Magnetic. | 5sos

44. Noqueadores

El problema no fue que alguno de los chicos se perdieron, porque Birdy y Michael lograron guiarlos a todos a la aeronave, el problema no era que Calum no se comunicó conmigo, el problema no era que me había perdido con las vagas indicaciones de Lia y el problema tampoco era que se había cortado la conexión de mi intercomunicador por unos segundos.

El verdadero problema era que M.A.C.E sabía que estábamos escapando y estaban desesperados por retenernos, así que todo el personal se dedicaba a atraparnos, paralizarnos y golpearnos.

Aunque esta vez no nos tomaron por sorpresa y defendernos iba a ser más fácil, después de todo nosotros éramos los de los poderes.

Todo sucedió de un momento a otro, corría por los largos pasillos cuando detecte un zumbido acercarse a mí, me tire al suelo lo más rápido que pude, una bola de una extraña luz azul exploto en la pared a mi lado haciendo el mismo ruido que hace la corriente de alta tensión, una ola de calor se esparció por el aire, un chico me tomo del brazo y me ayudo a levantarme, así que terminamos escondiéndonos en un armario de limpieza con la luz apagada, mientras oíamos los pasos agitados de los vigilantes al otro extremo de la puerta.

El chico soltó una risa y un escalofrío subió por mi espalda, era vagamente familiar.

– ¿Calum? – dije en un susurro apenas audible.

– Shhh – susurro tapando mi boca, duramos en silencio hasta que el ruido en el exterior se detuvo.

– ¿Qué demonios fue eso? – pregunte refiriéndome a la esfera de luz cuando me soltó.

– Noqueadores, si te tocan es como si te electrocutaran, te mandan a babear más rápido de lo que crees, son más dolorosos que los dardos, deben estar un poco alarmados – dijo por lo bajo, aun en la oscuridad sentía como sonreía con suficiencia – Lia me dijo que querías hablar conmigo, pero tu intercomunicador estaba fuera de línea.

– Tengo una idea – susurre y le explique cómo había logrado liberar a los chicos del sector dos.

– Aria, en el sector uno son ciento veinte jóvenes, lo que es igual a ciento veinte puertas, no es lo mismo que levantar treinta y cinco – exclamo preocupado, levanté mi ceja aunque no pudiera verme. – No tenemos tiempo, Rachel y Paige me informaron que tienen que defender la aeronave y no muchos saben usar sus poderes para pelear.

– ¡Pues van a tener que hacerlo Calum! – dije en un grito ahogado – Estamos todos juntos en esto, tenemos que ser nuestros propios héroes.

Calum me tomo de la muñeca y nos saco del armario, la luz de los pasillo escandilo mis ojos.

– Entonces vamos con Lia, cubre nuestras espaldas, yo iré por el frente – dijo y se transformo en una enorme pantera, su pelaje negro y brillante empezó a moverse conmigo detrás, ambos alerta de cualquier ataque.

Podía sentir el metal de los dardos y por alguna extraña razón el zumbido de los noqueadores, así que con leves movimientos de muñecas devolvía los ataques incluyendo los de las esferas azules, si quedaba algún guardia de pie, la pantera/Calum los atacaba.

Durante minutos nos abrimos paso a través de los pasillos y los guardias, perdí mi intercomunicador y si era sincera el miedo corría por mis venas así como la adrenalina, pero no podía dejar que me venciera.

Uno de los noqueadores rozo mi pierna y esta comenzó a hormiguear como si estuviera a punto de adormecerse, así que corría entre rápido y cojeando, Calum al ver mi dificultad se transformo en un elefante y con su trompa me subió a su lomo.

Era sorprendente el hecho de que aunque fuera un animal pesado seguía siendo rápido, se abría paso con facilidad ya que ¿Quién podía detener a un elefante y a una chica que controla el metal? al cabo de unos instantes nos detuvimos en las puertas de la cámara de vigilancia de sector uno, Calum volvió a la normalidad y abrimos las puertas, todo estaba en silencio y no había señal de Lia, un par de hombres se ubicaban en el panel de control murmurando en otro idioma, pero a juzgar por sus tonos estaban asustados, así que optamos por el elemento sorpresa y Calum se convirtió en una boa, luego se acerco a ellos y les aplico una llave donde perdieron rápido el conocimiento.

– ¡Lia sé que sigues aquí! Somos nosotros, sal de donde quiera que estés – pidió Calum cuando nos acercábamos a la estación de control para visualizar que cada habitación tenía un par de guardias custodiándola, una extraña sombra negra se acerco a nosotros, así que con mis poderes hice mover un par de cables atrapándola. La sombra comenzó a tomar colores y mostrar una forma, era una chica rubia.

– Lia – exclamo Calum preocupado, mientras trataba de liberarla, así que moví mis dedos y la solté. Ella tenía la habilidad de clamuflajearse con su entorno.

– Ellos vinieron y me escondí – jadeo asustada, Calum la abrazó y le dijo que todo estaría bien, ella se tranquilizó por un instante.

– Necesitamos tu ayuda – los interrumpí, por la manera en la que se comportaban podías deducir que tenían algo de historia, pero no era el momento para hablar de ello, así que le explique mi idea a la rubia, ella tomo control en los hologramas y pude visualizar cincuenta habitaciones, Calum había planteado que los liberara por parte, él salió de la casilla a cubrir nuestras espaldas.

Concentrarme me costó un poco más que antes, mi mente y mi cuerpo sentían el cansancio que me producía usar mis poderes de esta manera.

Y aun así lo logre, aunque para el tercer grupo de puertas mi cabeza parecía que estaba a punto de estallar.

– ¡Lo lograste! – escuche una voz a lo lejos pero no entendí muy bien lo que decía, mis ojos seguían cerrados y el zumbido familiar comenzó a manifestarse de nuevo en mi cabeza, perdí el control de mis piernas y todas mis fuerzas, de repente mis rodillas dolían, la oscuridad en mis ojos se volvió más densa y perdí el conocimiento.

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Gracias a todas por leer de verdad que sí♡

Las amoo♡