al menos seis años mayor a Tweek, se podía notar a simple vista que la escolaridad no seria una coincidencia, cayendo en cuenta de eso se miraron en busca de un pretexto que Kenneth supo improvisar, justificando que trabajo un corto periodo en la cafetería de la secundaria donde el otro estudiaba, en un lapso casi de actuación Tweek siguió el falso recuerdo citando ese tono peculiar que usaba para ser oído mejor tras el cubrebocas, de ahí que le reconociera por la voz y no la cara. No muy convencida de lo dicho, Karen, no quiso rebuscar más en el asunto que realmente no le interesaba mucho, así que se limitó a ordenar un capuccino descafeinado y cheesecake para retirarse al tocador según ella a lavarse las manos.

-Casi nos atrapa- Habló Kenny mirando detrás para asegurarse de que no estuviera cerca para oír. -Oye, viejo, aprovecho que se fue... pensaste lo de unirte?- Retomó su atención al rubio.

-Ah eso... Casi lo olvidaba... Ese idiota...- Frunció el ceño al recordar su enojo.

-Craig? Sí es un maldito, que hacías con él hace rato eh?-

Exactamente que le iba a decir, que cuido de el como niño pequeño hasta que hizo su berrinche? Eso sería muy extraño y complicado de explicar, sacudiendo la cabeza intentando evadir el tema simplemente contesto que era historia para otro dia, lo relevante era ahora precisamente su intención para unirse al equipo, que fue tomada con alegria por el mayor. Kenny sabiendo que le robaba tiempo de trabajo le dejo ir, no sin antes decirle que informaria de esto al Coon para realizar un junta y ciertos requerimientos entre papeleo u otras de esas cosas. Continuando en sus asuntos, Tweek miraba a los dos hermanos reir y hablar sin parar, preguntandose como hubiese sido su vida con un hermano, alguien con quien hablar de cualquier cosa, con quien pelear por tonterias pero en especial alguien que entendiese y compartiera sus problemas, que le aconsejara en momentos difíciles o mínimo escuchara en silencio y le diera un pequeño consuelo. Claro que ser hijo único tuvo las ventajas de tener toda la atención, un montón de juguetes y caprichos pero al ir creciendo se preguntaba por que sus padres no decidieron tener otro hijo, llegando a la suposición que tal vez tenían temor de que le ocurriera ya fuese lo mismo o algo parecido que a él.

Super Craig x Wonder Tweekحيث تعيش القصص. اكتشف الآن