Fighters (Todoroki Shoto y tú)

8

Llevaba aproximadamente 15 minutos escuchando a Momo y a Kyoka hablar efusivamente. Simplemente opinaba cuando me volteaban a ver al notar que no aportaba nada a la conversación. Últimamente me había sentido confundida, cuando me acerco a Shoto o él se acerca a mí me pongo algo nerviosa, esto me pasó hace años, pero tomó mucho más tiempo. A Shoto solamente lo había visto por 3 semanas sin contar cuando lo vi en la prueba de ingreso.

Momo: Entonces, ¿tienes una cita con Todoroki?

Kyoka: Al aparecer sí.

Salí de mis pensamientos y las miré pasmada, ambas comenzaron a reír y yo comprendí lo que habían hecho. Me crucé de brazos y dejé salir un suspiro.

Kyoka: No te preocupes, (T/N), nadie tiene una cita con Todoroki.

La miré con los ojos entrecerrados y me levanté para ir al baño.

Momo: ¡(T/N)! Era una simple broma, te veíamos distraída y queríamos que reaccionaras. Mil disculpas.

Momo y Kyoka dieron una reverencia y yo comencé a negar.

(T/N): No se preocupen por eso, simplemente voy a lavarme la cara.

Ambas asintieron y me miraban con ojos tristes.

(T/N): Y sí, sí acepto sus disculpas.

Por fin sonrieron y me dijeron que me darían una recompensa. No quise imaginar qué y caminé hacia el baño.

Una vez ahí abrí el grifo y me mojé las manos, el agua estaba demasiado fría. En cuanto lo pensé, esta se puso más tibia. Al parecer el destino me quería ver feliz, creo.

Salí del baño unos minutos después y me topé con Midoriya.

Izuku: Kamihara, lo siento.

De nuevo este chico me tenía confundida, ¿qué demonios hizo para disculparse?

Izuku: La vez que nos vimos en el supermercado ni siquiera pregunté tu nombre, fui un maleducado.

Comentó con un aire melancólico y una expresión exagerada.

(T/N): No te preocupes por eso, fue hace mucho. Si me disculpas debo ir al salón.

Me miró algo extrañado y asintió para después dejarme pasar. No tenía nada contra Izuku, ahora mismo no quería tratar con nadie.

El malhumor fue reemplazado por pánico. Tomé mi celular de mi bolsillo y llamé a Momo mientras corría de nuevo al baño. Le expliqué la situación y dijo que vendrían inmediatamente.

Emergencia de chicas, le pondríamos.

Después de superar esa crisis, nos dirigimos al salón. Yo, con mi expresión de incomodidad. Momo intentando no hacer una cara extraña y Kyoka tapándose el rostro. Mientras más pensaba en la experiencia anterior, más ridículo lo recordaba.

Decidí olvidar eso y comenzar una plática más tranquila, pero el timbre sonó y daría paso a la clase de Cementoss, anteriormente habíamos tenido la hora libre ya que Midnight se ausentó.

Fui a mi lugar e inició la clase de literatura. Las materias no eran nada del otro mundo, en parte me tranquilizaba que fuera así. Entrenar 24/7 no era una opción muy viable.

Terminó la hora y ya tocaba el receso. Fuimos las 3 a la cafetería y como se había hecho costumbre, Momo y yo pedimos las raciones gigantes que Kyoka detestaba.

El día después de eso se pasó increíblemente rápido, entrenamientos de la tarde e ir a casa.

El camino a casa también se me hizo demasiado corto, miré la hora y duré exactamente lo mismo que siempre, pero lo había sentido a la mitad.

Entré a mi hogar y mi estúpido hermano se encontraba tirado en la sala. Dejé mi mochila en el suelo y me acerqué a él, para después patearlo levemente.

Shinya: Estaba meditando, ¿cómo te fue?

(T/N): Horrible.

Comenté mientras me acercaba a la cocina.

Shinya: Bueno, si te sientes tan mal no podrás comer el pastel que traje.

Mis ojos se iluminaron y volteé a ver a mi hermano quien ya se encontraba de pie.

(T/N): De casualidad, ¿es mi favorito?

Asintió y caminó hacia el refrigerador mostrando ese pastel que tanto me gusta.

(T/N): ¡Muchas gracias! Te quiero Shinya.

Rodó los ojos y tomó un cuchillo para cortar el pastel.

Shinya: ¿Sólo me quieres porque te traje un pastel?

(T/N): Obvio no, eres mi hermano y mi modelo a seguir.

Sonrió levemente y me dio un trozo de pastel. Agradecí y caminé hacia mí habitación para acomodar unas cosas mientras como. Shinya dijo que saldría y le dije que se cuidara.

Terminé mi tarea y fui a bañarme. Saliendo tomé mi celular y vi 3 mensajes de Momo. Me preguntó que si el sábado saldríamos y le respondí que sí. Dejé mi celular de lado y me acosté.

Estaba pensando en el día que viví, cuando me llegó la imagen mental de aquel chico bicolor. Todoroki era guapo, no lo negaría, pero, ¿realmente me podría enamorar de él en tan poco tiempo? Supongo que era atracción, aunque no coincide con mi nerviosismo. Tal vez pasando más tiempo con él me de cuenta de la realidad. Intenté crear un plan para esto, pero simplemente no se me ocurría nada, fuera del campo de batalla soy un desastre para problemas "cotidianos".

Entonces la iluminación llegó a mi, continuas notificaciones provenientes de mi celular me dieron la respuesta. Momo y Kyoka me ayudarían. Tomé mi celular y vi que eran mensajes de Momo, miré la hora y aún no era tan tarde. Decidí llamarla y crucé los dedos para que contestara. Al tercer pitido la llamada conectó.

Momo: Hola (T/N), ¿estás bien?

Preguntó algo preocupada.

(T/N): En absoluto, estoy muy confundida.

Comencé a contarle todo a Momo y ella emitía sonidos de sorpresa. Unimos a Kyoka a la llamada, ella también estaba algo sorprendida.

Kyoka: ¿Entonces crees que te gusta Todoroki?

Momo: Creo que sí le gusta.

Kyoka: Tienes razón, no tendría sentido intentar eso sin que le guste.

Momo: Entonces hay que...

(T/N): Estoy escuchando, ¿saben? No creo que me guste como tal, sólo estoy confundida, es muy poco tiempo para enamorarme de él.

Momo: No sé de qué hablas, no hay un tiempo fijo para enamorarse de una persona.

Kyoka: Además, Todoroki es más amable contigo que con todos nosotros.

Momo: Tal vez a él también le gustes.

Y mi confusión llegó de nuevo, ¿yo, gustarle? Patrañas, no podría ser cierto.

(T/N): Es imposible que yo le guste a Shoto.

Kyoka: Aww, lo llamaste por su nombre.

Momo: Eres una persona muy bonita e inteligente, ¿qué podría impedirlo?

Kyoka: Exacto, cualquier chico podría caer ante ti.

Los cumplidos de mis amigas me hicieron avergonzarme. Dije que pensaría qué hacer y después de despedirme corté la llamada. No sé si me benefició o empeoró las cosas. Preferí dormirme.