Capítulo 16

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Los meses han pasado, Till con Paul seguían la vida como si fuese la última vez, esta vez sin excesos, disfrutando cada detalle nuevo. Till se había rehabilitado en un tiempo muy corto, solo necesitaba el incentivo de Paul para poder salir adelante y enfrentar esa adicción.

Ahora lo que tenían que tenían que enfrentar ambos era el tratamiento para el cáncer que comenzaba a tomar Till, ese tratamiento iba a traer grandes consecuencias físicas como también en el ámbito psicológico. A diario este cambiaba de humor debido a los efectos secundarios de la terapia, muchas veces Paul no podía tolerar con esto por esos cambios pero hacía el esfuerzo máximo por estar las 24 horas con él.

Habían días en que Paul se quedaba en casa para cuidar mejor de Till como el día de hoy, todo su trabajo lo hacía en casa.

El mayor estaba mirando a la ventana perdido en lo que Paul seguía en lo suyo. Para sacarlo de su tristeza se acercaba a su lado.

__¿qué miras tanto Till ?

__Oh... Me pregunto ¿iré al infierno o al cielo ?. A continuación reía negando con su cabeza.

__Ay Till, no preguntes eso... No le gustaba que tocara ese tema ya que no se sentía preparado para la partida de él.

__La polla, tengo tanto pecado en mí que dudo que vaya al cielo.

__Till... No digas eso.

__Paul seamos realista, yo he pecado mucho, he lastimado a muchos. Está claro que mi enfermedad es un castigo por haber obrado mal en esta vida.

En silencio Paul abrazó al mayor para darle calma, trataba de no romper en llanto por sus palabras. Por más que quisiera ser positivo las palabras del mayor eran lo contrario y más fuerte que las suyas.

__ya enano, no te pongas así mamón. Tengo que verme con el nuevo médico y no quiero que me vean así todo llorón. Tras terminar su palabra le otorgó un beso.

__Tienes razón, tienes que estar bien. Correspondía al beso luego dándole una sonrisa. _ ¿quieres que te acompañe?.

__Si enano, mueve e intento de culo que tienes. Se levantó del sofá para ir a prepararse.

__Procura depilarte las nalgas antes de salir. Le respondió divertido.

__¿otra vez ese chiste ?. Alzo una ceja molesto.

__Sip, eres mi gorila de culo peludo.

__maldito enano. Ofendido se fue a la habitación.

Paul por su parte se reía de la reacción ajena, pese a sufrir a diario por la enfermedad de Till siempre hay un momento en que el sentido del humor alegra el día.

Hoy Paul acompañaba a Till a su visita al médico, generalmente en estas no lo solía acompañar a no ser que fuese cuando el mayor recibía la quimioterapia, solo para esas ocasiones lo acompañaba debido a que Till quedaba muy débil después del tratamiento.

...

Estaban ambos en el hospital cuando de pronto aparecía un doctor cual captó la atención de Paul. Estaba boca abierta con sus ojos llenos de lágrimas, su cuerpo estaba temblando de la emoción, en cualquier momento este se lanzaba a contra de ese muchacho; el doctor era un tanto alto, cabello negro lacio, ojos verdes azulado y de tés blanca, era la figura viva de Richard. No dejó de verlo hasta que ese doctor entró a su box, por parte Till captó el cambio del menor cual no dudó en asistirlo.

__¿Paul?. Preguntaba nervioso en lo que tomaba sus manos.

__¿Lo viste? ¡Lo viste Till!. Respondía alterado, su lagrimas caían por si sola.

La fuerza de lo prohibido  (Till x Paul)Where stories live. Discover now