CAPÍTULO 10 HERIDOS

5.8K 688 7
                                    

Miguel no cabía en sí de gusto cuando escuchó la voz de Lorenzo, hacía horas que avanzaban sin esperanza, Roberth les había informado que el lugar en donde tenían a Lorenzo había sido abandonado, ya no se registraba ninguna actividad, el teléfono de Lorenzo había sido abandonado en el lugar, porque seguía en donde mismo, y eso significaba que lo habían dejado ahí y se habían llevado a Lorenzo a otro sitio, o él estaba muerto junto con su teléfono.

Ahora se alegraba de que estuviera con vida y más aún, que hubiera escapado, sin embargo, él gusto duró poco cuando escuchó un disparo a través del celular, luego se quedó estático, no sólo se había escuchado a través del celular, todos lo habían escuchado, lo que significaba que estaban cerca.

Se disponía a avanzar, cuando entró una llamada de parte de Roberth.

_Quién quiera que te haya llamado. - dijo. - está a unos cuantos kilómetros de distancia de ustedes.

_ Fue Lorenzo. - confirmó. _no se con quien esté.

_Ese número no lo tenía registrado, pero no forma parte del grupo que se llevó a Lorenzo, al menos no ha sido utilizado para comunicarse con ellos, James te va a ir mandando la ubicación en tiempo real, la mala noticia es que no están solos también ellos están a kilómetros de distancia de ellos, pero por el lado contrario, ustedes tienen poco tiempo para encontrarlos. - colgó.

_ Bien, vamos a dar contigo. - dijo Miguel para sí mismo. Aún no ha llegado tu hora, te rescataré así sea lo último que haga.

Luego se volvió a dar órdenes, organizó a su gente y se pusieron en marcha.

*****
Lorenzo avanzaba con dificultad, su estado físico no le era de gran ayuda, pero se esforzaba para no ser una carga para Mario, quien bien podía haber escapado solo y dejarlo a su suerte, pero seguía firme a su lado.

_ Jefe. - dijo Mario. _si no salimos de ésta, quiero pedirle perdón. No pensé las cosas y no sabe cómo me arrepiento, aunque ya nada puedo hacer, lo hecho, hecho está.

Lorenzo no contestó nada, solo lo miró.

Iba a seguir su camino cuando se escuchó una detonación y una bala se incrustó en un árbol muy cerca de ellos.

_ Nos encontraron. - dijo Mario ayudándolo a cubrirse tras unas rocas. Creo que no sobreviviremos a esto.

_ Preferiría, que no fueras tan pesimista. - lo reprendió Lorenzo. _ ¿tienes un arma?

_ Si. - se la entregó.

_ Bien, no nos vamos a ir sin luchar, quédate a mi lado. - dijo tirándose al piso para, quedar cubierto y poder disparar.

Lorenzo sabía que era difícil poder vencerlos, porque ellos eran dos y sólo poseían un arma, y sus enemigos eran muchos, fácilmente los rodearían, ¿con cuántos podían acabar él y Mario para cuando alguien pudiera llegar hasta ellos? Sus posibilidades eran casi nulas, pero no dejaría de luchar.

Permanecieron agazapados, sabía que se acercaban, pero no quería desperdiciar sus municiones, esa arma era con lo único que contaban.

Escuchó pasos, Lorenzo se movió con rapidez disparando su arma, dos hombres cayeron a su lado, de inmediato Mario tomó las armas que ellos portaban y se puso en posición de ataque, sus enemigos se habían replegado, no esperaban que los recibieran de ese modo.

El intercambio de disparos se extendió por quince minutos, Lorenzo sabía su estrategia, en cuanto se agotaran sus municiones, caerían sobre ellos, lo peor es que estaban a punto de terminarse y ellos eran demasiados como para poder vencerlos.

Lorenzo miró a Mario, estaba agotado al igual que él, ninguno tenía posibilidades de poder sobrevivir, menos cuando ambos se dieron cuenta de que uno de sus enemigos estaba prácticamente sobre ellos, había logrado cruzar la barrera y ya disparaba su arma, al mismo tiempo que Lorenzo también lo hacía, el hombre cayó muerto, pero una de sus balas había dado en el cuerpo de Mario, quien lo miraba sin poder creerlo, con su rostro pálido y desconcertado.

EL SECRETO QUE ME ATA No.5️⃣ // SERIE HOMBRES DE LA SIERRAOnde histórias criam vida. Descubra agora