Capítulo 32 - Segundas intenciones

747 148 11
                                    

Mi corazón dio un salto dentro de mi pecho y sentí que el mundo entero me daba vueltas

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Mi corazón dio un salto dentro de mi pecho y sentí que el mundo entero me daba vueltas.

— Chaparrita, ¿me escuchaste? —tuve que sacudir la cabeza para poder salir de mis pensamientos.

— ¿Uh?

— Que vas a caerte, te estás yendo de lado —me di cuenta de lo que hablaba, así que con su ayuda volví a mi posición original.

— Lo siento, no me di cuenta.

Como si Sirena supiera que había imaginado aquellas palabras, relinchó moviendo la cabeza de un lado a otro, demostrando que desaprobaba aquello. Una pequeña ráfaga de viento hizo que me estremeciera, iba bien abrigada pero siempre había sido una persona muy sensible al frío, pero lo amaba.

— Tengo una manta en la mochila —negué de inmediato, que él buscará la manta sería igual a dejarme a mi suerte con las riendas y con el control de Sirena.

Terrible combinación para alguien que apenas si se puede mantener correctamente en la silla de montar.

— No, no, estoy bien, descuida —regresé mi atención a todo lo que nos rodeaba —. Gabe, este lugar es realmente hermoso y de verdad puedo imaginarte montando a caballo con Nathan aquí —el sonido del agua comenzaba a escucharse más y más cerca.

— Cuando éramos adolescentes, Nathan y yo nos la vivíamos aquí. Nos gustaba escaparnos de nuestros padres para venir al rancho. Siempre he amado más el campo que la ciudad, y por lugares como este es que siempre voy a elegir la naturaleza.

Me quedé sin palabras al ver el hermoso claro que se encontraba frente a nosotros, no solo había un río con hermosas aguas cristalinas, también se encontraban unas de las más bellas cascadas que hubiera visto en la vida.

— Precioso, ¿verdad?

— No creo que exista una palabra precisa para describir este lugar.

— Te dije que iba a gustarte.

Hizo que Sirena se detuviera y bajo de un salto, no iba a negar que se veía divinamente sexy con esos jeans y su gorro vaquero, uno que Mason le había colocado apenas se acercó a él.

— Gírate con cuidado hacia mí, te ayudaré a bajar.

— Soy algo pesada para que me deje caer en tus brazos.

— Apenas si pesas un poco. Vamos Chaparrita, te sostendré. Confía en mí, no vas a caerte.

— ¿No la lastimaré?

— No te apalanques de ella y todo estará bien, tranquila, no se moverá. Cruza tu pierna izquierda hacia acá, como si montaras de lado —hice lo que me dijo —, estarás bien.

Me lancé hacia él con los ojos cerrados y rogando por no haber herido a Sirena, caí directamente en sus brazos, abrí mis ojos y pude ver una sonrisa hermosa con hoyuelos cerca de mi rostro, poco a poco me coloco sobre mis pies. Reacomodo mi gorrito y acaricio mis mejillas con sus pulgares.

Sam #PGP2021Where stories live. Discover now