"QUERIDO SOLDADO"

Capitulo 15

Su vieja casa seguía igual, la hamaca del porche, las plantas de que con tanto esmero su madre cuidaba el césped bien cortado como a su padre le gustaba, Steve ingreso a su casa con pasos lentos y temblorosos, no podía creer que estaba de vuelta, no podía creer que estaba en casa.

Todo seguía tal como él recordaba, era como si el tiempo no hubiera pasado.

La mente del comandante trabajaba a una milla por minuto, lo último que recordaba era estar aguantando los golpes de sus captores, pero ahora estaba en su casa, se sentía a salvo, seguro y feliz. Por las escaleras bajaba su padre más grande de lo que el recordaba con una pequeña bebe en brazos. Lo veía feliz y sonriendo, haciéndole caras raras a la niña para que esta sonriera.

-Papá, ya me robaste a Johan. Exclamo su pequeña hermana saliendo de su habitación despeinada y con el cabello mojado.

-Lo siento mi niña, pero esta princesa estaba por llorar, así que la traje conmigo para que tú te pudieras bañar tranquila.

-¿Por qué será que no te creo? Comento Mary con una sonrisa en los labios.

-Vamos Mary no te enojes, solo quería estar al lado de mi nieta. Comento John sonriendo a la bebe.

-Si sabes que Grace te escucha se pondrá celosa. Comento Mary sonriendo. –Y sabes que ella es cruel cuando quiere.

-Ni me lo digas comento John. –Estoy pensando en que Danny tiene razón, Steve es una mala influencia para mi niña bonita.

-Hey pensé que yo era tu niña bonita. Reclamo Mary arrebatándole su hija a John. –Eres un mentiroso.

-Yo no miento, pero tú dejaste de ser mi niña bonita desde hace mucho tiempo. Se explicó John yendo a la cocina.

-¿Y cómo es eso? Pregunto la joven doctora.

-Tú eres la reina de esta casa. Explico John sonriendo con nostalgia. –Sabes que tu madre era nuestra reina, pero como ella ya no está con nosotros, ese puesto pasa a ser tuyo, y sé que tu madre estará muy orgullosa de cómo has llevado las riendas de esta casa y de esta familia.

-Te amo papá. Hablo Mary con los ojos llenos de lágrimas y corrió a abrazar a su padre.

-¿Por qué hay abrazos tan temprano en esta casa? Un Steve vestido con ropa de deporte y todo sudado ingreso a la cocina sonriendo de ver a su familia junta. El comandante ahora si estaba en Shock, ¿Cómo podía el estar en dos lugares a la vez? ¿Era tal vez un sueño o una pesadilla? Porque el Steve quien recién llego se lo veía sano, alegre, sin heridas o cicatrices en el rostro, y un brillo especial en los ojos. Sin miedo o vergüenza este Steve acorto la distancia con su padre y hermana y los abrazos riéndose de las quejas de ambos al notar lo mojado que estaba a causa del sudor.

-Eres un asco Steven. Reclamo Mary. –Me acabo de bañar.

-Es su culpa, ustedes se estaban abrazando y no me esperaron. Se quejó Steve.

-Papá, ¿No estas grande para hacer berrinches? Una castañita de grandes ojos marrones ingreso a la cocina sonriendo, ella también vestía ropa de deporte y estaba sudada.

-Sobrina querida, ¿otra vez tu padre te está torturando con las carreras? Pregunto Mary.

-No tía, no es tortura si te gusta. Y a mí me encanta correr con papá. Además no puedo dejarlo solo, Danno lo corrió de la casa. Comento Grace sentándose en una de las sillas altas que había allí.