× 36 × DURA DECISIÓN

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Si desean escuchen la hermosura de canción y de cantante que esta en multimedia ¿quien no conoce esa canción? Perfecta para Andrew y escucharla mientras lees el capitulo :3

ANDREW: 

— ¿Qué debo hacer para recordar? —pregunté a la persona que tenía frente a mí.

Es un psicólogo treintañero, algo cansado, no parece que le gustara su trabajo pero aún así se esfuerza en decirme que recordar cosas pequeñas puede ser muy fundamental.

— Es como un rompecabezas, necesitas cada pieza para encontrar el resto, recuerda cosas esenciales, algo que te gustaba hacer, como eras tú, tu rutina, tus amigos, no te fuerces en recordar, lo harás poco a poco — le corte antes de terminar.

— Quiero recordar ahora —le dije seriamente.

— Entonces tomate un momento solo y piensa, no te fuerces pero con naturalidad una sola imagen puede ser el comienzo de recordar más cosas.

Se levantó de su blanco asiento y recogió sus folder de la mesa anunciando que se debía ir. Asentí y cuando cruzó la puerta me lancé hacia atrás para pensar, recordar.

Pero cada vez que me sumergía en mis pensamientos lo único que veía era una silueta de una chica, mi mente distorsionaba su rostro pero me recuerdo sentirla en un abrazo muy cálido y maravilloso, recuerdo cada uno de las emociones de ese momento. Sé lo importante que debió ser ella para mí.

Su cabello es largo y negro, alta y esbelta, solo quiero saber quien es de verdad, quiero sentirme tal y como lo recuerdo. Quiero sentir ese bendito cielo que sé que ya conozco.

Y aunque no estoy tan seguro, las pruebas lo confirman ella es Janny. Quien hace su encantadora aparición por mi habitación.

— Andy ¿Que tal te has levantado hoy? — pregunta mientras trae en sus manos mi desayuno.

— Como siempre, ya sabes, ¿tú que tal estas? — digo con normalidad mientras levanto mi taza de café dispuesto a tomarla.

— Me he quedado toda la noche en el hospital, estuve de guardia — contesta mientras se acomoda su cola de cabello.

Janny, es alta, tez blanca, cabello negro largo que siempre se amarra en una cola alta y perfecta, carismática y coqueta, capaz de enamorar a cualquier chico.

— Bien. Oye ¿Sabes cuando podré salir de acá? Las paredes blancas me están traumatizando — me quejo y dejo mi taza terminada en mi mesa de al lado.

— Pronto, tal vez mañana o pasado, pero pronto, cariño — se sienta a mi lado en la cama blanca y se acerca a mi con suavidad.

Estoy algo agotado pero no puedo evitar sonreirle a la chica de mis sueños. La chica que fue capaz de llevarme al cielo y lo volverá a hacer cuando recupere la memoria.

Se pega a mi y pasa sus brazos alrededor de mi cuello acercandome a ella, no me resisto, siento su respiración en mi rostro y no me molestaría besarla ahora.

Me acerco y le sigo, pero cuando estamos apunto de rozar los labios, me separo con velocidad y miro a otro lado.

— ¿Que.. que paso? — pregunta algo desconcertada.

— Estoy agotado, ¿me podrías dejar un rato solo para descansar? — miento pero ella asiente y en un minuto sale de la habitación.

Me siento estupefacto, ¿Por qué me detuve? Es una pregunta que me estoy intentando responder en todo segundo. Tal vez porque al estar apunto de besar a Janny solo pensé en Elizabeth..

Me despeino con brusquedad, confundido y estrezado, y ahora me jalo los cabellos, finalmente me rindo y me lanzo atrás en la cama.

¿Por que? ¿Por que tengo que pensar en ella? Solo es mi amiga... O tal vez no. Solo hay una manera de saberlo, tengo que recordar. Tengo que recordar a quien amo.

