Cap.20-El Ladrón

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Unos treinta años antes de los acontecimientos actuales llego al Valle un mozuelo de dieciséis años con más suerte que expectativas, su nombre era Merhs y aunque si poseía un curioso parecido físico con nuestro Nicolay su personalidad no hubiera podido ser más distinta.

Llevaba una gallina ajena bajo el brazo y había corrido al templo de Loki en busca de un escondite, huelga decir que lo encontró y todo lo que vio le impresiono tanto que se le escapo la gallina y ni le importo, compareció humildemente ante la Diosa, confeso sus faltas pensando que recibiría un castigo y en su lugar le dieron un papel, una casa y la oportunidad de cambiar su vida por completo con solo un deseo.

-Ha pasado tiempo desde nuestro último Ladrón-Mitzah le acompaño hasta el refugio-por favor, pon atención mientras doy los detalles de tu personaje.

Merhs era observador, muy listo, la clase de persona que ve posibilidades hasta en las piedras del camino y cree en cuanto se le presenta pero no podía, simplemente no podía, creer en la rígida sonrisa del esclavo, en su facha de monigote, apenas le estaba prestando atención y no resistió el impulso de tocar esa capa de plumas.

-¿Qué haces?-pregunto Mitzah, mirándole por primera vez.

-¡Perdón!, nunca vi una capa así.

-Son mis alas.

-¿De veras?-agito una para comprobárselo-¡Vaya!, ¿y puedes volar con ellas?

-¿Para que las tendría si no?

-¿Puedo ver?-Mitzah se aparto un poco-¿Qué pasa?

-¿Entendiste las instrucciones que te di?-se había puesto tenso-¿te ayudaría una guía escrita?

-Es mucho y no sé leer, mi madre decía que era un cabeza dura, aunque recuerdo sus canciones.

-Je, que lindo, pero necesito que entiendas las reglas.

-¿No tendrás una canción para eso?

-...Tengo una...mi Ama dice que es tonta.

-Bueno, me gustaría escucharla.

Hay momentos que redefinen la vida y uno no se da cuenta hasta después, el momento en que Mitzah decidió que no se estaban burlando de él y que podía compartir esa partecita suya fue uno de esos.

-"Dicen que la vida no es juego, más uno puede parecer..."

-Bien, bien.

-"Toma tu papel, apréndelo bien, para que puedas vencer..."

-Me gusta eso.

-"Mírate"-le dio un toquecito en la nariz-"un ladronzuelo sin más, nada tienes, al mundo quieres hurtar"-y ya en eso realizo un giro-"En mente siempre un plan y una suerte sin par, es tu forma de ganar"

-¡Ja!, ¡Nada mal!-exclamo-¿Qué me dices de los otros?

-Es tarde-dijo, la interrupción le había hecho apenarse del arrebato-tengo tareas, ya conocerás a los demás jugadores.

-¿Te vas?, ¿Cuándo te veré de nuevo?, ¿mañana?

-¿Por qué...?-en ese momento su insistencia le asusto-tengo que irme.

-¡Espera!-ya se alejaba-¿Qué hago si te necesito?-y se fue-bien, te buscare yo entonces.

Merhs se adapto al Valle casi enseguida, pero no mostro en los otros habitantes más interés que el de averiguar qué cosas de valor tenían, lo que quería era ver a Mitzah de nuevo y lo pesco una mañana, tratando de dar caramelos a unos niños que huyeron aterrorizados.

La Leyenda de AilurWhere stories live. Discover now