Imposible (Larriet Stylinson)

Epílogo

Tres años después

-Tenemos algo que anunciarles –dice Nidia entusiasmada, toma la mano de Larissa y ambas gritan – ¡Vamos a casarnos! –wow felicidades chicas –dice Lirmary abrazándolas a ambas –eh cuidado y aplastas al bebé –molesta Nidia –Si, no quiero que deformes a mi sobrino –dice Larissa –ven acá Louise comparte el amor –ve, yo detengo a Ángela  –dijo Lirmary tomando a la pequeña en sus manos mientras Louise abrazaba a las prometidas.

Harriet siempre quiso tener una niña llamada Ángela, Louise nunca entendió cuál era su trauma con ese nombre pero al final le terminó gustando. La pequeña tiene 6 meses ahora, Louise la adoptó cuando tenía 3. La niña era justo como Harriet decía que soñaba a su hija: blanca pero no mucho, con ojos entre miel y verde, rizada como ella pero con las facciones de Louise, de echo de verdad parecía que la niña fuera hija biológica de ellas dos, aunque claro que eso era imposible. – ¿Cómo está mi niña? ¿Tienes sueño Ángela? –La bebé respondió con un bostezo –bueno hora de acostarse señorita –dijo Louise llevándosela a la cuna –Buenas noches mi amor –dijo acostándola y dándole su beso de buenas noches.

Fue a su habitación pero no se durmió, algo le decía que esta iba a ser una de esas noches en las que no podría dejar de pensar en Harriet. Nunca volvió a verla, nunca supo nada de ella porque Gemma fue obligada a trasladarse a Liverpool donde estaba el hospital central, luego de dos meses cambió su teléfono y perdió contacto con ella.

Una vez su madre le preguntó que respondería Louise cuando Ángela preguntara por su padre, Louise respondió “Le diré que ella tiene dos madres, una soy yo y la otra la cuida desde el cielo” Sabe que es muy probable que Harriet no sobreviviera pero aún le queda un poco de esperanza de que Harriet está viva y que algún día volverá a verla, le presentará a su hija y por fin se casarán. –Te extraño tanto Hazz –dice y empieza a llorar, ya no finge ser fuerte, ya no finge ser fría, ahora es solo ella, y a ella le duele lo que pasó.

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Zayn despierta a Lirmary con el desayuno en la cama. Se casaron hace seis meses y ahora están esperando un niño, están felices porque al fin van a tener la familia que tanto querían. –Buenos días amor –le dice poniendo la charola en la mesa de noche –Que lindos buenos días –dice Lirmary aun con algo de sueño –Huele bien, felicidades por no quemar el agua esta vez –eso solo pasó dos veces –responde Zayn defendiéndose –Cinco veces –dice Lirmary haciendo que Zayn ponga cara triste –Pero estas mejorando, y eso no quita que eres el mejor esposo del mundo y que vas a ser el padre más lindo de la historia –gracias amor –dice dándole un beso.

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Los fines de semana Louise siempre salía al parque con Ángela, le encantaba ir y caminar con su niña en brazos. En el parque siempre hay mariposas monarca, las favoritas de Harriet, a la niña le encanta verlas volar y a Louise le encantan porque es como si Harriet las mandara a vigilar a su niña –¿Te encanta verdad chiquita? –Dice Louise y la bebé sonríe –Lo sé, a tu mami también –le dijo dándole un beso en la frente.

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Hoy es un día ocupado, tiene que llegar a las 6 al laboratorio y ya solo tiene 15 minutos. Claro que no tiene miedo de ser despedida, ella es la jefa, pero aun así debe ser el ejemplo para los demás. Llega justo a las seis y entra pretendiendo que no estaba corriendo minutos antes.

Están trabajando muy duro en un proyecto para una empresa millonaria que quiere un eco-edificio así que todos están más que nerviosos y Louise, más que estresada. Siempre fue su sueño tener su propio laboratorio, y aun hoy no cree que lo haya logrado, sabe que a veces se estrés demasiado, pero vale la pena, porque poco a poco está cambiando al mundo, como solía decir Harriet.

-Disculpe Ing. Tomlinson, alguien la busca en el primer piso –Díganle que deje un mensaje o si viene a entregar algo que se lo dé a Joe –Creo que este es un paquete muy personal como para que alguien más vaya por él –dice Clara, una de la secretaria de Louise –Esta bien, bajo en 5 minutos –dice Louise. Baja sin mucho ánimo y un poco de enojo porque en estos días no tiene mucho tiempo para perder. Se abren las puertas del ascensor y va directo al escritorio de Clara -¿Qué es lo que tengo que recoger? –pregunta Louise apurada, Clara le entrega una pequeña caja y Louise la abre sin mayor emoción, es el anillo. Es SU anillo. Pero eso es imposible, voltea y hay algo aún más  imposible atrás.

-Hola Louise –dice Harriet.

No es imposible, es perfecto.

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Gracias a todos por leer y por comentar <3