Mi mente viaja al vació e intento que sea al pasado, fuerza mi mente, al principio no encuentro nada más que ha aquella maravillosa chica pero pronto veo en mis recuerdos a otra mujer. Ella es mayor, de unos 40 años tiene algunas arrugas y se ve muy humilde, muy buena amable y tranquila. Mi recuerdo se basa en ella sonriendo y no evito sonreír yo también. Se parece tanto como si fuera mi madre.

Un dolor inmenso asoma a mi cabeza e inmediatamente la imagen cambia a esa encantadora señora feliz a el cuerpo de la mujer tirada en el suelo, sangre rodeándola, y unas apuñaladas notorias en su estomago.

Grito de horror y siento que me salen charcos de lagrimas. La angustia que me invade es horrenda y no paro de desesperarme y llorar. ¿Madre? 

Grito con mas fuerza y me levanto saliendo de mis pensamientos pero esa imagen no desaparece. Lloro y sollozo, abrazo a mi almohada y siento que me muero, me duele tanto el alma que quiero desaparecer. Mis llantos son desconsolados por lo que muerdo mi almohada, e intento que mis gritos no se oigan así.

Mi madre.. ¿Es mi madre? No puede ser. Yo.. yo.. Suelto un ultimo grito de horror y me quiebro en mis lamentos, me muerdo el labio intentado parar pero lo hago con tanta fuerza que siento que me sale sangre.

— Andrew.. Cielos Andrew — exclama alguien y levanto mi mirada derrotada hacia arriba.

Elizabeth esta parada al pie de la puerta y veo que tiembla. Me asusta que me vea en este estado pero milagrosamente ya no lloro. Olvido la imagen y me centro en ella. En su cabello no muy visiblemente despeinado y la angustia de su expresión.

Corre deprisa hacia mi y me abraza como si la vida le dependiera de ello. Intenta preguntarme como estoy a cada segundo pero ni siquiera la escucho. La sensación de su abrazo me tiene cautivado. Su calidez es reconfortante y perfecta.

— Andrew.. ¿Que paso? —pregunta y finalmente la imagen vuelve a mi mente y me horrorizo.

— Mi.. mi madre.. ¿Está muerta? ¿Alguien la.. apuñaló? —abre los labios en ligera sorpresa pero luego lo oculta.

— Andrew... yo... no... — la miro como exigiéndole la verdad y ella me asiente apenada — Si, si pasó eso. 

Doy respiraciones agitadas y lamentables y ella me abraza aún mas fuerte tranquilizándome. 

— ¿Y mi padre? — le pregunto esperando que la respuesta no sea tan terrible como la anterior pero su expresión me dice que es algo peor —No, no importa.

Quiero decir que no importa cuando a mi mente vuelve otra imagen horrorizante, me veo a mi mismo, veo mis manos sosteniendo una pistola y apuntando a un señor mayor, pero todo se empeora cuando veo que algo le atraviesa la frente y me percato que es una bala de la propia pistola que sostengo.

Suelto inhalaciones llenas de horror y desesperaciones y luego más lagrimas y llantos aun peores. Elizabeth no sabe como calmarme y solo doy respiraciones intentando calmarme solo.

Finalmente llego a una decisión.

— Elizabeth.. ¿Puedes dejarme solo? — dije mientras respiro pesadamente — He decidido que no quiero recordar.

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Se acerca el final en o 5 o más capítulos pero ¿Que esperan ustedes? ¿Un final feliz? La verdad mis planes son algo diferentes hehe pero nada decidido no se preocupen *guiña*

Les invito a seguirme por favor estaré resubiendo una historia que escribí en solo dos tardes, la temática es buena pero la hice muy corta, pronto les informaré.

Y si deseas hablar conmigo (soy chevere xd) buscame en instagram como.. v_assenatth 

DICHO TODO ESTO NOS VEMOS EN EL SIGUIENTE CAPITULO DENLE AMORRRR <3







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