--Vamos, hice una reservación en mi restaurante favorito.

--Si es tu favorito seguro es porque hay un bar en el y muchos hombres atractivos—volvió a burlarse Nay poniéndose unas gafas oscuras.

--Bruja, no puedo negarlo, pero como una está casada y la otra casi comprometida las llevaré a la terraza lejos de La tentación. –río junto a mi, yo si agradecía que nos llevase lejos de la tentación, mi fidelidad nunca había sido puesta a prueba.

En el auto yo iba atrás y ellas enfrente, la música sonaba muy fuerte mientras les mandaba mensajes a mis bebes.

Te extraño, vuelve mañana. 17:08

Mi imbécil esposo.

Sonreí aún más pero no podía regresar mañana, hasta pasado y eso era si Nay no despertaba con una resaca de los mil demonios como casi podía asegurar pasaría.

Mamá Darice tiene condones debajo de su cama, Casey me dijo imbécil, Addi vomitó sobre mi sistema solar a escala y Ada, bueno ella es mi favorita. Por favor sálvanos a ella y a mi. 16:50

Mi genio bebé.

Ahora entendía porque Killian quería que volviese, reí de imaginármelo corriendo por todas partes, Darice estaría en un problema porque su padre jamás podría verla de otra manera que no fuera su pequeñita. Aunque ella ya me había comentado que había un chico que le gustaba. Ahora bien, Arali podía ser bastante interrogativo y Casey muy corta de paciencia. Addi como ya había dicho era tremendo y mi pequeñita Ada era una princesita.

--Quiero volver.

Se me salió, ambas se miraron unos segundos y rieron.

--Solo serán dos días, piensa que les servirá para que aprendan a ser autosuficientes.

No dijimos más, trataba de disfrutar con mis amigas de la adolescencia con quienes no convivía así desde hace años, ni el día de mi boda porque me había escapado con Killian.

*****

--Otro trago.

Había decidido que debía relajarme y para eso lo mejor era tomar piña colada, bueno y mucho postre pues casi no toqué la comida.

--Tráigale un shot de tequila y un Cosmopolitan para mi. –pidió con una sonrisa Eileen.

--A mi Whiskey en las rocas doble.—Nay ya se había tomado tres de esos y estaba como si nada.

--¿Cómo está el ardiente de Nick?—Preguntó Eileen, claro que me preguntaría por su amigo con derecho que le había durado casi cinco años y nunca llegaron a nada.

--Ahora pertenece al FBI, y a veces anda deambulando por mi bufete. Pero si lo que quieres saber es si sigue tan bueno que el pan, te digo que es como una dona glaseada—y las tres amábamos las donas glaseadas. Rieron y me uní.

--¿Cómo está el sexy Colt?—le preguntó Nay a Eileen, este había sido ligue de la pelinegra durante el internado que compartimos.

De hecho, ahí nos conocimos todos, teníamos más historia y aventuras que un día contaría yo, quizá Nay o quizá Eileen...

--Igual de mujeriego e intelectual que siempre. He asistido a sus pretenciosas conferencias, pero si lo que preguntas es si sigue haciéndolo tan bien pues...-- se río por la mirada profunda de Nay – Es mejor amante que cualquiera con el que me haya acostado.

Nay bebió lo que le quedaba de Whiskey de un solo trago.

--¿Qué tal Casper?—fue mi turno de preguntar, yo no me había acostado con el pero hace tanto que no sabía de el. Había estado enamorado de mi cuando tenia 15, luego cuando ya casi nos graduábamos yo había sentido un flechazo por el pero ya era algo tarde para intentar algo.

MI JEFE ES UN PERFECTO Imbécil.|COMPLETA|Where stories live. Discover now