68

3.2K 306 67
                                    

Narra Jaesoo:

"Ya estamos en la zona, ¿dónde exactamente es?", leí el mensaje de mi padre mientras terminaba de comer mi pedazo de pizza.

—Ya están aquí.— Anuncié a los chicos mientras me levantaba con bandeja en mano para llevar todo a la cocina, por cortesía es lo menos que debía hacer.

—Déjalo, yo lo lavo.— Tae me detuvo, quitándome las cosas de las manos y tirándolas al lavavajillas.

—Gracias por todo.— Lo abracé de pronto.— Sin ti estaríamos perdidos.

—No debes agradecer nada Jae.— También me estrechó entre sus brazos.— Ustedes son mis amigos, como mis hermanos, y si puedo ayudarlos, obvio que lo haré.— Me alejó y apretó mis hombros, su tierna sonrisa cuadrada apareció para iluminar su rostro.

—Como quisiera haber crecido junto a ustedes, me sorprende el cariño que me tienes cuándo les fui tan indiferente.— Comenté con sinceridad y bastante apenada la verdad.

—Umh...— Él vaciló por un momento, supongo que pensando qué decir.— Fue lo mejor, al principio estaba enojado con tu hermano por separarnos así, pero luego entendí que era lo mejor, que él tenía razón, si no hubiese pasado todo ésto, no te hubiese revelado nada, me habría acercado a ti poco a poco, pero ya que todo nos cayó encima, no era justo que siguieras engañada.— Volvió a sonreír amplio, pero ésta vez con los labios pegados.

—Pero me conocías desde hace tiempo, ¿por qué no te acercaste? ¿Por qué sólo lo intentaste una vez?— Me daba curiosidad eso desde que contó lo de la caja de galletas.

—Porque... tenía cosas que resolver, me dio algo de miedo ponerte en peligro, así que esperaba al momento adecuado.— Caminó hasta la puerta de la cocina y vio hacia afuera como para ver si no venía alguien.— Iba a acercarme el día de la fiesta de Hoseok, pero estabas con Jimin, y me di cuenta de sus miradas y eso, y Jimin es muy, muy celoso.— Rió bajo.— Había estado hablando de ti, entonces preferí no interrumpir su momento. Tal vez Jimin me habría acusado de ver a su chica y me hubiese pateado el culo también.

No pude evitar sentir una punzada de tristeza tras el recuerdo de ese día, había mantenido alejado a Jimin de mis pensamientos porque no necesitaba más cargas emocionales, no veía necesario preocuparme por mi corta pero intensa relación cuándo habían cosas más importantes y graves pasando, aparte él había actuado de una manera que me disgustó demasiado, era mejor mantenerlo vetado por ahora.

—En fin, ya las cosas pasaron así.— Se encogió de hombros algo divertido, luego susurró bastante bajo:— Recuerda que no puedes decirle aún a los chicos lo que te conté, ¿ok?

—Sí...— Alargué la palabra con algo de fastidio en mi tono.— Pero es que no sé, no entiendo porqué no quieres decírselo, yo creo que estarían muy contentos de saber que...

—¿Confías en mí?— Me preguntó serio y algo tajante.

—Sí pero...— Él volvió a interrumpirme.

—Por favor, haz lo que te pedí y manten esto en secreto.— Su voz fue algo suplicante.

—Bien.— Le concedí.— Me callaré.

—Ya verás que todo saldrá bien.— Sonrió mostrando sus dientes.

—Cuidate mucho esa herida, ¿vale?— Dije con una nota de preocupación en mi voz.— No hagas mucho esfuerzo...— Me acerqué a él para mirar más de cerca el vendaje, estaba sin camisa.— Como lamento que esto te haya pasado.— Confesé con tristeza.— No debimos dejarte ir solo, éste era nuestro problema.

Natural. » Jeon Jungkook.Where stories live. Discover now