Imposible (Larriet Stylinson)

Capítulo 10

-Hey, despierta Nidia ¿sigues viva? –dice Larissa tratando de despertarla –mmmm –dice Nidia abriendo los ojos –ahora ya sabes por qué no me dejan tomar, mierda mi cabeza –dice Nidia estirándose –siempre me pasa eso, Lirmary dice que siempre hago más de alguna locura y cuando me enseña su celular no puedo creer lo que hago, lo peor es que nunca lo recuerdo, me doy pena ajena a mí misma – ¿No recuerdas nada de anoche? –Dice Larissa mitad decepcionada mitad triste –no sé depende, por favor dime que no me subí a las mesas –dice Nidia con un poco de pánico –no tranquila, no hiciste ninguna locura –dice Larissa viendo hacia el suelo, ¿quieres desayunar? –Creo que lo único que queda es cereal, te molestaría desayunar Lucky charms? –No, dicen que es saludable desayunar duendes de vez en cuando, iré a traerlo, quédate aquí –dice Larissa y se va.

Luego de diez minutos regresa con dos tazones de cereal y un café, encuentra a Nidia acostada con la almohada en la cara –tu sí que amas dormir –dice Larissa dándole la bandeja con el desayuno –gracias, no tenías que, además pudiste haberte ido probablemente un cereal no es un muy buen desayuno que se diga –dice Nidia –no te preocupes, me gusta el cereal –dice y aún se nota la cara de decepción que tiene Larissa –sobre anoche, lo último que recuerdo fue... -¿Cuándo golpeaste al camarero? –No, ¿en serio hice eso? –pregunta con una cara de "no lo creo" –no, solo te estoy molestando –dice Larissa y Nidia le saca la lengua –lo último que recuerdo fue que te bese, y al parecer te gustó –dice Nidia levantando la ceja –entonces si lo recuerdas –dice Larissa aventándole la almohada –Planeabas no decirme verdad –dice sacándole la lengua, otra vez –bueno es que... –Hija de puta –dice Nidia halándola para darle otro beso.

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Tiene que ir a comprar accesorios para las macetas, no es que le encante salir pero no le queda de otra, tiene que ayudar en la tienda y no va a dejar que Harriet se pierda en el camino. Cuando ya tiene todo lo que necesitan va a la caja y entonces se da cuenta que el destino tiene de hobbie fastidiarla. Justo detrás de ella está Melissa, iba a pretender que no la vio pero era demasiado tarde –Louise –dice Melissa. Es primera vez que se hablan desde lo de la discoteca el año pasado así que Louise no sabe cómo va a reaccionar Melissa –Hola –dice volteándose, Melissa iba a responder pero al fin recuerda porqué el suéter que lleva puesto se le hace familiar, es el mismo que la chica encargó el otro día –tienes novia –dice por fin, no le está preguntando se lo está afirmando -¿Qué? Ah esto –dice señalando su suéter – sí, ella me lo regaló –lo sé, yo trabajo en la tienda donde los mando a hacer –dice Melissa con un tono extraño –Oh conociste a Harriet, es un amor de persona no –dice Louise con una sonrisa triunfal –si es muy amable –dice Melissa aun sorprendida –bueno tengo que regresar a mi trabajo, adiós Mel –dice y se va viendo como Melissa mira su suéter con cara de querer quemarlo, pero no es posible ¿está celosa?

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-¿Qué tanto me ves Tomlinson? –preguntó Harriet riendo – ¿Ya te había dicho que te quiero? –dice Louise con un tono súper dulce. Harriet sonríe y la abraza –Sí, varias veces hoy –se le escapa una pequeña risa –y yo también te quiero Louise - por cierto, gracias por aguantarme –dice y hace a Harriet sonreír – el amor, el amor lo aguanta todo, aunque tú también me has aguantado mucho – por lo mismo que tú –dice y le da un beso en la frente –además de que necesito una aliada contra el Dc. Colesterol –bromeó.

Se ríen, no están haciendo nada en especial, solo están ahí, en la habitación hablando de cosas sin sentido pero para Louise, es de las mejores cosas que le han pasado. Se siente bien, se siente bien que al fin se arriesgó a volver a usar su corazón, al fin confió en alguien. Aún tiene miedo a caer, pero prefiere averiguarlo, si no arriesgas no ganas y Louise cruza los dedos para que por fin, por una vez en la vida, gane.