HALO: CROSSROADS (Español)

Nuevo Comienzo

Desde que llegó a Sanghelios casi todos los días se había dedicado a su entrenamiento con Rtas 'Vadum, y muchas ocasiones con el Inquisidor observando toda la sesión. Sabía que incluso después de lo que él había dicho aún no confiaba en ella, pero no podía culparlo, después de todo la razón por la que ella había querido encontrarlo al principio había sido para vengarse.

-Flexiona más tus rodillas, si sigues haciendo eso nunca podrás mantener el equilibrio-, dijo 'Vadum con severidad.

Nuray dejó escapar un suspiro de fatiga y molestia, -Lo sé, es lo único que me has dicho toda la semana, pero ten un poco de compasión, cuando el Inquisidor está aquí me pone algo nerviosa, parece un tipo muy duro y siempre tiene esa mirada terrible y acusadora sobre mí-, Bromeó, aunque casi parecía como si estuviese haciendo un berrinche, pero asegurándose de decir lo último en voz baja para que 'Vadam no pudiera escucharla.

-Bueno, entonces será un excelente ejercicio para que superes tus inseguridades-, respondió Rtas en voz baja.

-¡¿Qué?!, ¡Oh vamos! ¿Por qué tienes que ser tan estricto, por qué el Inquisidor es tan estricto, y por qué todos los sangheilis son tan rudos con sus entrenamientos y esas cosas?, estoy cansada de esto y de mis estúpidas rodillas inútiles...-, recibió una simple pero amenazadora mirada del elite de armadura blanca, y enseguida ella supo que era inútil rebatir a 'Vadum, -Tienes que estar bromeando-, así que ella se resignó y comenzó a hacer lo que Rtas le había dicho, pero el Inquisidor interrumpió la práctica.

-Es suficiente por hoy, puedes descansar ahora, te veré mañana a primera hora-, Nuray se sorprendió de que el Inquisidor la convocara, pero solo asintió y salió de la sala de entrenamiento para darse una ducha.

-Y Capitán 'Vadum...-

Media Mandíbula se acercó a 'Vadam y comprendió claramente que quería hablar con él a solas.

-...Debo felicitarte por lo que has estado haciendo con la humana, su desempeño muestra una mejora notable-.

-Solo doy las órdenes, ella hace el resto del trabajo, pero en efecto, ha pulido su técnica y mejorado sus movimientos, aunque debe entender que queda mucho por hacer-.

-Estoy de acuerdo y es por eso que mañana la llevaré a una simulación, quiero ver cómo se desarrolla en una batalla real. Ahora me despido hermano, tú también deberías ir a descansar-.

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Apenas podía ducharse, el dolor en sus músculos era indescriptible, ni siquiera el sargento de la academia militar tenía entrenamientos tan duros, incluso en ocasiones como esa deseaba retroceder en el tiempo para no sufrir las sesiones de ejercicio con Rtas.

Cuando terminó, salió de la ducha y colocó una toalla sobre su cuerpo, se ató el cabello mojado y se tumbó en la cama, se sentía muy cansada, tanto que solo cerró los ojos un momento y comenzó a quedarse dormida, pero un golpe en la puerta terminó con su deseo de descansar.

Sin pensar, se levantó tan rápido hacia la entrada que olvidó que solo llevaba una toalla puesta.
Cuando abrió la puerta se sorprendió al ver al Inquisidor allí.

-¿Vadam... Inquisidor?, ¿Qué haces aquí?-, se dio cuenta demasiado tarde del estado en que se encontraba, estaba prácticamente semidesnuda frente a Thel 'Vadam, entonces su rostro comenzó a sonrojarse y se puso tan nerviosa que cuando dio un par de pasos hacia atrás ella resbaló y cayó sobre sus nalgas, aunque afortunadamente la toalla seguía en su lugar.

-¿Estás bien? -,Aunque la torpeza de la humana cruzó por su cabeza, Thel le ofreció una mano para ayudarla a levantarse del suelo, lo cual ella aceptó avergonzada, -Me disculpo por la interrupción-, 'Vadam miró a la chica con atención, nunca había visto a ningún humano en un estado tan vulnerable, sin armadura o sin otra cosa que cubriera su piel, algo que llamó su atención ya que parecía muy suave y delicada y, de hecho, pudo detectar que su teoría era cierta cuando vio los grandes moretones en las piernas y brazos de Nuray.

-¿Estás segura de que no necesitas ayuda?, parece que sufriste algún daño, cuando lo necesites puedes ir al médico, parecía bastante comprensivo, incluso su voz sonaba un poco más dócil, y es que en realidad pensaba que, aunque para un sangheili aún era difícil aceptar ayuda médica, para un humano eso debería ser completamente normal, ya que en alguna ocasión había tenido la oportunidad atestiguar como sus heridas eran tratadas sin que los soldados humanos se negasen a recibir el trato de un médico.

Cuando Nuray escuchó eso, se dio cuenta de que el Inquisidor había estado viendo sus piernas, aunque... ¿cómo podría no notar todos esos moretones?, pero aun así estaba muy avergonzada por todo lo que estaba sucediendo.

-Por supuesto, sí... lo haré-, trató de cubrirse un poco las piernas y el árbitro notó que estaba incómoda, así que él se dio la vuelta para salir de ahí, -Excelente, porque debes estar lista para mañana-.

Y allí estaba otra vez, el habitual sangheili estricto.