Imposible (Larriet Stylinson)

Capítulo 9

Despierta y no puede creer lo que ve, el cuarto está lleno de velas y toda la habitación huele a perfume, ve una cartulina gigante en la pared que tiene escrito “¿quieres ser mi novia?” Harriet sonríe como una tonta y en ese momento entra Louise – ¿Y? ¿Qué respondes? – ¿te atreves a preguntar? Creí haberte dado el Sí ayer –Si, bueno soy tu primera novia y espero ser la última así que debía dejarte un buen recuerdo de la primera declaración de amor que  te dieron –dice Louise y Harriet la besa –Buenos días por cierto –dice Louise –Que hermosos buenos días –vamos, tenemos que levantarnos –espera, esto merece una selfie –me he enamorado de una niña de 13 años –Harriet se ríe y toma un par de fotos… bueno, varias fotos.

Están casi listas para ir a clases, solo les hace falta ir a contarles la noticia a las demás. Harriet quiere ir a gritar al pasillo pero Louise insiste en esperar a que las demás salgan. Ya cuando van todas en camino a sus salones Harriet da un salto y toma la mano de Louise –Tenemos algo que decirleeeees –dice de lo más feliz –Somos novias ahora –dice Louise sonrojada, Lirmary sonríe como una madre orgullosa, Larissa asiente feliz porque siempre sospechó que quien le gustaba a Louise era Harriet -Con que la misteriosa chica era Harriet –dice Nidia levantando una ceja – ¿Qué esperabas que hiciera? No podía contarles así como así “miren chicas me encanta Harriet” si ella estaba aquí – todas rieron ante su ocurrencia –Ya era hora de que usaras el corazón –se burló Lirmary. Nidia empezó a hacerles bullying cantándoles canciones cursis y cosas así.

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-Vístete, nos vamos a Fridays –dijo Lirmary entrando en la habitación de Nidia – ¿Qué? –Pregunta la rubia –Ya me oíste vamos a salir, alístate –No puedo Lir estoy terminando un proyecto –dice Nidia sin mucho interés –mira, yo sé que he sido muy egoísta contigo últimamente, ni siquiera recuerdo la última vez que salimos solas tu y yo así que no digas que no, sé que es mi culpa pero anda vamos siiiiiiii –dijo Lirmary, para desgracia de Nidia ella siempre ha sido muy persuasiva así que no puede decirle que no –Está bien, vamos –dice la rubia sacándole la lengua –en diez minutos regreso para irnos –dijo Lirmary.

Las chicas salen y se sienten en preparatoria otra vez, cuando era ley salir todos los viernes aunque no tuvieran ni idea de a dónde ir. Llevan diez años siendo amigas y aun así parece que fue ayer cuando se conocieron. Es lindo, saber que tienes a alguien que siempre estará para apoyarte, alguien que no va a cambiarte y que aunque metas la pata estará ahí para ti.

-Espero que vengas con ganas de molestar porque tengo mucha locura acumulada y me desquitaré contigo –dice Lirmary –Espera ¿eres capaz de sentir locura? Nah, tu eres muy aburrida para eso –bromea Nidia y Lir le responde con un empujón.

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Para las vacaciones Harriet insiste tanto en ir a vivir con Louise que finalmente ella termina accediendo. Louise le advierte, que es un apartamento pequeño, que el lugar no es la octava maravilla del mundo y que no sabe si le va a gustar, pero a Harriet no le importa, le dice que con tal de estar con ella no le importaría vivir en una pocilga. Rentan el mismo apartamento donde estuvo Louise el año anterior. Harriet paga la renta de los dos meses, claro que sin decirle a Louise, sabe que la va a matar por hacer eso pero no le importa.

Ambas consiguen empleo en un vivero, lo cual es bueno porque a Louise no le gustaría que pasara lo del año anterior. Es lindo, tierno y un poco gracioso ver a Harriet nerviosa por ser la primera vez que trabaja, aunque no le está yendo mal, es muy amable con todos y le encanta estar en el vivero. Louise insiste cada día más en que Harriet actúa como una niña pequeña cuando cree que nadie la ve, lo cual derrite el corazón de Lou.