\ 1 - 2 /

531 53 10
                                    

[🌼] ------------------- |•| ------------------- [🌼]

   —¿¡Qué!? ¿¡Por qué!? —pregunté por primera vez alterado en mi vida.

   —Te dije que te explicaría todo en la mañana, viejo. Ve a dormir ahora.

   —No. Quiero que me expliques eso: ¿qué le pasó a Freddy's? —Di un paso al frente como muestra de autoridad.

   Él me miró indignado, como si hubiese querido defender su diminuto ego. Al final cedió.

   —Después de que te explique vas a ir a dormir, ¿quedó claro?

   —De acuerdo.

   —Si quieres siéntate ahí —. Sus ojos apuraron al montón de cosas—. Esto podría tomarnos hasta la mañana.

   —¿En serio? ¿Tan grave es?

   —No —se rió—, pero es una explicación larga.

   Su actitud frívola me hacía pensar que, tal vez, el no estar en Freddy's no era tan malo después de todo. Él estaba tan tranquilo como si supiera en dónde estábamos y qué nos pasaría. Me senté sobre las cosas mientras observaba cómo él miraba al otro lado del cuarto.

   —En primer lugar, yo no tengo nombre, todos me llaman «Cupcake», así que puedes decirme Cupcake, aunque también acepto «Jefe». Como sea, yo fui creado como un juguete inteligente en diciembre, así que iba a ser un tonto regalo de navidad; lo sé, ¿quién querría un cupcake tan feo como yo para navidad? Es como un libro para un niño, ¿no crees? Bueno, eventualmente terminé en una repisa de cristal lleno de polvo, sólo viendo como los peluches al lado de mí y las muñecas salían de aquí con personas felices de tenerlos. En aquella tienda todas las cosas se vendían como en un Black Friday, y entonces comencé a pensar que estaría ahí el resto de mi asquerosa vida.

   »Cuando quedé solo yo, junto con algunos otros juguetes rotos y perdidos entre los estantes de metal, alguien me puso dentro de una caja: tenía un plato, galletas, listones y cascabeles. Ese fue el día en que me di cuenta que no toda mi vida valdría para pura verga.

   »Escuché a algunos trabajadores de la agencia de envíos que llevarían mi caja a «Freddy Fazbear's Pizza», así que no tenía ni puta idea de qué esperar; ¿niños? Tal vez sí, o tal vez no. Me decoraron como bota navideña, por cierto. Cuando mi caja se volvió a abrir, los conocí a todos ustedes: Freddy, Bonnie, Chica y Foxy. Claro que, cuando me sacaron por primera vez de esa caja, yo no sabía sus nombres, sólo me parecieron buenos tipos por ser robots como yo. Después de eso tomaron su foto de navidad.

   »Pensé que iba a volver a ser abandonado en una caja de liquidación en el fondo de una tienda de juguetes, ya que después de que la foto fue tomada, Chica me arrojó a una caja con maquillaje y más cosas de viejas; ¿ves cómo todos me tiran siempre? Ese mismo día grité, y ella me conoció entonces. No fue fácil: ella pensó que se había vuelto loca o que yo era una ilusión. Después de que le expliqué todo acerca de mi vida, nos volvimos amigos; y ¿como no?, ella es más macha que yo. —Rió mientras sacaba más nubes de humo—. Bueno, ella me dijo que no quería que todos ustedes me conocieran porque quería tener un amigo a quien confiarle varios de sus más profundos secretos; al parecer sólo compartía noches de sexo con Foxy, mas no palabras o anécdotas ridículas. Estuve de acuerdo con ella, así que pasé los últimos días de Freddy's en el cuarto de Chica escondido. Fui testigo de la vez que ese pendejo…, ¿cuál era su nombre? ¿Springtrap? Bueno, cuando él destruyó el restaurante, cuando todos estuvieron preocupados por ti cuando estuviste enfermo…

   —¿Estuve enfermo? —pregunté sorprendido.

   —Sí, los detalles llegarán después.

La margarita IIWhere stories live. Discover now