Héroe Mítico

Capítulo 41: Consecuencias

Un recordatorio para los lectores exclusivos de FFnet para que consulten el hilo de la historia en el foro de Spacebattles. Puede encontrar omakes escritos por mí y por otros lectores para disfrutar más. El fic también tiene páginas de tvtropes que puedes usar para encontrar el hilo directamente.

Capítulo 41: A la siguiente etapa

Gina Gwen dejó escapar un suave gemido cuando abrió los ojos y miró a su alrededor.

"¿Esta es mi habitación?"

En lugar de una habitación espartana forrada de piedra, estaba en una habitación pequeña pero cómoda de madera y yeso decorada con cosas que a cualquier niña de diez años le encantaría. Libros de cuentos, cancioneros, peluches y dagas ceremoniales.

Bueno, cosas que a una amazona de diez años le encantaría de todos modos.

"Yo, Bella Durmiente."

Los ojos de Gina se posaron a los pies de la cama donde estaba sentado el pelirrojo Smith de Hestia con lo que parecía un kit de costura a su lado.

"¿Welf?" Preguntó Gina mientras trataba de sentarse, el miedo se acumulaba lentamente en su pecho. "... ¿Por qué no puedo sentir mi brazo?"

"Ah, eso es porque estás tomando como un millón de analgésicos", dijo Welf mientras se acercaba y colocaba una mano en su hombro derecho para mantenerla quieta. "Mágico y normal".

Gina siguió su mano y vio que su brazo estaba envuelto en un yeso y estaba fuertemente atado a su pecho para evitar que lo moviera. Y así, toda la tensión salió de ella como un globo goteando.

"Lancer dijo que tu brazo se curará bien, pero tomará algunas semanas", continuó Welf mientras Gina pasaba una mano por su brazo para asegurarse de que todavía estaba allí. "Jackie y Primo también estaban aquí, pero se quedaron dormidos, así que Lancer los llevó de regreso a sus habitaciones. Bell, Lil'ly y Emmy también querían quedarse, pero se quedaron un poco clonados en el momento en que regresamos, así que Rider los acostó antes de irse. a la cocina. Fia todavía está aquí, pero acaba de salir ".

Welf indicó a la arpía que tenía una pierna enyesada mientras dormía profundamente con la espalda contra la pared.

"Entonces ... ¿estamos de vuelta en casa?" Preguntó Gina mientras Welf la hacía recostarse suavemente y le levantaba la manta. "¿Nosotros... ganamos?"

"Duh", respondió Welf sin rodeos, como si se sintiera insultado de que ella pudiera haber pensado lo contrario, haciéndola sonreír. "De todos modos, solo estoy aquí porque estoy acostumbrado a quedarme despierto toda la noche trabajando en cosas y para asegurarme de que no te despiertes solo".

"Gracias, Welf ..." respondió Gina con sinceridad. Ella apreciaba su sentimiento.

"Puedes agradecerme mirando los diseños de armaduras que voy a hacer para ti a partir de mañana", dijo Welf, alborotando su cabello. "Sé que Amazoness no suele usarlos, pero voy a tener que insistir en esto".

"Bien ..." Gina asintió a regañadientes mientras se frotaba el hombro con la mano libre. "¿En qué estabas trabajando allí?"

"Jaja ... bueno, quería agregar algunas cosas interesantes, pero supongo que no estaría de más mostrarte lo que tengo ahora".

Welf volvió al lugar del suelo donde había estado sentado y recogió un trozo de tela.

"¡Ta-dah! ¡Uno nuevo para tu colección!"

Fue un osito de peluche. Su pelaje era de un color marrón claro y llevaba un quitón amarillo sobre su cuerpo sujeto por un cinturón con tres pequeñas gemas insertadas. También tenía un pequeño garrote en una de sus manos y una daga roja en una pequeña funda alrededor de su cintura.