Cap.26 "Serás mia".

Start from the beginning
                                    

Volvió con dos vasos y bebí de uno de ellos, sintiendo el alcohol que me quemaba la garganta, pero tenía un gusto a frambuesa que lo hizo más leve.

Media hora más tarde luego de que me terminara mi tercer vaso al igual que Luka, ya estaba aburrida. El alcohol me había subido el ánimo pero no me gustaba demasiado la música que estaba sonando. Luka parecía disfrutarla pero no sabía cómo involucrarme.

Cuando salí del baño, pasé por donde Becky estaba y toqué su hombro, interrumpiendo su beso con Holden. Le dije que ya me volvía para la residencia, que no tenía ánimos para estar aquí. Ella asintió pidiéndome que tenga cuidado, mientras que Holden accedió a acompañarme a casa. Lo agradecí pero no quería arruinarles la noche, mañana nos iríamos y no quería que se estropeara por mi. Así que les dije que estaría bien y me fui de allí.

—Creo que ya voy a volver a la residencia —le dije a Luka, tomando lo que quedaba de mi tercer vaso.

—Vamos entonces —dijo tomando mi mano.

—No quiero que te vayas si te estás divirtiendo. En serio puedo volver sola —lo detuve pero el continuó caminando hacia la salida.

—¿Y perderme la oportunidad de pasar un tiempo contigo a solas? Claro que no —dijo guiñándome un ojo mientras paraba un taxi y sonreí.

En diez minutos ya estábamos entrando a la residencia. Zigzagueamos juntos mientras entrábamos. Casi tropecé con los zapatos pero él me atrapó a tiempo y allí explotamos en risas.

—Mierda, mi estómago —dije sintiendo que todo se revolvía. Solo había bebido tres vasos pero dejé de sentir que era fuerte.

—Recuéstate en el sofá. Te traeré agua —me hizo saber y me dejé caer como el me pidió.

Cerré mis ojos, sintiendo un poco de sueño. Cuando algo tiró de mi pie y noté que Luka intentaba sacarme los zapatos de Becky.

Me reí cuando se tambaleó hacia atrás, soltándolos sin querer. Él se rio de sí mismo y negó con la cabeza para intentar otra vez.

—Yo... puedo... hacerlo —dijo tirando de mi zapato mientras me seguía riendo.

Su fuerza le jugó en contra y terminó cayendo sobre mi. Nuestros rostros quedaron a centímetros del otro. Su mirada vagaba por mis labios hacia mis ojos y otra vez lo mismo. Sentí la garganta seca de pronto y no pude evitar tragar saliva. Él lo notó y sonrió.

—Menos mal que no te pongo nerviosa o no podré hacer esto —susurró acercándose más a mi.

Sus labios rozaron los míos, casi pidiendo permiso para besarme. Lo concedí al instante, extrañando la sensación que se sentía tener un cuerpo tan cerca del mío. Concedí permiso a su lengua y dejé que me besara.

—Eres tan sexy —dijo la voz de Atlas.

Abrí los ojos para verlo frente a mi, sobre mi. Parpadeé varias veces, sabiendo que esta vez no estaba soñando. Estaba despierta. Él volvió a besarme mientras se movía sobre mi, frotando su cuerpo con el mío.

—¿Quieres ir a mi cuarto? —susurró Atlas en mi oído y me estremecí debajo de su cuerpo.

—Si —respondí abriendo los ojos, para encontrar a Luka frente a mi—. Quiero decir, no. —Me miró extrañado. —Yo... Si pero no tenemos que hacer nada. 

—¿Estás bien? —preguntó riéndose un poco de mi extraño episodio y negué con la cabeza, riéndome nerviosa.

—Lo siento, el alcohol —mentí tomándome la cabeza.

—Lo entiendo Zoey. Estás enamorada de alguien imposible para ti o aún no superas a tu ex novio.

Bueno, ambas son correctas, así que tienes un diez de diez. Que alumno aplicado, Luka.

Nosotros ante todoWhere stories live. Discover now