El trabajo del Kaidon

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Después de lo que sucedió la noche anterior Nuray todavía se sentía algo avergonzada, pero tenía que cumplir con su deber, las órdenes de Thel Vadam fueron claras, así que allí estaba, esperando justo en la entrada del Torreón.

Escuchó múltiples pasos, pero para su sorpresa no había rastros ni de Rtas ni del Árbitro, aunque si que los sangheilis que acababan de llegar eran igualmente intimidantes y, por la expresión de sus rostros, Nuray dedujo que ninguno de ellos sabía de su estadía en el planeta.

-¡Un humano! ¿Pero... cómo? ¡¿Qué estás haciendo aquí?!-, El tono de voz uno de los sangheilis era claramente de molestia e indignación.

-Oye relájate, ahora somos todos amigos, ¿recuerdas? -, acostumbrada a su relación con los elites dentro de la Sombra de la Intención pensó que podría lidiar fácilmente con ese sangheili, pero qué equivocada estaba.

-Ninguno humano es digno, ¡¿cómo te atreves a poner un pie en nuestro mundo?!-.
Ella lo había dicho ya una vez, la paciencia no era una de sus mayores cualidades, y por desgracia no iba a comenzar a mostrarla para con aquel sangheili, -Es una pena que no te complazca...-, Nuray se acercó a la élite y le lanzó una mirada desafiante, -... porque no me voy a ir de aquí-.

El elite se enfureció inmediatamente  y la tomó del brazo con fuerza, -¡Insolente! Cuando termine contigo...-
-¡Déjame ir!-, Gritó ella a manera de reproche y rabia más que por miedo mientras luchaba por liberarse, -Podría terminar tu vida en segundos si quisiera-.

- Estúpido humano, ¿quién te crees que eres? Eres solo una bestia insignificante-.

-¡Xeem 'Thasan!-, la voz de Media Mandíbula hizo que todo se detuviera, -Tiene permitido estar aquí-, dijo con fuerza haciendo un gesto con la cabeza hacia Nuray.

-Y bajó las órdenes de quién, ¿tuyas?-, reprochó rápidamente el sangheili. 

-Fueron mis órdenes de hecho-, el Inquisidor apareció justo detrás de 'Thasan, caminando con calma pero con firmeza, -Se quedará en Sanghelios por un tiempo, será mejor que te acostumbres-.

Xeem 'Thasan no tuvo más remedio que agachar la cabeza a las órdenes del Inquisidor, aunque no estaba nada contento, de hecho sintió que su cuerpo ardía debido a la furia que sentía, pero no podía hacer nada más.

-Ahora, hay algunos temas que deberíamos discutir-,habiendo apaciguado la pequeña discusión Thel invitó a todos los sangheilis presentes a entrar en el salón.

Intentando ignorar la pasada situación, Nuray hizo una pequeña mueca después de ver al Inquisidor marcharse junto con el resto, -¿No se suponía que tendríamos una sesión de entrenamiento "súper especial"? -, parecía irritada, odiaba perder el tiempo y era justo lo que sentía que había pasado en ese momento.

-Cuando la reunión termine el Inquisidor nos alcanzará-, como siempre 'Vadum parecía tan tranquilo, Nuray en secreto admiraba su capacidad para permanecer sereno en situaciones que a ella la volvían loca, y por supuesto, atribuyó aquella cualidad de Rtas a la experiencia diplomática y guerrera que él había ganado durante su vida.

-¿Reunión de qué?-, preguntó ella curiosa.

-Con los Kaidon de otros Estados, él intenta establecer relaciones que sean beneficiosas para llevar a cabo la unificación de Sanghelios-.

-Política, nunca ha sido mi punto más fuerte... Bueno, entonces vamos... supongo-.

Para la desgracia de 'Vadam y la suerte de Nuray, la reunión había tomado mucho más tiempo de lo esperado, el Inquisidor tendría que esperar un poco más para probar la habilidad de Nuray en batalla.

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Como todo lo que Rtas solía ordenarle era agotador, la simulación también había sido extremadamente pesada, ahora Nuray entendía por qué los sangheilis habían sido tan difíciles de vencer durante la guerra humana contra el Covenant.

Se sentía casi muerta, así que se había acostado boca abajo sobre la cama, y estaba tan cansada que ni siquiera pensó en comer, le dolían los músculos solo de recordar cada pasillo que tendría que recorrer hasta el comedor, y se habría quedado acostada hasta el día siguiente si alguien no hubiese llamado a su puerta, así que como pudo se incorporó, y se dirigió a atender la llamada a su habitación.

-¿Inquisidor?... ¿Qué estás haciendo aquí?, me estoy acostumbrando a tus visitas nocturnas-, dijo con tono sarcástico cuando abrió la puerta, aunque inmediatamente después se abofeteó mentalmente al darse cuenta de lo que había dicho.

-¿Puedo pasar?-, Thel 'Vadam como siempre tenía esa actitud estricta, pero al mismo tiempo lucía bastante apacible.

Nuray se hizo a un lado, -Adelante, estás en tu casa... literalmente-.

-Me disculpo por hoy, hubo algunos conflictos que requirieron mi atención, Rtas 'Vadum me ha informado de tu buen desempeño en la simulación-.

"Vadum...", las imágenes de sesión con Medía Mandíbula pasaron por la mente de Nuray, -Es bueno saber que piensa eso después de cómo me trató hoy...-, dijo un poco sorprendida, después entrecerró los ojos un poco y dirigió su mirada directamente al Inquisidor, -...Me disculpo por mi audacia pero... dudo que hayas venido aquí solo para decirme eso-.

-Perspicaz... generalmente no dejo de cumplir mi palabra, y cómo hoy fallé con nuestro compromiso y en compensación por tu tiempo, he decidido que tu entrenamiento se suspenderá mañana, en su lugar podrás conocer Vadam-.

-¿Hablas en serio?-, ella parecía bastante incrédula hacia la oferta del Inquisidor, -¿No habrá golpes, ni patadas, ni gritos sin piedad por parte de Rtas?-.

Thel le lanzó una mirada difícil de interpretar, -Tomaré esa respuesta como positiva, nos veremos en la mañana-.



HALO: CROSSROADS (Español) Where stories live. Discover now